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Leticia. Ahora... eres el principio...

en Sexo con maduros

(sex/maduro)

LETICIA

Un encuentro en la ruta
Por Priapo

Mi nombre es Juan Pedro, tengo 40 años, vivo en un pequeño pero muy agradable pueblo de Uruguay, a unos 70 km de la capital (al que llamaré Costa Brava) y por mi trabajo debo viajar con frecuencia hacia allí. Hace un par de meses iba hacia Montevideo, lloviznaba,  y a mitad de camino vi que una chica me hacia auto-stot, me detuve, subió a mi camioneta y pude ver que era delgada, de mediana altura, pelo largo, de rostro bonito y unos 16 o 17 años (luego sabría que su edad era otra). La conversación se inición con los lugares comunes... se llamaba Leticia, quería llegar a Montevideo para verse con una miga, etc, etc. Ya dentro de la ciudad le dije que sólo iba a comprar unos cables y tintas para mi Pc y que visitaría a un amigo que vivía frente sl shopping donde estacionaría; me dijo que ese lugar "le quedaba bien" y llegadoa allí, nos saludamos con un beso y cada cual por su lado.-

Ya efectuadas mis compras y visita, volví al estacionamiento y para mi sorpresa allí estaba Leticia, sentada en un murete al lado de mi camioneta. Sonrió al verme y preguntó si ya me volvía, dije que si, abrí la puerta y emprendimos viaje de regreso en amable charla a través de la que me enteré que vivía en una zona poco habitada a unos 9 km de donde vivía Yo. Muy cerca de Costa Brava y ya con hambre, le pregunté si quería comer algo, asintió y tomé un muy corto desvío para entrar al pueblo. Al tomar la Avenida costera comenzó a reir y señalándome una pareja de perros muy entretenidos en fornicar me dijo: "el macho, parece el novio de mi madre!!", lo que me causó una mezcla de gracia y asombro que me hizo preguntarle el porqué de esa comparación... "Siempre se la monta por atrás", me dijo.-

- ¿Y tu los ves, Leticia?
- Si... Los fines de semana van a una "bailanta cercana" y cuando vuelven, medio borrachitos, ni se preocupan de cerrar la puerta del unico dormitorio y Yo termino en la sala mirando esa "película" hasta que se duermen. Otras veces el trae vino y es cuando Yo me voy, como hoy, porque si mi madre se pasa de copas, se duerme y él me mira feo...
- ¿Alguna vez te tocó?
- No... y ganas le sobran. Y no lo dejaría jamás... es mugroso.

No había movido la camioneta, los perros seguían en la suya y...

- Mirá, mirá!!! Ya terminaron!!!
- ¿Quiénes?
- Los perros!! Pero ahora quedaron enganchados y cuando se la saque, a la perrita le va a quedar el culo como una olla... Jaaa!!
- Pues si... pero debe haber disfrutado lo suyo -respondí-

Puse en marcha la camioneta y nos fuimos a un bolichito a comer empanadas. Comimos ambos con avidez y cuando volvíamos al vehículo cayó un golpe de agua que nos empapó. Chorreando agua y con bronca, nos metimos a la camioneta y le pregunté...

- ¿Quieres hacer una parada en mi casa a secarte un poco?
- Si, gracias. Y vamos rápido que estoy muerta de frío, se mojó mi camperita y abajo apenas tengo un sueter fino.

Entré a mi cochera (bajo techo, afortunadamente) y de allí a mi casa. Mi sala de estar sólo tiene un sillon grande y lo demás son equipos de audio, video y computación...

- Pahhh!!! Que bueno está esto
- Si... pero primero, a cambiarnos de ropa.

Se quitó su campera, que puse a secar frente a la estufa (que había dejado encendida) y pude ver que si bien era delgada y menudita, tenía una preciosa cola y un par de pechitos cuyos pezones parecían agujas de tan duros de frío que estaban. Le indiqué el baño y que se diera una ducha caliente, busqué un sueter deportivo y abrigado y se lo dejé colgado en la puerta; me puse un pantalón deportivo, otro sueter, y me fui a la cocina donde me serví un generoso vodka con naranja. Minutos más tarde apareció Leticia... mi sueter le quedaba como un vestido "mini" y dejaba ver un precioso par de piernas, realzaba su cola ni que decir de sus pechos, que pese al baño caliente, seguían con sus pezones paraditos.-

- Estás linda!!
- Gracias... ¿En verdad te parezco linda?
- Claro que si... sos realmente preciosa.
- Vos también y... Jaaa... con esos pantalones deportivos "se te nota el bulto".
- ¿El que?
- Eso... la pija.
- Y bueno... si, que le voy a hacer.
- ¿Te la puedo tocar a ver si está dura?
- Está dura, si.
- Pero... ¿me dejás tocarla?

Y sin dejarme responder, pasó su mano por encima... lentamente, una vez, dos y a la tercera, la agarró...

- Si, está durita.
- Y ahora más... Dejá esa caricia o me vas a hacer reventar!
- ¿No te gusta? Así le hace mi madre al novio!!
- Pero vos no sos mi novia!
- Pero me gustaría!
- Bueno, ya basta
- Está bien. ¿Me convidás con eso?
- Es una bebida muy fuerte para vos.
- Quiero probarla, ¿Si?
- Bueno, pero sólo un poquitito.
- Es rica!!! Mucho más que el vino!!
- ¿Tomás vino?
- A veces, pero nunca me emborraché del todo.
- Bueno sería!!!

Encendí la Pc y fui por una segunda copa. Al volver, Leticia -que por lo visto, sabía manejar una Pc- estaba mirando una web XXX con un video donde una chica trataba de hacerse montar por un perro policía...

- Mirá... ¿No te hace acordar a los perritos de hace un rato"?
- Si Leticia, pero esas "pelis" son trucadas... Ya vas a ver que "no pasa nada", y todo queda en un "fregado".

Mi segundo trago, en un descuido, terminó en Leticia y con un rezongo mío, pues estaba realmente "fuerte". Me fui a preparar un tercero y en la cocina, aproveché para "acomodarme" la pija tratando de que no se me notara que estaba dura como piedra. Al regresar, el "lindo perrito" tenía "clavada" a la chica y el primer plano lo mostraba con absoluta claridad... No había duda alguna que la chica la tenía adentro, bien adentro, y por si fuera poco, chorretes de canino sémen escapaban de la vagina de la chica. Entre el vaso de vodka que "se apuró" y el video, la cara de Leticia estaba colorada; y de la mía, no la ví, pero me la sentía hirviendo.-

- ¿Así que un "fregado? Pagás "prenda" por mentiroso... dame ese vaso que tengo sed...
- Aflojale (pero no le quité el vaso)... Está bien... si, se la metió.
- Si, y mirá lo que viene ahora: por la cola!!!

Leticia estaba "prendida" a la pantalla y describía las escenas como si fuera un partido de fútbol. Ella sentada en mi sillón y Yo detrás, parado y con una erección que me llegaba a la garganta... Y el perrito (muy aguantador), otra vez derrochando sémen!!
"Leti" (vamos a abreviar), seguía con los ojos fijos en la pantalla, una mano en el mouse, y la otra... bajo la mesa de trabajo. El suéter estaba "algo estirado", señal que algo "lo jalaba". Y como no era Yo, la conclusión fue que era "Leti" que se estaba "acariciando"; con lo que si esta a mil, pasé a 10 mil. Y para comprobarlo, le ofrecí mi vaso... pero por el lado de la manito "ocupada", sólo para ver si "había alguna humedad" en mi suéter... y si, la había (ni que decir de mi ropa interior a esta altura!!). Tomé una silla y me senté a su lado...

- Está bien Leti, tenías razón... el perrito se la clavó toda.
- Si... pero sigue, mirá como la lambetea... y ahora viene otra amiga... agarra al perro y lo masturba... Pahhh... que bueno!!!
- Leti... aflojale con esto!!
- ¿Estás mojado?
- Che... ¿qué pregunta es esa?
- Si... estás mojado. Mirate los pantalones.... Jaaaa... Estás mojado!!!
- Bueno, si. ¿Qué tiene de malo con tanta cosa? ¿Y vos?
- También... Sabés??? Me encanta acariciarme.

Bueno, un video "calientísimo", 2 vodkas "mios" y "uno y medio" de Leti... es mala mezcla....

- ¿Dónde?
- Acá.... en mi conchita...
- Yo te dejé tocarme... ¿vos... me dejás?
- Si... dame la mano y te digo donde.

Sentados uno al lado del otro, viendo un video de una chica y un perro con más energías que Supermán, Leti tomó mi mano y la colocó en su entrepierna... Comencé a acariciarla y ella a suspirar; ambos brazos se aferraban a mi sillón, su mano izquierda me "dirigía" mientras su derecha se aferraba a mi entrepierna... era evidente que estaba disfrutando su "fregado" y continué el "trabajo" para hacerla disfrutar.
- Juanpe, Juanpe.... me sale, me sale.....!!!
- Dale, mojate, empapame...
- Si Juanpe, pero meteme la mano por adentro, dale...

Y en ese momento, toqué mi "piedra de perdición"... Deliciosa, suave y con un aroma absolutamente desconocido... mi mano se llenó de amorosa humedad.

- Ay, ay... gracias Juanpe... estaba a mil. ¿Y vos?
- Leti... agradecé que "se lo que hago", porque si no, ni te imaginás!!!
- Juanpe... la seguis teniendo dura...
- Y si, claro... ¿qué querés? Me veo un perro cogiendo como un señor, te hago una bruta paja.... ¡y me voy a poner todo en el freezer?
- ¿Te gusto?
- ¿Qué pregunta es esa? Claro que si...
- ¿Me "tocaste"?
- Bueno, creo que te acaricié bien, ¿verdad?
- Si, me empapé... y me gustó. Y sabés que más???
- No, Leti, decime...
- No... si no sos mi novio, no!!!
- ¿De veras querés que sea tu novio? Soy bastante más grande que vos!!!
- Si... quiero que lo seas.
- Bueno, entonces, si, lo seré. Y me encanta la idea de tener una "novia" tan linda y preciosa como vos.
- ¿En serio?
- Si... Sos preciosa y me encanta que estés conmigo, me gustan tus inquietudes y preguntas; y también, hacerte feliz con mis caricias.-
- Juanpe...
- ¿Qué?
- Quiero tocarte... allí!!!

El "efecto vodka" o "el efecto video", no se... Lo que sí se, es que ni bien dijo "allí", cruzó el brazo, acarició mi pecho y metió la manita dentro de mi pantalón. Me agarró la verga y comenzó un "sube y baja" combinado con caricias "en la punta"... que me hizo empapar mano y calzoncillos...

- ¿Te gustó?
- Me encantó!!!
- A mi... también, me encanta tu "lechita". ¿Me dejás tomármela?
- Leti... ¿De donde la vas a sacar? Ya está... y todo está entre calzoncillos y pantalón!!!
- Dejame... Pahhh, que caidita está... le voy a dar un besito... Y mirá, es mágico... me quiere!! ¿Me dejás seguir?
- Leti... ¿sabés hacer eso?
- Si... vi a mi mamá y al novio. Y Yo... soy más suavecita.

Y si lo fue... lamió todo lo que encontró, mientras Yo acariciaba nalgas, cola y la cuevita... En eso estuvimos como una hora, hasta que con ropas muy "atravesadas", decidimos que era hora de "irse a dormir".

- ¿Te gustó?
- Ahh... claro que si.
- ¿Dormimos juntitos?
- Si... pero... dormimos, ¿verdad?
- Si, claro!

Y nos fuimos, ambos muy satisfechos y algo borrachitos, a la cama y sin preocuparnos de nada más.

- Juanpe... te gusto?
- Si, claro que si Leti.
- ¿En serio?
- Si.
- Dame un besito.
- ¿De buenas noches?
- Si... o mejor... más abajo del ombligo... Jaaa!!!
- ¿Querés más?
- ¿De Vos...? Claro que si
- ¿Qué más querés?
- ¿Me la ponés?
- ¿Qué cosa?
- Si me la metés.
- ¿El que?
- La pija.

Obviamente medio borrachito y ella lo idem... ambos en una misma cama, comenzamos de vuelta...

- ¿Qué es lo que querés?
- ¿Te acordás de los perritos y el video?
- Si, claro!!
- Mmmm, la tenés durita... a ver... si... dale ahora... metémela!!!
- Leti... por favor... me estás cogiendo!!!
- No hables... empujá... Dale que me entra!!!
- Leti... me estás cogiendo, y ya tengo la mitad adentro...
- Dale más. Dale más... me encanta...
- A mi también, te voy a llenar de lechita!!
- Dame, dame... como los perritos...
- Leti, me encanta... si, apretame la pija con tu cola y sacame hasta la última gota...

Y si... terminamos agotados; pero "Leti" pasó a ser parte de mi vida. Y lo que no sabía al inicio, ahora lo sé... tiene 14.-
En la próxima... veremos. Mi historia con "Leti" es reciente y la construímos "día a día".-