Un hombre tiene un alucinante encuentro en un callejón con una enigmática mujer-gata que se le ofrece con pasión felina y sensualidad embriagadora.
Después de una experiencia alucinante en el autobús y todavía caliente recordándola, la joven de nuestro relato se mete en la bañera, masturbándose con fruición.
Una joven regresa de su trabajo de relaciones públicas. Toma un autobús atestado de gente y siente como alguien se sitúa tras ella y comienza un decidido acercamiento a su intimidad...
Fantasía y realidad se funden muchas veces sin que podamos decir que el sueño no es real. Para nuestro protagonista, al menos, la diferencia no está nada clara...