Somos Becka y Alice, dos amigas bisex, de 35 y 32 años, que amamos la diversión, ir de fiesta juntas y las situaciones excitantes y calientes.

En el sexo nos gusta casi todo, especialmente provocar, ser atrevidas y traviesas.

Yo soy de cuerpo más salvaje, pelo largo, piel tostada por el sol, con un bonito y sensual culo como lo más atractivo, y unas tetas normales pero traviesas.

Alice, es bastante delgada, de piel blanca y rubia, aparentando el cuerpo de una adolescente, pero atrevida y descarada, a pesar de su cara de niña buena y sus gafas.

Este verano lo hemos pasado en Ibiza, un destino que adoramos por su ambiente y una de las muchas noches que teníamos ganas de “fiesta” tras pasar el día en la playa nudista d’es Cavallet, nos duchamos, nos pusimos nuestra ropa más sexy y decidimos ir a la disco Es Paradis.

Yo elegí un mini vestido sin tirantes plateado muy ajustado, con aberturas laterales, que delataban con claridad que no llevaba ropa interior, ese conjunto y unas sandalias plateadas de tacón alto, ofrecían un aspecto juvenil y atrevido, muy sensual.

Alice se decidió por  un vestido más vaporoso, también mini, negro y bastante transparente, en el que se adivinaban con claridad sus jugosos pezones rosados y por detrás el sensual canal de su culo, adivinándose por delante, su sensual coñito según la postura que adoptaba.

Antes de salir nos admirarnos mutuamente lo sexys que estábamos, nos fundimos en un largo y caliente beso y cogimos el coche para ir a Sant Antoni, donde esta Es Paradis.

Aparcamos el coche y nos dirigimos directamente a la entrada de estilo entre Ibicenco y Griego.

Cogidas cariñosamente de la mano, empezamos a observar el animado y variopinto ambiente, habitual del local, al mismo tiempo que como algunas miradas se clavaban en nuestros sensuales cuerpos.

Tras tomarnos unas caipiriñas, nos dirigimos a la pista de baile para empezar a calentar músculos y a los/as que nos mirasen bailar a dúo.

Nos gusta bailar combinando el ritmo, con roces y gestos sensuales entre nosotras, acariciándonos y excitándonos la una a la otra con algún beso y chupando los dedos de la otra sin parar de movernos a ritmo de desenfreno.

Nos sentíamos fuertemente observadas y otros chicos y alguna chica, se pegaban cada vez más a nosotras, envueltas en el excitante y caliente ritmo.

Todavía nadie nos había entrado a saco, pero ambas empezamos a sentir los primeros roces de cuerpos y manos en nuestros cuerpos y culos, siguiendo nosotras a nuestro ritmo, como si no nos diéramos por aludidas.

Me puse a bailar de espaldas a Alice, y ella pego su cuerpo al mío, moviéndonos sensualmente al mismo ritmo, mientras me estaba empezando a sentir muy húmeda y caliente, con los achuchones de mi amiga.

Delante de mí, un atractivo chico buscaba mi mirada y entablar contacto, así que puse mis manos a ambos lados de su cintura y danzamos unos minutos así.

A mi izquierda, una sensual nórdica, me sonreía y se había unido a pequeño corro, así que soltando al chico, me situé delante de ella y cogiendo con ambas manos su cara, empecé a besarla con descaro, a lo que ella, respondió dándome también su lengua.

Alice a nuestro lado sonreía complacida del espectáculo, y al mismo tiempo, sentí las manos del chico en mi cintura, recorriendo mi cuerpo y mi culo, no tardando en sentir como su abultada polla, se apretaba contra mi culo.

Alice entró al quite y le ofreció su boca de deseo al chico, que inmediatamente, empezó a besarse con ella y sobar su cuerpo, mientras la nórdica y yo, bailábamos y nos besábamos repetidas veces.

En un instante, la nórdica que se llamaba Sonja y yo, teníamos a tres chicos rodeándonos y buscando su parte del pastel, mientras Alice, seguía dejándose hacer por el otro, a quien veía acariciar su culo bajo el vestido.

Pensé que era el momento de cortar la exhibición, pero para hacer algo más caliente todavía, así que le dije a Sonja y Alice, que nos subiéramos las tres solas, a bailar en la pasarela que cruza elevada sobre la pista de baile.

Aunque para nuestros boys, ver que nos marchábamos las tres, indicándoles que no nos siguiesen, debió ser una frustración, sin duda,  iban a gozar mucho cuando nos viesen arriba, bailando y provocando en la pasarela elevada, jaja.

Le contamos a Sonja, lo que íbamos a hacer y si quería unirse a nosotras a lo que  contesto que si encantada, aunque ella si llevaba tanga “oh yeah, it is exciting, but I do not take my thong”

Subimos por las escaleras que llevan a la pasarela y con Alice, convenimos bailar al mismo ritmo, como si de una actuación programada se tratase, y le dijimos a Sonja que siguiese nuestro ritmo y movimientos.

Iba a ser muy travieso y caliente, bailar para todos, las tres muy sensuales, mucho más teniendo en cuenta que tanto Alice como yo, si tanga como, íbamos a ofrecerles un caliente espectáculo de nuestro culo y coño moviéndose al ritmo de la música sensualmente.  Me encantaban este tipo de situaciones, igual que a Alice,  mi pareja.

Antes de salir a ofrecer nuestro show, nos tomamos un par de caipiriñas bien cargadas cada una, para salir bien animadas, y porque solo de pensarlo, nos entraba sed de algo bueno, jaja

Nos tomamos nuestras copas, esperando que nuestro amigo, desde la cabina, nos diese el tono de entrada al show, y le dijimos que íbamos a bailar un par de temas para el público, que el mismo elegiría.

Cuando la música cambio al tono de entrada y oímos como el anunciaba “To all of you, the acting of our show girls, Beckah! Alice and Sonja! Let's dance with them all, our three beauties!  --  Para todos vosotros, la actuación de nuestras show girls, Becka ! Alice y Sonja!  ¡A bailar todos con ellas, nuestras tres sensuales bellezas!

Una tras otra con Alice en cabeza, salimos a la pasarela, al ritmo de la primera de las canciones, que había elegido un par de temas de reggaetón, primero “noche de sexo” de Wisin y Yandel, seguida de la provocativa “Gata fiera - Trebol Clan ft. Hector el Father “

Dos temas muy calientes de reggaetón, y con rápidos y sensuales movimientos, salimos una tras otra a la pasarela para ofrecerles un show muy caliente bailando con nuestros cuerpos y culos sin bragas.

Nos situamos bastante juntas, moviéndonos como zorras e intercambiando caricias y gestos de deseo entre nosotras tres, mientras abajo, todo nos miraban divertidos y con deseo de unirse a nuestro sexual forma de bailar.

Cuanto más avanzaba la música, más excitadas y alocadas bailábamos, mostrado en nuestros movimientos, toda la sensualidad de nuestros coños, asomando por detrás entre nuestras nalgas, o en otros movimientos, al abrir las piernas, mostrándolos ofrecidos y húmedos a todos los que nos miraban, mientras las letras de las canciones y el ritmo del reggaetón, aún calentaba más el ambiente.

Bailábamos con Alice, ondulando nuestros cuerpos y bocas pegadas las dos, y levantando nuestro culito para provocar al máximo, e intercambiando besos de deseo, cambiando con frecuencia de pareja, con Sonja, que se dejaba llevar, las dos le enseñábamos los movimientos, mientras las letras de las canciones,  marcaban todavía más, el contenido de nuestro show “

“(A que te aruo, mami!)

(A que te aruo!)

A mi no me vas a aruar...

Oye, tu, gata fiera

Que es lo que te crees

Que estas bregando con cualquiera

'tas equivoca, conmigo vas a sacar candela

Vamonos hasta abajo, pa' que pruebes de mi mela

Gata traicionera, va a ser mi prisionera

Vela que te pillo donde quiera, y como quiera”

Le gusta que Wisin la jale por el pelo 

Gritalo... (Papi, dame lo que quiero!) 

Siente la presión del callejero 

Gritalo... (Papi, dame lo que quiero!)

Hacia el final de la segunda canción, nos sorprendió la espontaneidad de Sonja, que bajándose el tanga mientras ondulaba sus piernas, se lo quitó, y lo lanzó a la pista de abajo, donde éramos el centro de atención, el cual se disputaron entre gritos, unos cuantos chicos.

Le hice una señal de aprobación a nuestra amiga, sin dejar de bailar y me  acerque a ella para acariciar su  culo y coño desnudo, con movimientos simulando follar juntas, lo que embraveció al público, porque nos estaba saliendo un show muy caliente e improvisado, que gustaba a todos y a nosotras nos excitaba como perras en celo.

Alice se pegó a mi culo y las tres iniciamos el simulado movimiento de estar follando durante unos momentos.

Nos volvimos a separar y entonces hice ademán de quitarme el vestido subiéndomelo hasta la cintura y diciéndoles con signos si lo querían.   La respuesta os la podéis imaginar, totalmente unánime, pero no podía hacer eso, porque no llevaba nada debajo de mini vestido, así que tras mostrar mi coñito desnudo, volví a bajar mi falda que no llegada a cubrirlo visto desde abajo, y me bajé la parte superior hasta la cintura, para que viesen que no llevaba nada debajo y poniéndome frente a Sonja, que también se había sacado sus hermosas tetas fuera, bailamos cara a cara, haciéndolas bambolear y rozarse entre si, mientras Alice, nos las acariciaba.

Fuimos acelerando el ritmo y el desenfreno, como si estuviésemos poseídas de verdad, hasta que tras más de siete minutos, la música termino y cambió de estilo, pero no como habíamos previsto, pues Ricky desde control y tras engarzar la conocida balada de Joe Cocker “ YOU CAN LEAVE YOUR HAT ON ”  nos invitaba a despedirnos, con un striptease integral.

Nos quedamos sorprendidas, cruzamos nuestras miradas y finalmente una al lado de la otra, empezamos a subir y bajar, nuestros vestidos, tapando y destapando, para alargar el show los cuatro minutos que duraba el tema, mientras nos movíamos sensualmente, poniendo cara de falsa vergüenza.

A mitad de la canción nuestros vestidos al mismo tiempo, habían descendido hasta nuestra cintura, moviéndonos las tres, entrelazando nuestros brazos y tocándonos mientras ofrecíamos nuestras tetas y espalda desnuda a todos los que ya estaban aplaudiendo, unas tetas que Sonja tenía grandes y deliciosas, siendo las más pequeñas pero de rosados y duros pezones, las de Alice.

En la segunda mitad de la canción, dejamos deslizar nuestros vestidos hasta nuestros tobillos y con cuidado de que al sacar nuestros pies, no cayesen abajo, pues si alguno se caía, podíamos darlo por perdido, …… terminamos el último minuto haciendo el show y bailando entre nosotras con sensualidad, solo sobre nuestros zapatos de tacón …  wow!  Había sido muy excitante y ninguna de las tres,  teníamos pensado hacer un integral, en el momento de subir a la pasarela.

Tras terminar el “You can Leave your hat on” de Cocker, entre una multitud de gritos, silbidos y aplausos, recogimos nuestros vestidos, y tras hacer una última reverencia, donde pudieron gozar de la visión de nuestros labios vaginales, asomando entre nuestras nalgas y nuestras tetas balanceándose, recorrimos de nuevo la pasarela, diciendo adiós con la mano libre y entre besos una a la otra.

Al final de la pasarela, estaba la cabina de control, con Rick el guapo mulato que solía ser el disc-jockey habitual, también estaba Erika, una de las relaciones públicas de la disco.

Nos recibieron con un aplauso de aprobación, además, ya nos conocían de otras ocasiones, pero nunca nos habían visto tan lanzadas y haciendo un show.

Llegamos acaloradas y sedientas, todavía con el vestido en la mano, desnudas y solo con los zapatos de tacón.

Un show así la verdad es que es agotador por lo trepidante y la emoción y el morbo de esos minutos, así que cuando llegamos junto a ellos, solo me salió decir gracias y buffff, que calor ¡

Erika al instante nos dijo, “os felicito, habéis estado realmente seductoras y sexys, y la improvisación que le he pedido que introdujese Rick para ver si erais capaces de hacernos un striptease integral,  ha quedado genial y ha tenido mucho éxito, por la cara de la gente que os miraba.”

“Os he visto, muyyy puestas, en vuestro papel y estaba casi segura de que ibais a seguir con el  show que deseábamos todos ver”

“Así que ha sido idea tuya – le dije a Erika – abrazándome a su cuello y dándole dos azotes en el culo”

Ahora nos vestiremos y bajaremos a beber algo, yo estoy muerta de sed. A lo que Erika me dijo, pasad dentro y poneos guapas de nuevo con tranquilidad, ahora llamo a un camarero que os suba lo que deseéis tomar.

Con sorna, Rick añadió “Yo os veo super guapas y sexys como estáis ahora, lástima que tenga las manos ocupadas, no hace falta que os pongáis nada más, por mi!  Y yo le respondí con un codazo, jaja.

Que queréis que os pida para beber chicas, dijo Erika, “una Jagermeister  muy fría” pidió Sonja, para mi, dijo Alice “Un vodka con redbull” para mi, dije yo “un Whisky con cola”

Ahora llamo y os hago traer todo, respondió Erika.  “necesitáis algo más”? creemos que no, en nuestros bolsos llevamos nuestras cositas para oler bien y ponernos de nuevo perfectas Erika.

“ Los habéis dejado donde siempre?  “Diré a una de las camareras que os lo suba para que os arregléis tranquilas aquí” – añadiendo-  “y tu Sonja, donde lo tienes?” en el guardarropía, respondió ella. “Pues dame el resguardo, y hago que te lo traigan también, guapa”

La amable Erika, hizo las llamadas y nosotras, sentamos nuestros culos en los sillones que había en el interior, mientras comentábamos entre risas, lo emocionante que había sido.

“Has venido sola Sonja” –le pregunté yo-  a lo que me dijo “No he venido con unas amigas, pero son menos lanzadas que yo” “en cuanto beba algo y  me vista, regresaré con ellas” añadió.

“No prefieres quedarte con nosotras? La noche solo acaba de empezar, ahora que ya tenemos confianza y nos conocemos” – le dije yo.  A lo que ella respondió “si me gustaría, si vosotras lo deseáis, no quiero molestar”

“Para nada” –le aseguré yo- “después vamos y les decimos que nosotras te cuidaremos el resto de la noche, ok”  … “si me gustaría, a sido muy divertido, hacer travesuras juntas”

Mientras recordábamos los excitante de ese inicio de fiesta, esperamos  que nos trajeran lo que habíamos pedido y con deseos de seguir aprovechando la noche y el calentón que ya llevábamos en el cuerpo y que alguien se tendría que encargar de satisfacer más pronto que tarde, tras la exhibición de striptease que nos había puesto cachondas como perras en celo.

Os lo contamos en la segunda parte …… muy pronto.  Becka y Alice