La historia sexual de los personajes del Best Seller “Dracula”

Capitulo I

Diario de Jonathan

Bistriz, 3 de Mayo.

He salido de Múnich a las 8:00 de la noche y llegue a Viena el siguiente día, el tren se ha retrasado una hora y aproveche para caminar un rato por Budapest parece una maravillosa ciudad aunque no me atreví a alejarme mucho de la estación, porque el tren podría salir en cualquier momento, me detuve un rato a admirar a las mujeres que me encontraba en el paso, todas caminaban de una manera sensual e incitadora que si yo no estuviera comprometido habría seguido a cualquiera, pero hubo una en especial que capto mi atención mas cualquier otra, se le veía hermosa con una cabellera obscura y con un escote que dejaba muy poco a la imaginación, al ser extranjero creo que capte su atención y se dirigía a mi con una sonrisa casi macabra, me tomo la mano y me subí al tren con ella, yo no podía ni pretendía negarle sus acciones parecía que me tenia hechizado, nos metimos a una de las habitaciones y cerro con seguro, no dijo palabra y empezó a besarme y acariciar mi entrepierna yo solo gemía entre sus labios porque no dejaba de besarme entonces bajo a mi cuello y sin darme cuenta me estaba quitando la ropa, al dejarme sin camisa se volteo y le desabroche el vestido, dejo caer su falda y se desvisto sola mientras lo hacia me acosté en el sofá y le pregunte su nombre, se limito a besarme ya completamente desnuda, era la primera vez que veía a una mujer de esa manera y mi excitación era superior a las que antes ya había tenido, empezó a bajar hasta quitarme los pantalones y dejo al descubierto mi miembro se lo llevo a la boca lo cual me pareció lo mas excitante de toda mi vida, juego con su lengua alrededor de la punta mientras su mano subía y bajaba sobre mi miembro no soporte mas y le dije que iba a terminar, esperaba que se apartara pero llevo su lengua a mis huevos y los metió a su boca después volvió a la cabeza y la introdujo a su boca de nuevo, le descargue toda mi leche y se la trago toda, me tenia asombrado y sobre excitado así que mi miembro no ceso su erección, después quiso besarme pero le aparte la boca, me parecía de mal gusto por lo que había hecho antes ella me sonrió y se sentó sobre mi llevando mi pene a su vagina, se lo enterró de golpe, soltó un quejido lastimoso pero era de excitación porque me di cuenta que no era virgen, siguió cabalgándome y yo le tome sus grandes y erectos pezones a lo que respondió con mas gemidos, hasta ahora no lo pensé pero pudo haber quedado embarazada de no ser que le avise que iba a terminar de nuevo se saco mi verga y empezó a chuparla de hasta que termine otra vez en su boca, lo trago y me dejo el miembro limpio, yo había terminado dos veces y no me había dado cuenta que el tren ya estaba en marcha, quede exhausto acostado en el sillón y lo ultimo que recuerdo de esa hermosa mujer es que se estaba vistiendo y se fue sin decir una palabra.

Ahora que lo pienso no me robo nada de dinero como suelen hacerlo las prostitutas, dormí mucho tiempo, al anochecer llegamos a Klausenburgh , me detuve a dormir en un hotel al bajar del tren espere ver a esa mujer pero todo parecía indicar o que se había bajado antes que yo no se había bajado, de cualquier manera me siento mal por mi pobre y adorada Mina, espero que no lea esto y le cause un terrible dolor innecesario.

En Londres en mis horas libres leí algo sobre Transilvania; pensé que me ayudarían para tener una idea de este país antes de entrevistarme con un noble de ese lugar. No logre descubrir en ningún libro o mapa el sitio exacto del castillo de Dracula.

A pesar de que la cama era muy confortable , no dormí bien; tuve todo tipo de sueños extraños y aquella mujer que deseo olvidar para siempre aparecía en ellos, un perro estuvo aullando toda la noche.

El resto del viaje fue completamente normal pero no quise bajarme des tren por miedo a ver a esa mujer, que por cierto no he visto en todo este camino tal vez a perdido el tren, cuando recuerdo lo que paso aun me excito pero debo controlarme por mi amada Mina.

Llegamos a Bistriz cuando ya anochecía, es una vieja ciudad muy interesante y las campesinas llevaban ropa humilde, después de mi debilidad con esa mujer me da miedo tener otro desliz con otra mujer. El conde Dracula me dijo que me hospedara en el Golden Krone, la mujer que me atendí era gorda y vieja y parecía como si me tuviera odio, me llevo a mi habitación un viejo que pareció ser su esposo y me refresque un poco antes de ir a cenar, llamaron a la puerta y era una joven sumamente hermosa con una carta:

Distinguido amigo:

    Bienvenido a Carpatos. Lo espero con ansiedad. Descanse esta noche. Mañana a las 3 partira la diligencia, le he apartado un boleto y he dejado a su disposición a esta hermosa joven dispuesta a cumplir todos sus deseos o necesidades debió ser un viaje largo y descansar con una mujer me parece sumamente placentero, espero que haya tenido un viaje feliz desde Londres y disfrute su estancia en mi bello país y sus bellas mujeres.

Su amigo, DRACULA.

Después de leer esta carta me di cuenta que la joven había entrado y se había metido a mi cama desnuda esperándome, de nuevo mi debilidad por las mujeres hermosas despertó mi libido y fui con ella, recordé lo que la mujer me había hecho y después de besar a mi antojo a la joven le lleve su cabeza hacia mi verga ya erecta, ella no comprendió y le dije: -Vamos hermosa chúpala un poco. Ella tenia una cara de asco pero después de unas caricias lo hizo, no tan bien como la mujer pero igual era excitante quería que se tragara mi leche así que tome su cabeza y comencé a penetrarla por la boca de una manera que no me reconocía pero la excitación era demasiado y cuando iba a terminar la tome mas fuerte y se lo trago sin ganas y con dificultad después de eso entre en mis cávales  y la pobre muchacha estaba llorando le di un poco de dinero y le dije que se fuera, me sentí un poco mal por mi brutalidad pero me quede dormido, ni siquiera fui a cenar.

CONTINUARA……