Me case por fin con él. Habiamos estado juntos unos 3 años y por fin dimos el paso, nos casamos.

En nuestro tiempo de noviazgo no hicimos el amor, porque no me sentia preparada y era virgen. Él era virgen tambien y

tampoco se sintio preparado.

Pero en nuestra noche de bodas me senti preparada. Nos alojamos en un lujoso hotel para nuestra noche de bodas y a la mañana

siguiente iriamos a nuestro viaje de novios a China.

La habitación era lujosa y muy bonita, de gran tamaño. Una cama de matrrimonio, un baño etc.

Me sente en la cama y le mire. Nuestros ojos se encontraron, se acerco y me beso. Como siempre, con dulzura y ternura. Le agarre de su pelo negro azabache, atrayendole hacia mi.

-Mi amor. . . . yo quiero-susurre tras separarnos, sonrio y me volvio a besar.

-¿Estas segura?

-Completamente, llevamos tiempo y se que lo deseas

-Me conoces muy bien, mi amor-me recosto en la cama, se coloco encima mia y seguimos besandonos y acariciandonos por encima de la ropa, con inexperiencia.

Le quite la ropa, dejandole nada mas que con unos pantalones. Lo habia visto otras veces sin camiseta, su cuerpo muy bien fibrado, su piel color cobriza resaltaba contra la claridad de mi piel (es mas moreno que yo claro esta)

acaricie sus abdominales y subi hasta su pecho, acaricie sus pezones y luego su cuello, le abrace y hundi mi rostro en su cuello, llenando mis pulmones de su agradable olor. Hizo lo mismo que yo, me sentia tan bien entre sus brazos tan fuertes, me sentia protegida.

-Tu olor es muy agradable mi niña loca

-El tuyo tambien-nos volvimos a besar, me desnudo hasta dejarme nada mas que con un sujetador blanco y unas braguitas blancas, me miro unos minutos, vi su rubor en sus mejillas. Se agacho y descendio a mi cuello, lo beso, lamio e incluso lo mordio un poquito

gemi un poco por como lo hacia, me beso de nuevo. Me desabrocho el sujetador, y lo quito despacio dejando mis senos desnudos a su vista.

-¿Te gusto asi?-Lamio y beso mi oreja y mordisqueo el lóbulo y con una voz ligeramente ronca, pero cargada de sensualidad:

-No me gusta, me encanta preciosa-desabrocho sus pantalones, y oi como deslizaban y los voleo por hay.

-Mi amor yo. . . -puso su dedo índice en mis labios en señal de silencio.

-No mi princesa, esta noche voy a dedicartela a ti-descendio hasta mis pechos, con su mano izquierda acaricio mi seno izquiero y con su boca lamio el derecho. El placer me recorria al sentir su lengua, note que me excitación era ya palpable.

Agarre su cabello negro y corto para acercarlo mas a mi, mis gemidos llenaban la habitación, luego acaricio mi seno derecho y lamio el izquierdo.

-¿D De verdad que ahh eres virgen?-rio divertido ante mi pregunta.

-Soy virgen si, pero mis pervertidos amigos, pervertieron mi mente ya

-Ahh eres lo mejor mi amor-susurre, sonrio de nuevo y bajo hasta mi vientre, lo lamio y mordisqueo, haciendo pequeños círculos, haciendome cosquilllas.

Bajo hasta mis piernas, besandolas, pero finalmente se paro, acaricio mi sexo atraves de mis braguitas, mi excitación era mas que palpable.

-Estas mojada reina-susurro, me quito lentamente las braguitas, dejandome ya completamente desnuda a sus ojos. Por primera vez-Cielo mira tengo una idea mejor. Incorporante y abre las piernas-yo obedeci.

Hundio su rostro entre mis piernas, y durante unos minutos estubo quieto.

-¿Qué vas a. . . . ?Ahhhh-senti su lengua en mi sexo, mis gemidos y jadeos llenaron la habitación, senti su lengo húmeda jugueteando y lamiendome, mordisqueo mi clítoris, haciendome chillar de placer.

Aún le tenia cogido del cabello, le indique que queria mas profundo su lengua. Llego a penetrarme con ella, sentia que me moria de placer, senti convulsiones fuertes, muy placenteras, y ya no pude mas me senti desfallecer.

Por primera vez me corri, me corri en su boca, se incorporo y su boca chorreaban mis jugos, me beso y ambos quedamos con los labios chorreando.

Note su potente erección a traves de sus bóxers azules, estaba tremenda.

-Bien mi amor, relajate vale-me beso y sonrio, tranquilizandome, poco a poco fue desaciendose de sus bóxers.

-La tienes tremenda me dolera-su sexo era de unos 20cm era tremenda, sonrio tranquilizandome.

-Confia en mi-me abrazo y poco a poco fue entrando en mi, senti dolor al principio y sangre, pero su mirada me tranquilizo. Y ya lo tenia dentro de mi y todo el dolor paso a placer.

Las embestidas eran lentas, procuraba no dañarme. Pero al poco comenzo a embestirme con mas fuerza y velocidad.

Gemiamos llenos de placer, nos besamos, entrelazamos nuestras lenguas, mezclandose nuestra saliva.

Me cogio por las caderas acercandome a su cuerpo, lo sentia tan adentro mio, senti que solo me pertenecia a mi. Perdi la noción del tiempo, solo existiamos él y yo en mi mundo, amandonos.

Le mire a la cara y lo vi venir.

-Yo ya. . . . . . -musito entre gemidos.

-Espera yo ya. . . . . -nos corrimos a la vez, senti su cálido semen dentro mio, estabamos sudados, cansados y felices, salio de dentro mio. Nos recostamos en la cama, apoye mi cabeza en su pecho y me acaricio el pelo castaño oscuro.

-¿Te gusto mi vida?-Me pregunto sonriendo.

-No. Me encanto mi amor-bese a mi esposo, y correspondio el beso.

-Valio la pena esperar hasta esta noche. A que seamos marido y mujer-mire nuestras alianzas y sonrei.

-Valio la pena. . . -dormimos juntos y abrazados, cansados por ese acto de amor.