Todo comenzó hace apenas unos meses. Desde que comencé a escribir, en todorelatos, he juntado ya una buena cantidad de contactos. Normalmente solía conectarme casi diario, con la esperanza de conocer las inquietudes de quienes leen mis experiencias y que también desearan en algún momento compartirme las suyas.

Casi siempre, estaba bastante ocupada para atender a una chica que incesantemente me llamaba cada vez que estaba en línea... su nombre: Brissa, como la brisa del viento, como la brisa del mar, que recorre tan suavemente tu cuerpo y tus sentidos.

En una ocasión, sentí que le debía ya bastante atención: decidi solo charlar con ella y regalarle una tarde, una buena tarde de platica entre amigas. Al terminar nuestra platica me mando una imagen por la web cam y entonces la conocí: es bajita, ojos cafes, cabello obscuro, de un largo sexy, y tenia una mirada muy picara que me hacia ver que podiamos llegar a ser mas que amigas.

El tiempo pasaba y día con día esperaba su llegada: el verla conectada era mi felicidad, pues sabia todo lo que habria de contarme esa tarde, ese día tan unico y especial, porque cada día era asi a su lado.

Siempre le confesé todos mis secretos y vaya que tengo muchos... ella hacia lo mismo. Me contaba a detalle de sus encuentros íntimos con su esposo, con una chava con la que vivo años antes de casarse y de su nuevo affair, que de un tiempo para acá se ha comenzado a tornar romance. De vez en cuando llamaba a mi casa y fascinaba tanto escuchar su voz... pero ayer no fue la excepción.

Nos encontramos, alrededor de las 6pm y ya tenia tantas ganas de verla, pues me había quedado sin PC por casi dos días ( que suplicio! ). Tan solo verla ahí presente, me removió... me hizo saltar casi de mi silla. Comenzamos a charlar, casi inmediatamente y a platicar de las travesuras que hacemos. Sin pensarlo le confesé algo, textualmente le dije: "Muero por conocerte" y empezamos a fantasear tanto...

Me dijo que una de sus fantasías era estar con un chavo meciéndosela bien rico y una chava haciéndole un oral... imagínate, tan solo de escucharlo comencé a mojar mis pantis, a tocarme los pechos, a imaginarme todo cuanto leía, porque era sumamente sensual leerla, me dijo también que una de sus fantasías era lamerle en ano a una chava... con eso me puso a mil por hora y a cada frase que ella escribía yo me tocaba tan suavemente, dándome vueltesitas con el dedo en mi clítoris, haciendo fricción y lamía uno de mis pezones... de tanto en tanto le contestaba, pero constantemente le repetía lo caliente que estaba y ella me decía lo mismo... hasta que revente y no pide mas, me vine, de una manera muy dulce, muy especial. No se si eso sea el cybersexo, pero en realidad de me fascino y con esas referencias que me dio ella no me importaría viajar lejos para conocerla!!!

Como a los 5 minutos que termine, llega mi esposo. No me descubrió de primera vista porque la puerta estaba cerrada y ya me había limpiado los dedos, pero cuando se acerco a mi inmediatamente sintió mi aroma, mi esencia... se metió mis dedos en su boca para probarme, pero con eso despertó sus instintos y yo claro que tenia ganas de mas... Tan rápido como pudo me quito toda la ropa y yo a el, no metimos s bañar el a mí y yo a el... limpiando con suavidad cada parte de nuestro cuerpo. Rápidamente no fuimos a la cama, comencé haciéndole un oral pero tuvimos una idea mejor... le propuse un 69, cosa que me fascina, es delicioso sentir una lengua al mismo tiempo que mueves la tuya. Me lamía al tiempo que metía un dedito por la vagina y otro por atrás, esa sensación si es deliciosa. Después le pedí que se detuviera. Lo puse de rodillas en la cama y me metí entre sus piernas, quise sentir su bombeo en mi boca, casi me ahogaba, pero sabia que el lo estaba gozando bastante...cuando estaba por venirse lo saque de mi boca y le pedí que se viniera en mi cara... eso lo prendió mas y continué lamiéndosela hasta que se dio gusto, hasta que cayo toda su leche en mi rostro, todo ese liquido que hervía en mi cara.

Nos reímos mucho al terminar... realmente estaba demasiado caliente yo, como pocas veces... y esto se los debo a Brissa y a mi esposo.

Una ultima cosa: Brissa no me quiero quedar sin ganas de conocerte... (si voy, yo les platico, va?)