miprimita.com

Primera vez con Tere

en Hetero: Primera vez

Hola de nuevo a todos. Me llamo José Manuel, para los que no me conozcáis me describo brevemente; 1,82 m de altura, 85Kg, pelo moreno, siempre de punta y ojos azul claro. Desde mi anterior relato mi único objetivo era poder disfrutar, por fin, del sexo con la persona a la que amo. Para ello tuve que esperar todavía un par de meses.

Durante un puente mi novia Tere y yo nos fuimos a un parador precioso situado en León, para poder disfrutar de la ciudad y descansar durante unos días. Mi novia es una chica súper agradable y para que la conozcáis físicamente mide 1,67 m pelo rizado castaño, está un poquito rellenita pero para mis es perfecta, sus medidas son 95-75-95.

El viernes por la tarde llegamos a León y nos instalamos en nuestra habitación, que por cierto era preciosa con unas vistas inmejorables a la plaza. Una vez instalados nos dimos una vuelta por León para poder disfrutar un poco de la ciudad en viernes por la tarde-noche. Cenamos algo ligero y dimos un paseo agradable cogidos de la mano y dándoos besos a cada pocos pasos. Llego un punto en el que ya no podíamos más y decidimos volver de vuelta a nuestra habitación.

Para mi desgracia mi novia al llegar al parador decido que debía tomar una ducha a lo que yo alegue que me quería duchar con ella.

T- Me voy a dar una ducha que hoy ha sido un día muy largo.

JM- Ok, yo me ducho contigo que tengo muchas ganas de ver ese cuerpo desnudo.

T- Jajajajja, que gracioso eres, pero resulta que mi cuerpo no es para que tú lo veas; no vaya a ser que cuando lo veas deje de gustarte.

JM- Anda no digas tonterías, que sabes que te amo y no hay ningún problema en que me duche contigo.

T- Mira Jose, que no. Que me ducho sola y no hay más que hablar.

Acto seguido cogió su pijama y ropa interior y se metió en el baño. Yo me quede bastante chafado y la verdad se me quitó todo el buen rollo que tenía. Espere a que saliera de la ducha, y obviamente salió ya con su pijama puesto. En ese momento decidí que me ducharía yo; pero olvide mi ropa interior en el cajón así que al salir tuve que salir desnudo.

T- ¿Pero qué haces? Te quieres vestir!!!!!

JM- Joder,, tampoco es para tanto.

Acto seguido me visto y me meto en la cama dispuesto a dormir; entonces Tere me sorprende, se gira sobre la cama y me abraza. Me da las buenas noches y se dispone a dormir apoyando su cabeza en mi pecho. Yo me pongo malo, siento sus pechos apoyados sobre mi cuerpo, noto su respiración, ella coloca su pierna justo sobre mis genitales, cosa que hace que mi pene cobre vida. Ella nada más sentirlo quita su pierna y se gira dándome la espalda.

La noche transcurre sin más sobresaltos. Ya por la mañana desayunamos y salimos a pasear, me siento genial compartiendo mi tiempo con ella. Me hace feliz cada segundo, cada momento compartido con ella me hace ver la luz. Al llegar la noche decidimos salir a cenar y tomar unas copas. Ella se vistió preciosa, unos vaqueros ajustados que resaltaban sus curvas y hacían que no pudiera dejar de mirar su culo y en la parte de arriba una camiseta de esas que quedan sueltas y en las que por la parte de atrás se notaba perfectamente su sujetador. Tomamos una cena ligera pero muy romántica, declarándonos amor eterno. Salimos a una discoteca a bailar, bueno bailar ello yo más bien desplazarme por la pista junto a ella, y así pudimos abrazarnos, acariciarnos y besarnos en la pista, cosa que me puso completamente cardiaco. Tras un par de copas decidimos que es hora de volver a nuestra habitación, de camino al parador nos besamos al pasar por cada zona oscura, nos acariciamos más de lo que en ella era normal, me dejo meter mi mano bajo la camiseta y acariciar sus pechos, tanto tiempo esperando por acariciar esos pechos y por fin los tenía en mis manos. Menos mal que estábamos cerca del alojamiento porque sino no hubiera podido llegar de la calentura que tenía.

Llegamos a la habitación y nos seguimos besando y acariciando nuestros cuerpos, son besos completamente pasionales, entrelazando nuestras lenguas, jugando a introduciros en el cuerpo del otro, a demostrarnos cuanto nos queremos. En ese momento, ya con mi calentura decido apostar fuerte e intentar dar un paso más, subo mis manos por su espalda y al llegar al broche del sujetador me dispongo a desabrocharlo pero ella me lo niega y me corta todo el rollo.

JM- ¿Por qué no te lo puedo quitar? Si sabes que me encantan tus pechos y que los quiero para mí.

T- Es que me da vergüenza y me da miedo que luego huyas de mí.

JM- Sabes de sobra que quiero pasar toda mi vida contigo, sabes que me encantas, que te adoro y que tu cuerpo es perfecto para mí.

T- Ya eso lo dices ahora pero luego…

JM- Anda no digas tonterías, solo dime que te da miedo.

T- Me dan miedo muchas cosas, me da miedo no hacerte feliz, me da miedo que no te guste mi cuerpo, me da miedo que me duela, me da miedo quedarme embarazada, me da miedo que solo quieras echarme un polvo y si te he visto no me acuerdo.

JM- A ver vamos por partes. No digas tonterías, tú me haces feliz, solo con sentirte respirar soy feliz. Por otro lado tu cuerpo me encante y me gustaría tenerlo cada segundo junto al mío. Tú crees que después de tanto tiempo junto a ti si solo quisiera echarte un polvo ya habría desaparecido.

T- Si, pero…

JM- A ver déjame terminar y luego me cuentas. Que te duela o no te lo puedo asegurar o prometer, pero sí que te puedo prometer que todo lo que haga lo hare para intentar evitarte cualquier sufrimiento y cualquier dolor. Todo lo haré con dulzura y amor porque a mí lo único que me interesa es disfrutar junto a ti. Y si te quedas embarazada no pasaría nada. Si cambiarían muchas cosas pero como te digo siempre yo te quiero a ti y quiero pasar cada día contigo y tener hijos contigo, por lo tanto si a día de hoy tenemos ya los hijos pues no es algo que me vaya  a preocupar.

T- Te quiero.

Se lanzó a besarme, pero esta vez no era un beso tan salvaje como antes, ahora simplemente era un beso de amor. Tere me abrazó y se quedó abrazada a mí durante un buen rato. Ella se levantó y se fue al baño. Entonces para intentar sorprenderla decidí montar lo que tenía preparado. Sobre la cama eché unos pétalos de rosas de colores claros hasta casi cubrir la totalidad de la cama, para luego poner en el centro un corazón en pétalos de rosa roja y a cada lado una de nuestras iniciales; además puse por la habitación distribuidas varias velas para dar un ambiente más romántico si cabe. Cuando note que iba a salir; apague las luces y procedí a encender las velas y poner un hilo musical muy suave que yo había elegido previamente.

Tere, salió del baño y como era de esperar quedó sorprendida.

T- ¿Qué haces?

JM- Sorpresa.

T- Estás loco.

JM- Si, por ti.

T- yo no me merezco todo esto que has montado.

JM- Sí que te lo mereces, de hecho eres la única persona por la cual montaría todo esto.

En ese momento se tiró a abrazarme y a besarme con pasión. Nos abrazamos con mucha fuerza y comenzamos a abrir los labios para compartirlo absolutamente todo el uno con el otro. Compartimos nuestra saliva, nuestras lenguas, nos dejamos caer sobre la cama. En ningún momento separamos nuestros labios. Nos acariciamos, yo la acariciaba su espalda ya que estaba tumbada sobre mí. Ella tenía un brazo sobre la cama y el otro acariciando mi pelo, cosa que me encantaba. Entonces decidí intentar meter mis manos por su espalda, ella ni se inmutó. Comencé a acariciar su espalda, a subirle la camiseta. Ella separó ligeramente su cuerpo del mío para que pudiera sacar su camiseta. La quite la camiseta y quedo simplemente con un sujetador precioso que tenía unos pequeños bordados en los bordes. Me dedique a acariciar las partes de su pecho que estaban al descubierto. En ese momento solo me preocupaba de no ir excesivamente rápido ya que ella podría asustarse de nuevo.

JM- Te quiero.

T- Déjate de hablar y bésame.

Esa reacción por su parte no me la esperaba y desde ese momento me desinhibí mucho más dejando de plantearme las cosas y con ganas solo de hacer lo que en cada segundo nos apeteciera. Nos volvimos a besar con pasión. Yo decidí que era ahora o nunca y fui acariciando con mis manos su espalda, baje hasta el borde de su pantalón y comencé a subir inexorablemente hasta mi verdadero objetivo. Una vez llegue al broche del sujetador, se lo solté. Ella se apoyó completamente en mí para evitar que sus tetas salieran del sujetador y yo se las viera. Conseguí que nos giráramos, ahora mismo era ella la que estaba tumbada sobre la cama y yo apoyado sobre ella. En ese momento metí mis manos entre nuestros cuerpos y la despoje del sujetador dejándola desnuda de cintura para arriba. Por primera vez vi su pecho desnudo. Tiene unos preciosos pezones con una areola bastante grande y clarita. Decidí comérmelos, fui un impulso lo que me hizo lanzarme a por ellos, eso si no me los metí directamente en la boca sino que empezó a besar todo su pecho, después empecé a pasar mi lengua por su areola para ir haciendo círculos cada vez más pequeños. Tere temblaba, en ese momento pensé que era de placer. Una vez tuve su pezón en contacto con mi lengua simplemente lo chupe durante un rato, después cerré los labios para poder absorber su pezón como si quisiera arrancárselo. Tras esto pase a besar otra vez sus labios, mientras me quitaba mi camiseta para quedar en igualdad de condiciones.

Ya ambos desnudos de cintura para arriba empezamos a acariciar cada centímetro de nuestros cuerpos y besándonos apasionadamente no separábamos nuestros labios. Lleve mis manos a su trasero para poder acariciar ese culo que tanto ansiaba. Conseguí meter la mano por dentro de su pantalón, sentir el tacto directo de su culo me acelero la respiración, lleve mi mano libre a intentar desabrochar su pantalón. En ese momento se echó para atrás y me dijo:

T- Te quiero.

JM- Yo también princesa.

T- Por favor ten cuidado.

JM- No te preocupes mi niña que solo quiero que disfrutes.

Volví a besarla y lleve mi mano hasta el botón de su pantalón para desabrocharlo, lentamente fui bajando la cremallera y por fin pude ver su tanga, lo recuerdo como si fuera hoy, llevaba un tanga negro con transparencias precioso por primera vez pude observar el vello púbico de mi novia, mi cuerpo estaba a tope, ya no podía más y ya no había marcha atrás. La quite completamente el pantalón y ella quedo tumbada sobre la cama inmóvil, solo tenía un leve temblor en sus piernas debido al miedo que sentía en ese momento. Estaba histérica.

JM- Relájate princesa, no va  a pasar nada. Estas histérica, tu solo confía en mí y relájate

T- Si claro tú lo ves muy fácil.

JM- Vale, vale relájate mi niña.

Volví a besarla pero esta vez mas amorosamente, besos tiernos y suaves, solo juntando mis labios a los suyos enviándole todo el amor y relajación que podía. Mientras nos besábamos ella tiro de la sabana para taparse y evitar que su cuerpo casi desnudo quedase a la vista. Yo me fui quitando lentamente el pantalón mientras la seguía besando. Una vez me quede completamente denudo, con mi pene completamente erecto y mirando hacia Tere que seguía tapada con la sabana. Ella estiro un brazo y me agarro por primera vez mi polla. Empezó a acariciarla temerosa, como si mordiera.

JM- Eso es princesa, sigue así. Ahora sube y baja tu mano por mi polla.

T- Así????

JM- Como tú quieras soy todo tuyo.

La fui destapando lentamente para volver a ver el cuerpo casi desnudo de mi amada Tere. Me tumbe junto a ella y comencé a quitarla el tanguita que llevaba. Por fin y por primera vez veía todo su cuerpo desnudo. La acaricie todo el cuerpo empezando por su oreja, poco a poco fui bajando con mi mano por el cuello, haciendo que se estremeciera. Pasea  rozar todo su pecho para finalmente jugar durante un largo rato con sus pezones, momento que aproveche para volver a besarla, nuestras lenguas se entrelazaban y pugnaban por entrar más en la boca del otro.

T- Ponte el condón.

JM- Tranquila que no se me olvida.

T- Vale pero póntelo que estamos demasiado cerca

Me levante y la hice caso, con parsimonia me coloque el preservativo haciendo que ella me mirase y observase la maniobra para que se quedase tranquila viendo que ya no había riesgo. Ella separo sus piernas cosa que yo aproveche para llegar con mi mano a su pubis, acaricie tranquilamente, casi con parsimonia, los vellos púbicos de mi novia. Poco a poco fui bajando más la mano hacia esa zona completamente inexplorada de su cuerpo. Acaricie sus labios vaginales, los tenia hirviendo y completamente empapados de excitación. Eso me animo a colocarme sobre ella para intentar penetrarla. Coloque la cabeza de mi pene sobre su vagina pero sin introducirla, simplemente acaricie su vagina con mi polla de arriba abajo, cada vez que rozaba el clítoris Tere deliraba de pacer. Cuando creí que era el momento coloque mi polla en la entrada de su coñito y empuje ligeramente para ver como reaccionaba. Ella se encogió, encogió todo su cuerpo pero no dijo absolutamente nada. Inmediatamente yo saque el pequeño pedazo que estaba alojado en el cuerpo de mi novia.

JM- Que te pasa??? Te duele???

T- Si me duele un poco, cuando has intentado entrar me ha entrado el pánico.

JM- No te preocupes princesa solo dímelo cuando te duele, yo solo quiero que disfrutes y si te duele a mí no me interesa, solo me interesa que disfrutes.

Decidí cambiar de estrategia, pase ahora a besar todo su cuerpo, oreja, cuello, pechos, pezones y fui bajando por su tripa hasta el ombligo y no el momento en el que iba a seguir bajando Tere me cogió la cabeza.

T- Eso sí que no.

JM- Porque?

T- Me da vergüenza y no quiero que lo hagas.

JM- Ok, tus deseos son órdenes para mí. Te quiero princesa.

Cambie mi boca por mi mano para que esta se acercara sin remedio al pubis de Tere. Volví a acariciar el ensortijado  vello de mi chica, lo acaricie con parsimonia, con toda la tranquilidad del mundo. Mis dedos bajaron más, hasta encontrarse en el mar de mi amor. Esa vagina parecía un charco o una piscina. Completamente empapada y cálida. Con uno de mis dedos empecé a introducirlo suavemente y con muuuuuucha tranquilidad, ella se relajó, ahora sí y dejo que todo mi dedo entrase en ella. Mientras yo simplemente observaba como disfrutaba con mis caricias. Decidí meter mi segundo dedo y entro con mucha menor facilidad que el otro. La fui preparando el terreno para que estuviera dispuesta y relajada para lo que le tocaba sentir. Volví a mi posición sobre ella y volví a introducir mi pene en ella, poco apoco cada centímetro era introducido muy poco a poco ella apretaba ligeramente sus dientes y cerraba los ojos.

JM- Te duele????

T- Despacio

JM- Eso estoy haciendo. Por favor si te duele dímelo y paramos. Ya lo haremos en otro momento.

T- No quiero que ares.

Dicho esto yo seguí introduciendo el pene dentro de su cuerpo hasta llegar a la base de mi polla. Un vez ambos sentimos que mi polla llego hasta el fondo suspiramos de tranquilidad. Poco a poco fui sacando ligeramente mi polla de dentro de mi novia, para con la misma parsimonia volver a introducirme dentro de ella. Es la mejor sensación del mundo. Sentirte dentro de la persona a la que amas, sentir que somos solo uno y que toda la vida tiene sentido solo si estamos juntos. Poco apoco pude ir haciendo más constantes las entradas y salidas pero no podía acelerara el ritmo ya que a Tere todavía la molestaba. Yo poco a poco me iba acercando al culmen.. Cada vez estaba más cerca de mi orgasmo ella debió percatarse

T- No te corras dentro.

JM- Pero si tengo el preservativo.

T- Da igual, por si acaso.

JM- Pero…..

Y empezó un beso pasional y unos movimiento de pelvis por su parte que me acercaban al orgasmo cada segundo, cada instante me acerca al punto de no retorno y parece que ella también. Empezamos a movernos de manera salvaje hasta que ella exploto, empezó a gritar y a convulsionarse todo su cuerpo cosa que yo note en mayor medida porque su coñito me exprimía la polla para que me vaciara completamente cosa que hice de inmediato, llenando el preservativo con todo mi semen. Tere yacía tranquilamente sobre la cama con las piernas completamente abiertas y su coñito enrojecido y dilatado. Me acerque a sus labios para besarlos para amarlos como deseaba amarlos por el resto de nuestros días. Cuando separamos nuestros labios yo la apoye sobre mi pecho para abrazarla y mantenerla junto a mí un rato más.

T- ¿Has visto lo que has hecho?

JM- ¿El qué?

T- Te has corrido dentro de mí

JM- Tranquila princesa que llevaba el preservativo y esta perfectamente.

T- Te quiero

JM- Y yo.

Allí nos quedamos durante no se cuánto rato más abrazados y acariciándonos hasta que el sueño nos venció y caímos rendidos.

Espero que os haya gustado.

Un saludo,

Jm18cm