YURENA – 10

Desde mi primera salida como Yurena para estar con aquellos dos señores que me indico Maurice, habían transcurrido 5 meses, durante los cuales, me había reunido en varias ocasiones con Erika y las demás chicas, nos contábamos nuestras experiencias, por las noches me descargaba con el masturbados de culo y otros días con el de vagina, no podía olvidar aquel primer polvo con una mujer.

Un día recibí un aviso de la clínica, recordándome que tenía que pasar para hacerme la correspondiente revisión, me persone el día señalado el Dr. me oculto y tras tomarme las medidas me dijo.

-          Estas preparada para el implante, podemos operarte el viernes por la tarde, vamos hacerte una liposucción, en vientre y cintura, esa grasa te la implantaremos en glúteos, de esa forma tu trasero será más redondo, tu cintura más estrecha, en lo que respecta al tamaño de los pechos se ha decidido que por tu constitución se pondrán unas de 500cc con ese tamaño y el trasero redondo que te quedara tendrás unas medidas muy especiales, además aprovecharemos, para modificarte la nariz, el mentón y un poco la nuez, nadie sabrá sin verte completamente desnuda que eres en realidad.

Aprovechando  unos días de fiesta, le dije a la portera, que iría a ver a mi padre y que estaría ausente entre 10 y 12 días.

El día señalado me presente en la clínica por la mañana, me hicieron las pruebas oportunas antes de la operación y a las 9 PM entre en el quirófano. Cuando me desperté, eran las 13 horas del día siguiente, el Dr. me visito y me dijo.

-          Todo ha salido muy bien, sentirás las molestias consabidas tras cualquier intervención, no hagas esfuerzos ni levantes pesos, se te ha puesto un sujetador especial, que deberás llevar durante dos meses, con respecto a la medicación que estabas tomando la suprimes y la sustituyes por esta, la cual seguirás tomando indefinidamente, es un complejo vitamínico y hormonas feminizantes, tu cuerpo no produce hormonas femeninas por eso tienes que tomarlas siempre. Puedes estar en la clínica durante 8 días las primeras curas te las haremos aquí y después de darte el alta únicamente tienes que venir una vez cada seis meses para revisión. Procura que durante un tiempo que no jueguen con tus pechos, tú puedes manosearlos, para acomodarlos a tu cuerpo, pero suavemente, por desgracia existe muchos bestias que al ver el tamaño de las tuyas se creen que son las ubres de una baca y estropean todo nuestro trabajo. Las tetas se tienen que acariciar, no manosear a lo bruto.

Cuando me pude levantar de la cama, quise ponerme delante de un espejo, pero no había ninguno, además como tenía el sujetador especial, no podía verlas, mi cara también estaba media escondida por la rinoplastia que me había hecho además de los arreglos del mentón y la nuez.

En una de las visitas de la enfermera para hacerme las curas, le pregunte como las veía y me dijo.

-          El Dr. te ha dejado unas tetas muy bonitas, grandes, con unos pezones hermosos una aureola no muy grande, al principio notaras que te pesan, pero te acostumbraras pronto, lo que si es que deberás cambiar el tamaño de los sujetadores, el que trajiste no te servirá, cuando te quites este, vete a comprar nuevos, por lo menos 2 tallas mas, bueno eso ya lo probaras en la tienda, y lo mismo con las bragas, ahora tienes un culito mas redondo, y tienes que ponerte la ropa que se adapte a tu figura, en fin que tendrás que renovar parte del vestuario.

Cuando me dieron el alta hospitalaria me dirigí a mi casa, en mi cara ya no tenía ningún apósito que me delatase de una cirugía facial, solamente las personas que me conocían podrían notar que mi nariz había cambiado y algo mi mentón, al entrar en el portal, me encontré con la portera, la salude y me dijo.

-          Como esta su padre Madeimoselle Yurena?

-          Bien muchas gracias, se ha restablecido casi en su totalidad, mi hermano sigue con el ayudándole, ya sabe los hombres se ayudan mutuamente, no quieren que las mujeres nos metamos en sus cosas, así les va.

-          La veo distinta.

-          Si es que aprovechando mi estancia en Alemania, me opere de la nariz, se acuerda de que cuando me conoció le dije que no estaba a gusto con ella, pues uno de los médicos que atendió a mi padre tiene un hijo cirujano plástico y me la arreglo, que le parece como quede.

-          Esta Ud. ahora mucho más guapa, tiene una nariz de estrella de cine. Me alegro de que su padre se esté reponiendo, si necesita algo me lo dice.

Así di por terminada mis explicaciones a la chismosa de la portera.

Esa noche, aun con el sujetador de la clínica puesto, di rienda suelta a mis deseos sexuales, me tumbe en la cama, lubrique el consolador y me lo metí en el culo, luego con el puesto cogí el masturbador con la terminal de vagina y me lo enchufe en mi pene, puse a funcionar los dos al mismo tiempo a máxima potencia. Me veía en un lugar donde me estaban dando por el culo al mismo tiempo que yo estaba jodiendo a una mujer con unos grandes pechos como los míos. La penetración del consolador en mi culo me provoco una eyaculación bestial ayudada por el masturbador de vagina, una vez que  eyacule, cambie el terminal y puse el masturbador con forma de ano. El resultado era el mismo, ahora se lo estaba metiendo a un tío por el culo, me imaginaba que era una orgia, yo un transexual le daba por el culo a un hombre, después me follaba a una mujer, mientras dos hombres me la metían por el culo, me encantaba esa visión en mi mente, me sentía llena, feliz me daban placer y yo daba placer, termine agotada y con todos los juguetes colocados en mi culo y en mi polla, y así me quede dormida.

Todos los días tenia la misma operación, unos días me follaba a una mujer imaginaria y otro día a un hombre, pero todos los días me la metían por el culo, únicamente descansaba los fines de semana, tenía que reponer fuerzas.

Pasaron los dos meses de rigor para poderme quitar el sujetador, aunque todos los días me lo quitaba para ducharme, ahora ya era definitivo. Al ponerme uno de los que tenia, su copa apenas tapaba la mitad de mis senos, los veía hermosos, turgentes, pidiendo que los acariciase, ahora tenía canalillo y podía lucirlo, mis vestidos podían ser mas escotados, mostrando mis atributos pectorales, durante esos dos meses, me fui acostumbrando al peso de los mismos, me obligaba a andar mas recta, lo que también me producía que mi trasero se destacase mas para compensar un poco el punto de gravedad, se me dio por tomarme las medidas, me pese, 67Kg. Media 1,78 y mis medidas anatómicas eran de 95- 65 – 95 tenía unas medidas de producir tortícolis de tanto voltear la cabeza para verme, pobrecitos los chicos.

Llame a Erika y le dije.

-          Necesito ir de compras, quiero que me acompañes, te espero esta tarde en mi casa, ven como Erika, te necesito urgente.

-          Pero qué te pasa Yurena, me tienes preocupada.

-          Tú ven y ya te lo explicare.

A la hora fijada, Erika, estaba llamando a la puerta, cuando entro, se quedo con la boca abierta, yo el recibí con un salto de cama que apenas me tapaba mis recién estrenados pechos, la pase al dormitorio y me quede desnuda ante ella. Y le dije.

-          Ves la urgencia que tengo, no me sirve la mitad de la ropa que tenia, a que te gustan mis tetas, si quieres puedes tocarlas.

-          Pero chica, tu no eres Yurena tu eres una modelo de Victoria Siecret

-          Qué maravilla estas divina, claro que necesitas, nueva ropa, sujetadores, bragas, blusas casi de todo, ponte algo por encima y salimos de inmediato.

Me puse un vestido que me quedaba un poco holgado, me calce y salimos.

Lo primero y más urgente eran los sujetadores, busque tallas y colores me probé un montón, y según como me quedasen los apartaba, luego las bragas para conjuntarlas en tono y dibujo, Tangas, Legins, jersey en pico para mostrar canalillo, vestidos escotados. Total me deje una pasta en la ropa, le dije a Erika, que aquella que no me servía si la quería ella o alguna de las chicas podían llevárselas, cuando salí del establecimiento estaba completamente cambiada, toda ropa nueva, me encontraba como Julia Robert en la película Pretty Woman.

Esa noche salí con las chicas, quería mostrarles mi nueva figura  luego, algunas vinieron a mi casa, y pudieron contemplar con mas detalles mi transformación, me acariciaron mis recién estrenadas tetas, las besaron, mi culo respingón fue acariciado y alguna me metió su pene por el culo, que alegría, sentir nuevamente uno  de verdad dentro de mí, saltaba de gozo y mis tetas se movían al compas era una sensación distinta el sentir un pene dentro de una y al mismo tiempo acariciarse las tetas. Para celebrarlo al mismo tiempo que una me metía su pene en el culo, yo le mamaba el pene a otra y una tercera se estaba masturbando sobre mis tetas, decía que era para bautizarlas, todas acabaron corriéndose sobre ellas estrenando aquellas hermosa tetas, que gracias a Maurice me habían puesto.

Al día siguiente, recibí una llamada de Maurice.

-          Yurena, estas contenta, te gustan las tetas que te pusieron?

-          Si mucho, quiero que vengas a besarlas necesito de ti para sentirme más feliz, cuando nos vemos

-          Mañana en el sitio de siempre y a la misma hora.

-          Allí estaré, te quiero.

A la hora señalada aparecí en el restaurante, me había puesto un vestido rojo corto, un generoso escote que marcaba el canalillo, nos besamos como nunca nos habíamos besado, cenamos y como de costumbre fuimos a bailar.

Al acompañarme a mi casa, le pregunte si quería verme con mi nueva figura.

-          Estoy deseando verte, quiero que me las enseñes.

Subimos a mi casa, y directamente nos dirigimos al dormitorio, se sentó en la cama y frente a él y muy lentamente comencé a desnudarme, me quede únicamente con la ropa interior, me acerque y comencé a desnudarle, al ponerme de rodillas para quitarle el pantalón, comprobé que su excitación era mucho mayor que las otras veces, al caerle el pantalón su bóxer mostraba la protuberancia correspondiente a ese momento, se lo baje y su pene libre, erecto y duro me golpeo mi cara, como si me estuviese diciendo que quería meterse en mi boca.

Lo agarre con las dos manos y me falto tiempo para comenzar una mamada, estaba muy excitado sus testículos se presentaban duros y llenos de esperma. Me quite el sujetador y coloque su pene entre mis pechos frotándolos contra ellos, su glande sobresalía entre mis tetas alcanzando mis labios que yo aprovechaba para besárselo. Me puso de pie y agarrando mis pechos los comenzó a besar. Nunca había tenido esa agradable sensación, mis pezones se pusieron duros y erectos pidiendo ser besados, me quite las bragas mi culo ya estaba muy mojado, lo tumbe en la cama y sentándome a horcajadas sobre Maurice lo monte, mis movimientos sobre su pene hacían que mis pechos se moviesen al compas, el los agarraba y manoseaba con cariño, en eso note como su pene dentro de mi culo se ponía más gordo y dando un grito descargo su jugo en mi culo, fue un polvo maravilloso, los dos agotados nos quedamos dormidos.

Al día siguiente, como de costumbre, cuando me desperté, Maurice, ya se había marchado, me dejo una nota, me indicaba que en tres días me presentase en una finca determinada, que pasaría en ella tres días y que obedeciese a todas las órdenes que me diesen, no me arrepentiría y quedaría muy satisfecha.

A la espera de aquella nueva cita, me dedique a poner mi trabajo en orden y preparar algunas cosas que podría necesitar para aquellos tres días, todas ellas relacionadas con mi vestuario y aseo, incluso metí en mi pequeño equipaje un bikini que me había comprado, me supuse que al ser una finca tendrían piscina y podría aprovechar para darme un chapuzón y tomar el sol.

CONTINUARA