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Dogging

en Voyerismo

Hacia unos tres meses que me habia entregado a mi Amo cuando me invitó a comer. Era la segunda comida y su deseo era que supiese organizarme para salir a cenar.

 
La comida llevaba implicita que me organizase la tarde y se la pudiese dedicar. Durante este tiempo nos habiamos ido conociendo más y mejor en lo personal y según sus propias palabras el puzzle de los miedos de Elih iban tomando forma dejando ver mejor los claroscuros de mis prejuicios.
 
El restaurant, pequeño, de mesas redondas con mantel y con la mitad de mesas ocupadas. A pesar de ser otoño el clima en Barcelona permitia vestir un tanto liviana. Medias y sin tanga ni similar. Una falda más bien corta, blusa y una chaqueta. 
 
El comedor de planta irregular y situados en una mesa al fondo, donde la pared retrocedia un medio metro, nos permitia observar las demás mesass y la puerta de cocinas. 
 
Sentada junto a el, esta vez no tuvo que ordenarmelo, al sentarme levanté la falda y senté mis nalgas sobre la silla y manteniendo las rodillas separadas. Desde el primer momento, cuando el servicio nos propuso un aperitivo y nos tomo nota, mantuvo su mano derecha sobre mi muslo y buscando mi sexo. La posición era correcta, no se percibia ningún movimiento, pero su mano estava ahí. 
 
Alternava el comer y la conversación con atrevidas y excitantes carícias sobre mi clítoris. y yo debia entregarme al placer manteniendo la compostura.
 
En cuando a las conversaciones, durante un buen rato estuvimos hablando de nuestro día a día y actividades y no fue hasta la mitad del segundo plato que se hablo de sexo y sumisión.
 
Me sorprendió cuando me dijo que había observado en mí a un mujer llena de prejuicios en cuando a las diferencias de edad y la importancia, aunque relativa, del físico. Y sobre este tema estuvimos debatiendo. Me preguntó sobre los chicos menores de 25 de mi entorno más próximo y no paró hasta que le dije cual de ellos permetiria que me sedujese. Lo mismo en cuanto a hombres mayores de 65 años. Utilizó los nombres que le dí para hacerme imaginar que eran ellos quienes me torturaban el clítoris e introducia un poco el dedo.
 
Más descolocada me dejó cuando me pidió que descartara primero al chico y luego al hombre que había elegido y le dijese cual seria el chico al quien yo seduciria si el me lo ordenase, Lo mismo para el hombre. 
 
Si yo ya habia elegido a regañadientes de quien aceptaria sus insinuaciones, imaginaros descartardos estos, ser yo quien les buscase.
 
La excitación era tremenda y la conversación continuó debatiendo sobre el placer del sexo por encima de los prejuicios por edades y físico. Logicamente hablamos de limpieza, educación e higiene.
 
El café iba acompañado de unos petits fours para el café y ya dándoles cuenta i con su dedo esta vez sí, dentro de mi sexo, me pregunta: Me perteneces ? Eres mía ? - Sí, claro, le respondí con cierta cara de sorpresa.
 
Quiero ver como te follan !
 
"Què dius" ?
 
No preguntes, confia y solamente disfruta. Quiero ver como te follan !. "Anem" !
 
Eran casi las 4 de la tarde, salimos y ya en el coche mientras conducia me fue desabotonado la blusa.y acariciandome los pechos y volteando mis pezones. Toda mi piel respondia excitada.
 
Conducia decidido y parecia que ibamos a salir de Barcelona, pero no, tomó la desviación de Montjuich y paró el coche en una zona de estazonamiento. En tres meses todavia no lo habiamos hecho en el coche y la situación me excitó habiendo olvidado lo que me habia dicho al salir del restaurant. Condujo el coche muy lentamente entre tres niveles distintos de estacionamiento que luego supe que eran los del castillo. 
 
Después de esta inspección del terreno paró el coche en bateria casi al lado de otro coche, momento en que me saltaron las alarmas pero no me dio tiempo a nada, me abrazó y empezó a besarme y su lengua se removia apasionada dentro de mi boca y retorciendose con la mía a la vez que sus manos empezaron a desbocarse hora con mis pechos hora entre mis piernas hundiendose dentro de mi sexo humedo y desnudo.
 
Así estabamos cuando le ví, fuera del coche, a la altura de la ventanilla la cintura de un hombre con su pene fuera y el moviéndola. Me deshice del beso "ens miren" atiné a decir a la vez que volví la cabeza y en la ventanilla de detrás mio estaba sucediendo lo mismo. Otro pene bailaba atizado por las manos de su dueño.
 
"Marxem d'aquí" le dije haciendo ademán de querer recomponer mi blusa.
 
Quieta !
 
Y quieta me quede. Me perteneces y eres mía. Vas a descubrir una nueva forma de placer. Primero yo observaré y si decido que pueden follarte lo harán, pero cuando lo hagan ten presente una cosa: ellos solamente seran invitados necesarios, te estarn follando sí, pero tu placer solo será para mi. Me mirarás orgullosa y me ofrecerás tus orgasmos. Dirás o no dirás nada, pero tus ojos lo diran todo. 
 
Abrazándome de nuevo y volviendo a besar aprovecho para susurrarme que disfratse del momento y que estuviese tranqula y apartándose empezó; liberó su miembro y entendiendole me agaché y se la empecé a comer, no tardando en devorarsela por lo excitada que yo estaba. Mientras yo me aplicaba golosamente el estiró su mano y tirando de la falda dejó mis nalgas y mi sexo al descubierto y dos dedos intentaban llegar al esfinter e inició de mi sexo.
 
Me cogió una de las manos y me la acompaño al interruptor del elevalunas y fue mi dedo el que hizo bajar la luna de la ventanilla de detras mio. A parte del fresco de la tarde no tardé nada en notar una mano fria que empezó a acariciar primero mis nalgas para acercarse con deción a explorarme por dentro y un dedo empezó a penetrar mi sexo invadido de flujos.
 
Chuparsela a mi Amo en aquella situación era un frenesí. Pronto fueron dos los dedos que me follaban el sexo y yo removia mi boca al ritmo de mis placeres.
 
Con sus manos aguantó mi cabeza y mi boca empezó a llenarse de su semen. Nunca antes me habia tragado el semen. La primera vez fue unos dos meses antes.
 
El desconocido seguia torturando mi sexo y ahora libre del miembro de mi Amo mis gemidos eran más audibles. Mi Amo me cogió de nuevo la mano y esta vez le di al otro interruptor y la ventanilla del conductor bajó. Mi Amo me cogió la cabellara haciendo que levantara la cabeza y una mano empezó a acariciarme hasta introducir dos dedos en mi boca.
 
A todo esto estaba oscureciendo. Luego supe que mi Amo habia estado escudriñando a los posibles participantes y ya habia elegido a uno. Un señor de unos 40 años de buen aspecto. 
 
Espera, me dijo, y salió del coche. No oí que dijese nada, dió la vuelta al coche y me ayudó a salir. Primero me apoyó de espaldas al coche y empezó a morrearme de nuevo y separándome las piernas empezó a masturbarme mientras notaba unas manos que se empeñaban en magrearme los pechos.
 
Como si estuviesemos bailando nos fuimos girando hasta quedar el, apoyado en el coche y yo totalmente ofrecida.
 
A lado y lado como apoyados en el coche habia dos que me pasaban las manos por los costados y se paraban en mis pechos, hasta que noté la preséncia de alguien detrás de mi.
 
Note un pene erecto que palmeaba mis nalgas buscando su lugar. Estaba asustada a la vez que este miedo era como una fuente de placer. No podia disimular mi humedad, mis flujos eran constantes. Y abrazada a mi Amo y este cuidandome noté como era penetrada y embestida con passión, con deseo, casi diria que con rabia. Grité y mi Amo tapo mi boca con la suya. Me estaban follando y yo besaba con mi lengua a mi Amo como si nadie más estuviese entre nosotros. 
 
Toda yo era un orgásmo, a la calma de los envites le acompañaron los resoplos del desconocido.
 
Mi Amo hizo señas para que se apartaran, me abrazó, entramos en el coche y me siguió besando. Puso el coche en marcha y cambiamos de lugar para primero arreglarme un poco y luego ir a tomar algo donde poder terminar de adecentarme.
 
Fue tomando algo que me habló del dogging i me explicó que el verdadero dogging es para personas que no le tienen miedo al fracaso. Que se han puesto de moda lugares como el que habiamos estado pero que el era más purista y le daba más morbo el dogging real, el que la otra persona no está ahi para ver si va alguien sino que se encuentra en la situación y decide participar o no. Añadiendo que estamos en la era de la inmediatez y que la gente ahora quiere resultados. 
 
Ahora se entiende mejor mi primer relato ?