Clara es una chica jóven , risueña, sus 22 añitos no la hacen una chica como las demás , pues tuvo que tomar las riendas de su negocio desde los 16 años, una pastelería fruto de la herencia de sus padres. Hoy Clara abre sus puertas con miedo y entusiasmo a la vez ... para reemprender su negocio ha decidido crear una nueva receta con ingrediente secreto ( en mi primer "mini relato" lo averiguaréis ;) ) .

Clara ha escrito un enorme cartel que preside la entrada a su pastelería : "EN HONOR A LA PRIMAVERA HOY SERVIMOS RECETA NUEVA, "LA TARTA DEL DESEO", ¡PRUÉBENLA!".

Sus rezos están surtiendo efecto y pronto se acercan los clientes atraídos por el anuncio de su puerta. Nunca había vendido dos tartas del mismo sabor sin previo encargo ...ese fué el primer día. Contaban las 12 h. del mediodía cuando dos atractivas "tartas deseo " decoradas con fresones confitados y nata fueron a parar en manos de un nuevo cliente. Se trataba de un hombre de entre 33 y 36 años,soltero, que adquirió esas dos tartas para celebrar un ascenso en su trabajo.

Debía ser nuevo en el vecindario , pues Clara no lo había visto en su vida . Sin duda se habría acordado de él , pues era apuesto , un cuerpo bien formado , espalda ancha y brazos fuertes y ese culito tan bonito que le hacían los vaqueros... Pero lo que más le llamó la atención fué su dulce mirada y esa sonrisa que la regaló mientras ella ataba sus tartas con cierto rubor .

La verdad , Clara en esos momentos estaba pasando una vergüenza enorme, aunque no sabía del cierto qué le provocaba su enrojecimiento: la imágen de ese hombre tan perfecto a sus ojos o la idea de que iba a probar su ingrediente secreto. Sin darse cuenta , o mejor dicho , sin haberlo planeado , le estaba regalando su esencia virginal.

Pasaron unas cuantas horas muertas desde que descolgó el cartel de la puerta. Ya casi ni recordaba la sensación que recorrió su cuerpo unas horas antes, se limitó a limpiar vitrinas, a vender alguna que otra barra de pan al despistado de turno que no la había comprado en su panadería habitual... se acercaba la hora del cierre ...

-Tsss Tsss... chica !- un dedo tocó delicadamente su hombro mientras colocaba unos bombones en la estantería.

Clara giró le dirijió su mirada con cierta sorpresa... ¡Era él! El mismo que había comprado en la mañana sus tartas y que probablemente ya habría desgustado. Ruborizada dejó de hacer lo que estaba haciendo para parar su atención en él.

-Perdona que te moleste... sé que estás muy ocupada pero...

-No no ! Dígame! - le interrumpió súbitamente Clara , necesitaba saber a qué se debía el hecho de volverle a ver por su tienda

-Tus tartas han sido todo un éxito pero me han sabido a poco - la sorpresa en Clara se le notaba conforme abría los ojos y arqueaba sus cejas

-Algún problema , caballero ? Les faltaba sabor...le puedo compensar ...

-Señorita -le dijo a modo respuesta con esa sonrisilla picarona- el sabor estaba perfecto! Solo que me preguntaba...¿sería posible una tarta más "de esas" para llevármela mañana a primera hora?

-Sin ningún problema , yo se la hago esta noche así la tendrá lista para venir a recogerla cuando usted quiera.

-No me llames de ud. por favor ... soy jóven! , por cierto , tienes un poco de harina en... - un ligero toque con el dedo en su cuello la estremeció.-Me llamo Sergio , y tú ?

-Yooo? ... Clara - bajó su mirada, no había manera de disimular el tremendo rubor y el cosquilleo que le había provocado el tacto de su dedo en su cuello.

-Clara , estaré encantado de venir a recoger esa tarta en cuanto la tengas hecha, es más... me ofrezco para ayudarte mientras la haces para mí.

-Ser...gio ...-tartamudeó , se quedó callada un par de segundos, le pasó mil ideas por la cabeza, mil deseos por cumplir , y la sola idea de hacerle conocedor del ingrediente secreto de su tarta la encendía tanto que podía notar la humedad acrecentando en su cuerpo.- Sergio... me puedes ayudar si quieres, pero eso sognificaría que tendrías que quedarte conmigo en el cierre y pasar unas horas de tu noche aquí dentro, en mi cocina, hasta que la tarta esté hecha, además, te podrías manchar mucho ...

-¡Sin problemas! Cierra ya que es muy tarde.- Impaciente la ayudó a bajar la persiana.

Dirijieron sus pasos hacia la trastienda, ella delante , él detrás acomodando sus grandes manos en sus caderas. Clara, entre la vergüenza y la timidez ante esa nueva situación , dejó caer sus manos sobre la encimera y ,antes de que consiguiera acomodar sus bártulos en ella, Sergio la agarró de nuevo con sus manos , pero esta vez para roderala por completo.

-Clarita , cielo , enséñame la harina que escondes tras la camisa- Clara sorpendida no había reparado que su escote delataba unos pechos enharinados que ni siquiera se molestó en limpiárselos con las prisas de la mañana.

Sus manos se aventuraban bajo su camisa , subiendo por sus caderitas, haciendo que Clara se retorciera con sus cosquilleos...Pronto una mano agarró uno de sus pechos.

-Uhmmm Clara! Con solo una teta tuya me pones cachondo...qué puedes hacer más con el resto de tu cuerpo, cariño ? -Acariciaba su pecho estrujándolo intermitentemente y pellizcando ese enorme pezón rosado tan erecto como el mismo regalo que Sergio le tenía preparado bajo su bragueta, mordisqueaba su nuca regalándole su aliento al oído, subía sus mordisquitos , ,suaves pero certeros, hacia el lóbulo de su rosadita orejita...

- Esss queee... -Clara ya no sabía donde esconderse, tratando de apartarse un poco , pues no estaba acostumbrada a esas sensaciones que eran nuevas para ella, tan placenteras y desconocidas hasta ese momento...sus braguitas, empapadas, empezaban a emanar el olor de la leche que la bañó en la mañana.

-Mi niña, ¿de qué tienes miedo ? Sabes desde el primer momento el por qué me he ofrecido a ayudarte en la trastienda, sabes de sobras que me pones cachondísimo desde que te ví al entrar en tu tienda y además... desde que probé tu tarta no me puedo quitar de la cabeza la necesidad de llenarte entera y hacerte mía , si tú quieres...que creo que sí ...

La cosa quedó ahí , sin apartarse Sergio , bien agarrado a su cintura, rozando su sexo con ella, la dejó de mordisquear dejándola libre para preparar los lingredientes sobre la tabla.

Clara sentía miedo por lo desconocido, pero eran demasiadas las ganas que tenía de sentir una polla dentro suyo, y más una polla tan deseada como la de aquél hombre que tanto le había atraído desde el primer momento. Así que se armó de valor, y decidió hacer la tarta exactamente igual de como la había hecho la madrugada anterior, desnudándose por completo.

-Sergio, ahora voy a hacer la tarta tal cual como la hice esta mañana, así podrás conocer el ingrediente secreto ...solo te pido un favor, no se lo digas a nadie , porfi.

-¡No lo haré!Pero déjame tocarte , estás tan linda desnuda y yo estoy tan caliente...-Clara apartó sus manos antes de que consiguiera acabar la frase .

-Si quieres conocer el ingrediente secreto tendrás que esperar, luego podrás hacer conmigo "lo que quieras "

-De acuerdo , trato hecho - abrió sus ojos espectante ante ese bellezón desnudo cubierto de harina...su polla iba a atravesar la tela de sus vaqueros de un momento a otro, pero debía esperar, Clara le prometió darle rienda suelta...

Clara empezó a jugar con la harina, maquillando su cuerpo como hizo en la mañana...jugando sin parar con su pecho mientras con otra mano se introducía el rodillo de amasar en su excitado y virginal coño. Agarró la jarra de leche fría y acomodando un cuando debajo hizo pasar media jarra de leche a través de sus pechos, dejándola caer en el "bowl". Cubrió de harina la encimera, subiéndose en ella , tumbada , boca arriba...acomodando el cuenco entre sus muslos...jugando con el rodillo, penetrando poco a poco el mango de éste y dejando caer simultánaemente con la otra mano la media jarra de leche que había reservado haciendo que se introdujera por su vagina con la ayuda de ese enorme juguete casero que tenia en la otra mano...

Sus piernas empezaron a a tamblar y se podía ver claramente como su entrada a la vagina se abría y cerraba instintivamente fruto de un dulcísimo orgasmo que hacía brotar toda la leche hacia el cuenco ...leche con sabor a deseo y pasión ,gracias a la mezcla con sus jugos vaginales tras su orgasmo .

Sergio no pudo aguantar más, la agarró por los muslos abriéndolos , retirando el cuenco , retirando el rodillo...apresuraba su boca hacia su coño sacando al máximo su lengua por tan de agarrar la máxima cantidad de leche posible con ella...y saborearla, disfrutarla sorbiéndola como un sediento puede sorber una sandía en medio de un desierto... lameteando toda su raja de arriba a abajo, escondiendo su lengua en su agujerito aún no explorado, empujando con la punta de su nariz ese clítoris rosadito que emergía de su escondrijo...

Clara no podía más , sus sollozos atravesaban las paredes del local , se podían escuchar por todo el vecindario... bien se podían confundir con la peli porno que ponía el vecino del bloque de al lado a todo trapo , pero estos gemidos sonaban a virgen... a placer ingenuo , a algo por descubrir.

-Mmmmm...qué rico tu flujo , Clarita... ahora quiero que te vuelvas a correr , pero esta vez a mi manera... vas a hacer para mí una receta nueva: " la tarta dos leches"...

Con un rápido movimiento Sergio volteó a Clara dejándola boca abajo en la encimera. Le ponía enfermísimo ver toda esa harina decorando su espalda y su culito respingón ... Era el momento perfecto para bajar su bragueta y meterle toda su polla dentro de ese culo que tantas ganas tenía de abrir a su paso...

-Sergio ! nooo porfi...soy virgen ...

Esa era la frase que quería escuchar ( pero no en ese momento ...). La idea de ser el primero en hacerla gozar la ponía más cerdo todabía , pero decía comportarse como un hombre ...decidió calmar sus necesidades más pausadamente.

-Clara , gírate cariño, tengo un regalo para tí y quiero que lo saborees

Clara obedeció y tras sus vaqueros , bajados hasta los tobillos se encontraba una enorme polla , rígida y erguida como el estandarte de toda buena nación que se precie, le mediría tranquilamente unos 20 cm. y además era gruesa, tanto que Clara tuvo que abrir mucho su boca para introducírsela dentro.

-Esta polla estará en tu coño cuando menos te lo esperes y tambien en tu culo , cariño.

No paraba de mirarla entrando y saliendo de su boca , poco a poco y con cuidado pues le tocaba la pared de la garganta y no la dejaba respirar con facilidad. Las manos de Clara se atrevieron a palparle los testículos a modo expedición . Estaban bien duros como dos piedras, la piel que los cubrñia no tenía un solo pelo, estaba recia por la excitación.

Esta vez era Sergio el que estaba sentado en la encimera y Clara regalándole mis caricias y lametones que lo ponían cada vez más enfermo. No pudo evitar sacar su primera gotita de líquido preseminal en cuanto a Clara se le ocurrió recorrer con su lengua desde los testículos hasta la punta de su pontente nabo sin dejar de empujarla, sin dejar de acariciar sus huevos , regalándole de tanto en tanto unos tiernos pellizcquitos en us pellejo que lo atontaban más aún.

-Para Clara , que no me quiero correr todabía...

Haciendo un paréntesis Sergio acomodó a la chica tumbada en la encimera boca abajo dejando caer sus piernas y agarrándolas con sus fuertes brazos con tal de mantenerlas baiertas al máximo que daba la articulación. Su lengua volvió a introducirse de nuevo en su delicado coñito vigren... sus jugos la delataban , Clara estaba pidiendo a gritos silenciosos que le metiera la polla...no iba a tardar mucho en sentirse como una perra bien follada.

Acercó su erguido nabo a la entradita tímida pero mojadísima de su coño. Ella era una chica muy pulcra y maníatica de la higiene personal, su coñito iba totalmente depilado , solo dejando una pequeña porción de pelo corto en su pubis a modo decorativo. Uffff ... a Sergio le ponía bien cerdo ver como resvalaban los flujos por sus labios libres de pelos ... no había nada que lo enloqueciera más que ver como ese liquidito blanquecino acababa rodeando el clítoris enrogecido de esa chica tan sedienta de él.

No lo dudó ni un momento, su polla se adentró lentamente pero con fuerza dentro se su coño.

Ella gritó tas ese inetnso dolor al sentirse penetrada por primera vez, unas lagrimitas se escurrieron de sus ojos cuando Sergio le arrebató su posesión más protegida por ella en sus 22 añitos de vida.

Uhmmm...no sábeis qué sensación más buena tuvo Sergio al notar un pequeño estallido en la punta de su pene mientras la penetraba con fuerza y de pronto notaba una humedad que lo bañaba y lo calentaba más aún de lo que estaba. Acrecentó su rimto, y pronto los sollozos de la nueva mujer , Clara , se convertirían en gemidos llenos de placer pidiendo más a gritos.

Sergio ya no podía más, empuejando y moviendo su polla dentro se ese prieto , mojadísimo y ardiento coño lo hacía perder el control. Los espasmos de Clara eran evidentes hacía ya un rato, descubrío en aquél momento que era multiorgásmica... no dejaba de emanar jugos y jugos bañando la polla de su amante y autrdiéndolo de tal manera que no pudo aguantar más.

Se corrió dentro ...lo hizo como a él le gustaba , empujándola mientras subía y bajaba su pelbis , agarrándola de las caderas bién fuerte asegurándose que no pidía sentirla más profunda, sin dejar de mover su pelbis , notando con la punta de su amenazante polla latiente el cérvix de esa mujer recién estrenada....y allí explotó, empezó a regalarle toda su leche sin dejar de agarrarla sin dejar de mover su pelbis perdiendo así el control sobre su mente, dejando al animal hacer lo que bien sabía hacer , follar como es debido.

Cinco fueron los segundo que mantuvo Sergio su pene vacío dentro del coñito recién estrenado de Clara, quería asegurarse que no se escapaba ni una sola gota, pues necesitaba tada la leche para crear la nueva receta de la tarta...

Pasado el clímax, las caderas de Clara fueron levantadas por Sergio , y sus rodillas asentadas en la encimera, dejando a la chica en cuatro patas, acomodando el cuendo de amasar entre sus piernas, masajeando sus labios externos totalmente enrojecidos y palpitantes, levantándolos para dejar ver coom se abría y cerraba su dulce coñito dejando ver el blanquecino del semen que la habia rellenado por completo.

A Clara se le salía la baba de la boca , sus ojos entrecerrados, el sudor en todo su cuerpo, ese mordisquito que se regaló en el labio inferior de su boca ... Todo hacía notar que Clara estaba en la gloria bendita.

Sergio la agarró con sus dos manos desde atrás las dos tetas , estrujándolas como si de ordeñar se tratara, sus pezones durísimos y tan sensibles como nunca , la hacían gozar como una perra en celo , entre el dolor y el placer de esas grandes manos apretándole las tetas como si de oredeñar una vaca sse tratara.

Esta es la situación , Clara en cuatro patas abierta de piernas, Sergio por detrás estrujándole con fuerzas sus tetas, el cuenco abajo esperando la leche caer de su coño...y a lengua de Sergio que rodea su ano dejándolo empapado , penetrándolo con la lengua sin dejar de estrujar esas preciosas tetas... y mientras la leche va cayendo , poco a poco , de su abierto y enrojecido coño recién estrenado , sus piernas temblorosas , su colito abriendose y cerrándose tras un inminente orgasmo ... Clara no puede más... explota en sollozos y gemidos tras un orgasmo descomunal que le remueve toda la leche que lleva dentro, la combulsiona y tras el espasmo final deja caer casi a presión toda la leche que la rellenaba.

-Ahora ya tenemos todos los ingredientes necesarios, mi zorrita, descansa un poco , ya te ayudaré con la masa.- La susurró al oído aprovechando para morderle el cuello, y regalarle una palmada en el culo a modo de recompensa por su trabajo bien hecho. Se subió los pantalones sin limpiarse, abrió la persiana y se marchó .

Clara extasiada cerró sus ojos y cayó rendida en sueños...era ya muy tarde.