Desde el primer día que llegue a la oficina quise causar una gran impresión, desde muy chica me desarrollé y siempre me ha gustado mostrarlo, escotes gigantes, las faldas mas cortas, etc, ese día llegue con un vestidito azul muy corto y con un gran escote, abajo solo mi tanga y unas zapatillas muy sexis, ¿por qué lo hice? No se, es la primera impresión que siempre quiero dar, que soy sexy.

Es una oficina en la que apoyo como secretaria a un jefe y 4 abogados, entré caminando lentamente y sonriéndoles, solo vi su cara de lujuria, desnudándome con la mirada, viéndome sin disimular las chichis o mi colita.

Poco a poco la relación se fue haciendo de mas confianza, sabia sus nombres, venían a coquetearme cada espacio libre.

Sabían que era mujer casada, y eso no detenía ni un segundo el perreo, era divertido.

Sentía su deseo por mi cada vez que me hablaban, me exitaba.

Me considero una mujer bella, femenina, con un gran cuerpo como se que les gusta a los hombres. De buena pierna, chichona y nalgona, y el sexo siempre ha causado en mi cierta adrenalina, los pequeños detalles lujuriosos que conducen al sexo me vuelven loca.

En la primera fiesta que se organizó en la oficina, mis compañeros llegaron de sorpresa con una botellas de vino a la oficina, era un viernes en que mi esposo tuvo que salir de viaje y mi hermana cuidaba a mi hija, así que no tenía prisa.

Ese día usé una minifalda de mezclilla y un top de tirantitos, para variar sin bra, la tela delgada asíí que se veía claramente cuando mi pezón estaba duro, que en realidad fue todo el tiempo. Solo veía a mis compañeros verme sin disimular.

Me sirvieron una copa y me contaron como habíamos obtenido una certificación importante, era de celebrar!

Me la tomé y me apresuraron otra.

Estuvimos platicando un rato y escuchando música. Era yo solita con 4 hombres queriéndome emborrachar y lujuriandome.

Mi jefe no estaba y había dado su autorización para usar la oficina, así que cerramos y seguimos la fiesta de manera privada.

Poco a poco la conversación se convirtió sobre mi, me decían que que bonita estaba, que bonito cuerpo y yo recibía los halagos de manera coqueta.

Me pidieron que por favor me parara, y empezaron con el clásico \"vuelta! Vuelta!\" Y los complací. Me empezaron a pedir que me parara con ciertas poses y lo hice también, era cachondo, empezaba a sentir el vino y me sentía muy bien.

Por fin uno de ellos se animó a decirme que si les bailaba tantito, me dio risa y fingí pena pero la realidad era que me exitaba la idea.

Me insistieron y finalmente accedí.

Me pusieron música reggaetonera y la bailé, me pidieron que me subiera a la mesa y no lo dudé.

Me subí y empezaron a gritarme, \"mucha ropa\", uno de ellos me jaló tantito la blusa y se rompieron los tirantitos lo que ocasionó que mis chichotas se salieran. Me las tapé con el brazo pero ellos jalaban mis manos, me dio risa y les dije \"ok, ok, yo lo hago sola\".

Me quité el resto de la blusa y quedé sin nada cubriendo mis tetas. Bailé. Me empecé a bajar la mini para quedar en tanga y tacones.

Y les dije, \"hasta ahí\". Me tapé avergonzada mis senos y me baje de la mesa. Ellos comprendieron que no iba a pasar mas, así que no insistieron.

Tuvieron la dicha de ver mi cuerpo casi desnudo, no está mal para mi primera fiesta con ellos pensé, mi idea era solo dejarlos picados.

Funcionó.

Tengo muchas mas historias en esta vida mía.

Les dejo besitos.