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Mi cuñada aprende lenguas diversas

en Fantasías Eróticas

                        

            Llegó a Dublín una mañana de Septiembre  justo antes de que se iniciara el año escolar en España. Mi cuñada Daniela era una cordobesa de 21 años, morena de piel y pelo y unos ojos negros inconfundibles de una auténtica Española. Muchas personas dicen que se parece a Penelope Cruz pero yo realmente creo que mi cuñada está mas buena y tiene mas pechos...sin ninguna duda..pechos que hasta el momento sólo había visto de refilón algún que otro verano en Salou tomando el Sol a nuestro lado pero siempre discreta de que yo no me fijara mucho o me empalmara demasiado ante aquellas deliciosas montañas coronadas por unos pezones oscuros y duros como una piedra. Yo se que alguna vez cuando mi mujer se iba a pasear con los niños por la playa ella bajo ese sombrero de paja de publicidad de  Ron de la Habana, abría los ojos lo justo para ver que la miraba y que mi poya estaba queriendo salir del bañador…y ella me sonreía pícaramente.

           Mi suegro cansado del pésimo inglés que tenía mi cuñada decidió pedirnos que la tuviéramos un año en nuestra casa encargados de que mejorara su idioma.

          La preparamos la habitación de invitados como si se tratase de su propia habitación. Mi esposa hizo un importante desembolso pero muy gustosa de tener a su hermana , así que nos pasamos una semana en Ikea, y yo el tonto, montando muebles juveniles pero no infantiles que la hicieran sentir en su propio hogar. Juro que cada vuelta de tuerca y tornillo me decía a mi mismo que esto me lo iba a cobrar con mi cuñada de alguna forma. De todas maneras lo hacía gustoso ya que era la pequeña de las hermanas de mi mujer y la mas educada y agradable y con la que siempre bailaba salsa en las fiestas y discotecas y tengo que confesar que más de una vez notó mi pene erecto contra su sexo..pero jamás dijo nada ...ni tampoco se quejó.

         Felices de tenerla entre nosotros y  yo más que nunca..hacía casi dos años que no la veíamos justo antes de que se fuera  a Barcelona a estudiar a la universidad...y vaya como había crecido...estaba aún mas buena.

          Mi suerte empezó el mismo día que llegó. Mi esposa trabaja en un banco de Dublín y yo aquella semana tenía en mi empresa inventario así que una mañana libre en casa desayunando tranquilo, leyendo periódicos y a lo mejor hasta podía salir a correr por el bosque o pescar en el lago.

          Mi mujer me dejó como único cometido recoger a los niños en el colegio a las 6 de la tarde así que tenía casi todo el día para mi. Me sugirió que no despertase a mi cuñada hasta las 11 de la mañana porque decía que estaría cansada del viaje que por cierto llego con cuatro horas de retraso por el mal tiempo en Barcelona.

          Asi que desayuné, salí a correr, compre dos periódicos en el kiosco de los hermanos Oneals y regresé a casa cerca de las 10:30. No hizo falta despertar a Daniela, ya estaba en pie, oí la ducha y como cantaba una canción de Mecano algo antigua para su edad pero me hizo sonreir....creo que Cruz de Navajas....jajjajja...algo apropiado para esta historia....es de una infidelidad...pero esta no acabará mal....o eso espero hasta el momento.

          Grité en voz alta que estaba en casa y me respondió buenos días....le dije que hoy no tenía trabajo y que estábamos solos y que la apetecía hacer....me dijo : Cuñis.....ahora salgo y hablamos...siempre me llamaba cuñis cariñosamente.

          Salió hasta el salón en toalla, una toalla minúscula, la primera que encontró en el baño y por cierto es la misma que uso para afeitarme y lavarme la cara asi que imaginaros lo poco que tapaba. Me dió un beso cariñoso, medio mojada salió y me dijo que se moría de hambre...

          La preparé un auténtico desayuno irlandés y así mismo se sentó a mi lado sin vestirse ni ponerse más prenda encima. Estaba pletórica, me contó mil cosas de sus dos años en Barcelona y esa toalla cada vez se subía mas y ya casi la veía el vello púbico...ella se percató y sólo sonrió y me guiñó un ojo y siguió hablando. Yo ni siquiera me había duchado y le dije que necesitaba también ducharme y relajarme después de casi 8 km monte a través.

La dejé sola en la sala acabando de desayunar y me fui al mismo baño que ella usó, baño que repito es de invitados al igual que la habitación pero lo hacía por practicidad...¿para que ensuciar otro? y bueno confieso que imaginar a mi cuñada allí desnuda minutos antes me ponía a mil.

Estaba en medio de la ducha cuando entro pidiendo disculpas a coger el secador de su bolsa de aseo y cerró la puerta y se puso a secar el pelo yo allí desnudo y ella a menos de medio metro de mi. Tenía que verme lo se…lo se…ese baño tiene una mampara de cristal transparente de 3  metros de largo por 5 de alto…lo sabré yo que me tocó montarla a mi y me quedó genial.

Se volvió a disculpar a gritos con el secador encendido que si molestaba allí y la dije sonriendo que no…que si estuviera su hermana seguro que era a ella la que nos sacaba a palos del baño, a lo que respondió..pero no está a si que hagamos lo que nos apetezca que mi hermana es doña perfecta y a veces no sé ni cómo la aguantas.

Me hablaba mientras me miraba aclararme el pelo…se que lo hacía y puso expresión de sorpresa cuando vio la tremenda erección que tenía. Paró el secador, me miro de frente y dijo...”cuñis…santo dios…no sabía que estabas tan bien armado….”  mientras se pasaba la lengua por los labios como imaginándoselo en ella.

No respondí, me limité a cerrar el grifo y mirarla. Hubo un silencio de 20 segundos donde sólo nos mirábamos…abrió la mampara y se metió dentro soltó su toalla diminuta y me acarició la cara y me puso un dedo en mis labios para que no dijese ni palabra.

Se agachó y me cogió el pene con una fuerza y maestría propia de una experta…me dijo que quería aprovechar hasta el último minuto que tuviéramos a solas en la casa. Asi que me pidió que le hiciese todo aquello que no me dejaba hacer su hermana.

Estaba alterado, con las palpitaciones a mil y me dije que esa era la mía, mi gran oportunidad, asi que la besé con pasión y sensualidad, le meti un dedo en su sexo y note como chorreaba caldo y que inmediatamente llevé a sus labios para que juntos en un beso probáramos su sabor.

La giré bruscamente, la obligué a darme la escalda apoyando sus manos en el asiento de hidromasaje quedó a la altura de mi cintura su culo, moreno y hermoso. Separé sus piernas, un lametazo de saliva sobre mi pene y todo para dentro…la metí mi polla por el culo y gritó como una loca insultándome y clavando sus uñas en mi muslo.

La rompí el culo…y se que la gustó. Se quedó exhausta, aun le corría el semen por su entrepierna, me sonreía y moviendo la cabeza me inquirió que esto no había terminado aquí que teníamos muchas horas de sexo duro si es lo que quería.

     (continuará)