Aquí unos consejos mas para la escritura de relatos. No están cubiertas todas las posibilidades sino sólo aquellas en las que he podido aprender a base de experiencia propia y de lectura de otros relatos.

Elegir el tema y la idea base del relato. Si usted quiere ser el mas leído y el mas votado tenga en cuenta que todas las ideas ya han sido pergeñadas por otras personas. Ello no significa que usted no sea original, no, simplemente hay mucha gente dando vueltas por el mundo. Por eso usted debe darle una vuelta de tuerca a su ideita. ¿Cómo hace esto? Sencillo: use su imaginación y su cerebro. Por ejemplo: idea mamá-hijo. Hemos leído millones de relatos en que "por casualidad" mamá ve la verguita parada del hijo y a partir de ahí se desencadena todo. Error. Busque otra forma de casualidad. Tal vez la escuchó nombrar a su hijo entre sueños, tal vez encontró un video de la madre actuando una representación en la que un hombre hacía de su hijo, tal vez una abuela perversa le cuenta a su nieto en una carta los deseos de su mamá... cambie, innove, delire un poco, busque acciones y razones que sorprendan y desconcierten al lector. Es un buen recurso el azar y puede utilizarlo a su favor en circunstancias diferentes y no tan repetidas. Use pero no abuse.

La fémina. Su fémina debe ser la mas puta y la mas caliente. Y para eso no hay vueltas. Si ella es la que provoca al/los macho/s su relato tiene unos cuantos votos asegurados. Un dicho repetido hasta el cansancio por nuestras madres de antaño reza lo siguiente: no solo hay que serlo sino también parecerlo. Claro que este dicho se refiere a la "decencia" y moralidad de las señoritas. Pero adaptado a nuestra jerga se traduce así: su fémina no solo debe ser calentona sino también demostrarlo y hasta decirlo con sus palabras, nuestra herramienta vital, pues si la muchacha se levanta la pollera y además dice que está caliente –demostración y confirmación- el círculo está cerrado y los lectores atrapados. Pruebe y después me cuenta.

En casos de violaciones y similares no confunda al lector. Si la están violando la están violando y es poco probable que la chica lo disfrute. Ahora si la mujerzuela que está recibiendo del protagonista un embate que ella no esperaba recibir empieza a encenderse, cuente con detalles y convenza al lector cómo ha sido que la muchacha pasó de mujer abusada a puta multiorgásmica. Nadie pasa de violada a mujer caliente en dos minutos o sea en dos líneas.

El macho. Es un recurso muy utilizado que nuestros machos descarguen su pistola tres veces en chorros larguísimos y espesos, uno detrás del otro. Yo también lo he utilizado y he recibido críticas por eso. Todos sabemos que solo superman alcanzaría este conteo y ello quita veracidad al relato. No se trata de la cantidad sino de la calidad. Y si usted tiene ganas de contar penetraciones, con sus respectivas descargas, en todos los agujeros de la chica en cuestión y de parte de un mismo tipo dele tiempo al muchacho para recuperarse. Mientras mas rentalice las cosas mas excitación generará en sus lectores. No sea vago y no ahorre en los detalles: muchas cosas pueden hacerse además de penetrar.

Las descripciones. No se quede en los 90-60-90 de la muchacha ni en los 25 centímetros del tipo. Por supuesto, a mucha gente le gustan las descripciones pero trate de que los personajes no sean perfectos pues nadie es perfecto; sus lectores tampoco. Si detalla sus virtudes y también sus defectos el lector podrá identificarse con el o la protagonista y sentir que él mismo es quien está desarrollando la historia.

Como personas no solo somos un cuerpo, también tenemos mente y sentimientos. Si a la física agrega una descripción introductoria de los pensamientos y sentimientos de los protagonistas estará usted presentando personas completas, comunes y corrientes pero, sobre todo, reales.

El morbo. Haga volar su imaginación y la de sus lectores. Recursos excelentes y que nunca fallan son el de mirar a otros mientras ponen y sacan o muestran las partes pudendas, ser mirados, ser escuchados y escuchar. Si en sus relatos puede introducir todos estos detalles tendrá en sus manos un sucesión de palabras calientes. Pero si a eso le agrega las razones de por qué siente placer al mirar o de que me miren o de que oigan o lo que sea tendrá una imagen y un sentimiento vívido de la situación que sus lectores sabrán apreciar.

Mas morbo está presente cuando su protagonista se anda revolcando junto a otra persona que no es con la que mantiene la relación afectiva "legal" digamos. Y si resulta que el legal está cerca mientras el protagonista se revuelca con el ilegal objeto próximo de su deseo las hormonas de sus lectores empezarán a calentar mas de lo normal.

No se quede describiendo como la pone o como la siente entrar, diga que está bárbaro cómo se la ponen o lo bien que se la están chupando al protagonista. Escríbalo: Qué delicia!!! Qué gusto!!!!. Son golpes bajos que queman la cabeza.

Tácticas. Cuando escriba y principalmente en los momentos de mayor lujuria describa en frases bien largas lo que está haciendo el protagonista, lo que hace el otro o los otros, lo que siente, lo que espera el protagonista de sí mismo y del otro/s. Trate de que las frases estén ordenadas y sean comprensibles, separadas por comas antes que por puntos. Lo que usted está escribiendo seguramente es lo que está sintiendo en su imaginación y cuando, querido amigo-amiga, usted siente, tanto en su vuelo mental como en la vida real, no fragmenta ni lo que siente ni lo que piensa. Por eso debe escribirlo así, con la menor fragmentación posible. Además, en los lectores genera mucha tensión y excitación leer sensaciones, sentimientos y pensamientos en una sucesión ininterrumpida que no da tiempo al respiro y que calienta la sangre rápidamente.

Motivaciones. Si usted no se calienta cuando está escribiendo el relato, abandónelo y vuelva mas tarde. Usted tiene que sentir lo que escribe y tiene que transmitir lo que siente a sus lectores. Mientras mas sensaciones y sentimientos ponga de sí en sus relatos, algo bien difícil pero necesario, mejor será recibido. Examínese interiormente para ver qué siente usted y póngase en el lugar del otro anticipándose a sus acciones y sentimientos. Y siempre busque ser original, diferente, sorprendente. Utilice los golpes bajos y lo inesperado como recursos de enganche al lector.

Título y presentación. Sea ingenioso para presentar su relato. Deje de lado los títulos obvios: "mi cuñado y yo", "mi jefe y yo" "la fiesta", etc., etc. Si pudo tomarse el tiempo de escribir un relato de 10 minutos también puede tomarse otro tanto para elegir un título sugerente. Con un buen título se llevará unos cuantos lectores. Esto aplica mucho mas para el resumen. Ahí también obvie lo obvio, "estaba caliente con fulanita y después me la cogí". Ya lo sabemos eso!!!! Piense otra cosa que diga lo mismo pero con palabras menos repetidas y mas sugerentes. Piense en los resúmenes que lo han enganchado a usted e imite pues nadie va a crear nada nuevo. No crea que por eso está robando (si puede robe pero, eso si, que no se note)

Detalles. Muy importante, aunque no lo parezca es la sintaxis y la ortografía. Le explico el por qué. Usted puede tener una idea buenísima, muy original pero resulta que su sintaxis es desastrosa. Si eso sucede es probable que su lector entienda a medias lo que usted está queriendo decir, releerá lo que usted escribió para entenderlo bien y se desconcentrará del objetivo principal que es disfrutar del relato. Ergo estará mas ocupado en entender la unión de sus palabras que en gozar y probablemente deje de leerlo pues no busca descifrar su esoterismo sino pasarla bien.

Con la ortografía sucede algo similar. Los errores en esta materia provocan sensaciones imperceptibles de molestia, en especial en aquellos lectores que no tienen faltas de ortografía. Esos, le aseguro, dejarán de leer su relato y buscarán otros en los que no aparezcan esos "ruidos" que lo desvían de su finalidad que es gozar. Y resulta que si usted publica sus relatos es porque está interesado en que otros lo lean. Por lo tanto, sus propios errores también lo desvían de su principal objetivo: ser leído. Por todo ello sea inteligente, pase el corrector de gramática y ortografía y antes de mandar el relato léalo completamente y corrija todos los detalles y errores posibles, incluso los de tipeo que también molestan, para que su lector se sienta a gusto y lo adopte como uno de sus escritores favoritos.