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Comienzos como chica CD con otra chica CD.

en Transexuales

Hola, mi nombre de CD es Lucía, tenía 18 años cuando me empezó a llamar la atención este mundo. Con esta edad ya comencé a ponerme ropa de mi hermana y de mi madre a escondidas.Empecé a coquetear con mi ano, primero con un dedo, aunque recuerdo que me dolía. Empecé a ver páginas en Internet sobre esto, fotos, vídeos, de todo un poco. Seguí jugando así hasta que con la mayoría de edad decidí intentar quedar con algún chico. Yo nunca me había sentido atraída por uno, así que finalmente opté por buscar una chica CD o transexual.

Cuando quedé con dicha chica, recuerdo que se llamaba Lorena, me enseñó muchas cosas, ya que yo no tenía experiencia. Quedamos en su casa, yo estaba muy nervioso en esa época, ya que ni siquiera me atrevía a contarle a ella que a mí también me gustaba vestir de chica (ella es 10 años mayor que yo). Finalmente me decidí y quedé con ella en su casa, un apartamento muy bonito, por cierto. Me dijo que me sentara y me ofreció algo de beber, ya que se me notaba nervioso. Me trajo agua y comenzamos a charlar. Empezó a tocarme la pierna y yo me encendí bastante, aunque luego con los nervios no se me levantaba, fue cuando ella me dijo: vamos a probar algo. Entonces me dijo que me tumbara, me la empezó a chupar mientras me introducía un dedo, luego dos, así hasta tres... Estuve a punto de correrme pero paró y me dijo que me tocaba a mí, así que por primera vez iba a chupar una polla, la agarré y comencé a masajearla, luego me agaché y la lamí poco a poco, me la metí en la boca y me dio muchísimo placer, hasta que me dijo que si quería que me la metiera, a lo que accedí (antes solo había usado mis dedos y algún utensilio pero pequeño), se puso el condón, me echó lubricante y la empezó a introducir poco a poco, hasta que me la metió casi toda y comenzó a moverse más y más rápido. Al principio me dolía, pero me daba mucho placer, aunque no me la metió entera, ya que eran 19 cm, por lo que paró y me dijo que quería correrse con una paja mientras me miraba, así que nos corrimos los dos así, nos vestimos y quedamos en volver a vernos.

Cuando volví a hablar con ella, le confesé que me gustaba vestir de chica, y me dijo que podríamos probar, por lo que volvimos a quedar en su casa. Estando allí me enseñó lo que había llevado para mí, unas medias con liguero, tacones no muy altos (por suerte teníamos la misma talla) y un vestido corto rojo. Me dijo que me vistiera, me pintó los labios de rojo y me puso un collar de perlas. Yo en ese momento estaba muerta de vergüenza (hablaré de mí en femenino a partir de ahora). Me decía que caminara para aprender a andar con tacones, después de un rato y con los pies doloridos me dijo que me pusiera otros mucho más altos, pero me dijo que no me preocupara, que no tendría que andar con ellos. Me los puse y nos sentamos en la cama, entonces me dijo que se la chupara y así lo hice, pero esta vez se corrió en mi boca sin avisar, no me desagradó el sabor, pero lo escupí porque tampoco la conocía demasiado. Nos sentamos un rato a hablar.

Poco después, ese mismo día, me dijo que fuera completamente depilada la próxima vez, y así hice, fue dos días después y yo estaba super excitada. Al entrar en su casa me enseñó unos papeles muy recientes que ponían que no tenía ninguna ETS, que ella siempre lo hacía todo con protección y que no tenía de qué preocuparme por si quería tragar su semen. También me reconoció que le gustaba y que quería quedar más a menudo. Me confesó que le gustaba bastante la idea de dominar y que si quería probar. Me llevó a una habitación que no había visto antes, solo tenía una cama y una mesa, me dijo que me desnudara y me sentara en la cama.

Después de unos 10-15 minutos esperando, apareció ella con un corset rojo y negro y con unas botas negras hasta medio muslo, se había maquillado con colores muy potentes, me puso a cien verla así. Por cierto, ella mide 1,70 y tiene un cuerpo muy femenino y, cuando se maquilla, parece una chica completamente, excepto por su pene, que está orgullosa de él (normal, con 19 cm...).

Siguiendo con el momento en que apareció en la habitación... Me dijo que me pusiera a cuatro patas y que le siguiera hasta su habitación, una vez llegamos a su habitación, me dijo que me pusiera lo que había encima de la cama, un tanga de hilo rosa, unas medias de rejilla negras, un corset y, a los pies de la cama, había dos pares de zapatos de tacón, unas sandalias rosas con poco tacón y unos botines negros de unos 12 cm, me dijo que eligiera, pero con una condición, que no me los podría quitar hasta que me fuera de allí ese día. Con un poco de miedo elegí los negros, ya que eran demasiado altos y esperaba que no me hiciera andar con ellos, claramente me confundía.

Cuando iba a empezar a vestirme me dijo que me esperara y me puso un cinturón de castidad, algo que me sorprendió bastante, pero como me gustaba tanto dejé que me lo pusiera, me dijo que guardaría la llave y que ya veríamos si me lo quitaba después. Después me vestí y me dijo que me pusiera de pie con los tacones puestos y que le siguiera, menos mal que era un pasillo estrecho y pude agarrarme a las paredes... Como decía, con mucha torpeza conseguí seguirle hasta el baño, me hizo sentarme y comenzó a maquillarme, esta vez me maquilló completamente y me puso una peluca morena cortita (aunque ella tiene el pelo largo, pero tiene pelucas porque le gusta cambiar). Me miré al espejo y no estaba nada mal, ya que había tardado muy poco en maquillarme.

Me llevó a la cama y una vez allí me puso un collar, pero de momento sin correa, me hizo ponerme boca arriba en la cama y luego me ató las manos y los pies y me tapó los ojos, esto sinceramente me dio un poco de miedo, porque no sabía por qué tenía tantas cosas así, pero bueno, ya que había empezado, seguí. Le pregunté qué iba a hacerme y me puso una especie de bozal (una bola con correa). Aquí ya sí que tuve miedo, porque no podía hacer nada. Entonces me susurró al oído: ahora eres completamente mía, vas a ser mi perrita. En ese momento sentía que estallaba mi pene dentro del cinturón de castidad.

Se puso encima mía y comenzó a lamerme por todo el cuerpo, a susurrarme cosas guarras al oído y mientras me azotaba con una fusta a veces. Poco después me quitó la bola de la boca y me dijo que le contestara a una pregunta, la cual era: si quieres que siga, tienes que decirme que eras completamente mía y que puedo hacer contigo lo que quiera; en ese momento ni me lo pensé y le dije: sí Ama. Algo que se notó que le encantó, me puso la bola en la boca y continuó.

Empecé a notar frío en el ano, me estaba untando una crema, luego noté como entraba algo, pero era una sensación extraña, porque no notaba casi nada. Me dijo que no me preocupara, que era una crema anestesiante para que no me doliera al principio, que me relajara. Cuando pasó un rato, me quitó las cuerdas de las piernas y me puso mis piernas sobre sus hombros, se puso un condón y comenzó a metérmela muy despacio, hasta que por primera vez, había entrado completamente. Sentí muchísimo gusto y empezó a darme cada vez más fuerte, me quitó la bola de la boca y me dijo que si quería su saliva, y pensando que era para besarme acepté, pero me escupió, me dijo que abriera la boca y me volvió a escupir, me encantó.

Me quitó la venda, me desató y me ordenó que me pusiera de rodillas en el suelo con la boca abierta, lo hice y me la folló, hasta que se corrió y me inundó la boca con su semen. Me dijo que no me lo tragara y que me echara boca arriba en la cama, me volvió a atar y me quitó el cinturón de castidad. Comenzó a chupármela y tardé 5 segundos en correrme, noté que me corría mucho, lo aguantó en la boca y me lo escupió todo en la mía. Me desató y me hizo poner de rodillas, me dijo que abriera la boca mirándola a ella, me escupió un par de veces y me dijo que podía tragar. Me costó tragarlo todo, pero lo hice finalmente. 

Luego nos duchamos juntos, nos vestimos y hablamos sobre lo que había pasado. Me dijo que eso solo era el principio, dependía de mí si quería seguir. Claramente acepté, pero me dijo que había otra condición, y era que tenía que llevar el dispositivo de castidad puesto, para así evitar correrme cuando yo quisiera. Eso ya me echó un poco para atrás, porque aunque yo hacía esto en privado, seguía quedando con chicas. Le dije que si me dejaba pensarlo, pero me dijo que si salía por la puerta sin el dispositivo puesto, que no podía volver a entrar. Tuve que aceptar, me gustaba demasiado, me lo puso y puso la llave junto a las demás suyas, pero me llamó la atención que había otra llave muy parecida, ¿tendría a alguien más?

Continuaré mi experiencia con más relatos. Gracias por vuestra atención.