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Primera Vez con un desconocio

en Hetero: Primera vez

Mi nombre es Sofía, tengo 19 años y lo que les voy a contar sucedió hace tres días.

Aprovechando las vacaciones y que mi madre se había ido de viaje, decidí hacer una “reunión” con mis amigas del colegio en mi casa. Por las ocupaciones en la universidad hace mucho tiempo no las veía; nos conocemos hace 6 años ya que las 4 estudiábamos en el mismo colegio. Al graduarnos tomamos caminos diferentes ya que nuestros gustos y personalidades eran muy diferentes lo que hacia aun mejor nuestra amistad.

Irene se decidió por las finanzas, Andrea por la ingeniería química, Lorena por la ingeniería industrial y yo por la medicina. A pesar de no tener mucho tiempo libre cada vez que podíamos salíamos juntas especialmente Lorena y yo y siempre terminábamos hablando de sexo ya que ella tenia muuchaa experiencia y yo era virgen así que me gustaba escuchar todos sus encuentros.

A mis 19 años nunca había tenido novio y no por que no se me presentaran oportunidades, si no simplemente por que no quería descuidar la universidad y para ser honesta me daba miedo o pena o no sé que supieran que nunca en la vida había tenido un novio. Físicamente no soy una mujer despampanante pero tampoco la mas fea; mido 1.65 soy trigueña de ojos verdes, cabello negro largo y ondulado un culo prominente y tetas medianas muy paraditas. Mis amigas decían que le gustaba a muchos chicos y tenia muchos amigos pero eran solo eso, porque siempre terminaba convirtiéndome en “la amiga” con la que veían partidos de futbol, juagaban videojuegos, a la que le cuentan todo y le piden consejos para fajarse a otras. Cuando nos emborrachábamos o nos íbamos de farra terminaba besándome con alguno de ellos pero de ahí no pasaba por que era muy raro por que nos conocíamos demasiado.

Volviendo al día en cuestión aproveche que mi mamá se fue de viaje para reunirme con mis amigas en mi casa a tomar tequila y hablar de hombres. A eso de las 9pm llegaron y comenzamos a tomar y a fumar un poco; comenzamos a bailar y ya estábamos muy calientes y comenzamos a besarnos pero las experiencias lésbicas no eran lo nuestro por lo que  necesitábamos hombres asi que Lorena llamo a Daniel uno de sus compañeros de la universidad que llego con unos amigos mas. Cuando ellos llegaron deje de tomar por que “era la dueña de la casa”  y la responsable de todos pero no necesitaba el alcohol para divertirme asi que comencé a bailar y Daniel se me acerco y empezamos a bailar muy caliente; siempre me han dicho que mi movimiento de cadera es muy sexi así que hice uso de este hasta que lo puse a mil. En ese momento de la calentura que traía no me preocupaba que nos vieran tenia muchas ganas y Daniel parecía un dios griego alto con un cuerpazo ya que era nadador, cabello negro y ojos azules, y por lo que podía sentir debajo de la ropa tenia una verga como de 20 cm.

Lorena y Christian se encerraron en una habitación, Irene se fue a la casa de su novio, Andrea y camilo se apoderaron de mi cama por lo que en la sala solo quedábamos Daniel y yo. Comenzamos a besarnos con desenfreno, me mordía los labios, jugábamos con nuestras lenguas, me lamia el cuello (cosa que nunca me habían hecho) ya estaba muy excitada, hasta que empezamos a escuchar gemidos, era Lorena explotando en tremendo orgasmo gracias a la majestuosa lengua de Christian en su clítoris, ellos ya tenían su historia por lo que ya conocían bien sus cuerpos.

Volviendo a lo que estábamos con Daniel a pesar de pensar en que no quería que mi primera vez fuese con alguien que acababa de conocer, primero estaban las ganas y ya estaba que no podía mas, me moría por sentir esa verga dentro de mi. Mis experiencias sexuales se reducían a “orgasmos” que conseguía masturbándome mientras leía  relatos como este o viendo videos porno.

Como todas las habitaciones estaban ocupadas nos toco en el sofá. Primero bailamos reggaetón, me tocaba las tetas, las mordía, las chupaba, las besaba; tocaba mi vagina por encima del pantalón y yo comencé a quitarle la camisa, tenia unos abdominales increíbles, luego le quite el pantalón y me encontré con una verga de 20 cm, la única que había visto en mi vida y la mas rica!!! Inmediatamente me dirigió hacia ella y comencé a mamarla. Creo que todas las películas porno y los relatos que había leído finalmente servían para algo. La recorria toda, le lamia los huevos, le la metia toda a la boca. Creo que no se dio cuenta de que era la primera mamada que daba en mi vida. Luego de unos minutos me detuvo me tiro en el sofá, me bajo la tanguita roja que traía y me dijo “ahora te toca a ti”.

Lentamente comenzó a lamer mi coño totalmente depilado, era lo mas rico que jamás había sentido, mi cuerpo se estremecía cada vez que sentía su aliento, se notaba que era todo un experto en el sexo oral, llegue 2 veces hasta que le dije que ya no aguantaba mas que lo quería dentro de mi y de una sola estocada me lo metio todooo!! Tenia el coño muy mojado lo que le facilito las cosas pero me dolioooo demasiado y aun asi no quería que se detuviera. Luego de un rato de mete y saca el dolor desaparecio y se convirtió en placer. Decidi probar todas las posiciones que algunas vez había visto y el estuvo dispuesto a todo. Primero lo cabalgue, me encantaba como me mordia los pezones, me besaba como un salvaje, me trataba como a un puta pero eso solo me ponía mas cachonda. Por un momento nos detuvimos por que escuchamos un ruido; eran Christian y Lorena mirándonos y masturbándose mutuamente.

Era el escenario perfecto, no podía creer que mi mejor amiga estuviese mirándome tener sexo con uno de sus amigos y a su vez llegando a un orgasmo. Daniel y yo seguimos en lo nuestro por 30 mins mas, ya llevábamos una hora teniendo sexo y yo no daba mas pero el seguía y seguía, aguantaba mucho sentía que nunca iba a terminar.

Cuando ya se venia la saco y se la mame hasta que me trague toda su leche, era una delicia. Nos quedamos dormidos en el sofá hasta que lo desperté para que sacara a sus amigos y se fueran.

Nos despedimos con un beso con toda y no volvi a saber de el. Puedo decir que mi primera vez no fue como siempre la espere pensando en el prototipo social de que fuera con mi novio, alguien a quien amara, que fuese algo romántico pero tampoco me puedo quejar, no me arrepiento de haberlo hecho.