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Mi abuela, mi hermano y yo

en Confesiones

Hola, soy un chico de 12 años y a continuación contaré mi primera experiencia sexual que me ocurrió el verano pasado.

Estaba en casa de mi abuela de vacaciones y no se si no me había fijado antes, pero me había salido un pelo en la zona del pito. Durante un tiempo me despertaba con el pito empinado. Todavía no sabía gran cosa sobre sexo, solo lo que me habían enseñado en la escuela.

Conmigo estaba mi hermano mayor tres años mayor que yo pasando las vacaciones. Mi abuela, mi hermano y yo solos. Mis padres estaban trabajando.

Al cabo de darme cuenta del descubrimiento del pelo, a la semana ya tenía el segundo en marcha, ¡increíble! Y es completamente cierto.

Esa noche me desperté con el pito muy tieso, y sentía un calor inmenso en todo el cuerpo. No se cómo, pero me vino la repentina idea a la cabeza de que mi hermano tenía que tener mucho pelo en la zona del pitilín. Como estaba ya dormido, me acerqué a su cama, y al estar boca arriba , metí la mano en sus calzoncillos.

Al principio se sintió algo molesto porque se movió. Yo tocaba un capa inmensa de pelos, y mi pito se puso a reventar. Su pito era enorme, pero blandito. Cuando no llevaba ni un segundo tocándolo, se puso duro y salió del calzoncillo. Automáticamente, empezé a agitarlo y echaba un olor tan repugnante pero excitante a la vez que me lo metí en la boca, no llevaba ni un minuto en minuto cuando noté que algo estaba soltando. Al principio creí que se estaba meando en mi boca, pero me aparte y fui corriendo al servicio. Allí observé como un líquido espeso color yogur ocupaba mi boca. Me lavé y me senté en la taza del water, pues esa situación novedosa, me entró cagalera. Cuando estába en ello, noté como mi pitilín seguía duro y empezé a agitarlo como el de mi hermano. Notaba un cosquilleo por la zona de los testículos y de repente disparó un chorro de líquido. Tal era mi placer que poco a poco me quedé dormido.

Al día siguiente, al amanecer, yo (el muy tonto) seguía dormido, desnudo y mi abuela me descubrió.

Vio como estaba el semen en el suelo y mi pito de nuevo tieso, y yo sentado en la taza del water.

No reaccionó mal, cuando me estaba depertando ella limpiaba el suelo:

-Cariño, despierta que te quedaste dormido, cuando cagabas.

Yo me escandalizé y me subí los pantalones.

-Me dejas cielo, tengo que mear-dijo-.

Yo salí avergonzado. Pero me di cuenta que ella ( una mujer de 50 años por cumplir y que estaba rellenita pero tenía cierto atractivo) se comportaba como si nada.

La puerta estaba sin cerrar y un impulso me dio por entrar dentro del baño de nuevo. Ahí estaba mi abuela meando, enseñando su chocho ya bastante carente de pelos. Me dio un subidón y me arrodillé besándole sus partes. Me paró:

-Tranquilo, tienes que empezar poco a poco, mira arrodillate encima de mi regazo.

Yo hice lo que me dijo. Una vez allí me saco el pito del calzoncillo y lo metió en la boca.

Yo no podía más ya exploté dentro.

Salí corriendo de vergüenza, mi abuela, ¿cómo podía?…

Al cabo de unos días me la encontré hablando por teléfono, y estaba ¡hablando sobre lo que pasó!

Me quería morir, pero resulta que mis padres lo tomaron como lo mas natural y no dijeron nada.

Por supuesto que ella tampoco dijo que me había chupado el pito.

Cuando escribo este relato, estoy en primero de la ESO y tengo el pito bastante aflorado.

Me hago masturbaciones todos los días y espero perder la virginidad pronto.