Esta historia sucedió una noche de verano.

Casi todas las noches de verano mi grupo de amigos nos reuniamos para hacer algo especial o simplemente pasar un rato juntos. Somos un grupo amplío, unos quince tios que con las parejas quizá de para 25. Nos los pasamos en grande, nos encanta hacer fiestas en las que reir y beber son los protagonistas.

Un viernes en vez de reurnirnos todo el grupo decidimos quedar tres parejas para cenar y posteriormente, jugar algún juego de mesa mientras nos tomamos alguna copa.

Mi nombre es Alex tengo 27 años me dedico al mundo de la educación y el deporte, en concreto soy preparador físico de un equipo de fútbol. Soy delgado aunque fibroso, castaño con ojos negros y me gusta vestir con elegancia. Mi novia se llama Alba, tiene 24 años es enfermera, es delgadita pero con un cuerpo bien formado del gimansio, piernas musculosas, culo respingón, unas tetas naturales pequeñas pero al mismo tiempo muy bonitas y bien colocadas y con una carita angelical.

Por otro lado, estaba Quique y Raquel. Quique, 27 años. trabaja en Madrid en una empresa arreglando aparatos tecnológicos, el tío es muy guapo, cuando estabamos solteros se llevaba a todas las tías, buen cuerpo y viste muy moderno. Su novia Raquel tiene 22 años y está en la Universidad, es alta con unas piernas largas con dos tetas naturales pero muy grandes y redondas muy guapa con ojos verdes, sonrisa perfecta y vestía siempre con vestidos, pantalones ajustados y tacones.

Por útlimo, la otra pareja era Carlos y Marta. Él, 27 años, era monitor de gimnasio, con un cuerpo muy bien trabajado y guapete y Marta es mulata aunque nació en España, es preciosa una casa increible con una sonrisa perfecta que resaltaba en esa piel tan morena, Iba al mismo gimnasio que Carlos y tenía también gran cuerpo y también esta en la universidad con 22 añitos.

Nuestra confianza era absoluta y eramos amigos desde hace mucho tiempo. Siempre había buen rollo, mucha complicidad y hablábamos de todo tipo de temas. 

Pues bien, Quique y Raquel nos invitaron a los parejas a pasar la noche en la casa de sus padres cerquita de la costa ya que sus padres estaban en el extranjero. Aceptamos todos y allí nos presentaríamos. Los primeros en llegar fuimos mi novia y yo, que por cierto iba espectacular. Llevaba un vestidito corto rojo con escote y unos tacones rojos de aguja y encima tan morena y con esa carita era irresistible ( en verdad todos estabamos morenos de la playa). Yo iba con camisa larga remangada unos pantalones vaquero ceñidos remangados y unas zapatillas de lona. LLamamos al timbre y nos recibió Quique el cual iba vestido practicamente al mismo estilo que yo. Nos saludamos y pasamos a ver la casa que era enorme y con todo tipo de detalles. Le entregamos un dulce que había hecho Alba como postre y yo llevé una botella de tequila, ya que eramos muy partidarios de los chupitos de tequila. Yo me aficioné en México y luego mis amigos le fueron cogiendo el gusto. En esto que salió Raquel que había terminado de arreglarse, yo me quedé embobado, hay que decir que Raquel siempre me gustó mucho, de hecho hablabamos con cierta freciencia por Whatsup y en alguna ocasión me había pillado mirándole las tetas. Iba vestida con un vestido parecido al de mi novia pero blanco con un gran escote que le hacía ver esas tetas maravillosas que tenía y unos gran tacones negros. Raquel y Alba se saludaron con gran entusiamos ya que son muy amigas.

A los 10 minutos, cuando estábamos en el salón tomando unas cervezas y conversando se presentaron Carlos y Marta los cuales habían traido algunos aperitivos caseros relizados por Marta que le encanta cocinar. Carlos iba con unos vaqueros cortos y una camiseta de manga corta ajustada mientras Marta llevaba una blusa blanca con más de uno y dos botones desabrochados en la que se transparentaba su sujetador negro y unos pantalones vaqueros muy cortos que se le veía un poco de cachete y unos taconazos. Estaba espectacular también. ¡Vaya tres diosas había reunidas en ese salón!.

La cena estuvo de escándalo, entre los aperitivos mágicos de Marta, el guisado que había hecho Quique ( su padre es cocinero y se sabe recetas muy ricas) y el postre de Alba no se podía reir más. Comiamos pero más bebíamos, no se cuantos tercios podíamos llevar más pero la verdad que ya estábamos un poco colorados. Reíamos sin parar, yo soy un tío bastante gracioso que utilizo muy bien la ironía y el sarcasmo y cuanto más bebo más cosas mágicas se me ocurren, mientras que Carlos y Quique son más de decir tonterías con las que te partes de risa. Las niñas estaban encantadas, reían con nosotros, hablaban entre ellas...ya casi al final de la cena Raquel me pilló mirándole las tetas, le miré a los ojos y un poco avergonzado intente quitar la mirada aunque ella sonreía. Vi que se levantó para ir a la cocina y le miré el culo y vi como llevaba un tangazo negro debajo del vestido blanco, por otro lado mi novia siempre muy elegante parecía intacta pero yo la veía bebida y Marta parecía que se le iba a salir una teta cada vez la blusa más abierta.

Terminamos la cena, recogimos y pasamos a las copas. Nosotros eramos más de whisky y ellas de Ginebra, Marta al sentarse en el sofá abrió un poco las piernas y se le marcaba todo el coño de manera asombrosa en esos pantalones tan cortos y ajustados. Cada uno se sentó cerca de su pareja y emepezaron las caricias y demás entre parejas, Mi novia me dio un beso con esos labios carnosos y un poquito de lengua que me empezó a poner cachondo. 

Ya en la tercera copa nuestra y en la segunda de ellas y tras haber tomado unos chupitos estábamos borrachos y calientes y decidimos jugar a la "botella". Aparatmos la mesa y nos sentamos en corro. La idea del principio era darnos akgunos piquitos entre unos y otros para reirnos y como fruto de la borrachera, a todos nos pareció bien.

Empezó girando la botella Marta que le tocó Quique y le dio un beso sin lengua pero quizá demasiado prolongado. A continuación fue Raquel y la botella indicó hacia mi, fue gateando hacia mi y me cogió de la nuca y me dio un morreo en toda regla podía ver lo caliente que estaba en el juego de su lengua con la mia. Carlos y Marta aplaudieron y caldearon el ambiente mientras que Alba y Quique reían forzadamente. Tiró Alba y le tocó Marta y ahí fue cuando a los tres tíos se nos formó un pollón, empezaron a jugar con sus lenguas entre ambas fuera de la boca, me encantó ver aquello entre ellas y ver lo borracha que iba mi novia. En una segunda ronda mi novia y Quique se vengarían de Raquel y de mi. A él le toco ella y ella fue hacia él colocandose en lo alto besandolo con cierta lujuria mientras él le apretaba el culo, a mi me molestó y me encantó. Yo con Marta a la cual le puse la mano en el coño por fuera del pantalón, vi que todos iban a saco y yo no iba a ser menos y Carlos y Raquel donde él le apretujó las tetas.

Estábamos todos muy calientes, molestos, encantados, pero sobre todo cachondos cuando Raquel propuso de en la próxima ronda meternos cinco minutos en un cuartillo pequelo que había al lado del salón con la persona que te tocase al girar la botella, Todos aceptamos, sabiamos que eso podría ser la ostia. Dijo que ella sería la primera en tirar, se veía con ganas de entrar al cuarto. Para mi suerte volvió a mirar hacia mi la botella, me miró, se rio y me cogió y mientras me llevaba al cuarto dijo: - Calcular cinco minutos mientras reía. Los demás sonreían,

Entramos al cuarto y empezamos a liarnos como si no hubiese mañana, yo meto mi cabeza entre sus tetas mientras ella dice: - ya tenías ganas eh. Empiezo a comerle las tetas que se las saco del vestido, a meter toda mi cara entre las dos y a chuparle los pezones, había que tener un croquis, en esas tetas te perdías. Le dí la vuelta bruscamente la puse contra la pared, le subí el vestido, le bajé el tanga y le comí el culo con mi lengua mientras ella con su mano izquierda metía mi cara entre su culo y apretaba. De pronto dice: - se va a cumplir los cinco minutos y no me va a dar tiempo de comerte la polla con las ganas que tengo. Así que comenzó a chuparmela y ¡cómo la chupaba!, increible, se la tragaba entera. Yo estaba muy caliente y con el ciego me corrí pronto y sin avisar, dentro de su boca. Ella se sorprendió, pero sacó su lengua llena de semen, se la metió, la volvió a sacar y ya no tenía nada, se lo había tragado. Que pedazo de puta y que cabrón mi colega Quique como estaría disfrutando. Cuando nos avisaron de los cinco minutos ya estabamos casi vestidos bien de nuevo y nos retocamos y salimos como si nada hubiese pasado. Nos sentamos en el corro y no dijimos nada. Mi novia más que enfadada estaba deseando de entrar.

Ahora entraron Quique y Marta, no estuve dentro pasa saber que ocurrió pero todos reimos cuando contra la puerta se oía golpes y cada vez más rapidos, se la estaría follando contra la puerta. Miré a Raquel y lejos de cabrearse se relamía mientras mi novia y Carlos se miraban. Salieron Quique y Marta, él subiendose la bragueta y ella con el botón del pantalón desabrochado y haciéndose una coleta cuando antes llevaba el pelo suelto.

Entró Alba y Carlos y yo la verdad que ahí me preocupé. Pasaron los cinco minutos y no oímos nada. Ella salió bajándose el vestido y él normal. Luego me enteraría de que Carlos le comió el coño y le metió los dedos e hizo con él lo que quiso.

Al igual que con los chupitos hariamos una segunda ronda, Carlos que no descargó en la primera ronda entró con Raquel y cómo se la follaría que se oían los gemidos en toda la casa. Salió Raquel sonrojada y Carlos riendo a Carcajadas. 

Entro Alba y Quique e igual que antes no oimos nada solo un fuerte golpe en la puerta. Luego me diría que empujó a Quique contra la puerta para comerle la polla y que hicieron el 69. Ella salió con el pintalabios practicamente corrido y nunca mejor dicho y caminando con los taconazos enseñando el tanga y como se marcaba su coño mojado en él. Estaba claro que esto iba en aumento a ver quien daba más, parecía una competición. Quique salió normal se sentó y le guiñó un ojo a Raquel.

Por  último Marta y yo, a la cual agarré del culo mientras me la llevaba para el cuarto. Una vez dentro le dije; - me llevas poniendo cerdo toda la noche, ella contestó: - a mi me llevas poniendo cerda desde que te conocí. Cogí con fuerza le quité los pantalones y el tanga, se lo metí en la boca la puse a cuatro patas y me la follé. Qué buena estaba la perra esa, se quitó el tanga y reía mientras me la follaba. Nos avisaron y le dije: -si lo de hoy acaba aquí quiero repetir, ella contestó: cuando quieras. Salimos ella desnuda de la cintura para abajo con la blusa abierta y yo vestido totalmente con la polla fuera de la bragueta, caminamos hacia el salón agarrados de la cintura mientras ella me pajeaba.

Ví como Carlos y Alba se salieron del juego y empezaron a hacer el suyo propio. Él estaba en el sofá con ella encima de una de sus piernas de medio lado y la mano de él dentro de su tanga jugando con su coño. Alba nos miró y preguntó: -¿como lo habeís pasado? yo asombrado de aquella situación dije: -no veas Carlos, vaya tía tienes mientras le daba un azote a Marta. Él dijo: lo mismo digo. Quique se levantó y me hizo un gesto con la cabeza como que me fuera con Raquel y él se quedaba con Marta. Ahí empezó la locura. Raquel se abrió completamente de piernas en un sillón se desplazó el tanga y me hizo un gesto con un dedo como para que fuera a comérselo. Quique cogió de la coleta a Marta y la agachó para que comenzara a chuparsela. Carlos le quito el tanga a mi novia, lo lanzó sin mirar hacia el lado que estaba yo y me dio en la cara mientras le comía las deliciosas tetas a mi novia estando ella encima. Yo le estaba comiendo el coño a Raquel cuando esta me dijo: - graba la escena. Saqué el movil y lo coloqué en una esquina del salón donde se nos veía a las tres parejas sin que los demás se dieran cuenta.

Al poco rato vi como mi novia estaba completamente desnuda y cabalgaba de manera espectacular encima de Carlos. Hay que decir que tengo suerte de tenerla. Es una niña fabulosa y encima una máquina en la cama que ahora estaba comprobando Carlos. Marta y Quique estaban completamente desnudos y esta no se cansaba de tragarse la polla. Mientras yo puse a Raquel a 90º contra la pared y empecé a follarmela por el culo, no sabía si lo habia exmperimentado pero me daba que sí y tanto que sí. Mi polla entraba fabulosa y ella gozaba con gemidos increibles. De pronto aquello fue el éxtasis Carlos se follaba a mi novia como un poseso cogida en el aire, nunca había oido a mi novia gemir tanto. La mulata movía el culo encima de Quique que parecía que tenía un motor, ¡qué velocidad moviendo el culo!, y yo m efollaba a Raquel por el culo mientras le tocaba el coño y estaba empapada. Eso era un sueño.

La tiré contra el sofá donde estaba mi novia y Carlos y empezaron a chuparsela las dos a la vez a Carlos y besándose entre ellas. Yo me acerqué a Marta que se la estaba follando de medio lado Quique. Le dije_ - allí tienes a mi novia haz con ella lo que quieras. Cogió a mi novia la puso contra la ventana le abrio bien las piernas la cogió del pelo y se la follaba a cuatro patas dándole una caña impresionante azotándole, mi novia se corrió a chorros y él siguió.

Marta me follaba encima mía a una velocidad endiablada. No podía pensar que me estaba follando a esa tia que en las discotecas me ponía cachondo perdío con sus movimientos de culo, ahora esos movimientos los hacía con mi polla dentro. Me decía al oido: . quiero follarte todos los días.

Después de veinte minutos ví como Carlos se corría en las tetas de Raquel, al ver eso yo me corrí dentro de Marta que tomaba la píldora y Quique y Alba que habían desaparecido entraron al salón comentando este: - Raquel necesitamos un sommier nuevo. Mi novia se reía con cara de niña avergonzada.

Había tres duchas,cuando se fueron todos paras las duchas corté el video del movil, nos duchamos con nuestras parejas, nos vestimos, mi novia no encontraba el tanga y es que me lo había metido en el bolsillo de mi pantalón, y nos despedimos. Sin antes decir: -¿para cuando otra reunión?

Al mes, mi novia un fin de semana se fue a Valencia por trabajo, y Quique se quedó en Madrid. Raquel y yo quedamos para ver el video y mientras tanto que se saludasen mi polla y su culo.

Esto no ha influido para nada en nuestras relaciones personales aunque si es cierto que hay muchas miraditas. Creo que tenemos ganas de repetir.