Fuiste

Fuiste.

¡Realmente fuiste tantas cosas!.

Mi quimera, mi vida, mi ley,

mi eterna molestia.

La búsqueda fiel de una voluntad no mía.

La muerte a retazos de mi soledad promíscua.

Fuiste

La imagen de los sueños dorados de mi mente.

Ese ser de rasgos y defectos impares

que llegó y anidó en mi alma.

Ese sexo animal que llenaba mi cuerpo desnudo

de incertidumbres abismales.

Fuiste

El movimiento constante

de unos brazos alrededor de lo inaudito.

El contínuo tropezar

contra la amarga sensación de no estar sola.

Fuiste

El ser, el estar, el tener, el andar

El creer, el sentirse uno solo.

El rutinario palpitar de un corazón

cuando siente que se queda sin fuerzas.

ERES

Para mí y en lo adelante

la máscara gris

que acompaña un olvido angustioso.

El beso ansiado

que trato de borrar con mi silencio.

La eterna contradicción

de no poder decirte ya

TE AMO.