Valhalla

El mundo ártico de Vallhalla llevaba siglos asediado por los orkos, las incursiones eran constantes, pero la población siempre vencía, en las heladas regiones del desierto ártico de los Orchillas (una especie de felinos gigantes con semejanza física a los Úrsidos), se encontraba un fragmento de cristal sepultado bajo el hielo, ese fragmento era un arma mental, tenía capacidad de controlar mentalmente a las gentes de muchos kilómetros a la redonda, o incluso destrozarles las neuronas haciéndoles entrar en un estado vegetativo, un arma que ambicionaban muchas facciones, concretamente los eldars oscuros.

En ese mismo desierto, un gran contingente de orkos y de la guardia ártica de Valhalla combatieron a muerte, tras la batalla, dos aventureros corrían por los restos, eran el corsario Ishar-ied y la renegada Celestine, tan pronto como encontraron el cristal regresaron a la nave en la que aterrizaron, su intención era llevar la tecnología ante el consejo de los exarcas, con el fin de que devolvieran al eldar su rango perdido.

En cuanto despegaron fueron derribados por un fuego de artillería orka que estaba posicionada en unas montañas, ambos saltaron en dos cápsulas de evacuación distanciándose enormemente, en cuanto el corsario eldar salió de su cápsula se dio cuenta de que había sido capturado por una nave de exploración de la cabala del corazón negro de sus primos y enemigos los eldars oscuros, los cuales lo encerrador en una celda de represión psíquica, marchando a Comorath, donde sería esclavizado por una bruja del culto, en cuanto a Celestine, ella aterrizó en un dominio dominado por los orkos.

La marine se aproximó a escondidas hasta 3 orkos pudiendo escuchar sus conversaciones, al parecer uno de ellos, con apariencia de oso inocentón decía que ya no quería seguir combatiendo a los humanos, que lo que quería eran flores, los otros dos orkos se dispusieron a matarlo y Celestine surgió acribillando a los orkos con su bolter, mientras los orkos surgían por todas partes, el orko bonachón agarró a la hermana apoyándola sobre su hombro boca abajo con el trasero al frente, el xenos corrió apresuradamente hasta llegar fuera del alcance de los guerreros de su clan, una vez en las estepas ambos hablaron y simpatizaron, pero Celestine fue enfriándose cada vez más hasta caer temblando sobre los brazos del orko, asustado preguntó a toda prisa que podía hacer, y Celestine agarró uno de sus dedos y se lo apretó contra la parte de la armadura donde estaba su vagina, ella suplicó que debía desnudarla y hacerle entrar en calor.

Así pues el Grommir el orko, con su aspecto bonachón, desmontó la armadura de Celestine como pudo, al ser más grande que ella introdujo su lengua hasta su esófago mientras penetraba su vagina con uno de sus dedos, el cual era igual de grande que un pene humano, con su boca podía absorber uno de sus pechos, mientras con una de sus manos agitaba una de sus piernas cada vez a más velocidad, luego lamió su espalda y después la rozó con su enorme pene, continuando con esto hasta que Celestine recuperó su calor corporal, la cual se puso de cuclillas frente a Grommir alzándose un poco para abrir su boca todo lo que pudo y poder absorber la punta de su pene, para ser un orko, tenía una gran higiene, algo que le gustó a la hermana, que con todas sus fuerzas agitó con las palmas de su mano el pene del orko hasta provocarle una eyaculación, aquello hizo que Celestine cayera espatarrada al suelo tosiendo tras haber ingerido algo de semen, luego apoyó su espalda contra el orko, éste la alzó poniendo sus manos bajo sus muslos, con una mano fue introduciendo sus dedos hasta dilatar el clítoris de ella lo suficiente para poder introducir su pene, aunque sólo pudo penetrarla con la punta de fu fornido pene, la hermana exclamó expirando aire en lo que fue un pequeño susto y luego comenzó a gritar gimiendo salvajemente mientras que Grommir absorbía sus mejillas, babeando tanto que su saliva cubrió hasta la vejiga de la hermana, él aumentó la velocidad mientras Celestine se mantenía en el aire con sus piernas ligeramente flexionadas removiendo violentamente sus suaves pies en el aire.

Los orgasmos de Celestine eran cada vez más intensos, cortos y rápidos, surgiendo enormes bocanadas de vapor por su boca, como si le faltase aire para gemir, el orko agarraba con una de sus manos el culo de ella mientras con otra mano apretaba ligeramente uno de sus pechos hasta que finalmente ella eyaculó flujos vaginales sobre el pene de Grommir, luego él le dio la vuelta agarrándola solamente de la cintura, dejándola caer hacia abajo, pero la hermana estaba tan tensa que estiró sus piernas y pies agarrando su pelo fuertemente con las manos mientras se tambaleaba, ella seguía llena de emoción, el placer era tan grande que su pelvis le temblaba y por momentos se desmayaba teniendo la respiración rápida y continuada en respiraciones cortas a veces, y luego largas y temblorosas, todo esto seguido de un orgasmo que la mantuvo con los parpados medio abiertos, cada uno hacia un lado hasta que terminó babeando ferozmente y eyaculando más flujos vaginales, tantos, que el orko pudo penetrarla entera hasta eyacular dentro de ella. 

El orgasmo de Grommir fue tan potente que hizo temblar las nieves de las montañas heladas del campamento orko sepultándolo por completo.

Pasadas las horas, ambos se resguardaron en una cueva preguntándose de donde podrían obtener una nave para buscar a Ishar-ied, el cual ya no se encontraba en el planeta, mientras ellos pensaron erróneamente donde podía haber caído su capsula, el corsario se encontraba cada vez más cerca de Comorath.