Sentada en la mesa de la cafetería , apurando un cigarrillo y dando sorbitos a mi café con leche, los vi pasar, eran cuatro subsaharianos, se les veía animados, contentos, el mundo de alrededor no existía para ellos, me sonreí para mis adentros y mi mente voló, se traslado a meses anteriores , cuando conocí a Assane, esos encuentros casuales, en mi consulta de enfermería , apareció ese chico alto, algo desgarbado, sonriente pero asustado, a curarse una herida en su hombro, fue rápido, cordial,,, me dio las gracias con un dulce acento afrancesado y salio ; pasaron varios días y escuche un ¨señorita¨ de forma repetida en plena calle, me gire y allí estaba , con su sonrisa, le reconocí y charlamos de su estado, me invito tímidamente a tomar un café…. Desde la ruptura con Cesar. no me apetecía hablar con nadie, pero,,, al ver esa cara expectante… casi esperando la escusa para oír que no, lo acepte, su cara se lleno de sorpresa y alegría y fuimos a una cafetería cercana donde se nos paso el tiempo volando. Contándome su vida, quede tan contenta que acepte ir a una fiesta unos días después , día de una celebración nacional o algo así.. lo hice instintivamente y cuando me encontré allí, me sentí sorprendida, era la única mujer blanca, todos y las pocas chicas que habían , fueron maravillosos , me integre rápidamente, era su invitada , ya tarde, decidí irme, e insistió en acompañarme, el barrio no era muy recomendable, así que salimos hacia mi casa , algo alejada de allí, paseamos , era un chico inagotable, delicado, detallista, yo me encontraba encantadísima , no veía las miradas racistas de los que nos cruzábamos, como pensando que una chica tan apetecible iba con un chico así… triste sociedad.

Llegamos a casa, le miraba y me hacia sentirme feliz, hacia tiempo que no sentía esa sensación, el baile sensual, las bebidas. su delicadeza…. una noche casi perfecta , me puso sus manos en mis hombros y me dio las gracias , le sonreí y le di un beso en su mejilla , sus ojos se pusieron como platos y se acerco a darme otro , un movimiento inesperado , se juntan los labios, unos segundos,,,,eternos,,, se separo como para disculparse , mis ojos están cerrados, unos segundos ….. de nuevo se unen los labios, ahora sin timidez. me siento abrazada , mis brazos le rodean , me impregno de su olor, me sentí apretada , protegida , como en una nube , sus gruesos labios me abarcan toda mi boca , no se el tiempo que transcurrió , pero subimos a mi pequeño apartamento, nuestras manos se acariciaban todo nuestros cuerpos , el se sentía como en un sueño ,yo como en una nube, la pasión se había desatado , el me susurraba un popurrí de lenguas al oído , esas enormes manos acariciaban mis pechos, mis nalgas, su boca pasaba de mis labios a mi cuello , a mis lóbulos , yo acariciaba su espalda, su largo cuello, su ralo pelo, caímos en la cama de forma pausada , mi falda descansaba en el suelo , no se desde cuando, sus pantalones en una silla , nuestras pieles se rozaban apasionadamente , era una situación que jamás había pasado por mi mente, su vergüenza original, había desaparecido, mi cuerpo era objeto de sus labios, yo me dejaba llevar, su cuerpo. flexible, apretado, se unía al mío , sus labios bajaron a mi sexo. Me creí transportada a otro lugar mientras acariciaba su cabeza, creí que había pasado una eternidad, pero el seguía, no le importaba mis secreciones, continuaba, no podía mas, cuando el subió su cabeza a mis pechos, mis manos alcanzaron sus duras nalgas, busque su miembro. erecto, desafiante , largo y grueso , lo bese , lo deglutí, él parecía levitar , y con energía me atrajo e introdujo esa lanza dentro de mi , creí que iba desgarrarme , pero entro suave , lento pero con una decisión que solo lo justifica la pasión, me sentí unida a el , un solo cuerpo, lo abrace con locura, lo bese le mordí, mis dedos se clavaron en su espalda, ni cuerpo absorbía sus envestidas, fueron momentos interminables, me sentía ocupada plenamente por él, mientras que sus manos me apretaban , me susurraba palabras extrañas pero dulces, no quería que ese momento acabase, pero en plena éxtasis , sentí dentro de mi una corriente caliente que me inundaba mis entrañas, mientras que un abrazo intenso cubría todo mi cuerpo, mis piernas rodearon su cintura, como queriendo que siguiese dentro de mi eternamente, estaba entregada como nunca me había sentido, el permanecía dentro de mi, con contracciones, como queriendo dejar dentro de mi hasta el ultimo residuo de él , en un instante, me miro asustado, como disculpándose de haber permanecido dentro hasta el final, pero mis labios , sellando los suyos, disiparon cualquier preocupación, permanecidos abrazados un tiempo indeterminado acariciándonos de manera dulce, insinuante, cómplice, dejando que nuestros cuerpos se recuperasen de ese enorme esfuerzo ,así transcurrió la noche, amándonos sin tabúes , entregándonos lujuriosos disfrutando de nuestros cuerpos , centímetro a centímetro , con ansiedad , pensando que esa situación no se repetiría . Paso la noche entregados, con una intensidad increíble, poseída por todas las partes de mi cuerpo, besando todo su anatomía, mezclando nuestros sudores, como si fuésemos los únicos que existíamos en el mundo.

Amaneció sin darnos cuenta, entregados el uno al otro, quedo dormido a mi lado, lo miraba y mi cuerpo se estremecía, me fui a la ducha y cuando volví envuelta en mi toalla, vi ese cuerpo de ébano incorporándose, me beso y se fue a la ducha, salio vestido, y me dijo que había sido el momento mas feliz de su vida, sabia que seria difícil de repetir, pero que seria para el lo mas hermoso de su vida, le dije que volviese cuando quisiese. que le esperaría siempre, el sonrío tristemente, salio lanzándome un beso.

Pasados unos días, recibí una llamada, decía que iba a la vendimia, pero que cuando volviese soñaba volver a verme…. Han pasado dos meses, me queda su recuerdo, su olor, el recuerdo de su tacto, la sensación del peso de su cuerpo… quizá no lo vuelva a ver, pero eso me queda… nadie me lo quitara.

Soñando, mirando a los chicos, apure mi café con leche y apague el cigarrillo... suspire…. inmersa en mis pensamientos. Creí oír la llamada del móvil.