Pasó una semana hasta que pude verla, nos hablamos por whatsapp, hablamos de nuestras vidas, nuestros sueños y metas.
Nos confiamos hasta los más profundos secretos. Era un vicio hablar con ella, era una necesidad saber como estaba, que sentía, si necesitaba algo.
Como además de enfermera soy masajista, me comenta que se encuentra muy contracturada, que estaba trabajando demasiado, a lo que le contesto que se merecía algunos mimos y que si precisaba masajes que me llame (me arriesgué, ya fue, no importa que piense que soy fácil, sólo quería verla de nuevo jaja) y llegó el día que nos encontramos nuevamente de guardia, mirada va mirada viene, le pregunté si esta noche estaba sola de guardia, me dijo que si y que vaya luego a la habitación.
En un principio me quedé congelada ante tal respuesta y de inmediato le contesté "Dígame cuando doc. Me escribe y voy".
Mientras tanto disimulábamos nuestra química que se sentía en el aire, nuestra atracción podía ser detectada fácilmente por cualquiera de mis compañeros y eso complicaría todo, entonces disimulábamos, nos manejamos con distancia en ese momento, luego se fue.
Continué mi trabajo y pasaron varias horas, pensaba que era demasiado bonito para ser verdad, y entrada la madrugada recibí el esperadísimo mensaje: "Estoy en la habitación, venís?".Enseguida adelanté trabajo, me organicé, inventé una excusa y salí de la neo.
Entro y apenas vislumbro su cuerpo en la penumbra, me acerco y la siento desnuda, recorro su suave piel de punta a punta con mis manos, mientras nos besamos, le muerdo apasionadamente su labio inferior, sigo hasta su cuello que me enloquece y comienzo a descender hasta su pecho...
Reposé mi cabeza entre sus pechos, mientras me acariciaba y me decía que nunca había sentido nada como aquello y que notaba que también había sido especial para mi.
Era un regalo divino poder admirarla de cerca, reconfortada, con esa expresión de placer en su precioso rostro. Quería que todos mis días fueran así, quería hacerla mía y sentirme suya cada día por el resto de mi vida.