Primero voy al supermercado. ¿se te ofrece algo? - Mmm... sí, pero no está dentro de ese lugar. - ¿Ah, ¿sí? ¿y dónde? Tomó el cuello de mi camisa y me haló. La punta de su lengua rozó mis labios entre abierto y la metió en mi boca. Se alejó chupando mi labio inferior. - Con eso ya tendrás una idea.
- ¿Hola, Estefany – me saludó Marcos vestido con un elegante smokin color negro – nerviosa por la idea de tener otro padre? La palabra “padre” me cayó de sorpresa y retumbó tan fuerte en mi cabeza que mis ojos empezaron a nublarse. Dudé mucho de una buena relación futura con ese seño
- Esperamos tu opinión, hija - continúa Marcos - ¿Apruebas esta unión? ¿Me dejas unir mi vida a la de esta mujer que amo tanto?
Alice quitó mi t-shirt con desespero mientras yo lamia su cuello y tocaba su espalda. Quitó mi sostén y me tiró de espaldas al suelo. Su boca besó mi abdomen, dejando un camino ascendente de saliva hasta mis pezones.
"Buenos días, Estefany" - decía el mensaje. Río y contesto. "Buenos días, Alex" " Cómo le amanece, Srta.?
- ¿Quién es ésta? - ve la foto de Alex en el fondo de pantalla - Cielos... Amo su cabello. - Es una chica que conocí hoy donde Doña Teresa. Ya sabía que se me escapaba algo. - ¿Y ya los pones de fondo? Sí que van rápido. - No seas tonta, te explicaré después. Primero resolveré el lío de las clases.
Era una chica agradable, no había dudas. Eso sí, hablaba hasta por los codos. De la mínima cosa sacaba un tema de conversación. Yo sólo agregaba pequeñas oraciones, en la mayoría de veces sólo daba tiempo a monosílabos y me daba la impresión de que no le ponía mucho asunto. A pesar de todo, yo ponía
Ya con su vagina totalmente abierta aceleré mis lamidas, recorriendo desde la entrada de su ano hasta concentrarme en su abultado clítoris. Luego la penetre, iniciando su vaivén de caderas mientras me comía prácticamente su clítoris, llevándola así a su anhelado orgasmos. Saque mis dedos, los chupe
- Ahora sí – secundándome por completo - ¿Cómo te llamas? - Estefany - le respondo - ¿Y tú? – - Soy Alexandra - me extiende la mano - pero mejor dime Alex - estrecho su mano. Ambas sonreímos.
La besé despacio agarrando su rostro con una mano y con la otra su cintura, obligándola a cortar el pequeño espacio entre las dos, provocando ligeros roces de nuestros sexos. Ella sube sus dedos desde mi nuca hasta la parte donde el largo de mi cabello le permite sujetarlo. Entramos al baño entre...
Me mira y sonriendo me saca la lengua por un instante. Seguimos mirándonos y su cara empieza a cambiar. Pasó de sonreír, a estar seria, de estar seria a sorprendida, y de sorprendida a extrema sorpresa. Parecía que había visto un fantasma, su cara palideció. Me acerque rápidamente, agarré su rostro. Antonella: ¿Nati? ¿Natali? me empieza a preocupar- ¿Qué coño pasa? ya desesperada. Nati no dice nada. Me agarra de un brazo y empieza a correr, yo intento seguirle el paso- ¿Qué mierda pasa? sigo corriendo- Natali, ¿qué fue lo que viste? pero ella no me hace caso y sigue corriendo, mientras me arrastra con ella- Maldición dime que pasa no dejo de correr-. Natali: Es él, la acabo de ver continuamos corriendo-. Antonella: ¿él? ¿él quién? desconcertada Natali: él, por quien viniste a esta universidad. Antonella: No puede ser - creo que también palidecí -.
Volví. Disculpen la demora
Y así tú encajando con mi mitad, te convertiste en mi Yin Y por ende yo en tu Yang.
Permito que tome el jabón. Empieza a enjabonarme los hombros, luego la espalda, pasa a mi trasero, mis piernas *siento que estoy en el cielo*. Me doy la vuelta para que termine su labor, empieza con mi cuello, mis hombros, mi clavícula, cuando va a llegar a mis senos para, entre gemidos le digo:
Hola queridos lectores :D. Es mi primer relato de muchos que vendrán. Espero que les guste, pues es una historia llena de amor y erotismo, y algo larga.Dejen sus comentarios o me dicen que les pareció por mi facebook que esta en mi perfil. Sin mas me despido ;).