Estrene a mi sobrina

Era una calida tarde de verano, mi prima Sandra y su familia habian decidido salir de vacaciones ese verano, sin embargo, su hija Aimee no habia obtenido buenas notas en el colegio, asi que ella no podria ir, sin embargo, ¿con quien podrian dejar a la pequeña?, luego de mucho pensarlo, mi prima Sandra lo decidio, recientemente yo me habia mudado a la ciudad por mis estudios y mis padres habian decidido que para no incomodar a mis parientes en esa ciudad, alquilarme una casa en la zona residencial.

Ese dia, tocaron a mi puerta, yo como siempre abri y vi con sorpresa que Sandra estaba en la entrada de la puerta junto a su pequeña hija mayor Aimee, de doce años. Aimee era una niña blanquina de pelo castaño claro, algo flacucha, pero esos pequeñas protuberancias que le comenzaban a salir del pecho la hacian ver muy sexi, ademas teniendo en cuenta que su culito comenzaba a ponerse muy redondito y paradito.

-Buenas tardes Alan- me saludo ella- ¿podemos pasar?

Las invite a pasar, ya en mi salita de estar, Sandra prosedio a contarme la triste historia de su vida, de como Aimee habia salido mal en la escuela y que de castigo habian decidido no llevarla con ella de vacaciones. Aimee por su parte no decia nada, permanecia todo el tiempo mirandome fijamente, me pregunte que estaria pensando hasta que Sandra me pregunto que si Aimee podria pasar la semana que habian planeado ir a la playa conmigo, a lo que yo acepte sin chistar. No se por que pero me parecio que Aimee sonrio.

Esa noche, instale a mi sobrina en la habitación que solia usar mi hermana para dormir y me retire yo a mi habitación. Ahi, miles de ideas maquiabelicas sobre la mejor manera en que podria aprovecharme de la situación se cruzaban por mi cabeza, sin embargo, la moral pudo mas y pense que no era bueno abusar de la confianza que me habia tenido mi prima abusando de su hija. Asi que con esto lo unico que logre fue causarme una erección marca diablo y comenzar a extrañar a mi novia Fanni. Fanni era una morenaza de quince años de pelo negro largo con un cuerpo que muchas mujeres mayores envidiarian. Ella ya habia venido a mi casa anteriormente y habia sido yo el encargado de instruirla en el delicado arte del sexo. Tan solo el recordar como la habia desvirgado o como habia logrado hacerla pujar la ultima vez que estuvo en mi casa, basto para hacer que mi erección se hiciera mas dolorosa. Sin embargo, Fanni no podria asistir en mucho tiempo para cumplir sus deberes de femina para su macho. Su familia habia decidido tambien salir estas vacaciones y por culpa de un mal movimiento financiero por parte mio, habia perdido todo el dinero que habia ahorrado para salir de vacaciones, y mi orgullo de hombre me impedia aceptar la amable invitación de ir con ellos haciendose cargo de mis gastos.

Sin embargo, justo en ese momento fue cuando decidi dejar de combalecer de mi mismo y decidi tomar el camino de la tan trillada manuela, busque en mi cajon una pelicula porno que habia adquirido recientemente, me asegure de que Aimee estuviera profundamente dormida y me baje a la sala a verla.

La pelicula se llamaba "Fiesta anal" y relataba las andanzas de una muchacha que iba de fiesta en fiesta donde particularmente se la cogian por el culo. Puse la pelicula desde el principio, y usando toda mi fuerza de voluntad pude ver las tres primeras cojidas sin llegar a vaciarme, sin embargo, al llegar a la quinta follada que le daban a la protagonista, no pude contenerme mas y me vacie todo en mi calzoncillo, en ese momento volvi la cabeza y lo que vi hizo que se me parara, pero el corazón: Al pie de la escalera, se encontraba Aimee mirandome picaramente, en ese momento miles de preguntas pasaron por mi cabeza ¿cuanto habia visto de la pelicula?, ¿que pensaira al respecto?, ¿iria a decir algo? y ¿por que me estaba mirando asi?

Sin decir mas, rio picaramente al tiempo que se tapaba la boca y regreso por las escaleras a su habitación, mientras yo, undido en la mas subita verguenza, apagaba el video y regresaba silenciosamente a mi habitación.

Al dia siguiente, evite todo contacto visual con mi sobrina, las dudas que me habia planteado antes aun seguian rondando por mi cabeza, ese dia, me limite a servirle el desayuno y la comida para posteriormente encerrarme en mi cuarto alegando que tenia trabajo que hacer, sin embargo, en lo poco que vi a mi sobrina, pude notar que ya no tenia la pinta de picarona, sino que se veia nerviosa, como si quisiera decirme algo.

Al llegar lo noche, decidi tomarme un relajante baño para olvidar todas mis preocupaciones de ese dia. Entre al baño, me despoje de mi ropa y entre a la ducha, acomodando la temperatura del agua a como a mi me gustaba.

Pasaron unos minutos y escuche que Aimee entraba al baño "seguramente quiere mear" pense, sin embargo y para mi sorpresa, repentinamente se abrio bruscamente el acrilico del baño. Mire sobresaltado y vi delante de mi a Aimee aparentemente desnuda unicamente cubierta por una toalla rosa.

-¿Me preguntaba- dijo timidamente-si podria bañarme contigo?

Por los nervios, estube apunto de decirle que mejor usara el otro baño, pensando que aun estaba en casa de mis padres, sin embargo, recorde donde estaba y el hecho de que solamente poseia un cuarto de baño, asi que solamente le dije.

-¡Estas loca, yo soy hombre!- pero ella me contesto divertida.

-Anda sera divertido- y sin decir mas entro a la ducha al tiempo que se despojaba de su toalla. Inmediatamente, mis ojos se clavaron en sus pequeños y jubiniles pechitos, los cuales estaban coronados por dos aoreolas claras junto con dos pesoncitos que ya parecian de piedra. Claramente pude ver como sus ojitos se abrian como platos al ver como mi polla se erectaba, ¿como esperaba que no sucediera si apesar de su edad ella tenia un cuerpo que haria que cualquier hombre que se dignara de serlo la deseara?

Aimee se acerco a mi al tiempo que repegaba sus pequeños pechitos en mi torax al tiempo que mi verga se repegaba en su conchita que ya estaba comenzando a poblarse de vello al tiempo que se mojaba, posteriormente, tomo una de mis esponjas y comenzo a llenarla de jabon.

-¿Me tallas el cuerpo?- pregunto al tiempo que me entregaba la esponja y se me ponia de espaldas.

Yo, preso de la lujuria, comenze a tallarle su cuerpesito sin chistar, poniendo especial cuidado en sus pechitos y en sus nalguitas. Posteriormente, comenze a frotarle su ano.

-Oye Alan (asi me dice ella)¿Que se sientira que me metan "eso" por mi anito?- me pregunto. Yo entendi que con la palabra eso se referia a mi verga, la cual ahora estaba rosando su entrepierna, asi que no resistiendo la tentación de hacer un comentario mordaz, le dije.

-No se, nunca me la han metido- ella no se inmuto por mi comentario y me dijo.

-Me gustaria saber lo que se siente- el que ahora abrio los ojos como plato fui yo, ¿me estaria insinuando lo que yo creia?- Alan, quiero que me hagas lo mismo que a la muchacha del video.

Deje de frotarla en seco, me pare y muy seriamente le dije.

-¡Pero de que estas hablando, tu eres una niña, aun eres muy joven para entender eso!

Aparentemente se enojo por mi comentario por que me vio con el ceño fruncido, se salio de la ducha, se volvio a envolver en la toalla y dijo muy molesta.

-Entonces le preguntare a mi papa que se siente y cuando me diga que por que ese interes le dire que me entro la duda cuando te vi viendo una pelicula porno.

La respiración se me fue en ese instante, estaba perdido, si Aimee les decia a sus padres que me habia cachado viendo una porno, mi prima se lo diria a mi madre y mi madre me enviaria de regreso a la casa de mi abuela (donde me ospedaba antes) y eso significaria no mas noches de pasión con Fani. Pero en eso, pense en lo provechoso de mi situación, desde hace cuanto tiempo no habia deseado hecharle la mano a Aimee y ahora que se me estaba ofreciendo voluntariamente la estaba rechazando, seria un estupido si rechazaba la oferta.

Sali del baño aun desnudo y alcanze a Aime en la puerta de su habitación.

-Esta bien- le dije- acepto enseñarte pero debes prometer que no diras nada de lo que pase aqui, ¿ok?

Ella me miro con una gran sonrisa y me dijo.

-Esta bien, lo prometo, nadie se enterara de tu pelicula o de mis "clases"

Y en ese momento, nos encaminamos a mi cuarto.

Aimee entro a mi cuarto, se despojo rapidamente de la toalla y se sento en mi cama esperando instrucciónes.

-Bien, y ahora que hago- dijo.

-Antes de hacertelo te voy a enseñar a mamar- le dije.

-¿Que es eso?- me pregunto divertida.

-Mira, para que mi pene entre facilmente en tu ano, debe estar bien resbalocito, el agua no sirve, asi que debes dejarlo bien lubricado con tu saliba.

-Y como logro eso- me pregunto.

-Mira, primero lo tienes que hacer es agarrar mi pene con tus manitas y luego lo metes a tu boquita como si estuvieras chupando un bolis, pero trata de que tus dientes no lo toquen- le explique.

-Me de algo de asco- dijo mientras miraba la amoratada cabeza de mi miembro.

-No te preocupes, ya veras como te va a gustar- le dije con una sonrisita.

Me acoste en mi cama y vi como Aimee se acercaba a gatas a mi miebro, primero lo vio con algo de asco, luego lo tomo con su suave mano y comenzo a frotarmelo de una manera que me volvia loco, luego, miro la amoratada cabeza y saco su pequeña lengua para darle unas pequeñas lamidas que estuvieron a punto de arrancarme en muchas ocaciones mas de un orgasmo. Finalmente, parecio que se habia acostumbrado a su sabor, pues poco a poco comenzo a introducirce mi falo en su boca. Cabe destacar que, ejem, gracias a las proporciones de mi miebro, solo logro meterse la mitad de mi miembro.

La forma en que Aimee me mamaba la verga era asombrosa, mientras yo la veia podia recordar claramente a todas las actricez porno que habia visto y la forma en que mamaban la verga de su macho en turno. Ocasionalmente me miraba a los ojos, y yo podia ver en ellos la mezcla de placer y la suplica de que ya la fornicara por detras.

Finalmente, y luego de que estuviera a punto de venirme en su boca, le pedi que parara.

-¿Y ahora que sigue?- me pregunto con una amplia sonrisa.

-Quiero que te pongas a gatas sobre la cama- le ordene.

Ella asi lo hizo mientras yo iba mi closet y sacaba un embaze de vaselina, lo mire con cariño y recorde la primera vez que lo use para lubricar el anito de mi querida Fanni, ¡ah!, como disfrute esa lubricada. Posteriormente, mire unos pañuelos negros que tire por ahi, siempre habia querido tener amordazada a Fanni mientras le hacia el culo, pero ella no se habia dejado amordazar, asi que pense que era mi oportunidad para disfrutar con Aimee, tome los dos pañuelos y le dije a Aimee.

-Siempre eh querido hacer algo para hacer esto mas divertido, pero Fanni no me deja, ¿me dejas tu?- olvidando que ella era la que ponia las ordenes, asintio divertida.mirando fijamente los pañuelos, esperando a ver que ocurria.

Me acerque a ella y le vende los ojos con cuidado y asegurandome de que no podia ver nada. Posteriormente, tome sus dos manos y se las hate detras de la espalda y la deje a gatas, obviamente en esta posición su hermoso culo en construccion quedo lo mas alzado posible, permitiendome a mi metersela mejor. Al saber que no podria ver nada, saque mi video camara y la grabe desde todos los angulos posibles, luego la deje sobre mi comoda en un angulo perfecto para que pudiera grabar el momento de la primera penetracion de Aimme.

-¿Y ahora que?- me pregunto notablemente divertida.

-Te voy a lubricar ahora a ti, como no te puedo lamer la cola, pues te voy a lubricar con esta cremita.

Dije y comenze a untarme en el dedo indice la vaselina para posteriormente metersela por el culo.

En cuanto mi dedo entro en su orificio anal, pude sentir como se contraia.

-¡No lo aprietes o te va a doler mucho!- le reprendi, ella me hizo caso y pude ver como su ano poco a poco se dilataba, pero, ¡Maldicion!, a comparacion del ano de Fanni, el ano de Aimee estaba exageradamente estrecho, apesar de segun yo Aimee ya lo habia dilatado lo mas que podia. La primera vez que me habia cogido a Fanni, ella grito mucho por el dolor que le causaba la penetracion y no me cabia le menor duda de que Aimee iba a gritar igual o incluso mas que mi novia.

Cuando deje su culo bien lubricadito, su ano, me pase un poco de la vaselina por mi pene, levante un poco mas su cadera y apunte mi arma a su orificio.

-¿Estas lista?- le pregunte algo nervioso.

-¡Si papito!- me contesto exitadisima.

Comenze el calentamiento introduciendo poco a poco solo un poco de la cabeza de mi miembro.A pesar de que apenas estaba comenzando a meter mi cabeza en su agujero anal, Aime ya estaba pujando como si estuviera experimentando un orgasmo.

-¡Ah, ah, AH!- era lo que se podia oir exclamar a Aime.

Sin embargo, durante unos segundo olvide con quien estaba y pensando por unos momentos que estaba fornicandome a mi novia, meti de golpe la cabeza de mi miembro en el ano de Aimee. Solo su desgarrador grito me recordo con quien estaba tratando, asi que me detuve hasta que dejara de jemir y solo jadeara, cuando dejo de gemir, prosegui con la penetracion, pero ella tambien comenzo a gritar nuevamente, no iba ni la mitad de mi verga cuando entre gritos y gemidos me dijo.

-¡Ya no Alan, ya no, AAHH, me duele, ya sacamela!

Yo furioso por que ella ya se habia hechado para atras y yo seguia caliente, no cheque consecuencias y se la meti toda de trancaso.

Lo habia logrado, Aimee grito desgarradoramente para despues soltar en llanto inconsolablemente, sin duda, le habia dolido. Me quede un rato montado sobre ella, esperando a que se le pasara el dolor y se la saque, para volversela a ensartar otra vez, y luego otra y otra, mientras ella continuaba gimiendo de dolor. Pero unas veinte metisaque despues, sus gemidos ya no eran de dolor, sino mas bien pujaba como la puta en la que la habia convertido, ah, el placer que me probocaba esa cojida era tremenda, y que decir de Aimee, pues incluso podia ver un hilo de baba surcando su menton. Cada pujido que ella daba me exitaba aun mas y incitaba a envestirla aun mas fuerte.

Finalmente, no puede contenerme mas, sentia el orgasmo cerca, asi que la tome de la cintura y meti mi verga lo mas profundamente que pude y ahi, vacie toda mi leche, sinceramente, fue el orgasmo mas profundo y delicioso que eh tenido hasta ahora. Al mismo tiempo, Aimme tuvo su primer orgasmo, pues jadeo como Fanni solia hacerlo y comenze a sentir algo biscoso escurriendo entre sus piernas y embarrando las mias al tiempo que tenia las contracciones tipicas de un orgasmo femenino al tiempo que gritaba.

-¡Yo te amo Alan, desde siempre a sido asi y quiero que me hagas tu mujer!

Yo cansado y habatido, saque mi verga de su ano, sono como si hubiera destapado una botella de champaña, al tiempo que mi leche comenzaba a escapar de las profundidades de su ano, que ahora parecia un tunel de ferrocarril.

Me desplome a su lado y la coloque de costado, para posteriormente besarla tiernamente en los labios. Cuando recupero la respiración, decidi destarla, no sin antes esconder y apagar la camara, no queria que el momento se hechara a perder por culpa de eso. Cuando la desate, me miro con una tierna sonrisa para posteriormente lanzarse a buscar nuevamente mis labios con los suyos, para que posteriormente yo prosediera a limpiar el producto de nuestro mutuo orgasmo, primero limpie los mecos que seguian escurriendo de su culo al tiempo que revisaba que no hubiera habido desgarre, para posteriormente, limpiar sus mecos.

-Alan- me dijo mientras limpiaba sus ingles- te queria preguntar, ya casi para acabar, senti en mi vagina una especie de explocion y luego como que me mojaba por dentro, ¿eso que fue?

La mire con una gran sonrisa, feliz de que mi amante de ocacion siguiera siendo inocente, coloque mi mano en su liza cabellera castaña y con una sonrisa le dije.

-Eso se llama orgasmo, y es la mayor satisfaccion en el acto sexual- para posteriormente volver a besarla.

La invite a quedarse a dormir en mi cama, nos cobijamos y apagamos la luz, pronto ella se quedo dormida, mientras yo seguia mirando lo hermosa que era y la manoseaba cuanto queria.

Epilogo

Al dia siguiente, Aimee desperto con los dolores tipicos de la ruptura de culo, sin embargo, se le pasaron en unas horas.

Todo el dia estuvo inquieta, pues queria otra "leccion" esa noche y yo estaba perfectamente dispuesto a darsela, esta ves sin las mordasas.

Toda las noches de la semana siguiente ella y yo estuvimos cogiendo, pues era muy divertido. Finalmente, la ultima noche que pasaria conmigo, accedi a tomar una pastilla que me habia pasado un friend que para alargar la ereccion.

Esa noche Aimee no tuvo para cuando acabar, estuvimos cogiendo por horas y cuando acabamos me confeso que habia logrado seis orgamos y antes de quedarnos dormidos, me juro que no iba a dejar que nadie mas la cogiera por el culo, pues su ano era solo mio.