Estás en casa relajado viendo la televisión, tu madre llega de la oficina muy cansada y estresada.

Tu madre siempre que tiene un mal día, acostumbra ir a un lugar de masajes relajadores a desestresarse y a ti te gusta acompañarla porque siempre que la acompañas también te paga un masaje relajante a ti.

Así que te levantas del sofá te colocas tus zapatos, tu madre y tú salen de la casa y se dirigen hacia el local de masajes.

Tu madre va vestida de un modo semi formal como siempre, con una playera gris brillante muy escotada y unos pantalones de mezclilla muy pegados.

Al verla de pies a cabeza te pones a recordar todas las obscenidades que dicen tus amigos acerca de tu madre, mientras te pones a  recordar como iba vestida un día tu madre, un día que se veía buenísima con un vestido negro tan pegado como una segunda piel.

"me gustaría follarme a tu madre" - recordabas a un amigo decir

"pero que mama tienes, si yo tuviera una madre así me haría una paja todos los días pensando en ella" - recordabas a otro amigo decir

"Pero que buen culo y que buen par de tetas tiene esa señora" - recordabas a algún extraño decir.

Pero ninguno de esos comentarios te molestaba, puesto que tú sabes que tu madre es una mujer de respeto y sabes que siempre le es fiel a tu padre.

Al llegar al local de masajes al cuál acostumbraban ir, notan que está cerrado, tu madre hace una cara de disgusto, y notas una pizca de desilusión en su hermoso rostro.

- ¿porqué no buscamos otro lugar de masajes? - le dices a tu madre.

- ¡sí! buena idea hijo - te responde tu madre con ternura.

Después de buscar un buen rato, encuentran un pequeño local de masajes.

Al llegar a la entrada, los recibe una bonita recepcionista, y le dice a tu madre que en un momento llamará al masajista.

-¿tu no quieres un masaje, hijo? - te pregunta tu madre

-No mamá, yo te espero aquí - le respondes a tu madre, ya que no te dan ganas de recibir un masaje en un lugar nuevo y desconocido.

Un joven de aproximadamente 26 años de edad, vestido todo de blanco, sale por una de las puertas, y notas como este "joven" se le queda viendo con lujuria y descaro a las tetas de tu madre.

A ti no te parece la idea de que un hombre le de un masaje a tu madre, puesto que en el lugar de masajes  a donde siempre acostumbran a ir, es una mujer la que le da los masajes a tu madre, no un hombre.

 Tu madre se queda mirando indecisa a aquel joven masajista.

-No se preocupe señora, él es nuevo en éste trabajo, pero aquí, todos nuestros masajistas son profesionales - le dice la recepcionista a tu madre al notarla indecisa.

Tu madre aún indecisa acepta el masaje y después de pagarle a la recepcionista el monto por el masaje, te regala una tierna sonrisa con sus dientes perfectos.

- espérame aquí hijo, no me tardo - te dice tu mamá.

Notas como el joven masajista mira el culo de tu madre descaradamente mientras se dirigen al cuarto asignado. Ambos entran al cuarto y escuchas como el joven masajista le pone el seguro a la puerta después de cerrarla.

La recepcionista te dice que si gustas puedes ponerte a ver la televisión en la sala de espera, pero tú, preocupado por lo que haz visto, te sales del local corriendo y desesperadamente buscas alguna forma de poder ver lo que pasa dentro del cuarto. Por suerte, en la parte de atrás del local, notas una pequeña ventana entreabierta desde la cuál puedes ver el cuarto donde se encuentra tu mamá.

Tú ya conoces el protocolo de los masajes relajantes de cuerpo completo, porque haz acompañado a tu madre a los masajes en el otro local, sabes que tu madre tiene que quitarse la ropa por completo y ponerse boca abajo sobre la tabla. Pero tu madre no se quita la playera y sólo se la baja hasta la cintura, mientras se desnuda, reflexionas acerca de que tu madre realmente tiene un cuerpo que debe causar envidia en mujeres de todas las edades y fantasías sexuales en los ojos de todo hombre.

Puedes notar como el masajista mira con lujuria a tu madre que se encuentra boca abajo, semi desnuda sobre la tabla, relajada, con los ojos cerrados esperando a que empiece el masaje relajante.

Pero al comenzar el masaje, te das cuenta que algo no está bien, te das cuenta de algo que te hace enojar mucho.

Aquel joven masajista no está dándole un masaje "relajante" a tu madre, en realidad parece estarle dando un masaje "erótico" y con cada movimiento de sus grandes manos, está intentando poner cachonda a tu madre, masajeando a tu madre de forma erótica de arriba a abajo, manoseando con descaro el culo de tu madre, sus caderas y cada parte de su cuerpo con sus manazas.

Después de un rato tú mismo confirmas que la intención de aquel masajista cabrón era poner cachonda a tu madre, cuando notas que tu mamá comienza a emitir pequeños gemidos de excitación, y su respiración comienza a alterarse y envés de estarse "relajando" con aquel masaje, tu madre se estaba "calentando".

Además ahora no era una mujer la que masajeaba a tu madre, era un hombre joven, que con toda la intención de calentar la situación, movía sus manos con astucia para seducir a tu madre.

El masajista, deja de masajear a tu mamá y le pide amablemente que se ponga boca arriba pero además el muy cabron le dice que la va a dar un aceite relajante y que es mejor quitarla las bragas para no mancharlas, pero que no se tiene que preocupar porque la tapara con unas toallas.

Tu madre esta como ida y solo contesta

"Haz lo que creas conveniente, tu eres el profesional"

Ves como el masajista agarra los bordes de las bragas de tu madre y ayudado por ella que levanta el culo hacia arriba le quita las bragas a tu madre dejándola en la mesa de masaje completamente desnuda, luego la da dos toallas minúsculas y tu madre se gira y se las coloca mientras el masajista busca el aceite.

Las toallas son tan pequeñas que el coño de tu madre se puede intuir perfectamente.

El masajista continúa con su masaje y pronto la toalla que tapa el pubis de tu madre se cae hacia un lado, tu madre ni se da cuenta y el masajista retira la toallita sin decir nada y continua con su masaje, ahora tu madre tiene todo su coño expuesto.

El masajista pronto se sigue aprobechando y pronto se deshace de la otra toalla, ahora tu madre esta dejando ver sus redondas, firmes y grandes tetas y notas que tiene los pezones muy levantados, al parecer está un tanto excitada, también puedes ver la estrecha raja de su vagina, entre sus piernas que tiene cerradas.

El joven masajista se queda viendo impresionado las redondas tetas de tu madre, pero se queda aún más impresionado al ver lo estrecha que tiene la vagina tu madre.

El masajista comienza a masajearla de nuevo de forma muy erótica , empezando por el cuello y los hombros de tu mamá, que ahora se encontraba boca arriba.

Poco a poco sigue bajando su mano hasta comenzar a sobar eróticamente las tetas de tu madre, notas que los pezones de tu madre están a punto de estallar y notas como con sus ojos cerrados emite pequeños gemidos y está exaltada.

A aquel joven masajista se le nota un enorme bulto en el pantalón, que obviamente debía ser su polla que cada vez crecía más y se ponía mas dura, como a cualquier hombre se le pondría si tuviera la oportunidad de tocar esas grandes, redondas y firmes tetas que tiene tu madre.

  Oye espera un poco, es que siento que en vez de estarme relajando, me estas poniendo cachonda con este masaje, jajajaja - le dice de pronto tu madre al joven masajista.

El masajista deja de inmediato de masajear las tetas de tu madre.

- Lo siento mucho si así lo siente señora, el masaje es completamente profesional, si usted gusta que me detenga, me detengo - le responde cínicamente el masajista a tu madre.

- No, continua, lo siento - responde tu madre

Al joven masajista se le dibuja una enorme sonrisa cínica en el rostro, y de inmediato se dirige a una pequeña mesa que estaba en la esquina del cuarto, y toma un aceite de masajes, luego se regresa a la tabla de masajes en la cual se encontraba tu madre recostada boca arriba con las tetas al aire.

Y fue allí cuando aquel masajista hace algo que nunca se te va a olvidar, algo que desencadeno una situación que jamás creíste que podría pasar, algo que jamás creíste que tu madre podría hacer.

El masajista, abrió el recipiente y descaradamente volteó boca abajo el recipiente sobre las tetas de tu madre y vació una gran cantidad del líquido sobre sus tetas.

Tu madre miró sorprendida sus tetas y emitió un pequeño gemido.

- ¡hay! está un poco frío el aceite - exclamó tu madre mirando sus tetas.

- no se preocupe señora, ahorita entramos en calor - le respondió sin pudor alguno el muy cabrón.

Y dicho esto comenzó a sobar las tetas de tu madre , que se encontraban llenas de aceite, con ambas manos de un modo tan sexual, que tu madre de inmediato comenzó a gemir un poco más fuerte, mientras se mordía el labio inferior.

 Aquel joven masajista manoseaba con descaro las tetas de tu madre sin parar, tu madre cada vez gemía más y más fuerte y su respiración se notaba cada vez más exaltada.

- ¿que estas haciendo? ...... ¡aaaayyy! por favor no pares, se siente muy rico - exclamó tu cachonda madre con la voz entrecortada, definitivamente dándole permiso a aquel joven masajista para que continuara manoseándola.

El masajista después de escuchar lo que tu madre le dijo, y confirmando que había logrado ponerla cachonda, se inclina hacia tu madre y comienza a chuparle las tetas, besando las tetas de tu madre con lujuria, acariciándolas.

Te encuentras paralizado observando aquella situación desde la ventana, no puedes moverte, no puedes gritar, solo éstas allí, inmóvil viendo como aquel masajista, le come las tetas a tu madre, mientras ella gime de placer.

Para tu desgracia eso pronto es poco para el masajista, va bajando poco a poco, tu madre esta completamente entregada, el masajista se agacha y su cara queda a escasos centímetros del coño de tu madre que continúa con los ojos cerrados y cada vez mas cachonda.

 El masajista abrió las piernas de tu madre con facilidad pues tu madre no puso ningún reparo así que el masajista comenzó a comerle el coño pasando su lengua por los rincones mas profundos de tu madre la cual cada vez tenia mas dificultades para ahogar sus gemidos.

Podías ver al masajista con la boca pegada a las partes intimas de tu madre sin levantar la cabeza ni un momento mientras ella se agarraba como podía a la sabana que cubría la camilla mientras soportaba la comida de coño que aquel hijo de puta le estaba dando.

El masajista mantuvo la boca en el coño de tu madre durante varios minutos, parecía que tu madre estaba a punto de correrse pero aquel cabron la tenia donde quería, se levanto y comenzó a masturbarla muy despacio con sus dedos a la vez que con la otra mano se bajaba lo suficiente el pantalón y los calzoncillos para sacarse la polla.

Fue dando la vuelta a la camilla sin sacar los dedos de tu madre, ella estaba girada en la camilla con la cabeza prácticamente fuera así que pronto el masajista puso su polla sobre la cara de tu madre, en aquel momento pensaste que en cuanto tu madre viera lo que estaba haciendo aquel hombre con su polla fuera del pantalón todo aquello terminaría pero estabas muy equivocado.

Tu madre abrió los ojos al sentir la polla del masajista sobre su mejilla y sin decir nada la agarro y comenzó a mamar.

Aquel tipo ya tenia lo que quería, tu madre le estaba comiendo la polla así que comenzó a mover sus dedos dentro de tu madre mas rápido, lo que hizo que tu madre comenzara a chupar su polla con mas ganas, tu madre estaba tan cachonda que pronto se corrió como una cerda, se saco la polla de la boca y escuchaste su orgasmo que pronto fue ahogado por el masajista que volvió a meter su polla dentro de la boca de tu madre mientras se limpiaba los dedos con los jugos vaginales de tu madre en la sabana de la camilla.

El masajista coloco a tu madre en la camilla en la posición inicial que había ocupado cuando el masaje había comenzado pero dejando que su cabeza colgara por el borde de la camilla, tu madre dijo.

"Nose que me ha pasado pero creo que es mejor que egtooggg"

Tu madre no pudo terminar la frase porque el masajista le metió la polla en la boca y comenzó a literalmente follarse la boca de tu madre, en esa postura tu madre no podía hacer nada mas que agarrar con sus manos las muñecas del masajista para tratar de que no la ahogara con su polla y así poder controlar un poco mejor la profundidad a la que aquel hijo puta le metía la polla hasta la garganta.

 El masajista volvió a agarrar las tetas de tu madre y la pellizcaba sus pezones que volvían a estar duros como piedras mientras el seguía follandole la boca.

El masajista se alejo un momento de tu madre lo que ella aprovecho para incorporarse en la camilla y girarse.

"En esa postura me estaba empezando a doler el cuello"

Eso fue lo único que dijo porque agarro la polla del masajista acercándole hacia ella y metiéndose nuevamente su polla en la boca.

"Supongo que querrás el masaje completo ¿no?" le dijo el masajista a tu madre en un tono jocoso

"¿Tu que crees?" respondió tu madre

En cuanto tu madre dijo eso el masajista se la saco de la boca, giro a tu madre y dirigió su polla hasta rozar su clítoris, tu madre se limito a mirar la polla del masajista que estaba a punto de entrar dentro de ella.

El masajista no terminaba de penetrar a tu madre y tu seguías inmóvil observándolo todo, el masajista rozaba con su polla el clirotis de tu madre sin llegar a penetrarla y finalmente ella dijo

"Métemela joder"

El chico comenzó a meter su glande muy despacio, permitiendo que las paredes vaginales de tu madre se adaptaran adecuadamente a la herramienta que iba a recibir.

El masajista fue entrando en tu madre cuidadosamente, lento pero seguro, poco a poco aquel muchacho iba metiendo su polla centímetro a centímetro dentro de tu madre.

El masajista fue adelantando sus caderas hasta terminar de rellenar a tu madre, por lo poco que veías por el ángulo en que estabas ubicado, te diste cuenta que definitivamente el acoplé era total, el coño de tu madre albergaba en su interior la polla del masajista, lo había echo, se la estaba follando.

El masajista se inclino buscando la boca de tu madre a lo que ella respondió levantando su cabeza y enroscando su lengua con la de aquel joven que hasta hacia unos minutos solo se iba a encargar de darle un masaje relajante.

Despacio el muchacho fue desenfundando su polla del interior de tu madre hasta sacársela por completo para al instante volvérsela a meter entera de una sola estocada, el masajista fue moviendo sus caderas de atrás hacia adelante, una y otra vez aumentando la velocidad y la fuerza.

Con su mano giro la pierna de tu madre y de ese modo el masajista se metió entre las piernas de tu madre y la agarro de las caderas para embestir con las fuerza, de ese modo las embestidas eran mas violentas y profundas y tu madre ya no solo jadeaba sino que gritaba con fuerza.

 Los golpes de su embestida al chocar su pubis contra el de tu madre retumbaban contra las paredes del salón de masajes, sus embestidas eran cada vez mas rápidas y profundas.

"Como follas cabron" decía tu madre

"Pongase a cuatro patas" le dijo el masajista a tu madre

Tu madre obedeció como una perra sumisa sin objetar nada, se levanto del suelo, se dio la vuelta dándole la espalda al masajista y espero a cuatro patas sobre la camilla mientras el masajista se subió también en la camilla que debía ser bastante resistente para aguantar el peso de los dos y agarrando la punta de su miembro la oriento hacia el coñito de tu madre, primero lo paso de arriba abajo por sus labios vaginales y viste que el cuerpo de tu madre se estremecía, de un golpe le metió su polla a tu madre hasta las entrañas.

"Ahhhhh" gimió tu madre al sentir como aquel mástil había desaparecido por completo dentro de ella, el masajista agarro las nalgas de tu madre y comenzó a follarse nuevamente a tu madre, tu podías ver como su polla desaparecía nuevamente dentro del chochito de tu mama.

La fuerza de la follada era tal que tu madre no pudo mantenerse en esa postura y callo sobre la camilla quedando completamente tumbada sobre ella, aquello no impidió que el masajista siguiera dándole un buen repaso a tu madre que estaba recibiendo la follada de su vida.

El masajista mira el reloj de la sala y comienza a follar a tu madre a toda velocidad, ella solo alcanza a decir

"Joder, joder, no pares"

"El tiempo se esta terminando señora, pero no se preocupe que voy a hacer que se quede relajada"

El físico portentoso del masajista le ayuda a imprimir a la follada un ritmo impresionante, puedes escuchar como ese joven embiste con fuerza desmedida sobre tu madre, un par de minutos después ella grita como loca signo inequívoco de que se esta corriendo y cae derrumbada sobre la camilla.

El masajista deja de follarla y vuelve a bajar al suelo, al verlo tu madre le dice

"Tu no te has corrido"

"La clienta es usted señora, yo no tengo porque correrme sino lograr que lo haga usted"

Aquellas palabras hacen que tanto tu como tu madre os deis cuenta de que ese sitio de masajes no era un sitio de masajes normal y que el masajista no se había propasado con tu madre sino que le pagaban precisamente por eso, por follar.

Tu madre aun estaba tan cachonda que bajo de la camilla y agarradose al borde movió su culo hacia atrás haciendo que la polla aun erecta del masajista entrara nuevamente en ella.

"No es necesario señora usted..."

Tu madre no le dejo terminar la frase

"Tu lo has dicho, yo pago así que quiero que te corras en mi cara"

Tu madre sigue moviendo su culo hacia atrás, ahora es ella quien se folla al masajista que animado por tu madre le mete el dedo en la boca, ella lo lame como una cerda, jamás hubieras imaginado ver a tu madre en una situación así, parece una puta ramera.

"Estoy a punto señora"

Tu madre vuelve a tumbarse en la camilla y dice

"Adelante"

El masajista se sacude la polla a escasos centímetros de la cara de tu madre y en pocos segundos acaba por estallar frente al rostro de tu madre cubriéndolo de lefa caliente y espesa.

El masajista comienza a vestirse mientras tu madre sigue relamiéndose el semen de la cara, tu te mueves rápidamente, abandonas tu posición en la ventana y regresas a la sala de espera del salón de masajes, te sientas y a los pocos segundos sale la recepcionista y vuelve a saludarte con una sonrisa en la cara, pocos minutos después sale tu madre, tu no puedes dejar de pensar que hace 5 minutos la has visto con la cara llena de semen.

"¿Todo bien señora?" pregunta la recepcionista

"Estupendamente"

"Espero que haya salido relajada"

"Muy relajada, solo que no sabia que dierais unos masajes tan..."

"Si, cuando la vi entrar imagine que no sabia que hacíamos unos masajes tan especiales", esto lo dijo mirándote ya que claramente a la recepcionista le había parecido raro que una mujer viniera a recibir una follada acompañada por su hijo.

"Pues he de decirle que me ha encantado, a partir de ahora vendré por este salón muy a menudo"

"Me alegra escucharlo señora, tenemos un gran numero de profesionales especializados en distintos tipos de masajes"

"Pues pienso probarlos todos" dijo la cerda de tu madre sin saber que tu entendías perfectamente lo que había pasado y que lo que la muy puta estaba diciendo era que pensaba ir allí a menudo a follarse a todos los masajistas.

Después salisteis del salón de masaje y fuisteis a casa donde tu padre y tu hermano os esperaban, jamás has vuelto a mirar a tu madre como antes de aquel día y se te llevan los demonios cada vez que dice que

"Se va a dar un buen masaje"