Casi todas las tardes iban al banco del parque, bajo mi edificio, a besarse y darse arrumacos.
Cuando me desperté atado a una silla, miré alrededor y reconocí el lugar. Era el cuarto de Clara, a donde había acudido para hacer un trabajo de clase en grupo con ella y con Yéssica.
Al principio trataba de negarlo, pero me fui dando cuenta de que mi hermana me daba morbo.
Bebí de tu néctar y me refugié en tu cálido interior.
Un hermano y una hermana salen del instituto rumbo a su casa cuando los sorprende la lluvia.
Tu cuerpo brillando bajo el radiante sol.
Historia de dos jóvenes. Se conocían desde hacía algunos meses, pero hasta aquel preciso momento no había habido una relación tan estrecha entre ellos.
Recordando lo sucedido entre tú y yo la noche anterior.