Las hermanas de mi amiga... Parte I
Bueno, hola a todos de nuevo. Aca paso a relatar algo que me paso hace unos años y que me hizo aprender un par de lecciones, bueno, una sola, pero importante. Paso aclarar que los nombres estan cambiados, debido a que si las personas aca descritas se enteran soy hombre muerto... bueno, paso a relatar...
Corrian mis 19 años y era una hermosa mañana de verano. Mis vacaciones habian empezado hacia unas semanas y ya estaba de vago. Esa mañana me levante y acomode mi habitacion, ayude un poco en casa y para cuando el desorden general se hubo aplacado me decidi a salir a dar una vuelta. Era un agradable domingo y en casa almorzabamos tarde... demasiado tarde, asi que sali a matar el tiempo. Siempre me a gustado caminar y de hecho esa mañana me dirigi a la casa de una amiga mia, que mas que amiga era como una hermana para mi. Ella vivia lejos, pero siempre fui de caminar mucho, asi que me mande. Llegaba a eso de las 2 de la tarde, suponiendo que ya habian comido en casa de mi amiga, ya que no queria caer de regalito al almuerzo.
Llegue y me atendio Luciana, mi amiga. Nos conociamos desde la primaria y eramos buenos, muy buenos amigos. Nuestra amistad era el vivo reflejo de que podia haber una relacion de amistad entre el hombre y la mujer, aunque no puedo decir que hubo un par de veces que la desee sexualmente, pero eso habia sido a causa del alcohol y nunca avance sobre ella, ya que la respetaba mucho como amiga.
Luciana me abrio y me hizo pasare. Ella vivia con sus tios, ya que su familia se habia mudado al interior de la provincia y ella se habia quedado en la ciudad ya que queria seguir estudiando aca y aparte viviendo con sus tios no acarreaba gastos a sus padres. Al entrar pude observar que ya habian comido, bien para mi, ya que no queria molestar. Nos servimos unos jugos y comenzamos a charlar de vanalidades y cosas por el estilo, hasta que ella saco el tema de que se hiba a pasar las vacaciones a la casa de sus padres. Estabamos hablando de eso hasta que me pregunto si me queria ir con ella de vacaciones, yo dude, le dije que no queria caer de regalo a la casa de sus padres y que estos me tengan que aguantar a la fuerza. Pero ella me dijo que ya habian quedado con sus padres y que estos estarian encantados de tenerme como invitado, ya que hacia mucho que no me veian. Confirme esto con sus tios y le dije que solo me quedaba ir a avisar a casa.
Asi fue que partimos a los tres dias con destino hacia la casa de sus padres. Llegamos a la parada y luego caminamos por caminos de tierra y otros asfaltados hasta llegar a la casa en si. Una vez que hubimos llegado, Luciana fue tremendamente recibida por pardes que hacia mucho que no veian a su hija. Tambien fui excelentemente recibido, ya que me consideraban como un miebro mas de la familia. Estuvimos charlando un buen rato con sus padres de todo un poco, como iba en los estudios, en la vida, hasta que llegaron las hermanas de Luciana, fuente de mis futuros problemas y satisfacciones.
Llegaron, Ana y Lucia. Ana era la ams grande, tenia 16 años y se habia desarrollado tremendamente. Cabe aclarar que yo no las veia desde hacia tres años.Ana tenia una hermosa cabellera rubia que llegaba un poco mas abajo de sus hombros, una cara hermosa que escondia una mirada picara, tenia unas excelentes tetas para su edad, grandecitas y firmes, y unas bellas piernas que se me presentaban ese dia, gracias al pantalocillo de vaquero corto que llevaba, el cual ajustaba sobremanera su paradito culo. Pero la que mas me sorprendio fue Lucia, la cual tenia 12 años y segun mis calculos estaba por cumplir los trece un dia de esos. La ultima vez que la vi era una niña tierna, es mas yo la habia visto crecer, pero el cambio que note en ella fue termendo. Estaba presiosa, tenia una hermosa carita, enmarcada en un oscuro cabello que le llegaba hasta la base del cuello, unos ojos hermosos y tiernos me miraban. Su cuerpito daba señales de que seria una hermosa chica cuando creciera. Sus tetitas estaban asomandose, tenia un bello y formado culito y sus piernas eran super tentadoras.
Salude a las niñas y les hice comentarios sobre que era de su vida, en que andaban. Cabe decir que nunca habia pensado nada raro sobre ellas, ya que siempre las considere unas niñas agradables, asi que para mi el cambio fisico fue abrupto, pero en el fondo seguia sin pensar en nada retorcido de ellas, pero eso me iba a durar poco...
Me instale en la casa y en seguida pude notar que Ana no se me despegaba. Andaba como parasito preguntandome de todo un poco, legaba a fastidiar a Luciana que la corria varias veces, ya que nos molestaba mientras estabamos charlando. Pero sus preguntas se volvian mas atrevidas cada vez que me pescaba solo. Fue creciendo el tono, desde si era virgen hasta que un dia me pregunto si me gustaba que me chuparan la verga. Yo no era ningun idiota, asi que ya sabia para donde apuntaban estas preguntas. Y haciendo uso de toda mi voluntad trataba de contenerme para no terminar cogiendo a la chiquilla esta que se me mostraba cada vez mas provocativa. Luego empezaron los roces. Cada vez que podia ela restregaba alguna parte suyo contra mi, al parecer inocentemente. Sus tetas en mi espalda, su culo en mi bulto o hasta su mano por ahi. Mi calentura iba en aumento, pero trataba de contenerme, sabia hasta donde queria llegar esta chica, pero era la hermana de mi amiga y yo no queria hacer nada por temor a que ella se diera cuenta, y si eso pasaba nunca mas me hablaria ella de nuevo y yo la queria mucho para terminar en eso. Pero Ana fue mas y mas alla. Una vez que estaba en la cocina, despues de no haber dormido nada, debido a que me quede jugando a las cartas toda la noche con el parde de Luciana, esta vino y me dijo si queria salir un rato con ella, yo estaba en la cocina hablando de tonterias con Ana y le dije que no, que me iria a dormir un rato. Ella me dijo que bueno y al salir le dijo a su hermana que no me molestara. Ella le dijo que si, pero en el moemnto que Luciana se fue, dejandonos solos en la cocia, ella se acerco y levanto su falta, colocando su colu en mi paquete.
Yo quede duro como roca en mas de un sentido, sin saber que hacer, pero Ana si sabia lo que queria. Empezo a restregar su culo, con el mas puro descaro, sobre mi paquete, el cual empezo a crecer. Mientras hacia esto lelvo una de sus manos a su entrepierna y metiendola debajo de su calzon empezo a pajearse. Los empujones me llevaron contra la pared y ahi Ana comenzo a darle mas duro y rapido. Ella gemia despacito y yo sentia algo de las caricias de su culo. En ese momento lo unico que deseaba era sacar mi evrga y penetrar a esa muchacha, pero sabia que no estabamos completamente solos. Pero eso a ella no le importaba, seguia pajeandose y restregando su culo. Ahora de una forma mas rapida, apoyando su mano libre contra la pared, la cuald espues de un rato tomo una de mis manos y la apoyo contra una de sus tetas. Yo guiado por mi instinto empece a amasar su teta por encima de su remera y pude notar que no llevaba sosten. Pero mi conciencia pudo mas y saque la mano en el momento en que ella acababa en medio de un lago suspiro. En ese momento quedo apoyada contra mi un rato, luego se separo y se fue, dandome una gran sonrisa como despedida. Yo quede super caliente pero me fui a dormir de todos modos, tratando de no pensar en lo ocurrido y en como evitarlo la proxima vez. Pero nunca me espere lo que vendria....
Mientras habian estado pasando los dias note que a Lucia le encantaba hacer origami, es decir, figuras de papel. Y a mi siempre me gusto ese tipo de cosas, asi que yo la ayudaba con sus cosas. Pasabamos buenos tiempos haciendo origamis y hablando de tonteras, cabe decir que esta niña me atraia bastante, ayq eu era hermosa, pero lo que mas me gustaba de ella en el fondo era su noble inocencia. Pero simpre me contuve con ella y no me era tan dificil como con Ana, asi que nunca pasaba nada raro entre los dos.
Uno de esos dias en que haciamos origami, Luciana y sus padres se fueron de compras, Ana no estaba por ningun lado, asi que nos quedamos Lucia y yo solos. Estabamos en la sala, en una mesa que tenia un mantel demasiado largo para mi gusto, pero no importaba y comenzamos a hacer nuestros origamis. No pasaron ni cinco minutos cuando senti que algo acariciaba mi paquete. Mire a Lucia y ella estaba concentrada haciendo una figura medio complicada, ella no podia ser. En seguida se vino a mi mente el causante de eso, Ana. La mano acariciaba mi paquete por encima del pantalon, hasta que llego un moemto que desabrocho mi pantalon y saco afuera mi aparato, el cual estaba a media asta debido a las caricias que habia recibido. En ese momento pude notar como esa mano se apoderaba de mi pene y comenzaba a pajearlo despacio. Mi verga fue respondiendo y fue creciendo en medio de las caricias que le propiciaba esa mano suave y delicada. Una vez que mi herramienta estuvo dura y en su maximo explendor senti como unos labios besaban el glande y despues una lengua lo comenzaba a recorrer, como si estuviera chupando un helado. Mientras tanto yo hacia lo que podia para que Lucia no notara lo que pasaba, tratando de contener lo que me producian las caricias de esa lengua juguetona, la cual comenzo a recorrer a mi pene desde arriba hacia abajo, para terminar acariciando mis huevos. Despues senti como los labios se apoderaban de mis huevos y una tierna boquita empezaba a chuparme los huevos, mientras la mano seguia acaricando mi verga despacio y suave.
La lengua se dirigio desde los huevos que estaban ensalibados hasta la punta de mi verga, en donde pude notar como la boca se tragaba mi pene. Moviendome hacia tras pude ver que era Ana nomas la que me estaba chupando la verga. En sus ojos se veia picardia y lujuria. Empeo a chupar fuerte, mientras su lengua seguia recorriendo y esalibando mi duro miembro. Ella me chupaba de una forma maravillosa y yo tenia que hacer una gran fuerza para que Lucia no notara el placer que estaba sintiendo en ese momento. Por un rato se me ocurrio apartarle la cabeza a Ana, pero rapidamente descarte la idea, ya estaba, ella me la estaba chupando y lo unico que lograria era armar un escandalo y que Lucia se enterara y ahi si seria mi fin.
La Boca de Ana se concentro en mi glande, chupando golosamente, mientras que sus manos me pajeaban y acariciaban mis huevos que estaban a punto de estallar. En eso Lucia me pidio ayuda con algo de la figura que hacia y para no para lo que Ana me estaba haciando me levante un poco y estire mis manos hacia la niña para ayudarla. En ese momento volvi mi atencion de nuevo a Lucia, pero no la vi como antes. En estas alturas, a causa de la mamada maravillosa que Ana me estaba dando, la vi como a una hembra. Vi su hermosura, en su rostro, en su piel, sus brazos bellos y deluicados y tenia que hacer esfuerzos tremendos para no saltar sobre ella y poseerla ahi nomas. Me dedique a explicarle como pude lo que me pregunto, en ese momento volvi a sentir como la boca de Ana dejaba de chupar mi glande y volvia a recorrer a mi pene con su boca desde su punta a su base. En eso estaba por venirme y sin pensarlo estire una de mis manos hasta uno de los brazos de Lucia y empece a acariciarlo, ella me vio sorprendida un rato y luego bajo la cabeza sonriendo, dedicandose a su origami. Yo estaba fuera de mi y los masajes que le propicionaba Ana a mis huevos harian que estos reventaran en una explosion de semen. Mi otra mano fue bajo la mesa y agarro fuertemente la cabeza de Ana, apretandola contra mi verga, la cual empezo a largar sendos chorros de leche en la garganta de la muchacha, la cual se dedicaba a tragar y succionar, en busca de todo el semen que tenian mis huevos. Ella seguia succionando, dandome un gran placer, mientras mi mano recorria la suave y delicada piel de Lucia. Una vez que hubo tragado todo lo que pude darle, Ana se dedico a limpiar mi aparato y yo me tranquilice un rato, soltando a Lucia y sentandome mas tranquilo.
Depues de eso termiamos de hacer la figura complicada, y en el moemnto en que Lucia se iba a buscar algo de beber, y dejandome deleitar con la vista de sus piernas, gracias a su flada, Ana salio de debajo de la mesa y se fue rapido hacia el pasillo que llebava a las habitaciones. Ahi se dio vuelta y me dedico una agran sonrisa, de picardia y triunfo, ya que si antes tenia prejuicio, ya no los habia y no desaprovecharia la oportunidad de cogermela. En el moemnto en que entro Lucia, Ana desaparecio en el pasillo. La pequeña me sirvio jugo, y pude notar que sus manos temblaban y ella estaba medio con verguenza, y una sonrisita extraña en sus labios.... mis problemas y placeres estaban empezando a germinarse....
Continuara...
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Seba