Una tarde estaba muerto de aburrimiento esperando una llamada importante de la que dependían varios asuntos de mi trabajo y para liberar un poco de tensión decidí divertirme un rato en el chat, solo por hacer algo diferente se me ocurrió hacerme pasar por mujer.

La idea era hacerme pasar por casada desde hace 2 años con la fantasía insatisfecha de tener sexo anal porque "mi marido" no sabía como darlo, así que escogí un nick muy sugestivo escribí un pequeño perfil de "mi fantasía" y me lancé al salón de chat dispuesto a pasar un rato divertido.

En menos de 2 minutos tenía por lo menos 8 hombres tratando de hablar conmigo, la aparición de ventanas solicitando hablar conmigo parecía una jauría perros rabiosos encima de mi pobre personaje, me negué a hablar con varios y me quede platicando con los que parecían mas amigables y menos urgidos que los demás, en pocas palabras mantenían cierto toque de caballerosidad, no es que los fuera a conocer en persona pero me dieron mas confianza.

Como es tradicional, empezaron el cuento de que son incomprendidos por sus esposas, que no quieren recibir sexo anal pero ellos están dispuestos a hacerlo, me preguntaban sobre "mi esposo" y que porque me tenía "insatisfecha", esa fue la parte mas divertida, hacerles creer en mi personaje, una mujer de baja estatura, con muy buena cadera (como les gustan en México) de piel blanca y con un tinte castaño-rojizo que me hacía ver muy sexi y ardiendo en deseos, totalmente húmeda tan solo de pensar que su fantasía será cumplida esa misma noche en que su marido se encuentra de viaje hasta el fin de semana.

Las platicas se ponían muy calientes, les preguntaba que clase de ropa interior usaban ese día y si les decía que no me gustaban los boxers prometían cambiárselos por trusas antes de nuestro supuesto encuentro, esa fue una de tantas promesas que me hicieron... que pasarían por mi a mi trabajo y me tratarían como reina todo el tiempo que estuviéramos juntos, no falto el maduro que hasta dinero ofreció y el vividor que me lo hacía pero si yo pagaba el hotel ¿qué paso con toda la gente decente que había en el mundo?

Cuando los tenía mas enganchados a la conversación les preguntaba como me lo harían, ese fue un momento decepcionante porque los "maestros" no parecían tener idea de lo que se trataba, algunos ni sabían de la existencia de lubricantes, me di el lujo de terminar la conversación con ellos argumentando que no iba a perder mi tiempo con inexpertos que no podrían satisfacer "mi fantasía".

Eso redujo mis posibilidades de ligue a un solo hombre, por sus descripciones parecía si sabía como hacerlo (de hecho, menciono muchas cosas que hubiera hecho como gay que asume el rol activo básicamente) cuando y como estimular, los juegos previos adecuados y todas las medidas de precaución para tener sexo seguro pero placentero, la conversación iba subiendo de tono con este buen hombre que se definió físicamente no muy atractivo pero con muy buena herramienta y con la experiencia suficiente para cumplir mi fantasía, cuando le pregunte si me dejaría jugar también con su ano ¡se molesto! argumentó que si yo lo creía homosexual, que a el no le gustaba que lo tocaran ahí etc... al final el terminó la conversación algo enfadado, no le hubiera molestado darle anal a mi personaje pero un ligero jugueteo con su ano iba a ser suficiente para desanimarlo, que contradictorio ¿no?

Permanecí un rato mas en el chat estudiando propuestas cuando apareció exactamente lo contrario que buscaba mi personaje, un hombre me preguntaba si yo le daría anal a él ¡no lo podía creer! al principio finjí timidez respecto al tema pero él estaba muy interesado, le dije que yo no tenía ningún inconveniente en hacerlo pero que no tenía dildos para hacérselo, mencionó que el tenía el cinturón con adaptador para un dildo como los que usan las lesbianas para penetrarse, dijo que lo podría usar y que no importaba si yo sabía como hacerlo porque el mismo podía estimular su ano y relajarse para que la penetración fuera menos dolorosa, bajo ese entendido empezamos a platicar, le dije que me gustaría lavar sus nalgas y untarle aceites aromáticos mientras masajeaba suavemente su ano y que después lo besaría y pasaría mi lengua todo alrededor explorando cada centímetro y dándole mucho placer a su ano para que se relaje, introduciría uno a uno mis dedos llenos de lubricante para abrirlo con firmeza sin dejar de besarlo y cuando lo sintiera listo introduciría el dildo hasta el fondo con todas mis fuerzas, él gemía y describía como se iba a masturbar mientras lo penetraba en varias posiciones, quería que lo tratara como un animal.

Mientras escribía ,tenía una erección casi dolorosa y las manos sudorosas, lo estaba penetrando "virtualmente" cuando sonó el teléfono, era la llamada que estaba esperando, escribí en la pantalla que me esperara un momento porque tenía una llamada telefónica, él me dijo que iba a ir al baño a masturbarse en "mi honor" y se desconectó... a mi no me faltaron ganas de ir y hacer lo mismo pero no pude hacerlo y me tuve que bajar la erección con fuerza de voluntad porque salí de mi oficina rumbo a una junta en la que apenas me mantuve concentrando porque seguí excitado con mi intensa primera sesión de sexo anal virtual como mujer.

Todos nos usamos en el chat...