Una cita...

Aveces una mirada, el simple roce de los dedos, un gesto al comunicarnos... nos hace estremecer, todo nuestro cuerpo se pone en funcionamiento y se une a los pensamientos, a los sueños y la imaginación...

Así paso, así fue.

Conocí a un chico por una red social... nos caímos bien e intercambiamos frases, letras... en un principio fueron mensajes sencillos, pero poco a poco esos mensajes se convirtieron en complicidad, en un deseo de conocer a esa persona que me hacia temblar, el saborear cada beso que había leído y que lo había sentido como mio.

Pero ninguno se atrevía a dar ese paso de conocerse, de ir un poquito más allá, de compartir todas esas sensaciones y fue pasando el tiempo.

Sin embargo sus letras me excitaban y muchas veces mis muslos se apretaron entre si, hasta llegar a un estado de excitación extremo.

El no podría imaginar que yo me sintiera así, que lo deseara con solo leerlo, que mi imaginación nos llevara a estar abrazados y disfrutando el uno del otro.

Seguimos con esos mensajes aumentado el grado de complicidad... y dí un paso más describiendo como era mi ropa interior (por ejemplo) que mi pecho se endurecía y mis pezones estaban erectos, subiendo poco a poco esa complicidad.

El a su vez me hacia referencia a su pene, como estaba y lo que le gustaría hacer con el... donde llevarlo y de que manera.

Mis pensamientos eran tan explosivos como yo misma si lo tuviera delante... cerraba los ojos y sentía sus manos recorrer cada pliegue de mi piel, sentía su boca humedecida y caliente buscar mi nuca, ni espalda, mis hombros... lo sentía, lo sentía tanto que mis braguitas se humedecían y mi sexo necesitaban ser aliviado de alguna manera.

Así mientras yo leía como me explicaba su estado y sensaciones, mis dedos empezaron a entrar por mis braguitas, mientras me acariciaba los pechos (lolas), primero uno y después otro para así compartir el placer entre los dos... mis labios se sentían presionados por los dientes que apretaban cada vez más, pero yo sentía mucho más placer que dolor... seguí, seguí leyendo y seguí acariciándome mi cuerpo con más necesidad e intensidad...

Muchas veces mis muslos se humedecieron mientras esas letras caían una a una y me excitaban... pero solo eran letras.

Para mi ya no era suficientes solo leerlo... quería sentirlo más que el me sintiera a mi... que escuchara mis jadeos, mi voz mientras mi sexo llegaba al clímax, sentirme y desearme y dí otro paso...

Esta vez no serian letras... No.

Cuando más excitada estuviera todas mis sensaciones las gravaría en audio y se las enviaría... y así lo hice.

(Audio):

Hoy mi cuerpo y mente tiene ganas de ti... que tus manos recorran cada parte de mi, que tus labios presionen los míos mientras tu lengua se une a la miá en un largo y sabroso beso...

Pero tu no estas y serán mis manos las que me den placer... mientras en mi pensamiento solo estés tú.

Como siempre mi ropa interior sigue siendo exquisita... pero solo llevo las braguitas y un suave y corto camisón, mis manos han empezado bajando esos finos tirantes del camisón para seguir acariciando mis pechos tersos, duros, calientes, excitados... mis amadas “lolas” que es como yo suelo llamar a mis “tetas” , siento como mis muslos apretados entre si han subido de temperatura a unos niveles de escándalo capaces de quedar lo que se entremetiera entre esos muslos... a la vez los siento humedecidos, siento mi sexo palpitar, bombear, excitarse porque espera que mis dedos lo acaricien, le den el máximo de los placeres... y todo esto lo hago pensando en ti... solo en ti, cuando escuches este audio sabrás lo que me haces sentir, hasta donde llega mi deseo y locura... y quiero que lo vivas conmigo... cada roce, cada latido, cada gemido, quiero que entre en ti y se quede contigo.

Ya no siento que mis labios están siendo dormidos... siento mucho más placer, y ahora es mi lengua la que pasea entre las comisuras de mi boca para aliviarla un poco y seguir con el juego... se unen mis jadeos que determinan mi grado de excitación... vívelo conmigo !!!!

Recorro con mis manos empezando desde mis “lolas” bajando lentamente por mi cintura, mis caderas... entreteniéndose en el fino borde de mis braguitas...

Siento esa fragancia... como mis feromonas embadurnan cada poro de mi piel como si de un exquisito perfume se tratara... lo siento y me excita mucho más... toda la habitación se llena con esa fragancia que es miá... miá y tuya.

Mi cuerpo se estira y a la vez se encoje cuando mis dedos llegan a mi clítoris.. Voy recorriendo muy despacio mis labios vaginales en busca de todas las sensaciones... el placer, así mis dedos pueden entrar por mi vagina un dedo, otro dedo... entran y salen como si de tu pene “tu polla” se tratara, para mi esos dedos son tu polla erecta...

Mis muslos se aprietan entre si como sujetando fuertemente ese placer que me invade... se aprietan para impedir de los dedos abandonen mi vagina aunque se quemen por el calor.

Quisiera que pudieras mirarme, que pudieras disfrutar como yo de mi cuerpo... que pudieras disfrutar conmigo.

De nuevo mis manos desean acariciar mis “lolas” que están mucho mas endurecidas que al principio, aprieto mis pezones con dos de mis dedos lo cual me hace lanzar un pequeño grito de placer, mientras mis muslos siguen rozándose entre si hasta quedar mojados por el dulce manjar que produce mi coño cuando lo acaricio... mi mejor manjar tan deseado.

No quisiera que esto acabara nunca...

Es como un ritual que me hace doblemente feliz, pensar en ti e imaginar que eres tu quien acaricia mi cuerpo, pensar que solo unas letras me han hecho excitarme de tal manera que mis braguitas se humedecieron... llevarte conmigo a ese placer y compartirlo...

Vivir deseándote cada vez que tus letras lleguen a mi...

Toma tus manos... acaricia mis “lolas”.

Toma tus manos... siente el calor de mis muslos.

Entreabre tu boca... respira conmigo, siente mi aliento tibio y excitado.

Une tus labios a los míos... Besame !!!

Dama De La Noche