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Soñado pero inesperado (II)

en Hetero: Primera vez

Hete aquí que llegó el tan ansiado sábado y allí me encontraba tocando el timbre en casa de M. Ella me esperaba con un topcito que dejaba al aire todo su bello abdomen y su apetecible ombligo y realzaba sus tetitas, al tiempo que remarcaba sus pezones que duros y erectos pugnaban por atravesar la tela. Y una faldita que mostraba toda la longitud de sus hermosas y bien torneadas piernas, y al voltearse dejaban insinuar sus rosadas y firmes nalgas.

-Hola preciosa, como estás. -nerviosa, ansiosa y muy asustada.
-Tranquila que no voy a comerte y prometo no hacerte daño en absoluto.
Además no haremos nada que no estés dispuesta a hacer o no te sientas preparada para ello. Solo quiero aclararte que obviamente solo con teoría no lograrás nada, tendremos que llevar a la práctica algunas cosillas para que completes tu formación en la materia y puedas luego llevarlas a cabo exitosamente con tu novio.
-Lo sé y por eso estoy nerviosa. -Tranquila y prepara un cafecito así mientras lo degustamos te cuento lo que he pensado, vale? -vale.

-Para empezar había pensado que para lograr todo eso que hablamos, primero es necesario que conozcas tu propio cuerpo y el de un hombre.-Pero si eso ya lo sé, lo he estudiado en anatomía en el cole. -No me refiero a eso sino a tus zonas sensibles y la nuestras, que obviamente no son las mismas y además seguramente tampoco conoces en su totalidad las tuyas.
 

Para eso empezaremos desnudándonos los dos por completo, aunque te cause pudor, pero es necesario. Estás de acuerdo? -Vale, si tu lo dices, yo confío en ti.

Terminado el café la cogí de la mano y nos fuimos al cuarto de sus padres, por aquello de la cama matrimonial.
Una vez allí : -si te parece me desvisto yo primero para que no te sea tan duro hacerlo delante de un casi extraño. -pero si tu no eres un extraño, además me gustas mucho.??!! -

Dicho esto procedí a desvestirme lentamente bajo su atenta y escrutadora mirada, que se quedó como petrificada cuando vio mi lanza, que semierecta medía unos 19 cm (en erección completa llega a los 25 cm por unos 5 de grosor) -Por dios si es mucho más grande que la de mi novio incluso sin estar erecta.

Dijo con la cara ruborizada y una suerte de agitación. -ven acá y bésame a ver si sabes hacerlo bien, que es muy importante en los preliminares de una relación sexual, dije mientras me sentaba desnudo en el borde de la cama.

Se acercó ubicándose entre mis piernas y agachándose me dio un suave y caliente
beso en los labios, con los suyos cerrados. -Muy rico pero incompleto, dije.
-Ven y haz lo mismo que yo dije y tomándole por su cabeza le plante un besazo intentando hasta que lo logré meter mi lengua en su boca, a lo que respondió (aprendía muy rápido) entrelazando su lengua con la mía y recorriendo mi boca como yo la suya.
-Guau, nunca me habían besado así! MMMMM que gustito, me das otro.
Dijo agachándose a recibirlo, y nos dimos un morreo de por lo menos cinco minutos. Mientras tanto yo posaba mi mano derecha en el dorso de su muslo izquierdo suave y caliente y ascendía hasta su trasero, introduciéndolo bajo su tanguita y sintiendo el calor y la firmeza y suavidad de su nalga. Piel tersa como un bebé y de una dureza increíble. Y además estaba hirviendo.

Mientras acariciaba insaciablemente su culo, ella como al descuido apoyó su rodilla derecha en mi pene lo que nos puso a los dos a mil. Yo la sentía gemir bajo mis labios y entre mis brazos. Bajé su tanguita deslizándola suavemente por sus esbeltas piernas hasta llegar a sus pies, los que descalcé y acaricié con un suave masaje plantar al tiempo que besaba y lamía cada uno de sus dedos, primero de un pie y luego del  otro, excitándola hasta el paroxismo. Subí con mi boca y lengua saboreando cada centímetro de su piel hasta sumergirme bajo su faldita y olisquear su coñito virgen.

Que maravilla el olor de una hembra caliente y virgen. Se notaba su calentura por las gotas de flujo que pendían de sus pelitos. Suavemente toqué sus labios vaginales
con la lengua entre su mata de vellitos y eso le arrancó un profundo suspiro. Lo dejé ahí y levante mi cabeza para besarla nuevamente buscando afanosamente su lengua, mientras le quitaba el top dejando al aire sus deliciosas, pequeñas y perfectas tetas, con unas areolas rosaditas vírgenes de labios y lenguas y sus pezones erectos y duros que al chupar se me antojaron como dos fresas silvestres dulces y rugosas, y ella: ahhhhhhhhhh! que rico, sigue, sigue, más, más no pares por fa!!!!!!!!!!!!!!!!!. metí toda su seno derecho en mi boca y con mi lengua frotaba su pezoncito, luego hice
lo mismo con el otro, mientras seguía acariciando su culo y de a ratos su coño, hasta que estalló en el primer y primoroso orgasmo.

El primero de su vida, compartido con un hombre. AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!Que me pasa, OOOOOOOOHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH que delicia! papitooooo! Más quiero mucho más de esto.

La terminé de desnudar y me quedé admirado de sus formas. La senté sobre mis
muslos y ella arrimó su pubis a mi picha que ya estaba a mil y uno y comenzó a frotarse contra ella, logrando en segundos su segundo orgasmo, esta vez casi explosivo. La recosté sobre la cama acariciando su rostro angelical y llenándola de besos en su mejilla ardiente y ruborizada. -Estás bien ,mi amor? -Fantástico, nunca me sentí mejor.

Cogí sus manos y la llevé a mi pene que parecía una antorcha de fuego por lo colorado y caliente que estaba. -MMMMMMMMMMMM..que calentito y duro. Es
enorme, no alcanzo a rodearlo con una mano y me acariciaba de arriba a abajo
mientras yo acariciaba su culo y la besaba apasionadamente en la boca. En esas estábamos. Lo cogí por la nuca y la llevé hacia él. -Míralo de cerca, esto es el glande. Y ella instintivamente se agachó del todo y le dio un beso en la puntita. Dios que placer inmenso el que me proporcionaba esa boquita virgen, pero húmeda y caliente. --- saca la lengüita y lámelo.

Comenzó a lamerlo dulcemente mientras con sus manitos me acariciaba suavemente las bolas. -te gusta papito. -me encanta, eres una maravilla, ahora abre la boquita y saboréalo como a un chupa chups. Abrió su boca y empezó a comerse mi polla con fruición. En un momento dado lo cogió con sus labios del rodete del glande y mientras con la lengua jugaba frotándome la puntita. Creí que me moría de placer. -Ojo mi amor que en cualquier momento me corro, si quieres sácalo así no te lleno la boquita de semen.

-No me importa, además quiero probarlo. Y mientras lo decía apretó más sus labios y me masturbara con la boca, hasta que no pude más y exploté en su boca llenándola de semen que contra toda suposición saboreó y trago hasta la última gota. -MMMMMMMHHHHHHHHHHHHHHHH....que rico, calentito, y dulce como la miel. Yo pense que me iba a dar náuseas pero no, es una delicia. Gracias y me beso en la boca.

Yo me di la vuelta y me puse a horcajadas sobre ella apoyando mi polla en vías de flaccidez sobre su pubis, lo cual provocó enseguida que se ponga nuevamente dura. --Ay papito que rico se siente tener tu polla dura y caliente sobre mi sexo. Quiero sentirte adentro mío, porfa..

-No te apures, tiempo al tiempo, ya llegará eso, antes tienes que aprender y sentir muchas cosas. y diciendo este me recosté sobre ella y empecé a besar y lamer sus pezones que mordisqueaba con delicadeza, mientras frotaba mi picha contra su rajita. Fui bajando con mis labios por si terso vientre  entreteniéndome un rato en su ombliguito. Que delicia!!!Hasta llegar a su rajita. Separé con suavidad sus piernas y poniéndole un almohadón bajo el culito, comencé a lamerle el coño. Primero entreabrí sus labios con mi lengua, pasándola suavemente por el surco entre sus labios mayores y menores, saboreando la dulzura de su olor y flujo de hembra caliente. Y finalmente le introduje la lengua en su vagina, que maravilla, pensaba yo, al fin el sueño de mi vida cumplido. --que maravilla papi, sigue, porfa no pares, másssssssss, másssssssssss, más adentro.
OOOOOOOOHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH, SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII, así
asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, ahhhhhhhhhhhhhh, me corroooooooooooooooooooooooooo.
Dios papito eres un sol. No creo que mi novio sea capaz de provocarme tanto placer. Tranquila que aprenderá como todo el mundo. Y dicho esto comencé a lamerle y frotarle el botoncito de su clítoris con mi lengua, y cuando lo tuve durito y erecto empecé a succionarlo desesperadamente provocándole un orgasmo interminable. Luego la voltee y seguí besando y lamiendo su piel. Esta vez la de sus nalgas.

Gracias dios mío por darme este regalo, pensaba yo. Y seguí chupando sus nalguitas y luego recorriendo su rajita posterior hasta llegar a su agujerito anal al cual proporcioné un delicioso beso negro logrando introducir después de un ratito la punta de la lengua en su deliciosa caverna negra. Ella en tanto solo profería gemidos de placer indescriptibles
. -AAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHpapito por favor follame, no aguanto más. Ya lo he decidido, quiero que seas tu quien me haga mujer.
Quiero premiar tanto placer dándote mi AAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
virginidad . -Tranquila amorcito, nada hay que desee más, pero quiero que lo pienses detenidamente, en frío y si luego de masticarlo mucho lo decides así, yo estoy dispuesto a complacerte, solo tienes que llamarme.
Y seguí chupando su culito arrancándole un orgasmo casi volcánico.
AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
OOOOOOOOOHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH....SSSSSSSIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII.

Me recosté sobre ella colocando mi chipote entre sus nalgas y ella inmediatamente empezó a moverse frotándome y masajeándome la polla con sus nalgas hasta que estallé en un polvazo increíble, llenando su espalda y su raja trasera de semen. Ella se llevó la mano atrás y cojiendolo con los dedos se lo llevó a su boca. -MMMMMMMMMMMMHHHHHHHHH..que bueno!.

Así nos quedamos dormido hasta las diez de la noche. Fuimos a ducharnos nos
enjabonamos mutuamente, fue delicioso. Al terminar de enjuagarnos se agachó y me dio una sensacional mamada recibiendo nuevamente toda mi leche en su boca. -MMMMMMMMMMMMMmmmmHHHHHHHHHHHHHHH... que delicia. Se sentó al borde de la bañera y abriendo sus piernas me invitó a hacer lo mío, que por supuesto
ni me hice rogar y le pegué una mamada que la dejé tiritando y chorreando flujo por sus muslos. La sequé, la levanté y la deposité en su cama, estaba agotada, y yo destruído.. Me vestí le di un enorme beso en su morrito y me fui, quedando en que me llamaría. Me fui rezando por que realmente se decidiera, porque no veía la hora de desvirgar ese coñito y por supuesto ese culazo hermoso. me imaginaba con el fierro candente abriéndome paso entre sus nalgas hirvientes y casi me corro en el camino.
Unos días después me llamó y ................

Bueno eso será la tercera parte.
Esperaré a ver publicadas las dos primeras.

EPTAL
Adiós. Si queréis escribidme a eptal@hotmail.com, para contarme experiencias similares o comentar que les pareció esta.