Mientras seguíamos caminado le pregunte si me dejaba tocarlo antes de llegar a la casa, me miro y me preguntó que quería tocar, no le conteste pero mire hacía su pantalón, me preguntó cuanto había tocado y le dije que dos, pero que me había gustado más el suyo. Me dijo en dónde los tocaste-, le conteste que en el metro y sonrió, me dijo que sólo una vez y ya. Me emocione y le conteste que sí.
Mientras seguía en su faena de metérmela escuché su vos que me decía abre los ojos, así lo hice y lo vi. parado frente a mi, ¡no podía creerlo! Inmediatamente volví la cabeza y me di cuenta que quien me había estado provocando esas sensaciones y me tenía ensartada ¡era Anel!. Sí, era ella quien seguía en sus movimientos dentro de mí, sin soltarme de mis caderas, me miraba con una sonrisa y se le veía colorada la cara.
Después de tres estaciones iba más lleno el convoy y al llegar a la Raza podía sentir como insistentemente una mano pasaba por mis nalgas, había levantado discretamente un poco mi saco para acariciarme, y disimuladamente de vez en ves se posaba en ellas, rozando mis piernas y recorriendo mi anatomía con movimientos circulares, no alcanzaba a ver quien era el que me tocaba así, trataba de moverme de ahí pero no pude, así que tuve que tratar de esquivar esas caricias clandestinas
le estaban dando una fiera manoseada a mis tetas, esos tipos me las jalaban, me las apretaban, me las sobaban fuertemente, sacudiéndolas de un lado a otro, las jalaban hacia delante como queriéndose llevar mis senos, me dieron varios chupetones en mis tetas y ya no podía contener mi excitación, estaba a punto de venirme y de pedir verga por todos mis orificios.
Mientras mas me arrimaba su pene a mis manos más me excitaba. De pronto note que estaban humedecidas mis manos por un líquido que salía de su cosa y embarraba mis manos, era trasnparente y viscoso. Hubo un momento en que la excitación y la curiosidad se apoderaron de mí y sin pernsarlo tome entre mi mano izquierda su pene, lo rodee con mi mano y sentí su calor, sentí su humedad y como daba pequeños saltos.