Con motivo de mi cumpleaños mi marido organizó todo para que pudiera satisfacer mi fantasía de follar con un chico virgen.
Temía perder a mi marido en brazos de otro hombre a causa de su bisexualidad recién descubierta. Pero encontré la forma de satisfacerlo, sin que tuviera que salir de mi casa, ni de mis brazos.
Mi primera experiencia sexual con otro hombre y en presencia de mi marido cambió nuestras vidas.