La revisión

Hola me llamo Javier y vivo en Guadalajara, México. Soy un tipo promedio, mido 1.70m, complexión media, moreno, no soy feo sin ser un adonis y con algunas aventuras por aquí y por allá.

La historia que les contaré ocurrió hace un par de años. Nos pasó a mi novia y a mí. Mi novia se llama Esperanza y mide 1.65m. Ojos almendrados, algunas pecas, labios carnosos y mordisqueables, una sonrisa increíble y tiene un cuerpazo!! Senos fabulosos, trasero parado y muy firme y unas piernas que de inmediato llaman la atención. Y lo más importante es que nos complementamos a la perfección en todos los aspectos. Hasta parece que nos leemos la mente.

Resulta que Esperanza estaba buscando empleo y yo la llevé en mi auto a su entrevista. La esperé estacionado en una calle aledaña. Después de que salió nos fuimos a dar una vuelta. Ese día en particular no había podido cobrar un dinero que me debían y sólo traía lo justo para cargar gasolina, así que nos fuimos a pasear en el auto.

Ese día Esperanza estaba vestida con una blusa blanca muy ligera, sostén de encaje blanco, falda de vestir color gris, medias ahumadas con liguero y una tanga negra… Ah! y zapatillas.

Esperanza y yo somos muy calientes, y muchas veces mientras voy manejando, ella me acaricia el paquete mientras yo trato de no chocar… a veces me saca la verga del pantalón y me acaricia sin importarle quién nos vea.

Como era de esperarse, mientras conducía, Esperanza me acariciaba y se subía la falda para que admirara cuando se tocaba también.

Obviamente yo estaba muuuy caliente y sin dinero para ir a un motel decidí ir hacia la colonia Seattle en Zapopan. Ahí hay calles empedradas, muchos árboles con bonitas jardineras y pasan pocos autos. Pensé en pasar un buen rato.

Me estacioné en un lugar apartado cerca de una jardinera donde no se veía mucho movimiento y nos fuimos a la parte trasera del auto.

—MMM!—dije—Ven mamacita… quiero que me la chupes…

—Sí mi amor—contestó—Me muero de ganas de chupártela… saborearla, sentirla y morderte… mmmm

Se sentó a la derecha y se inclinó hacia mí y me sacó la polla del pantalón

—MM… sí papito dámela—dijo

Empezó a lamer muy lentamente desde la base hasta la punta… después me besó la punta mientras me tomaba la verga con la mano derecha y me masturbaba suavemente.

—Ah! mmm!! Delicioso mi putita…—Dije—Sigue así

A mi novia le prende que le diga putita. Le encanta y es uno de nuestros juegos habituales.

—Sí papi… soy tu putita y me encanta tu verga…

—No hables!!—interrumpí—Sigue

Comenzó a mordisquearme suavemente la punta mientras me acariciaba los huevos. Después, abrió la boca y se la metió hasta la mitad mientras me masturbaba más rápido.

—Aaaah!! Mmm no pares—dije

Subía y bajaba su cabeza engullendo toda mi polla… yo sentía delicioso. Sus dientes comenzaban rozarme el glande muy suavemente. Sólo lo suficiente para aumentar la sensibilidad…

—Sí putita!! Sigue así mamacita. Te adoro!!

—Me encanta chupar papito… me fascina tu verga, me vuelve loca.

Mientras tanto, le subí la falda y comencé a acariciar su rajita desde el ano hasta su vagina… sentía húmeda su tanga mientras ella gemía

—Mmm aahhhh mmmm!! Sssiiii!!

Bajó a lo largo de mi verga y comenzó a lamerme los huevos… me mordía el escroto mientras me masturbaba, yo me sentía en el cielo. En ese momento escuchamos unos golpes en la ventanilla y nos sobresaltamos ya que era un oficial de policía.

—A ver, a ver… Salgan del auto por favor—Dijo el oficial y acto seguido abrió la puerta del coche sin darnos tiempo ni de meterme la verga en el pantalón ni de bajarle la falda a mi novia.

—Qué bonito!! Qué bonito!! Qué espectáculo están dando en plena vía pública—dijo

Cuando bajamos, me percaté que había dos patrullas Pick Up estacionadas y nosotros por nuestra calentura no las escuchamos llegar. ¿Desde cuándo estarían gozando del show? No lo sé…

—A ver jóvenes… tenemos que llevarlos detenidos por faltas a la moral—Dijo mientras desnudaba a mi novia con la mirada…

—No oficial, por favor, déjenos ir con una advertencia…

—Silencio!! —interrumpió— A ver… que alguien revise a este cabrón—dijo mientras me hacía poner las manos sobre el cofre (capó) de la patrulla

Una oficial se acercó y me revisó muy concienzudamente… comenzó en mi espalda y bajó hasta mis nalgas, mis piernas y por último, mi entrepierna y como aún estaba con los huevos de fuera me los agarró bruscamente ya que mi erección se había esfumado.

—Déjenlo!—dijo mi novia

—Usted no se entrometa!!—Dijo el primer oficial— a usted también vamos a revisarla… tal vez traiga droga…—Añadió con una sonrisa maliciosa

—No por favor!!... no traemos droga, sólo estábamos…

—Ya sé lo que estaban haciendo!!—gritó el oficial—Lo malo es que lo hacían ustedes solos…

La oficial que me estaba estrujando los huevos soltó una risita mientras su caricia se volvía menos brusca…

Mientras tanto, el oficial que había hablado, colocó a mi novia en la misma posición que yo, pero en la otra patrulla.

—Señorita, abra las piernas por favor… la revisaré

Mi novia no dijo nada y abrió las piernas. Como aún tenía la falda levantada, estaba dando todo un espectáculo con su liguero y sus medias ahumadas en esas deliciosas piernas.

El oficial empezó a acariciarle los senos sin perder ni un momento. También le acariciaba las nalgas redondas y tersas.

—Hey! Déjenla!!... —grité—Ouch!! …—Me interrumpí porque la oficial me apretó los huevos y se me cortó la respiración.

—Mira mocoso—dijo el primer oficial— Ustedes va a hacer lo que nosotros les digamos, porque si no lo hacen, “encontraremos” drogas en el auto y pasarán una buena temporada en prisión y tú sabes el tipo de calaña que hay allí… por un par de pesos son capaces de violar a tu noviecita todos los días y a ti también te pueden conseguir un pinche negro vergudo para que sepas lo que es bueno.

No contesté… estaba pensando en una salida, pero no encontraba ninguna. Entonces, mi novia dijo

—Está bien amor… tenemos que obedecer

Me mordí los labios… ¿Cómo diablos nos metimos en este lío?

—Ves?—Dijo otro oficial que no había hablado—Ella es más sensata que tú—Ven mamacita… demuéstrame lo que le estabas haciendo a tu novio

Se sacó la verga del pantalón y casi se me salen los ojos de sus órbitas ¡La tenía enorme! Y eso que aún no estaba erecta. Mi novia también se quedó pasmada pero reaccionó y se acercó lentamente

—Espera—Dijo el primero—Primero quítate toda la ropa excepto el liguero y las medias.

Mi novia lentamente se desabrochó la blusa y se quitó el sostén mientras los tres oficiales varones la contemplaban.

—Bien hermosa—Dijo el segundo—ahora sí… comienza

Mi novia se arrodilló frente al segundo y tomó con ambas manos esa polla enorme y con la lengua lamió tímidamente la punta mientras intentaba masturbarlo… esa acción tuvo una reacción inmediata ya que comenzó a crecer aún más

—Bien!! Sigue así…

Mientras estaban los hombres viendo el show, la oficial que me tenía sujeto por los huevos comenzó a acariciarme muy lentamente y muy a mi pesar, mi cuerpo reaccionó con una erección.

—Mira!—Dijo el tercero que no había hablado hasta el momento—Parece que a tu novio no le molesta lo que haces con nosotros.

Y era verdad!! No puedo mentir… nosotros acostumbramos grabarnos mientras hacemos el amor y subimos los videos y las fotos a internet. Nos excita compartir nuestra intimidad con el mundo.  

Mi novia, al ver mi erección se sorprendió, pero no dijo una palabra. Continuó mamándole la verga al segundo hasta que alcanzó alrededor de 25 o 28cm de largo y un ancho de 6 o 7 cm. Esperanza subía y bajaba sin descanso, le acariciaba los huevos, le besaba el glande; succionaba el escroto y con sus dos manitas lo masturbaba con mucha energía…

—Aaaaahhh!! Esta cabrona mama como una profesional!! Levanta el trasero puta!!

Esperanza obedeció y se incorporó estirando las piernas dejando su trasero expuesto. El primero se acercó y le lamió el culo. Vi como mi novia se estremecía y se le erizaba la piel mientras la oficial me masturbaba con más fuerza. Yo esta súper excitado por lo bizarro de la situación. Ver a mi novia chupando la verga de otro hombre a unos metros de mí me puso a cien.

Gmmm!!!—gimió mi novia

El tercer oficial se acercó y le apretó las tetas sin contemplaciones. Esto provocó que mi novia se sobresaltara y recibiera una nalgada por parte del primero.

—No te muevas puta!! Debes dejar que hagamos lo que queramos!!

El segundo seguía disfrutando de la espectacular mamada mientras el primero le lamía toda la raja hasta el culo. Mi novia estaba jadeando y gimiendo como una verdadera zorra

Entonces el segundo volteó a mi novia para que quedara frente a mí y le dijo:

—Deja que el cornudo de tu novio vea como disfrutas mi verga putita!!

La cogió de la cintura y empezó a meterle la punta en la puchita

—Perdón amor!! No lo puedo evitar—decía mientras su cara se contorsionaba al sentir semejante garrote la vagina.

El tercero la acercó más a mí para que yo la viera mejor y aproveché para decirle

—Disfruta mi amor… quiero que disfrutes todo lo que puedas. Me encanta verte gozar!!

Cuando dije eso, a Esperanza le brillaron los ojos y entonces se desinhibió por completo

—Mmm!! Sí papito!! Métemela en frente de mi novio que le está gustando

La oficial que me tenía agarrado se agachó y empezó a darme una violenta mamada que me excitaba aún más.

—Te gusta puta?—Dijo el tercero mientras le acercaba a verga a Esperanza para que se la mamara—Eres una puta descarada.

Lo ellos no sabían era que cada vez que le decían “puta” ella se calentaba más. Aunque se dieron cuenta rápidamente.

De pronto el segundo se la metió de golpe toda completa y Esperanza sólo abrió los ojos al máximo mientras ahogaba un grito por la verga del tercero que tenía en la boca

—MMmmaaaaghhh! Mmmm!! Me duele!!—gritó—Cabrón me estás partiendo en dos!!

El segundo se sentó en el pasto de la jardinera con mi novia enchufada aún. Así tuve una vista perfecta de mi novia siendo empalada por ese impresionante pedazo de carne

—Ah! me encanta!—me miró—mi amor!! Me encanta como me coge este cabrón!!

En eso se acercó el primero y le metió la verga en la boca mientras Esperanza subía y bajaba sin cesar disfrutando como la llenaba ese garrote.

El tercero le acariciaba los pezones y el clítoris mientras Esperanza sólo gemía y yo sentía como me la mamaba la oficial.

—Quiero a los tres juntos!!—Dijo mi novia

Se levantó y se sacó ese mástil de la vagina y llamó al primero

—Ven papi… te quiero en mi culo

El primero prácticamente corrió a sentarse en el pasto a esperar a que Esperanza se sentara de espaldas a él. Ella ni tarda ni perezosa se acercó y colocó la punta de la verga en la entrada de su culo

—Sí… a mi novio le prende ver cómo me cogen

—Pues le daremos gusto mamacita!!

La situación había cambiado. Ahora era Esperanza quién estaba al mando y los oficiales estaban locos por complacerla. Se sentó de golpe y se ensartó la verga del primer oficial mientras soltaba un gemido de satisfacción

—Mmm!!! Qué rica verga tienes papito! Me encanta como se siente… y tú mi cielo. Ven a mi boquita—Le dijo al tercero

—Aquí me tienes mamacita. Toda tuya!

—A ti te quiero en mi conchita!—Le dijo al segundo. Al de la verga enorme

—Quiero que me llenen

El segundo se acercó y se la ensartó sin miramientos, pero como ya estaba acostumbrada al tamaño, mi novia ni se quejó.

—Siiiii!!! Cójanme!! Métanmela toda!—Gritó—muérdanme, rasgúñenme, pellízquenme!!

Los tres comenzaron a bombearla durísimo!! A un ritmo rapidísimo y tan fuerte que yo esperaba que la rompieran. Uno la tenía empalada en el culo y le rasguñaba y mordía la espalda, el segundo le daba fortísimo en la concha mientras le pellizcaba los pezones y se los retorcía hasta hacerlos enrojecer mientras le mordía en el cuello. El tercero se la estaba follando por la boca e insultándola

—Eres una puta! Te encanta la verga verdad? Y que te maltratemos también!! Te vamos a dejar marcada pinche zorra!

—Sí papi!!—Se sacaba la verga de la boca para contestar—Más!! No paren!! Soy su putita!! Más duro!! Sin piedad!!

—Te adoro mi putita!!—Decía yo—Acaba con ellos!!

La oficial que me la estaba mamando se quitó el uniforme y se puso a gatas para que se la metiera y yo de inmediato se la ensarté sin contemplaciones!!

—Aaaay! Cabrón­—gritó—te tiene súper caliente la puta esa verdad??

No contesté y empecé a mover mi verga dentro de ella haciendo círculos y un movimiento ondulatorio mientras le acariciaba el clítoris. Su reacción fue inmediata

—Ay que rico!!... qué bien lo haces!! Sigue así!! Enséñale a esa puta que también tú tienes a quien follarte!!

­—Sí mi amor!! Fóllatela!! Que te sienta!! Que sepa que follas maravilloso mi vida!!­—Dijo mi novia

Mientras tanto, los tres oficiales, cambiaron de posición y el tercero se acostó en el pasto mientras Esperanza se acostaba sobre él cara a cara y la penetraba en la vagina. El primero se levantó y se acercó a su boca. Y el segundo apunto a su culito…

—Mi vida!! Está enorme!! me dolerá!! Métemela ya!! Rómpeme!!—Decía mi novia

El segundo no se hizo del rogar y se la metió de golpe!! Esperanza dio un grito desgarrador

—AAAAAAAAYYYYYYY!!!!!! MÁS!!!!!!

Noté como le sangraba el culo, pero ella pedía más. Recordé que siempre nos ha gustado hacerlo salvaje y con toques sado maso. 

Se estuvieron turnando con ella… la pusieron a gatas y le ensartaban una y otra vez. Mi novia tuvo no sé cuantos orgasmos pero no menos de 5. Yo había tratado de aguantar, pero la oficial estaba apretándome con su conchita y no pude evitar venirme dentro de ella

—Ah! me corro!!—Dije—mientras la oficial decía lo mismo

Al ver que me venía. Esperanza aceleró el ritmo todo lo que pudo y provocó que los otros oficiales se vinieran mientras ella también lo hacía.

—Ay que rico mis amores!! Qué rica leche!!—decía mientras les limpiaba las vergas para dejárselas impecables.

Para ese momento, ya habían pasado varias horas y estábamos agotados.

—Creo que se han ganado su libertad—Dijo el primer oficial—Vístanse y váyanse

Mi novia se incorporó y se quitó las medias y el liguero y se las entregó

—Aquí tiene oficial—dijo suavemente—Para que nunca me olviden

Se acercó a cada uno y los besó tiernamente en los labios y los abrazó

—Gracias!!—decía

La oficial que me había cogido me dio su tarjeta con su número

—Llámame… lo haremos sin mirones

Esperanza se vistió y se subió al auto mientras yo besaba a la oficial.

Cuando llegamos a casa. Esperanza se recostó sobre mí mientras me besaba suavemente

—Gracias mi amor!! Gracias por decirme que lo disfrutara…

—Te amo—Contesté

Tiempo después me enteré que volvió a ver a los mismos oficiales y salió con ellos en una fiesta privada con otros más, pero eso es otra historia…