En ese mediodía del mes de enero el sol caía a plomo sobre la ruta, el aire acondicionado del auto estaba descompuesto y por mas que las ventanillas estaban abiertas el calor era insoportable, tenia sueño, necesitaba descansar, fue en ese momento que recordé que a un par de kilómetros, a la izquierda de la ruta sobre un camino vecinal había un pequeño puente sobre un arroyito rodeado de árboles, con muy buena sombra.

No lo pensé dos veces, entre en el camino vecinal y ahí estaba el puente sobre el arroyo con sus árboles y su sombra, al acercarme divise que debajo de un eucaliptos enorme había un camioncito, modelo viejo con caja alta cubierta por una lona, detuve el auto a diez metros del camión y baje para estirar las piernas, me acerque al puente y observe que a un costado había una pequeña parrilla con las brasas aún humeantes, restos de asado una mesa de camping y varias botellas de cerveza vacías,-

Camine hacia el puente y escuche voces y risas que venían del arroyo, al asomarme vi a dos muchachotes jugando en un pequeño remanso, se empujaban, jugaban a luchar y caían abrazados al agua, uno de ellos era rubio flaco y alto pero musculoso, el otro morocho y mas menudito, me quede mirando, la rama de un árbol me cubría, note que mas que lucha eran toqueteos bastante atrevidos el rubio se notaba por la bermuda mojada que tenia una gran erección, seguí mirando hasta que de pronto pe pareció que se habían dado cuenta que los miraba, disimuladamente me fui caminando hacia el auto, me recosté en el asiento con las dos puertas delanteras abiertas para que circulara el air fresco del arroyo y cerré los ojos, debo reconocer que la escena de los muchachos toqueteándose me éxito bastante, mientras escuchaba las voces y risas que venían del arroyo comencé a tocarme la entrepierna y note que estaba al palo, recosté un poco mas el asiento y con la mano en el bolsillo del pantalón comencé a acariciarme el miembro.

Estaba semidormido cuando un… ¡QUE ACES VOS ACA! Me despertó sobresaltado, abrí los ojos y frente a mi tenia la cara del rubio que me miraba con una sonrisa sobradora, mandíbulas huesudas, boca grande con dientes manchados por el tipo de agua que consumen en esa zona, me miro por unos instantes y me dijo – se ve que te gusta espiar putito, te calentaste veni que con nosotros que te vas a divertir y me agarro del brazo…. Espera que yo solo paré para descansar un poco le dije,

--- Por eso te estabas pajeando putito, -- (y me arranco del asiento de un tirón) veni con nosotros al camión que la vas a pasar fenómeno, (dirigiéndose al morochito le dijo) veni chino ayudame.-

--No me lastimen déjenme ir, les suplique, realmente estaba aterrorizado, en esa época yo tenia 32 años media un metro setenta y pesaba 66 kilos de ninguna manera los podía enfrentar, estaba a su merced,-

-- No te va a pasar nada subí al camión (me tomaron uno de cada brazo, el rubio me puso la mano en el culo y me apretó con fuerza mientras con un dedo trataba de penetrame por arriba del pantalón.-

__ Tenes un lindo culito creo que nos vamos a divertir,,,, subí al camión dale.-

Me agarraron uno de cada brazo y me subieron a la caja del camión , era una caja de madera alta con un techo de lona que también cubría la parte trasera, dentro de la caja n hacia mucho calor, en un rincón había un colchón tirado en el suelo, bolsas y trastos por doquier, me quede parado sin saber que hacer, detrás mió estaba el que le decían chino les pedí que no me lastimaran, el rubio se sentó sobre una bolsa y saco su miembro por la manga del pantalón, me pareció enorme lo abrazaba con su manota y sobresalían mas de diez centímetros con una cabezota roja que con el movimiento de su mano la cubría y descubría un prepucio blanco como la leche, estaba perdido si me violaban con ese aparato estaba seguro que terminaba en el hospital, por lo que se me ocurrió una idea y le dije, flaco no me rompas el culo si queres yo te la chupo la pasas bien igual y no me lastimas.-

--Te gusta la mamadera, dale chino sacale toda la ropa ( el chino me desvistió en un santiamén, el rubio se saco le bermuda y lo pude ver en toda su dimensión, tenía un una mata de bello pubico rubio, el miembro muy blanco con una cabezota roja media mas de 20 centímetros, se sentó en el cachón con las piernas abiertas) veni empeza a chupar si queres salvar el culo ( me arrodille y agache la cabeza, al acercarme sentí ese olor característico de los vestuarios de hombres, me quede mirando esa cabezota roja cuando el rubio me agarro del pelo y de un empujón me la hizo tragar toda, me dio una arcada cuando me toco la garganta , pero inmediatamente la agarre con una mano y pude controlar lo que me ingresaba a la boca, no me dio asco era la primera vez que tenia una poronga en la mano y menos en la boca, no me resulto desagradable estaba caliente y su textura era suave a pesar de su dureza, comencé a chupar en la forma que lo había visto en las películas porno, el rubio tenia la cabeza echada hacia atrás y suspiraba con fuerza, empecé a sentir en la boca el gusto salado de los jugos pre seminales que largaba, estaba haciendo un buen trabajo le pasaba la lengua entre el prepucio y el glande por momentos la sacaba toda de la boca y le mordisqueaba el frenillo, no podía creer lo que estaba haciendo y es mas aun lo estaba gozando, con la mano izquierda me toque la poronga y la tenia parada, comencé a pajearme fue en ese momento que sentí una mano que me agarraba los testículos y un cuerpo desnudo que se apoyaba en mi espalda y me pasaba la lengua por detrás de las orejas también sentí una poronga parada apoyada contra mis nalgas me dio un escalofrio y fruncí los esfínter pero no intento penetrame me fue besando y pasando la lengua por la espalda hasta llegar al culo me paso la lengua por la zanja, en ese momento casi me acabo, la sensación fue buenísima , me hizo levantar un poca y metió la cabeza entre mis piernas y me chupo los testículos, luego comenzó a mamarme, era la gloria yo seguía con mi trabajo, moje un dedo en la saliva que chorreaba por los testículos del rubio y se lo metí en el culo, dio un gritito pero abrió las piernas como pidiendo mas.

Estaba completamente perdido no me conocía, nunca me hubiera imaginado en esa situación y menos gozándola.-

La orgía continuaba y ya no pude aguantar más y acabe en la boca del chino fue interminable un chorro tras otro, apreté la boca con tanta fuerza que el rubio dio un grito, afloje la presión, los labios me ardían la poronga del rubio había crecido tanto que no me cabía en la boca, el chino se saco la pija de la boca y empezó a soltar el semen que tenia en la boca en la raja de mi culo y a masajearme con la mano en un momento dado me metió un dedo en el culo, entro con facilidad por la lubricación del semen, cuando quise recordar tenia tres dedos adentro, fue una sensación buenísima se me paró de nuevo, se puso detrás y me apoyo la poronga en el culo hizo fuerza y entro la cabeza, me dolió bastante pero la poronga del chino era pequeña y no me lastimo, empujo mas y entro el resto y sentí sus testículos golpeando contra los míos, cuando empezó el meta y saca goce tanto me sentí acabar, seguí chupando y el rubio no acababa nunca, el chino pego un suspiro acelero los movimientos y acabo dentro de mis tripas, luego se salio yo deje de chupar y empecé a pajear al rubio con todas mis fuerzas, se incorporó y me dijo.