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Henri´s Club I

en Confesiones

Hola a todos mis queridos lectores, como algunos de ustedes ya me conocen yo soy Delia y esta vez voy a omitir como soy físicamente, así que si tienen curiosidad como soy puedes ir a mi perfil de todos relatos y lo que en esta ocasión voy a contarles es acerca de el nuevo club en el que estoy y todo comenzó así.

Todo comenzó cuando mi esposo me invitó a una cena de su trabajo a lo cual yo no tenia muchas ganas de asistir pero al final me convenció, me dijo que tenia ganas que conociera a sus jefes y que quería presentarme ante ellos. Ese día era un domingo en el que el me dijo que fuera con él y el día de la cena iba a ser el siguiente viernes en una posada de muy buena categoría.

La semana me la pasé muy aburrida yendo y regresando de mi trabajo, mi trabajo a mi casa y de casa a mi trabajo, hasta que se llegó el día (ahora si) esperado pues ya estaba muy frustrada de la semana pesada que fue. Llegue a la casa el viernes y rápidamente fui a tomar una ducha, busqué en mi clóset una de los vestidos tan hermosos de noche que tengo pues tenia pensado ser el centro de atención en la cena de mi esposo y ahí lo vi, uno de los mejores vestidos que tengo, es un vestido negro que no es muy pegado ni muy suelto, con algunas partes de transparencia en especial en el área de los hombros y de las piernas, un escote muy pronunciado y que de seguro con eso iba a ser el centro de atención de todos los que estuvieran ahí presentes y todo gracias a mis grandes tetas que me encanta presumir a donde quiera que voy, también me puse mi collar para la ocasión, mis mejores aretes, unos zapatos de tacón color negro, ya con eso me sentía toda una perra, toda una diva inigualable e inalcanzable.

Llegamos a la cena, era muy hermoso todo lo que estaba, personas de categoría muy elegantes, las mujeres muy hermosas con sus vestidos y los hombres la mayoría llevaba trajes muy elegantes y admirando el ambiente nos fuimos a sentar a la mesa que nos había tocado.

S: Mira amor, aquí es nuestra mesa.

D: Si ya vi los nombres, todo es muy hermoso, gracias por haberme traído.

S: Por eso te insistí tanto mi amor.

S: Hola jefe, muy buenas noches, ella es mi esposa Delia de quien le había platicado.

S: Delia, él es mi jefe Bob.

D: Mucho gusto.

B: El placer es todo mio, Sebastian que hermosa mujer tienes como esposa.

S: Siempre lo recuerdo todos los días que me despierto.

Nos sentamos en la mesa todos y comenzó una platica placentera y en casi todos los temas de conversación se escuchaba mi nombre, todos los socios de mi esposo le decían lo hermosa que me veía y hacían chistes. Después de mucho alcohol y bastantes horas de platica, la cena y un par de bailes nos despedimos y regresamos a nuestra casa.

Le dije a Sebastian que fue una hermosa noche, me dijo que si podíamos tener relaciones sexuales y de muy mala gana le dije que si, aunque la verdad yo no quería y que no voy a describir como fue porque no es un semental que me hace gozar ni nada por el estilo.

Ya estábamos a mediados de la semana y en mi perfil de facebook recibo una solicitud de amistad, era Bob el jefe de Sebastian y lo acepté, iniciamos una platica muy amigable y con el pasar de los días y a manera de chiste me decía que quería acostarse conmigo, yo no tenía pensado hacerle caso y solo lo dejaba en visto cuando me hacia esos comentarios, después de platicar aproximadamente una semana volvió a hacer esos comentarios y ya lo estaba dejando en visto, hasta que me dijo algo que llamó mi atención, me dijo algo de un club, me invitó a unirme a ese club, me dijo de lo que trataba, que solo las mujeres mas hermosas y con grandes atributos pueden entrar al igual que los hombres, solo los más apuestos con grandes herramientas están dentro y al final me convenció y terminé aceptando, me dijo que no era tan fácil ya que necesitaba hacerme unas pruebas de embarazo y que no tuviera ninguna enfermedad de transmisión sexual, le dije que si pero que el las pagaría y acepto mis condiciones.

Al día siguiente me desperté más temprano para ir hacerme las pruebas que me había pedido, cuando salí fui por ellas y hasta el fin de semana fui a entregar las pruebas con él.

B; hola Delia, me alegra que aceptaras mi propuesta.

D: Claro Bob, a quien no le gusta el sexo duro?

B: Nos vamos a llevar muy bien preciosura, te voy a explicar las reglas y es que tu pones tus reglas.

D: Como es eso?

B: Fácil, tu decides como quieres ser tratada y la forma de tener sexo y los hombres tienen que respetar tu voluntad.

D: Me parece perfecto.

B: Depende como quieres ser tratada tienes que ponerte uno de los tres gafetes y cada uno es de color diferente, esta el verde que indica que prefieres más un ambiente romántico y que te traten con amor y dulzura, el amarillo que indica amor del rudo y también esta el rojo que indica sexo duro.

D: y que tan duro?

B: Hay pocas las que usan este gafete, es sexo duro pero aún así esta controlado, no te preocupes.

D: entonces este color no es para mi.

B: no te preocupes hermosa, también tenemos el verde que va al color de tus ojos.

D: No me refiero a eso.

B: a que te refieres?

D: Quiero ser tratada como una puta, que me usen, nada de romance.

B: Wow, esta bien, tenemos algo para ti y es el color marrón, es el indicado para ti, vas a ser tratada como una puta, pero también puedes ser humillada y lo que les plazca a los hombres hacerte, por eso las mujeres no usan este color.

D: Me parece perfecto, es mi color.

Después de explicarme me dijo los días de reunión y algunas otras reglas que se deben seguir en el club. Yo estaba ansiosa de que se llegara el día para que me dieran unas cogidas majestuosas, el día llegó y a base de unas mentiras para mi amado Sebastian fui a la reunión, era una casa hermosa, tenia piscina y muchas áreas de juego. Rápidamente fui al baño a cambiarme, me puse una micro falda que apenas alcanzaba a cubrir mis nalgas, unas medias negras con un encaje hermoso que hacían ver a mis piernas hermosas, una especie de camisa que solo cubría la mitad de mis tetas y parte de mi espalda y aunque no me gusta utilizarla también me puse una tanga, tan delgada como un hilo y lo que no puede faltar, mi gafete de color marrón.

Salí a la fiesta, rápidamente me ofrecen cerveza, la música muy alto y yo entro rápido en ambiente, un grupo de hombres me llaman de una mesa y me invitan a jugar cartas, quien pierda tiene que hacer castigo, me agrado la idea me siento en una silla y “misteriosamente” perdí el juego. De castigo tenia que dejarme nalguear por todos y claro que acepté, saque mis nalgas y uno a uno me iban nalgueando, yo estaba que escurría de húmeda.

*Mira nada más esta perra que le gusta ser humillada.

* Te gusta ser humillada puta?

D: si me encanta

* Quieres verga puta?

D: Si yo quiero.

* Pues tienes que pedirla con propiedad puta, hincate y dinos que es lo que quieres.

Yo me hinque como lo dijo el extraño

D: Yo quiero que me den verga, esta perrita quiere verga.

Abrí mi boca para que me la metieran y uno de ellos tomó mi cabeza mientras se sacaba la verga de su pantalón y dirigió su verga a mi boca, yo la comencé a mamar pues ya tenia ganas de una buena verga, la comencé a succionar.

- Esta puta me va hacer terminar rápido, la mama como una profesional.

Luego de decir eso, los otros 4 se acercan a mi y me levantan la falda, me quitan la tanga y el pedazo de tela que cubría mis tetas, uno de ellos me empieza a mamar una teta y con su mano me apretaba la otra, otro de ellos pone su verga en frente de mi para que la mamara y estaba intercambiando de vergas, primero mamaba una y después la otra, empiezo a sentir que una verga me va penetrando mi coño, ufff estaba en el cielo, siendo cogida con dos vergas mamando, les dije que me penetraran dos, uno por mi coño y el otro por mi ano, uno se sienta en la silla y me la mete en mi culito de repente, me dolió pero me encanto, otro de ellos me la mete por mi coño y me comienzan a coger duro mientras me decían lo puta que era, me pegaban en mis tetas, me nalgueaban y eso me hacia mojar más, “que ricas estas sus vergas bien grandes y gordas” era lo que lo que yo decía, uno de ellos me terminó en el culo y el que me estaba cogiendo por el coño me la metió a la boca para que la mamara, estaba como poseído porque hasta cierto punto ya no se la estaba mamando, él me estaba cogiendo por la boca y llega otro que me comenzó a cogerme por el culo, era verdad lo que bob me había dicho, todos estaban con una vergota bien buena, grande y gorda, muy venosa, se acercan otros dos y los empiezo a masturbar, ya tenia uno cogiéndome por el culo, una verga en mi garganta y una verga en cada una de mis manos, al ver que ya la mayoría se iba a venir les dije que terminaran en mi boca porque quería tomar mucha leche y así lo hicieron, el que se iba a venir me los aventaba en mi boca, yo quedé muy satisfecha y fui a sentarme en el sillón, después de un tiempo les dije que ya me iba y al ir al maño a cambiarme unos me manoseaban y otros me nalgueaban o tocaban las tetas, llegué al baño y me cambié, salí de la casa y ahí estaba Bob, me ofreció llevarme a mi casa y yo acepté, una cuadra atrás me deja para no levantar sospechas a mi querido Sebastian.

Antes que se diera cuenta me metí a bañar para que no sospechara nada pues olía mucho a semen y sexo, salí de la ducha y fui con Sebastian.

D: Hola mi amor ya llegué.

S: Me da gusto, porque tan sonriente?

D: Porque todo el amor que te tengo.

S: Te amo tanto mi vida, no se que sería de mí sin ti

 

 

PD: Muchas gracias a todos los que me envían mensajes a mi correo, se los agradezco y aunque hay veces que no los puedo responder todos de verdad estoy muy agradecida con ustedes, también les quiero mandar un saludo a mis lectores que no dejan de leer mis relatos.