La vi, por primera vez, el día de nuestra llegada, ella estaba en el hotel,  en aquel momento imagine que, con sus padres. Cruzas una mirada y ya sabes que va a pasar algo.  Con el tiempo, y tras varias experiencias, he llegado al convencimiento de  que las jovencitas esconden en su mirada, mitad inocente y mitad descaro, una picardía que a mí, particularmente, me excita.

 Unas miran de forma inocente pero con descaro y otras descaramente pero sin la maldad que tendrán cuando cumplan 4 o 5 años mas  y  creo que, en ambos casos, buscan un contacto que les excite, que un hombre las mire, pero tienen miedo a un contacto directo, así evitan el peligro de una experiencia desagradable, o para la que todavía no están preparadas.   En cualquier caso, siempre que he notado esa mirada (y después) he  podido llegar al contacto directo, jamás me han rechazado, es más, a veces, me he sentido provocado y por pudor, he escapado del contacto.

He tenido contactos sexuales anónimos, en un autobus, en una cola multitudinaria, en un cine, en cualquier lugar en el que me halla encontrado cómodo, y siempre ha sido con jovencitas. Quiza por eso cuando siento una de esas miradas me salta algo en la cabeza y el   deseo  me hace seguir adelante, a  veces hasta el punto de olvidarme que también pueden estar presentes su madre o hermana mayor, mujeres  más maduras y quizas mas dispuestas  para un encuentro placentero y fugaz.

Recuerdo un viaje a  Punta Cana,  en el vuelo de vuelta, un vuelo nocturno, no pude conseguir plazas para toda la familia en primera, así que me tocó compartir la clase turista con dos mujeres, bueno una madre y una hija, ambas de muy buen ver. Ambas muy parecidas, cada una en su tramo de edad, desprendían un halo sensual y desenfadado, después de todo podría pasar un buen vuelo.

Yo ocupaba el asiento de la ventanilla y cuando llevabamos menos de una hora de vuelo, la más joven me pidió que le cediera mi asiento, a lo que accedi gustoso porque así yo quedaba sentado entre las dos y reconozco que, viendo las miradas de la hija y lo apetecible que estaba la madre,  me producia cierto morbo.

 La jovencita,  bastante coquetuela, desde el principio entablo conversacion conmigo, me conto sus vacaciones, que se habia aburrido mucho de tanto sol y sin poder salir por la noche, pues no tenia a sus amigas y su madre no la dejaba salir sola  -"normal pense yo"-

 Me explico que en su ciudad salia con chicos mayores que ella y que los de su edad le aburrian.-"Carne de cañon, pense mientras me lo explicaba"

No se si se lo inventaba o era verdad pero a mi me estaba poniendo bastante  caliente  pensar en el juego que daba su forma de pensar, expresarse y ponerse . Por su parte la madre, que era a quien yo queria prestar mas antención escuchaba mientras leia una revista, hacia que no estaba atenta, pero de reojo, note en su cara una expresión complaciente y serena (prestaba interés), ella me lanzaba miradas. Yo coqueteaba todo lo que podia con ella, sin dejar de prestar atencion a su hija. Tanto la madre como la hija, con sus movimientos, sus posturas  y expresiones, sobre todo con la ropa tan ligera que llevaban, me perturbaban toda la situación, me menta hacia tiempo que estaba trabajando y mi miembro cada vez se ponía más duro, no sabía como disimular.  Noté, que ninguna de las dos llevaba sujetador, lo cual hacia que sus pezones se notarán, quería rozarlos, pero no podía atreverme a tanto, la confianza no era mucha y en un sitio tan cerrado como un avión, corria el riego de quedar en ridículo, tenia que contenerme yo y…., resople y continúe hablando con ellas dos.  Me resultaba imposible centrarme, en un instante y tras un breve movimiento vi las curvas del culo de la hija, estaba duro, y reseltaba por debajo de la minifalda que llevaba. Cuado se levantó para ir al baño, lo roce con disimulo, pero lo suficiente para que ella lo notara, no se inmuto, continuo y cuando ya estaba en el pasillo me miró y se rio mientras se iba.  Tras un rato, me levanté y fui al baño, pero al que hay en la parte trasera, trataba de disimular lo más posible, después de refrescarme un rato, llamaron a la puerta y oi la voz de la chica, decía que le abriera, así que lo hice, enseguida entró y cerró la puerta tras de sí, sin perder tiempo me bajo la cremallera y me saco la verga, te estaba casi empalmada me miro y comenzó a chuparmela, me deje llevar y la deje hacer, después de un rato se levantó me agaró una mano y me la puso en su coño, en ese momento me di cuenta de que se había quitado las bragas, casi me corro, pero tenia que aguantar, asi que la senté en el lavabo, le abri las piernas y comencé a lamerla, gemia quedamente, en silencio, se movia y me hacia disfrutar más y más de la situación. Estaba tan lubricada que me levante y le metí mi polla en su coño, follamos hasta corrernos, después nos refrescamos con agua y salimos por turnos del lavabo, antes ella me dijo que a su madre le habría gustado mucho poder disfrutar de una experiencia así. Todo me daba vueltas, no lo podría creeer......

 Volvi a mi asiento y alli tenia a las dos, a mi alcance, para mi solo. Ya habia disfrutado de una y queria disfrutar de la otra. Me tape con la manta, me desabroche la brageta y saque mi polla, mire insinuante a la jovencita y me gire un poco hacia su madre que parecia dormida, meti la mano debajo de su manta y le empece a sobar las tetas, abrio los ojos y note como relajaba las piernas por lo que pase mi mano a su coño y lo toque por encima de su pantalon, lo pego a mi mano con ganas y poco a poco se fue mojando y abriendo. Cogi su mano y la lleve a mi polla que estaba esperando una buena paja. Mientras le metia la mano en el coño y le bajaba los pantalos introduje un dedo y lo movi con fuerza, se corria y yo le contaba al oido como me acababa de follar a su hija en el baño. Me llamaba  "cabron" y se corria con mas fuerza. Levante el respaldo del brazo de mi asiento, atraje su culo hacia mi y la coloque para metersela, en ese momento note una respiracion por detras, en mi cuello, y una mano que me cogia la polla, - la niñita estaba dispuesta a ayudarme a metersela a su madre,- me la movio arriba y abajo varias veces y cuando creyo que era suficiente la llevo hasta el coño de su madre y la puso en la entrada, el resto me tocaba a mi, comence a meterla con embestidas lentas pero profundas, la madre gemia despacito y se corria mientras su hija me mordia el cuello por detras y me pellizcaba los pezones. Me corri en el coñito de su madre despues de disfrutarlo un rato y mientras su hija me comia los labios. No pude resistirlo, mi polla en la madre y mi lengua en la hija. Demasiado.  

Estaba excitadisimo, terminaba de correrme y ya la tenia dura de nuevo. Me recoste en mi asiento y le pedi a la jovencita que me la chupara, me dolia de follar, pero necesitaba mas, se inclino, se la metio en la boca y empezo a chuparmela. No tenia mucha esperiencia y me hacia un poco de daño, pero me excitaba sobre todo cuando paraba, levantaba la cabeza y me miraba. Su madre empezo a besarme mientras la hija me la chupaba, se invertian los papeles. Levante a la hija la sente encima de mi verga durisima, se la meti hasta dentro y empujaba con fuerza cada embestida. Agarrada del asiento delantero, que estaba vacio, empezo a metersela con tal destreza que crei morir. La sacaba y la metia como si fuera un chupa chups, mientras la madre me agarro los huevos por debajo ( como tu haces ) y empezo a acariciarme - los con sumo cuidado, mientras me besaba con placer y yo se la metia a su hija. Me comia la oreja y me decia "cabron, mas que cabron como te follas a mi hija" y se excitaba. La niña no se cansaba de correrse, yo no podia mas y le meti toda mi leche hasta dentro para que la gozara calentita y no lo olvidara nunca. Su primer polvo no debia olvidarlo nunca.