Ricardo despertó lentamente, desperezándose y miró a su alrededor: 3 mujeres desnudas dormían plácidamente, en una maraña de sábanas y miembros bastante caótica. Se levantó cuidándose de no despertar a ninguna, y el recuerdo de la noche pasada le causó una erección. Tenía 20 años, medía 1.80 y era bien parecido, musculoso pero sin que se le notara excepto en sus anchas espaldas de nadador, parecía un chico cualquiera. Se vistió rápidamente, lanzando una última libidinosa mirada a las mujeres, se retiró ocultando su erección en el cinturón.

Salió al aire fresco de la mañana, y lentamente fue relajándose mientras se dirigía a su casa.

Mientras caminaba, recordaba cómo habían comenzado los placenteros días, en los que estas amanecidas no eran raras en absoluto. Todo había comenzado ese año, cuando descubrió el poder que podía ejercer en otras personas.

Era una nublada tarde de otoño, estaba de camino a su casa cuando la vio, era una chica hermosísima, con pelo color azabache, curvilínea figura y precioso rostro, él la veía todos los días cuando volvía de la U, y deseaba a toda costa llevársela a la cama, pero nunca se había atrevido a hablarle, pero ese día estaba decidido a comenzar:

Hola!- dijo con una sonrisa tímida. Hola extraño- respondió ella con una mirada entre turbada y divertida- - Yo quisiera...eh..saber si tu..conmigo...salir.....-que balbuceas?- rió ella- quisiera saber si te gustaría salir conmigo alguna vez- le dijo por fin, observando con espanto su mirada escéptica, empezó a desear con toda su alma que la chica deseara salir con él, y sorprendido, vio un cambio en la expresión de la chica (catalina era su nombre) que al momento tomó una postura más relajada y coqueta y esperando un minuto para ver su tensión, respondió con voz suave: te queda bien el viernes?- eso era justo lo que quería, ese fin de semana su casa quedaba vacía. –Sí!-respondió con un notorio tono de emoción en su voz. Bueno, pues quedamos en "El huacho" a las 8- dijo catalina sin más y se fue, caminando sensualmente. En ese momento lo único que Ricardo deseaba es que ella se diera vuelta...que lo quisiese, que quisiera besarlo ahí mismo, y notó sorprendido que, repentinamente, ella se detenía, se daba vuelta, se acercaba a él ....

La vi acercarse a mí, estaba paralizado de emoción, no sé que pasaba ese día, pero parecía que lo que deseaba se hacía realidad, en ese momento, ella se acercó mucho y comenzó a besarme, y mi mente quedó en blanco, disfrutando del contacto de sus labios y sintiendo su cuerpo contra el mío, y deseé que fuera ya viernes, para llevármela a la cama...

Me estaba yendo cuando de repente sentí un incontenible deseo de besarlo, ese chico me gustaba, y no entiendo bien porque pero lo quiero mucho, me di vuelta y me acerqué a besarlo, estrechándolo fuertemente, sin querer soltarlo....lo quería tanto...

Después de besarlo, catalina se alejó de Ricardo, y éste se ponía a pensar en los raros sucesos, y una sospecha, casi fantasiosa, comenzó a rondarlo....tendría él acaso el poder de hacer que los otros quisieran lo que él quisiera que quisieran? Continuó su camino hacia su casa, decidido a probarlo con la primera persona que se encontrara. Iba por una calle deshabitada y de repente vio a un tío que se acercaba por la calle –esto no es lo que esperaba!!- pensó con algo de rabia, pero de repente vio a una señora de unos 40 años mirando por la ventana al tío y se decidió a probar

Me concentré en la tipa esa y pensé: Que el tío de ahí le parezca tan irresistible, que salga de su casa a verlo pasar. Esperé unos segundos en el mas absoluto de los suspensos, hasta que, para gran satisfacción mía, la tía se paro rápidamente, yo pensé hacer algo más así que me escondí en la pared de una escalera de por ahí y observé como la cuarentona salía en la actitud más sexy de su casa. Que el tipo se sienta caliente con esta- pensé muy concentrado, y al momento la mirada del tío cambió, el tendría unos 30 años y parecía robusto, mientras que ella, pese a sus 40, tenía todavía muy buenas formas y unas piernas exisitas que dejaba ver con picardía al extraño. Que los dos quieran cojerse aquí y ahora. Pense, y me sorprendió ver que no pasabanada mas que el inicio de una conversación, extrañado, probé a ser más específico. Que quieran cojerse aqui y ahora tanto que no lo puedan resistir, al momento, los dos se unieron en un muy caliente beso, yo me encontré empamadísimo con la idea de ver a 2 cojiendo en la calle así que saqué mi pija y comencé a hacerme una paja, mientras veía como los desconocidos se desvestían apasionadamente, La tía se quitaba el sostén, dejando libres unos hermosos pechos, que uno esperaría más de una mina de 20 que de ella, pero ahñi estaban, el tío había sido más rápido y ya no tenía ninguna prenda, y dejaba ver su polla, que se apresuro a introducir en la recientemente libre vagina de la tía, comenzando a penetrarla muy rápidamente. En ese momento una idea me asaltó...podría yo controlar el orgasmo de los otros?...como quería estar seguro de notarlo, decidí probar con el tío, introduciéndole el desesperado deseo de correrse ahora ya, y, para muy más grata sorpresa, el tío lanzó un gemido que dejaba claro su orgasmo, y detenía sus movimientos, y observé divertido la expresión de asombro en la cara de ambos, con un claro agregado de decepción en la cara de ella, y me compadecí del tipo, cómo sería terminar en un minuto un día si uno está acostumbrado a más? Asi que decidía alargarles da diversión, introduciéndole un deseo enorme de seguir al tipo, que no alcanzó a sacar su polla que ya estaba empalmadísimo, incluso más que antes, y que penetraba con mucha rapidez, de repente sentí un deseo como externo al mi que decía que quería terminar ya, así que relajé al tipo, que siguó embistiendo con fuerza y rapidez, pero con la mente más calmada. Eso era nuevo, no solo podía inducir, sino que podía serntir.......esto me estaba abriendo universos de posibilidades, calenté a la mina un poco más, y se corrió rapidamente, mientras el tipo seguía con su ritmo. Seguro que sin mi ayuda no odría tanto, pensé divertido, notando que yo estaba queriendo un poco mas q hacerme lap aja mirando a dos extraños que tuviera bajo mi control así que introduje en ambos el deseo de alguien mas en el acto e hice mi aparición, polla en mano, me dirigí rápidamente hacia ellos, observando divertido la expresión de sorpresa en ellos, para ellos todo se había dado mágicamente, al momento introdije en ella el deseo por mí y el de chupármela, así que me recosté en unos escalones, haciendo una almohada con mis manos, mientras la tía empezaba a chupármela con maestría mientras el tío seguía dándole ahora en perrito, la tia se la metía a la boca ,la sacaba, la metia, la sacaba, la metia ,la sacaba, y empezé a sentir que quería irme, pero no sólo eso si no como si hubieran dos deseos más, yo estaba que terminaba, y con un aullido terminé, haciendo que los otros dos terminaran también al mismo tiempo y sintiendo su orgasmo y me corrí como nunca me había corrido en mi vida....

Ricardo se paró, todavía con la polla empalmada, y observó como los extraños se vestían, lo saludaban con gesto turbado y el tio enfilaba en la dirección en que venia y la tía volvía a su casa. Estaba alucinado por la mamada y la porno en vivo y a pedido que había visto. Se metió con dificultad la polla en el pantalón de manera de disimularla y se dirigió a su casa, viendo con estupor como justo un grupo de tíos doblaba la calle hasta recién vacía, y le entró una gran duda...