En primer lugar quería pedir perdón por la tardanza en volver a escribir, pero entre exámenes, clases... no he tenido mucho tiempo.

Este relato continua de este último:

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Al dirigirnos a su despacho para revisar el trabajo, el profesor me mandó ir delante de él, por lo que al llevar una falda muy corta, al subir las escaleras no se perdió nada de mi tanga y mi culo.

Llegamos a su despacho y cerró la puerta con cerrojo, lo que me extrañó, pero se justificó diciendo que la puerta no encajaba bien y no quería dejar la puerta abierta ya que la revisión era algo personal. Buscó entre una gran pila de folios y sacó mi trabajo, lo colocó encima de la mesa. En él aparecía en rojo un 3. A mí me extrañó ya que me lo había currado mucho y solo me había puesto un 3. Antes de poder hablar para pedir una explicación, se levantó y se sentó encima de la mesa justo a mi lado, desde donde tenía una gran vista de mis tetas, que como comenté en mi primer relajo no llevaba sujetador. Comenzó a explicarme porqué tenía el trabajo mal y que tendría que hacer un examen muy bueno para poder aprobar su asignatura. Lástima que según me habían avisado algunos compañeros en el examen era un cabrón, pro lo que me veía estudiando todo el verano. Pero derrepente se cambió de lado y se sentó en una silla a mi lado, lo que me extrañó. Siguió hablando como si nada, explicándome que el examen era bastnate dificil ya que era una asignatura muy importante para la carrera. Mientras hacía esto sentí como rozaba su mano en mi pierna, al principio pensé que era casual, pero finalmente la puso encima de mi rodilla. El tiempo pasaba y no la movía, incluso al ver que no le decía nada se animó a subirla hasta llegar al borde de mi falda. Entonces me levanté de la silla y le dije:

- Que se piensa, que porque me quiera suspende me voy a acostar con usted.

A lo que él respondió:

- Yo no he dicho nada de acostarnos, solo que me gustaría disfrutar un poco de tu cuerpo, viendolo y quizás tocándolo.

- No creerá que de verdad le voy a dejar q me toque por un aprobado, dije yo.

- Yo no dije nada de aprobarte, aunque ese 3 y la escasa nota que saques en el examen, quizás pueda subir hasta un 9 o un 10.

Al ver que me volvía a ssentar, se animó y volvío a colocar la mano en el borde de mi falda. Al ver que me estaba quieta empezó a pasar su mano por mi pierna, subiendo de la rodilla a la falda. Hasta que se animó y la metió debajo de mi falda. Se levantó de la silla y se arrodilló delante de mi. Mientras me metía la mano acariciando mi muslo por dentro, hasta llegar a mi coñito, notaba como se aceleraba su respiración, al igual que aumentaba su bulto del pantalón.

De pronto se volvió un bestia, al notar mi coñito húmedo y se lanzó sobre mis pechos. Me empezó a meter dos dedos en mi coñito húmedo mientras me quitaba la camiseta y me chupaba las tetas. Comenzó a chuparme los pezones en círculos y dándoles mordisquitos. Yo no dejaba de decirle que parara pero al notar mi respiración y mis gemidos seguía cada vez más deprisa.

- MMMMMM, que tetitas tienes nenita. No dejar a tu profesor que disfrute de ellas...

- No siga, por favor.... mmmmmmmm.... usted no puede hacer esto....mmmmmmm

De pronto, subió la falda a mi cintura y empezó a comerme el coñito. Primero paso su lengua para limpiar mi coñito de todos los jugos que tenía y poco a poco fue metiendo su lengua en mi coño mientras con sus labios me chupaba los labios. Mientras, ocn las manos me apretaba las tetas. Yo no dejaba de gemir y de soltar flujos. Hasta que me corrí.

Enotnces él se sentó en la silla de al lado y me hizo una señal hacia su gran bulto. Yo me incorporé como pude y le dije que no iba a hacer nada de eso. A lo que él me respondió:

- Puedo suspenderte y hacerte ir a tribunal, lo que te costará pagar varias convocatorias. Y por lo que se tú no tienes suficiente dinero.

A lo que tuve que bajar la cabeza, arrodillarme y bajarle le pantalón.

Pero lo que él no sabía esque eso me excitaba muchísismo...

Empecé a desabrochar sus pantalones y los bajé, al igual que sus calzoncillos. Apareció su enorme polla, por la cual empezé a pasar mi lengua. Empezé a enrollaral en la poya mientras ocn mis manos aacariciaba sus huevitos. Cuadno la tenía totalmente humeda, la metí en mi boca y empezé el mete saca. Mi profe no dejaba de gemir de placer, mientras yo me llenaba la boca con su gran y gorda poya. Ël no aguantó mucho y se corrió en mi boca. Yo me lo tragué todo y no dejé caer una sola gota.

Tras esto, se vistió y yo me vestí. Me dijo que tenía clase y no podía faltar, que ese trabajo habái estado mucho mejor que el que le había entregado a papel. Si quería subir más mi nota ya sabía donde encontrarlo, pero que me quería volver a ver por sus clases para alegrarlo la vista con mi ropa tan sexy.