MI PRIMERA VEZ CON MI CUÑADO

Luego de navegar y leer un relato, he decidido contar una de mis experiencias que he tenido, y la cual he intentado contársela a alguien, pero no me he animado.

Primeramente les cuento que tengo 34 años de edad, soy de tez blanca, ojos marrones, cabello ondulado, castaño, mido 1,62 ctms.

Estoy en pareja, no casada formalmente, con Darío, quien tiene 38 años, desde hace 8 años. Tenemos un hijo de 7 años de edad.

 Esto me sucedió hace aproximadamente dos años atrás. Un día mi pareja me comenta que vendría a la ciudad donde vivimos,  Hernán, el hermano de mi esposo, el cual estaría alojado en nuestra casa por dos días, ya que venía por una cuestión laboral, ante lo cual había decido que se aloje en nuestro departamento y de paso podrían compartir más horas, ya que hacia  así un año que no teníamos contacto con él.

Todo ocurrido en primavera. Recuerdo que Hernán, el cual tiene 42 años de edad, buen físico, alto 1,82 ctmts,  llego a la ciudad, arribo en la madrugada, y a buscarlo al aeropuerto fue mi marido. Esa noche yo me quede en casa durmiendo, con nuestro hijo. Ya le habíamos preparado su cama, en la habitación de nuestro hijo.

La mañana siguiente, día de semana, mi esposo se fue a trabajar a las 05:30 hs, porque trabaja para una empresa petrolera. Mientras que yo me desperté tipo 07:00 hs., porque tenía que preparar a mi nene, el cual a las 07:45 hs. pasaba el micro escolar a buscarlo.

Esa noche nuestro hijo durmió en mi habitación, y mi esposo en la habitación con su hermano.

Cuando estaba por hacerse la hora de pasar el micro escolar, tuve que ingresar a la habitación de mi nene a buscarle un cuaderno que se había olvidado poner en la mochila la noche anterior. Ingrese muy despacio, para no despertar a Hernán, y cuando lo hice lo observe dormido, pero para sorpresa estaba todo destapado y durmiendo de espaldas. En paños menores, es decir solo con slip. Ingrese busque el cuaderno, pero no pude no dejar de mirarlo, y al verlo de esa forma, tuve una sensación rara, ya que no podía no dejar de observar su cuerpo, que de por si es llamativo a pesar de su edad.

Hernán, es alto, debe medir un metro ochenta, tiene muy buen físico, se mantiene. Cuando salía logre visualizar que el mismo se mueve de la cama, gira y queda boca arriba. Quede atónita, mirándole su slip, cosa que me sorprendió por el bulto que observe.

Salí de la habitación, y luego de eso se fue mi hijo al colegio, yo regrese a la habitación y no pude dormirme, pensando en lo que había observado anteriormente. Estaba un poco adonada y confundida a la vez. Se me vinieron muchas cosas a la cabeza, hasta que decidí ir a ducharme.  Hernán aun dormía, me duche y cuando salía del baño, observo que el mismo se levanta y nos cruzamos en el pasillo, ante lo cual nos saludamos e inmediatamente me fui a la habitación y él se fue al baño. Me prepare en la habitación. Esa mañana me puse una remera al cuerpo, y calzas, que marcaban mi figura.

Ahí prepare mates, y luego de ello llego Hernán y decidimos tomar mates juntos y comenzar a charlar sobre nuestras vidas, los hijos, de Gisela, su esposa y sus dos hijos. Cosas de familia. Nos reímos bastante; también me di cuenta que cada vez que me levantaba o dirigía hacia algún lugar, me miraba mi cola.

Luego el se fue a una reunión que tenia, y quede realizando las tareas de la casa.

Todo trascurrió normal en el día. Hernán regreso a las 16:00 hs. aprox.

Ahí el salió de compras con su hermano y nuestro hijo, y decidieron realizar un asado.

Ya de entre charlas, en un momento que quedamos solo, y sorpresivamente me dice:

Hoy te vi cuando ingresaste a la habitación a buscar algo, vi como quedaste observando, pensé que buscabas algún otra cosa? Y se sonrió,

Ante lo cual quede sin palabras, y creo que me sonroje (por dentro pensaba que hice, me vio cuando le miraba su cuerpo); y le contesto:

noo, solo busque el cuaderno de thiago.. y ahí vi que él se ríe y también me sonreí..

observando que regresaba Dario, continuando con la charla..

cenamos, charlamos, nos reimos, hasta que fui a acostar a Thiago en la cama, porque esa noche durmió conmigo, mientras que mi esposo y hernan, dormirían en la otra habitación asi continuaban charlando.

En un momento dado, estando solos, le digo a Hernan, bueno ya que te vas mañana, te voy a despertar temprano asi tomamos mates,

Ante lo cual  Hernan me dice: dale, despertame temprano, cuando se vaya Thiago al colegio, pero no vuelvas a ingresar como lo hiciste hoy,

Riéndome le digo: como, como lo hice hoy?

Me dice: asi, ya sabes; con tu camisón de esa forma, y se sonrio,

Me rio y le digo, no se que forma pero bueno,

Y el me dice: pasa que te puedes encontrar con una sorpresa peligrosa, y se rie

Me sonrio y le digo, peligrosa? Jaja, bueno te despierto cuando se vaya Thiago:

Y me voy del lugar que estábamos ambos con dirección a la cocina, donde estaba Dario, observando que el me miraba la cola mientras caminaba

Quede muy sorprendida de esa charla, no podía creerlo y me imaginaba de todo.

Esa noche me quede pensando en la cama, se me vino muchas en la cabeza, y pensaba lo que me había dicho Hernan.

Dario, se levanto como siempre a las 05, se fue a trabajar; mientras que a las 07. Hs me desperté, levante a Thiago, para prepararlo para que vaya al cole. Cuando pase por cerca de la habitación donde dormía Hernan, vi la puerta cerrada en forma completa,

Fui al baño, me higienice, como era muy temprano no cambie, estaba de camisón..

El micro paso por Thiago,

Luego me fui hacia la habitación y cuando pasaba por la habitación donde dormia Hernan, me quede parada, pensando que  haría, si ingresaba a despertarlo o no..

Estuve dudando, porque recordaba lo que me había dicho, sobre la sorpresa que me llevaría

Dude, fui hasta la habitación y luego regrese decidida a despertarlo, le golpee la puerta y lo llame, pero no obtuve respuesta de Hernán, así que decidí abrir la puerta de la habitación, e ingrese llamándolo, pero para mi sorpresa lo observo durmiendo, totalmente destapado y al observarlo noto que el mismo estaba completamente desnudo, quede atónita, e intente salir de la habitación, y ahí Hernán me dice, cuñada veni, te dije que te tendría una sorpresa..

Entonces yo le digo, sos un hdp, estoy casada con tu hermano, e intento salir, pero el se levanta y me toma la mano desde atrás, ahí le digo que  haces?, y el me dice, hago lo que yo y vos deseamos, te vi ayer como me mirabas anonadada mientras yo dormía, sintiendo como se me pegaba en mi cuerpo, sintiendo su pene por arriba de mi cola; y es allí como siento sus manos que comienza a tocarme mi cola, y mi cintura, mientras que mi mano, instintamente, se dirige hacia su pene, sorprendiéndome, viendo como el mismo crecía rápidamente, sorprendiéndome por su tamaño y dureza. Me gire y comenzamos a besarnos, mientras que por momentos le decía que no podía hacer esto, el continuaba besándome, hasta que me tira en la cama, y comienza a besarme hacia abajo, luego me corre mi diminuta tanga, y comienza a comerme mi sexo; estaba descontrolada, a punto de explotar de la calentura que todo esto me generaba, luego de ello saco mi tanga y puso su pene en mi vagina, lo apoyo y luego lo introdujo lentamente, sintiendo como el mismo ingresa y me abría cada vez más mi vagina, hasta que lo sentí muy adentro, quedándose por un instante en esa posición, dándome cuenta del pedazo de pija que el mismo tenia; luego de ello comenzó a moverse cada vez más rápido, y fuerte, haciéndome gemir y gritar del dolor y placer, fue tan rico que me hizo acabar rápidamente;

Cambiamos de posiciones y me coloco en posición perrito sobre la cama, me penetro tan profundo que sentía demasiado placer, haciendo gemir y gritar como una verdadera puta en la cama, me hizo acabar rápidamente, y luego en una segundo vez en la misma posición.

No pensaba en nada en ese momento, no pensaba que  estaba engañando a mi esposo con su hermano, solo disfrutaba del hombre que me estaba dando tanto placer.

Luego de penetrarme por varios minutos en esa posición y hacerme llegar a un segundo orgasmo, cambiamos de posición recostándose Hernán sobre la cama, y mientras nos besábamos apasionadamente, me senté sobre el, sintiendo en lo mas profundo de mi, su rico y enorme pija, con la poca fuerza que tenía, comencé moverme sobre el sintiendo un placer infinito,, de vez en cuando me llevaba hacia el y continuaba con sus movimientos que hacían introducir su enorme pija en lo profundo de mi sexo; cabalgue por unos minutos, hasta que note que Hernán se estaba por venir, ante lo cual comenzó a moverse más rápidamente, sintiendo como el también disfrutaba y gemía por el placer, hasta que llego el punto en que en forma conjunta, acabamos. Sentí como su semen se introducía en mi interior, esa tibia y mojada sensación, me hacía irme de mi misma.

Luego caí rendida en la cama, nos quedamos en silencio, como casi todo el tiempo que duro nuestro acto sexual, creo que cuando cogíamos, solo me pregunto un par de oportunidades si me gustaba, y yo le respondía que me encantaba, nada más..

Luego de eso, hablamos y le pedí por favor que no le cuente nada a nadie, que trate de olvidar lo ocurrido, mientras que hicimos un pacto de silencio porque a ambos nos perjudicaría.

Me fui al baño, luego a mi habitación, donde quede recostada, agotada, pero completamente complacida de lo que había vivido instantes antes.

Creo que me dormí unos instantes, despertándome cuando Hernán me llama desde afuera de mi habitación y me dice si estaba bien, que me despierte que iba a preparar mates; contestándole que ya iría, que me aguarde; no sabía qué hacer, me superaba la situación, como vería a mi cuñado después de lo que habíamos vivido, instantes antes. Así que me decidí, fui al baño, me duche, me cambie, y fui a la cocina, donde lo observe a Hernán, el cual me esperaba con mates y galletitas.

No dijimos nada de lo ocurrido, solo nos reímos, en forma cómplice de la situación.

Charlamos de otros temas, era como si nada hubiera ocurrido instantes antes.

Ya se hizo las 10:00 hs., Hernán ya había preparado su maleta, porque 11:30 hs. pasaba el remis a buscarlo para llevarlo al aeropuerto.

En un momento me dirigí a mi habitación, a ordenar la misma, y escucho que Hernán llega a la misma, trayendo en su mano mi ropa interior que había olvidado en la cama donde habíamos tenido relaciones.

Me la entrega, yo sonrojada intente agarrarla sin decir nada, pero me lleva hacia el y comenzamos a besarnos apasionadamente, no quería volver hacerlo pero era algo que no podía evitarlo; otra vez comenzamos a calentarnos y me dice, no quiero irme asi, quiero despedirme como se debe de ti; comenzando a sacarnos nuestra ropa, nos metimos en la cama, y al ver que su pene estaba muy duro, comencé a besárselo, comérselo plácidamente, observando como el mismo disfrutaba del sexo oral que le hacía; luego el me gira y me saca mi tanga, y baja hasta mi vagina, donde comienza a comérmela ricamente, haciéndome sentir lo más profundo de mis deseos; luego me giro y me pone de espaldas a el, sintiendo como me comienza a penetrar frenéticamente su enorme pija sobre mi vagina, haciéndome explotar de tanta pasión, hace bastante que no sentía una pija tan rica dentro de mí, lo que hacía que me vuelva loca y grite y gima como una puta en celo, al sentir cada una de sus entoscadas cada vez más fuerte; hasta que me hace terminar en dos oportunidades, luego me subo sobre él, cabalgando como una trola. Luego el se para y me coloca en la posición con mis pies en su hombro, sintiendo su enorme pija, toda dentro de mi, hasta que se para y me sube sobre el, sintiendo una penetración tan profunda, como si me quemara dentro de mi, en cada uno de los movimientos que realizaba; hasta que terminamos juntos, otra vez; quedándonos rendidos y saciados de pasión, sobre la cama, varios minutos; ahí charlamos, nos reímos y me pidió que le regale algo, quedándose con mi ropa interior, una tanga diminuta, color negra, la cual tenía la primera vez por la mañana.

Luego llegó la hora que pasaba el remis, nos despedimos apasionadamente, jurándonos hacer pacto de silencio, pero con la promesa que lo vivido volvería a suceder.

Ese dia transcurrió, llego mi nene, luego ya a la tarde mi marido; y allí el mi Dario, me agradece porque se había comunicado con Hernán, quien le agradeció su atención como así también la atención que yo le había brindado, desconociendo mi esposo la locura que había ocurrido esa mañana en su casa, entre su esposa y su hermano.