Aquí os traigo un relato con el que quiero hacer un relato erótico, en el sentido más extricto de este, donde exista una base y no el típico vamos a hacerlo, acabamos ambos y adios, si eso es lo que quereis no es exactamente este el relato que deberíais leer. Me he tomado mis propias "licencias poéticas" y de este relato abrá una segunda parte. Al igual que crearé otros teniendo en cuenta los comics, como son Lobezno y Jean Gray o Ciclope y Jean Gray o similares. 

Otra cosa, estos relatos estarán basados en la versión Ultimate de los X-Men, donde Piort es gay. Digo esto para aquellos fans de los comics y ante lo que antes dije comenten acerca de ese detalle. ¡ESPERO QUE OS GUSTE!

En la gran mansión en la que se emplazaba la Academia Xabier para “Niños Superdotados” la paz era casi palpable. En un mundo en el que tener el gen mutante puede traerte la muerte, a pesar de todo, los pobres integrantes de la Patrulla X se veían con normalidad obligados a quedarse en esa impresionante casa cuando no participaban en sus misiones o cuando no tenían permiso para salir con ciertas medidas de seguridad hechas por el mismísimo Xabier.

En la mansión reina el silencio, Henry se encuentra chateando en la soledad de su cuarto, Scott, Ororo y Jean se encuentran en la Habitación del Peligro. Xabier los monitoriza. Mientras que Bobby sigue en el hospital.

Piort Raputin y Logan están en sus respectivos cuartos, tras haber pasado un rato charlando en las duchas para los hombres, aunque Logan quizás podía haber ido a por una cerveza a la cocina. Ambos tienen actualmente una gran amistad, aunque realmente eso no es lo que desea Peter. Desea realmente mantenerlo en el más estricto secreto, aunque a la telépata del colegio no le ha costado nada saber que quiere mucho más con Logan.

Peter simplemente pensaba en lo insano que le resultaba a veces esas duchas junto con Logan, rozando lo erótico y la camadería, realmente  deseaba lograr llegar hasta su corazón, aunque teniendo en cuenta el enamoramiento que tenía con Jean a pesar de todo… Realmente para Peter era una batalla perdida antes de siquiera intentarlo. ¿Aunque para que intentarlo? El mutante de 225 kilos tenía bastante claro que Logan no era gay, por lo que no pretendía fastidiar su amistad con el por algo como eso.

Peter perdió el hilo de sus pensamientos con un repentino silbido a lo lejos, reconoció el tono de Logan de inmediato. No pudo evitar levantarse de la cama y dirigirse hacia la puerta, que entreabrió con el mayor sigilo posible, sin saber bien porque lo hacía. Debía ser muy cuidadoso si no quería que el mutante de sentidos agudizados se diera cuenta de que le estaba “espiando”.

Peter busco rápidamente a Logan en el pasillo, apenas a unos tres metros de la puerta y restando estaba él alegre tipo, que vestido únicamente por una toalla degustaba una cerveza que había cogido de la nevera en la cocina.

El gran mutante no pudo evitar repasar lentamente cada músculo brillante por unas perladas gotas de agua que le recorrían el cuerpo hasta llegar a la toalla. Peter vio al peludo mutante que se presentaba delante de él, mientras se iba tranquilamente a su cuarto, al cuarto más cercano al del joven Rasputín. Él no pudo evitar pensar en esa fuerte espalda que se alejaba lentamente en ese paso animado. Pensaba en acariciarla, notar cada uno de sus músculos, sus trabajados músculos a los largos de las décadas. Se preguntó cuántos años tendría debajo de ese factor de regeneración acelerado. De repente se sintió pervertido al haber tenido ese tipo sueños con el implicado, pero en lo más hondo le dio por completo igual, más allá de lo físico veía lo sentimental.

Pasaron los segundos, se quedo en la puerta mirando un pasillo vacío en el que no había ya nadie. Pensó en hacer algo precipitado, quizás algo que le provocaría suficientes problemas para que la vergüenza le venciera y se viese obligado a irse de la academia, pero en ese momento le dio igual.

Abrió por completo la puerta y a paso cauteloso se dirigió al cuarto de Logan, en el que él ya estaba terminándose la cerveza. El corazón le latía a mil, si el del esqueleto de adamantium se ponía a atender un poco se daría cuenta de su presencia.

Respiro, espiro, respiro, espiro, y cuando pensó que estaba suficientemente preparado, empezó a abrir la puerta con sigilo, había decidido mirar el escultural cuerpo antes de aventurarse con lo que tenía pensado, pero lo que vio no se lo esperaba.

Logan se estaba quitando la toalla, para dejarla en la cama, encima de la lata de cerveza ya aplastada. Peter miraba con extrema fijación el perfeccionado cuerpo de su compañero de fatigas. Realmente nunca lo había visto desnudo ya que siempre mantenía la vista el frente en las duchas tratando de ocultar al máximo su fascinación por Logan y todo lo que hay en él…

Peter empezó a bajar la mirada, Logan le daba la espalda, y solo pudo ver unas apretadas nalgas. Empezó a sentir unos terribles celos contra Jean, por haber podido tocar hasta el último milímetro de ese cuerpo, y pensó que era una increíble idiota por romper su relación.

Pensó por un segundo en entrar, justo cuando Logan se empezaba a dar la vuelta y pudo ver lo que la toalla le tapaba. Se deleito de cada centímetro del miembro de su camarada, entre todo ese vello… Era tan peludo, en contra de él mismo, que básicamente carecía de vello corporal por sus habilidades… El miembro en estado semiflácido rondaba los diecisiete centímetros, con un gran grosor. El musculoso mutante lentamente acarició su cuerpo, sin sospechar de la atenta mirada de su colega.

Peter empezó a excitarse, pensando que la mano de Logan era la suya, que podía tocar hasta el último centímetro del perfecto cuerpo del tipo del que estaba prendado. Acariciar lentamente sus prietas nalgas, morder uno de sus pezones, besarle… Acariciar lentamente su miembro en un lento masaje tratando de abarcar todo… Deseaba entrar en la sala y poder hacer eso, sin parar, hasta que Logan decidiera que era el momento de ponerse con algo más serio, y poder empezar a lamer el glande, poder acariciar el tronco por el cual varios pelos escalaban… Realmente quería una noche de pura pasión en el que acabara completamente sudado y bañado por los fluidos de su apasionado compañero…

Sin darse siquiera cuenta, Peter ya estaba acariciando su miembro, metiendo la mano por los pantalones cortos rojos. Acariciando su miembro… Deseando que fuera el de Logan y poder saborearlo.

No podía gemir, aunque en esa fantasía que tenía rugía de placer en las poderosas embestidas de Logan… Él que aparentemente si podía gemir era al que deseaba hacerle de todo, porque poco a poco soltaba algún gemido, cuando movía su miembro de arriba a abajo, cuando pellizcaba sus duros pezones… Eso hacía que Peter se calentase más, y pensando en la completa privacidad que podía tener, se desabrochó los pantalones y se bajo los bóxer que casi eran tan largas como las bermudas. Empezó masajeándose los testículos, pero lentamente ese masajeo le parecía demasiado poco ante el aún creciente miembro de Logan.

Por alguna razón Logan se había sentado en el suelo, Peter empezó a pensar que le estaba ofreciendo ese espectáculo, sabiendo que estaba espiándole, pero lo descarto al ver como poco a poco se flexionaba sobre sí mismo con una gran flexibilidad de la que no había alardeado antes. Peter estaba ya empezando con lentas sacudidas que le daban cierto placer, nada comparado con lo que imaginaba que podía hacer con Logan. Abrió un poquito más la puerta, para ver entero el duro cuerpo de ese monstruo que podría darle tanto placel.

El miembro de Peter en su perfecta erección tenía los diecinueve centímetros, aunque aún podía crecer hasta los veinticuatro.  Mientras que Logan seguía con su miembro casi del todo duro, acariciando el aire con unos imponentes y gruesos veintidós centímetros. Parecía que esos genes mutantes que le daban masa muscular le daban también tamaño en otra parte…

El joven Piort suspiró entre el placer y la añoranza de lo que nunca tuvo pero tanto deseaba. Lentamente entro en su estado de acero orgánico, buscando el extraño placer que le provocaba la frotación del acero con el acero.  Su miembro creció imponente hasta su medida máxima, Peter no pudo hacer otra cosa que reprimir un gemido mientras una gota de un denso líquido que salía de su falo, como la variante en su fase de acero del líquido preseminal. Arqueo la espalda, mientras el líquido se desplazaba limpiamente por su miembro, aparentemente dándole un tremendo placer por una razón desconocida. Al llegar a su mano, recopilo de su miembro todo lo que pudo él y lo lamió.

Mientras aún se relamía los labios observo asombrado lo que Logan había intentado, lentamente empezó a sacar la lengua, y de un lametazo logró empapar su glande en su saliva. Eso a Peter no lo pudo calentar más, realmente sintió la necesidad de lanzarse a por Logan… No podía saber si era hetero o bi, pero el simplemente hecho de poder demostrar eso hizo que sufriera un terrible espasmo de puro placer mental.

Logan avanzaba lentamente con su lengua por la longitud de su miembro, haciendo sonar sonidos guturales… Sonidos que le excitaban a sí mismo. Realmente Logan sabía como automamarsela, pasar la lengua por lugares donde le daba más placer, arañando delicadamente su glande con los colmillos, dando caricias fogosas con sus labios al tronco. Hacía movimiento hacia arriba y hacia abajo, sin molestarse en pensar en el hecho que podía meterse perfectamente su miembro en la boca, hasta su base y aún sacar la lengua para lamer sus huevos. Realmente sentía el gusto de alguien capaz de llevar al siguiente nivel el darse placer a uno.

Lentamente, disfrutando de cada centímetro, saboreando su miembro gracias a su flexibilidad sobrehumana… Poco a poco empezó a sacarse el miembro de la boca, cuando termino de ello le dio una fuerte y rápida lamida, que le produjo un espasmo de placer. Con la mano derecha cogió su babeado falo y con la izquierda empezó a pellizcarse los pezones, primero lentamente, con delicadeza, para después retorcer un poco al compas del sube y baja de su mano meneando se tremendo miembro.

Lentamente la mano izquierda fue bajando, hasta coger su miembro con ambas manos, apreciando cuanto medía, cuanto sobraba por encima de la segunda mano… La mano izquierda no tardo mucho en empezar a bajar y a estrujar esos huevos repletos de algo que Peter deseaba chorreado por su cuerpo.

Con ese pensamiento Peter empezó a bajar la mano hasta llegar a la entrada de su ano, acariciando los alrededores, apretando sus duras y metálicas nalgas mientras su otra mano se movía a una velocidad vertiginosa, provocándole muecas de puro placer, sintiendo verdaderas ganas de entrar y descargar encima de Logan, después comerle su tremendo miembro y comerse la lefa que pudiera robarle.

Simplemente se conformó con mirarle, desearle y empezar una lenta penetración en su ano, con un dedo, empezando lentamente, con dos, tres de esos tremendos dedos de gran tamaño que ya no permitían meter más en el apretado y metálico culo. Los gemidos no podían ser reprimidos ya. Gemía poco a poco, sofocado, pensando en que si se corriera través de la puerta podría manchar con su semen el reluciente y bien formado cuerpo de Logan. Pero eso daba igual, sentía el placer, sentía las ganas de correrse, pero quería correrse al unísono con Logan… Que lentamente volvía a sus andadas lamiendo su largo falo en un garganta profunda que le procuraba un muy intenso placer, sintiendo la necesidad de correrse a cada repetición, a cada segundo que su lengua lamía los recovecos de ese miembro duro como la piedra. Logan empezó a sentir que se acercaba el extasiante momento… Que de un momento a otro acabaría con su propia lefa casi ahogándole. Le hubiera gustado que hubiera sido Jean quien se la comiera, quien acabara medio ahogada y bañada en esa blanca y abundante leche de cosecha propia…

No pudo evitarlo, empezó a darse algún que otro mordisquito en el miembro, pellizcarse los pezones, lamer ferozmente ese terriblemente buen falo. Sentir ese leve espasmo, ese tremendo placer antes de correrse, solo hizo que se animara más, más y más… Y deseara correrse aunque fuera en su boca, incluso tragárselo…     

Y Peter por su parte estaba en un impresionante movimiento de gran velocidad, llevando al limite su capacidad de aguante para correrse, aunque le costaba, no podía evitar ver que Logan estaba igual que él, buscando una tremenda corrida que llegase a dejarlos catatónicos de placer… Y aún ahí Peter básicamente solo se fijaba en esa musculatura marcada, en el brillo que el sudor le daba… Deseaba lamer su piel salada, besarlo… Y recibir por donde el quisiera hasta que su capa de acero orgánico se rompiera si era posible… Deseaba sexo frenético, pero teniendo en cuenta ciertos sentimientos… Aún así… Seguía deseando ver como Logan se corría, como si esperase que esa corrida iba a ser dedicado especialmente para el… Que Logan se levantaría, le daría un beso para intercambiar lefa, y empezaría con sexo duro y realmente placentero, de gemidos y rugidos de placer, de verdaderas sensaciones extremas… Deseaba gemir su nombre, sentir ese miembro desgarrándole hasta el último orificio…

Y así no pudo más, y su miembro reventó en una lluvia plateada que lo empapó entero, que baño su cara…   

-AhhhhAhhaaAaA…-Gimió lo más bajo que pudo el ruso, que en ese estado las experiencias como correrse eran realmente intensas. Le empezaron a temblar las piernas, empezó a sentir que se caía, no le importaba, los raudales de placer aún hacían verdadera mella en él.

Ese líquido plateado, que no era nada más que su propia lefa pasada por su mutación, empezó a entrarle en la boca, pero le daba igual. Estaba con la mirada perdida por el placer, mirando a Logan, que empezaba a tener en la espalda extraños movimientos que le decía que claramente se iba a correr. Le seguían temblando las piernas, empapadas de la lluvia dorada. En un movimiento de frenesí rompió la camiseta apretada de tirantes y sus gigantescos músculos plateados parecían sudar, recubiertos de esa lefa cayéndole como perlas de agua.

Peter no paraba, y ya le daba igual que le pillasen, había aumentado el ritmo, sentía un placer terrible, deseaba que sus dedos fueran la polla de Logan aunque no podía ser… Así que simplemente se los sacó. Uso la mano izquierda, ahora libre, para recopilar el semen y comérselo, sin dar ascos a donde había estado esa mano, ya que en esa forma nada era igual… Saboreo el líquido metálico como si fuera un manjar… Pensaba en que era la lefa de Logan, que esa corrida le había empapado de lo fuerte que había sido, y ahora Logan iría y le daría lo más fuerte posible… Hasta reventar…. Sintió otro espasmo, en una segunda corrida ínfima comparada con la otra, pero de lo más placentera… Gemidos, gemidos… Le daba igual que le pillase, quería tener algo más físico con él…

Logan, por su parte, seguía sintiendo esos leves espasmos en la espalda… Le pareció oír un gemido, pero no podía llegar a centrarse por ese placer indescriptible que le llenaba… Y… Reventó… Primero un chorro directo a la garganta, después otro al paladar, y así sin parar, hasta que su boca estaba repleta de ese líquido. Logan gemía guturalmente, Peter vio como se volcaba con el miembro en la boca, como se veían terribles convulsiones de puro placer… Logan saboreo la lefa que no paraba de salir, la tragaba, y aún salía… Sacó con rapidez la polla de su boca y el tremendo miembro siguió escupiendo largos ríos de semen, que empaparon el pelo de Logan, lo bañaron poco a poco… Y al fin, su poya dejo de regar… Ya cuando el suelo estaba empapado, y el exhausto.

-Ahrf… -Gimió de puro placer.-Puto factor regenerativo. –Dijo entre risas, con la voz entre recortada, por los jadeos… Por los ríos de semen que había soltado gracias a esa gran factor de recuperación acelerado… Sus huevos ya secos, empezaban a llenarse… Peter pensó en que sería una incansable máquina de sexo… Y él mismo igual, en su forma de acero orgánico no tenía ese problema… Aunque acabó dejando ese estado, ya agotado por el placer, más que por el acto masturbatorio intenso.

Logan masajeaba sus huevos, su polla, aunque ya veía demasiada lefa como para ponerse otra vez con lo mismo… Sentía la boca pastosa del sabor del semen… Pero le daba igual. Todo su cuerpo estaba en puro éxtasis de placer… Por eso muchas veces prefería trabajar solo que con compañía… A las mujeres no les hacía siempre gracia que las bañasen en una corrida explosiva.

Peter se quedo mirando desde el escondite detrás de la puerta, habiendo escondido ya su miembro, en un estado de semierección, mientras miraba como Logan aún tenía esa tremenda erección… Incansable maquina de sexo… Y dudo si entrar o no… Cumplir su mayor deseo, sexual… Y quizás sentimental…

Bueno, si has terminado de leerlo y te ha gustado, coméntamelo, si quereis que siga escribiendo más (la segunda parte de esta la subiré si o si) me lo decís. ¡Hasta otra!