Me calenté con un profesor del jardín…y este me desvirgó mi ano

Era una noche insoportable de primavera y no dejaba de recordar lo que había pasado esa tarde en el jardín con Matías, el joven profesor de Educación Física de la escuelita en la que soy directora. No podía creer que aquella tarde, lo hubiese visto como un macho y no como el profesor que conocía desde hace 7 meses…..me asombro darme cuenta el magnetismo que había ejercido en mí la charla que habíamos tenido luego de finalizar su horario de actividades…donde pude….por esas cosas que tiene la vida … pensar lo diferente que era él en relación a mi esposo no solo físicamente, sino mentalmente.

En estos meses recordaba habíamos hablado de diversos temas sobre lectura, proyectos escolares y deportivos, nuestra manía por el cine e incluso había insinuado cierta invitación para ver una película "la piscina"…creo que es un thriller erótico,,,,,yo por supuesto me hice un poco la tonta como que no lo había escuchado. Comprenderán que siendo una mujer casada, de 40 años, pero muy bien conservada….ah!! y siéndole fiel a mi marido desde los 19 años y además la Directora de Matías, creo haber tomado la postura correcta.

Me encontraba en todas estas divagaciones acostada en mi cama, vistiendo solo una bombachita verde agua y un corpiño calado haciendo juego, mientras al lado dormía mi esposo, él giró en la cama en ese momento y yo sentí un estremecimiento y volví a la realidad…sintiendo por primera vez mis bragas mojadas por el recuerdo de otro hombre.

Al día siguiente me encontraba yo trabajando en mi oficina con mi mente en otro lado cuando sonó el teléfono, era Matías; me puse algo nerviosa, ya que los pensamientos de la noche anterior vinieron a mi mente, pero él me habló acerca del trabajo que estábamos realizando y me hizo algunas preguntas sobre el tema ya que estaba decidido a sobresalir en sus actividades. Cuando corté con él me di cuenta que nuevamente estaba algo excitada, me llevé la mano derecha entre las piernas y pude comprobar que había mojado levemente mis bragas nuevamente y pensé si este no había percibido algo raro en mi voz.

Por la tarde, al volverlo a ver en su uniforme azul de gimnasia que levemente le marcaba su bulto y una remera musculosa blanca que me permitía ver su bien formado cuerpo, una oleada de sensaciones eróticas recorrieron mi cuerpo. Nos sentamos en la oficina a revisar los informes de la salita de cuatro, mientras el me iba mostrando uno por uno mis pensamientos estaban en otro lado………me llevé mi mano izquierda a las mejillas y estas ardían como si yo tuviese fiebre……creo que tuve que comenzar a ordenar mis pensamientos ya que me estaba comportando como una adolescente enamorada, con la diferencia que en ese momento era la señora y "caliente" directora.

De alguna extraña manera estaba caliente de el, lo suficiente como para estar en ese estado de imbecilidad transitorio que tienen los enamorados y desear encontrarme a solas con él.

Luego de unos días, mi esposo me dice que por problemas laborales en la empresa, debía ausentarse de la ciudad por una semana, ya que debía inspeccionar una planta en la ciudad de Mar del Plata. Así llegamos al día viernes, mi marido había partido la noche anterior…….cuando siento que alguien golpea en mi oficina, para mi sorpresa era Matías que traía parte de los informes, nos saludamos con un beso en la mejilla y me solicito si le podía revisar los mismos para su corrección…al observar un par de ellos le hice pequeños comentarios y le pedí que me perdonase ya que tenía una importante reunión de padres……luego de intercambiar opiniones, quedamos, en forma inocente que el pasaría por casa a recogerlos a eso de las 2000 horas.

Esa tarde, un par de horas antes de que Matías viniese por sus informes..mis dos hijos un varón de 20 años y una mujer de 19 años, me dijeron que esa noche no vendrían a dormir, ya que tenían programas arreglados de antemano con sus amigos ……..cuando oí que a mis espaldas se cerraba la puerta comencé a pensar seriamente en la situación…….con mi marido a ciento de kilómetros de distancia, mis hijos por ahí con sus amigos …y yo a solas con Matías……………………..

Sin querer me encontré tomando un baño de inmersión y mientras me relajaba…pensaba en Matías, la forma extraña en la cuál me había calentado con él, que bien podría haber sido mi hijo; al salir de la ducha y luego de secarme me dirigí al cajón de mi ropa interior y por no se que fuerza extraña me acordé como lo calienta a mi marido la ropa interior fina y con encajes y más si una usa portaligas…, me puse un conjunto negro con una tanga chiquita y con unas medias negras, luego seleccione una camisa blanca semitransparente que contrastaba con mi brassier negro y una pollera negra que me quedaba a unos seis dedos de mi rodilla… al terminar de cambiarme me miré al espejo y me sentí bien, aunque un poco nerviosa ante la situación que se iba a plantear en menos de una hora.

Cuando el timbre sonó yo ya estaba lista, fui lentamente a la puerta y cuando la abrí ahí estaba Matías frente a mí, con su uniforme de trabajo y su portafolio de cuero…….noté su cara de sorpresa que me halagó y me dijo "Disculpame Alejandra no te reconocí estas preciosa….." , sentía como caminaba detrás de mí y creí percibir que dirigía su vista sobre mi trasero…que debo confesar lo bamboleaba más que de costumbre.

Ya sentados, uno al lado del otro en la mesa del living…intercambiando opiniones sobre nuestros alumnos….nuestras manos comenzaron a entrecruzarse en el intercambio de papeles más de los acostumbrado al menos eso era lo que me parecía…….lo mismo que su vista quizás subyugado por mis pechos talla 95 y el contraste entre el corpiño y la blusa.

A la hora nos habíamos tomado entre los dos un par de cervezas…..cuando de improviso se cortó la luz……yo estiré mis manos en forma inocente y tomé las suyas alarmada ante el corte, debo confesar que me da algo de temor la oscuridad……el las cobijo con total naturalidad…..el tiempo me pareció interminable aunque deben haber sido un par de segundos. Luego me incorporé y le dije que iba a la pieza por unas velas……ni bien inicie la marcha sentí un par de manos firmes que me tomaban de la cintura……"te acompaño por si tenés miedo…….." me pareció escuchar. Cuando llegamos a la pieza, quizás porque percibió mi temblor, me besó en los labios…….

Luego nos arrojamos en la cama, sentí la presión de su pene sobre mi ropa pero no nos apresuramos a quitárnosla pues queríamos asimilar lo que estaba pasando y tanto él como yo sabíamos que tendríamos toda la noche por delante para que nuestros cuerpos se conocieran mejor.

Me desabrochó la camisa mientras iba besando cada parte que quedaba al descubierto haciendo circulitos con su lengua y arrojando su aliento cálido. Yo mientras tanto lo abracé con mis piernas subiéndolas y bajándolas acariciándolo con mis rodillas. Cuando metió su mano entre mis piernas y rozó mis panties creí desfallecer…..en pocos minutos un hombre al cuál doblaba casi en edad, iba por segunda vez en mi vida a descubrir mis tesoros ocultos y esto me excitó sobre manera. Se dirigió luego a los labios de mi vagina y los acarició suavemente con su lengua, le dije que parara pues sentí algo de pena pero me dijo que le gustaba realmente saborear mi chochito por primera vez.

Siguió succionando con sus labios los labios de mi vagina y más tarde se concentró en mi clítoris, no era muy común que yo tuviera un orgasmo con sexo oral pero esta nueva situación me había puesto a mil, me fue calentando más y más con el suave movimiento de su habilidosa lengua, lo que me llevó a explotar en forma memorable. Mi espalda se arqueo y pequeñas gotas de sudor bajaron por ella. Mis mejillas se ruborizaron y suaves gemidos que no pude contener inundaron toda la habitación. Yo seguía a un lado de la cama con las piernas colgando así que me deslizó de manera que mi vagina quedara convenientemente en el borde de la cama se arrodilló ante mí y me penetró.

Aún estábamos semi-vestidos y el roce de nuestras ropas hacía aún más excitante el momento. Las paredes de mi vagina aun se estaban contrayendo por el anterior orgasmo y apretaban su pene mientras se movía dentro de mi frenéticamente empujándome contra la cama.

Se asió de mis caderas y empujó su pene rítmicamente hacia delante, atrás y en circulo, alternando los momentos en los cuales se movía rápidamente, con pasión, con otros en los cuales se movía despacio y sensualmente. Me frotaba con su pene una y otra vez haciéndome sentir cosas increíbles mientras le pedía que me inundase de una buena vez.

Me hizo poner en cuatro, y apoyarme en unas almohadas, colocando unas especialmente bajo mi estómago para levantar mi trasero, luego comenzó a lamer mi orificio anal con maestría…parecía que quería introducir toda su lengua en mi culito virgen….. note que sus dedos jugaban habidamente con mi vagina y un rato después mojo con mis fluidos vaginales mi ano y empezó a penetrarme con ellos por ahí; yo gritaba como loca, pues era mi primera vez por ese pequeño orificio y me dolía, mi marido siempre había tenido esa obsesión, pero yo me negaba sistemáticamente…..si me viese ahora.

Empezó entonces a empujar mas fuerte mientras yo seguía dando pequeños gemidos.

Al rato sentí que su semen me inundaba mi canal trasero…fue una sensación nueva y a la vez excitante……., el quedó tendido al lado mío…..empecé a masturbar su pene nuevamente …y este empezó nuevamente a reaccionar, me monté a él y empecé a cabalgar levantándome hasta casi sacarlo de mí y luego volviendo a bajar para aumentar sus sensaciones, me moví en círculos, acariciando su pene con mi vagina mientras me apoyaba en las rodillas y empezaba a masturbarme sin dejar de moverme.

Esto pareció enloquecerlo….. me decía que siguiera masturbándome así, que le parecía muy sensual verme tan caliente y dándole ese espectáculo tan colosal……. Me dejé caer sobre el para que su pene penetrase en mi más profunda intimidad……..en ese momento sentí mis jugos fluir.

Su pene parecía palpitar ……….. y me inundó con su semen caliente. Me acosté a su lado exhausta, con mis bombachas inundadas de la mezcla de semen y jugos vaginales.

Un rato después echados sobre la cama nos dimos unos piquitos y descansamos un rato uno al lado del otro, acariciándonos un poco. Luego el me dijo que se quería llevar un pequeño trofeo mío y lentamente me fue sacando la bombachita…..la olió y me dijo esto es para recordarte……..

Al salir le dije que me había quitado la única virginidad que me quedaba: la del culo, y que lo había pasado bien. Me sonrió con picardía juvenil y yo sonreí nerviosamente mientras bajaba la mirada, pensando lo que sería el lunes cuando nos volviésemos a ver en el establecimiento educacional.