El calor estaba sofocante, me apresure a abrir la ventana y de inmediato el fresco pego en todo mi cuerpo. ¡Ha! Que delicia-exclame sintiendo la frescura de la noche,  regrese a la cama y en pocos minutos caí en un profundo sueño.  No se cuanto tiempo había pasado pero desperté sobresaltada,  -mire a la ventana y un escalofrió se apodero de mi cuerpo,  una figura me observaba, trate de lanzar un grito pero fue inútil – de un solo paso logro cubrir mi boca, ahogando  cualquier intento de mi parte;  fue suficiente y perdí el conocimiento.  Cuando reaccione mire con temor que estaba en el bosque.

Trate de moverme y fue cuando me di cuenta que estaba atada de pies y manos,                                                     ---todo lo que intentes será inútil, estamos lejos de cualquier lugar poblado-, puedes gritar si lo deseas seria mas excitante escucharte,  te e observado y se que eres una chica muy caliente. Esta noche apagare todo el fuego que invade tu cuerpo; 

---se aproximo y de un tirón arranco mi bata de dormir, quede expuesta a su mirada, tenía varios días que prefería dormir sin ropa interior, cuando la luz de la luna ilumino su rostro me di cuenta que se trataba de un hombre rudo, de aspecto desagradable su desnudes me impacto cuando mire su entrepierna-, soltó las ataduras de mis tobillos y levanto mis piernas con demasiada facilidad. Las puso en sus hombros y mi rajita quedo justo frente a su rostro.

No, ¡por favor! Suplique esperando conmoverlo, pero lejos de lograrlo restregó su lengua en mi raja, sus ojos parecían de fuego, aquella lengua entraba y salía de mi raja sin piedad dejando su saliva escurriendo por mis nalgas, se apresuro a soltar las manos y caí sin fuerzas se planto frente de mi, y tomándome del cabello me obligo a  abrir la boca. Me introdujo su verga,  la cual solo entro una parte, podía sentir sus venas palpitar-,

Me tomo de la cintura y me enterró la verga hasta lo mas profundo. Solo fueron unos segundos que la dejo dentro de mi,  la saco y nuevamente me puso de rodillas y me obligo a mamar, mire como le había quedado blanca de mi jugo esa verga, esta ves casi logre meter toda en mi boca;  el lanzo un gruñido como si fuera un animal, me aparto de su lado y sin nada de delicadeza me recargo en un árbol, separo mis piernas y dio unos lengüetazos a mi culito,

¡Eso no por favor! ---- claro que si, vocifero --- ¿crees que no se que te gusta la verga en el culo?  Jajaja—sonrió y sin piedad me metió su verga en mi culo, se aferro a mi cintura con sus enormes manos, y en movimientos brutos termino por inundar mi ano, su leche escurría por mis piernas, ¡no! Grite y al abrir mis ojos mire que nuevamente se trataba de un sueño.  Me puse de pie y mire mi cuerpo sudoroso, cerré la ventana y regrese a dormir.

Por la mañana recibí una llamada de mi esposo, el había tenido que salir por 2 meses a realizar trabajos en otro estado, y apenas llevaba 2 semanas, le dije que lo extrañaba y que no podía dormir pensando en el-,   --no te desesperes amor- me dijo  cuando regrese a casa te recompensare todo el tiempo perdido, se despidió y continúe con mis labores cotidianas;

Solo podía llamar un par de minutos por las mañanas, y cada día se me hacia una eternidad:   como al medio día Salí de casa con la intensión de comprar algunas cosas en el centro de la ciudad.

Me puse una falda corta, zapatillas negras, y una blusa blanca de tirantes en los hombros, de ropa interior llevaba unas pantaletas blancas de algodón y sostén del mismo color. Me recogí el cabello en una coleta y fui de compras.

Camine por varias calles y solo miraba sin comprar nada, no se cuantas calles o cuanto tiempo llevaba caminando-, 

De pronto mire un local, SEXSHOP. Se leía en la entrada, mire a los lados y espere que hubiese la menor gente posible, cuando lo creí oportuno entre recorrí los aparadores y con un poco de pudor pregunte a quien estaba en el mostrador si tenia algo, para sexo anal;     -si mira tenemos estas bolitas, y lo mejor este cono es de lo mas buscado,  compre el cono y cuando estaba pagando un caballero estaba detrás mío, con unas bolas chinas en mano:  Salí y me apresure a caminar sin un rumbo fijo, al dar la vuelta en la siguiente calle respire aliviada y trate de perderme en la muchedumbre.  Sin embargo cuando pensé que había pasado desapercibida, escuche su voz a mis espaldas.

¡Señorita! Perdone mi atrevimiento e mirado que compro un cono, y la e alcanzado pues esto le será de utilidad para usarlo por ves primera.  –lo mire y me pareció una persona muy educada y de buena apariencia, le sonreí y le conteste: -hay señor que pena,  -no esto son cosas normales, no se sienta mal, pero dígame ¿es usted casada?        --si señor soy casada--   llámame Arturo,   --gracias Arturo yo me llamo Ana--,

-dime Ana ¿lo usaras con tu esposo?      -no Arturo mi esposo esta de viaje y lo usare para calmar las ganas en su ausencia.     –Ana quizá sea muy atrevido pero te gustaría que yo te enseñe a usar ese cono--          --guarde silencio y pensé que podría tener un encuentro con aquel desconocido y quizá jamás se entere mi esposo-         - lo mire y le dije que si tenia algún lugar en mente -   dijo   -a unas calles de aquí tengo un despacho, podemos ir y pasar un buen rato-    -caminamos y en unos minutos llegamos a un edificio, abrió la puerta y pasamos por un corredor, hasta llegar a un elevador, se detuvo en el piso 7 entramos al departamento marcado con el numero 703,   se trataba de un departamento amueblado y de despacho no tenia nada:    ¡este es mi lugar privado! Nadie sabe de su existencia,   puso música en un estéreo y me llevo a la recamara.        –Desnúdate Ana-  mientras yo me quitaba la ropa el hacia lo propio,      salió de la recamara y regreso con un banquito circular, sin respaldos, de unos 25 cts. Lo puso en el centro de la habitación y después tomo una jeringa de medico, le puso un poco de aceite del frasco que me había dado y me dijo.

Este aceite, es especial no te pasara nada, te pondré un poco en tu ano para facilitar que entre el cono, recuéstate en la cama y separa tus nalgas con tus manos,     -sentí como entraba el liquido en mi ano, al terminar le puso otro poco al cono y lo puso en el banquito,  -ahora siéntate en el cono y tu sola penétrate con cuidado,    -me senté poco a poco y sentía como aquel juguete se abría paso en mi culito, no fue difícil absorberlo en su totalidad, la sensación era de locura.

En esa posición mis labios vaginales quedaban totalmente abiertos, y mi rajita estaba escurriendo los primeros líquidos de su interior.

Te gusta el sexo anal ¿verdad Ana?   -si Arturo es lo que mas me encanta-  salió y regreso ahora con dos juguetes mas, un consolador con puntas a los lados y otro cono anal mas grande pero con unas adaptaciones, que permitían sujetarlo al banco,    -ponte de pie-   mientras sujetaba el otro cono mire que su verga quizá no es muy grande pero si demasiado gruesa.

Tomo el cono de mi ano, y lo saco poco a poco,   -ahora hazlo con el otro-  nuevamente me senté y ahora el nuevo cono me permitía sentarme y podía subir y bajar como si fuese un pene en un cuerpo.    Se arrodillo y ahora fue metiendo el consolador en mi raja, esto si era algo nuevo, pues era como tener dos vergas al mismo tiempo, el vibrador se movía rítmicamente al accionarle las pilas,

Se aparto lo suficiente y solo observaba mi actuar, su verga ya estaba bien parada,  se aproximo y me la ofreció sin vacilar la metí en mi boca, ansiosa de probar ese trozo de carne erguido.   Un liquido transparente salió de su verga su sabor inundo mi boca, y la sensación de placer fue de lo mas cercano a la gloria en ese momento.       –se aparto de mi y mientras yo seguía con mis movimientos en aquel banco, sin darme tiempo de reaccionar me tomo una serie de fotos, lejos de molestarme me dio mas morbo-,   

Ana, ¿alguna ves te han cogido por el culo y la raja al mismo tiempo?      -no Arturo nunca-                   -¿te gustaría probar algunas ves?     -si Arturo me encantaría-     mi mente se imagino esa acción y no resistí mas solté mi primer orgasmo,

Se aproximo y levanto mi cuerpo con cuidado, mi culo soltó un ruido como de una succión al salir el cono, me atrajo hacia la cama, y ahora el se sentó y me metió su rica verga en mi ano,

-te gustaría que invite a algunos amigos y que te cojamos hasta que ya no aguantes-              -si me gustaría mucho, te llenaríamos de verga por todos tus orificios,

Un gemido prolongado anuncio una nueva venida, solté otro chorro más.  El arrecio sus movimientos mientras con su mano metía y sacaba el consolador, de forma rápida,

Su cuerpo se tensó anunciando su culminación, su leche salió disparada con fuerza inundando mi culo,   -satisfecho la saco y tomándome de la cabeza me hizo mamar nuevamente, trate de no hacerlo pues la acababa de sacar de mi ano, sin embargo su fuerza fue mayor y me la introdujo sin piedad, el sabor era muy diferente a todo lo que había probado antes.

Sin soltar mi cabeza acabo  por venirse dentro de mi boca, por un momento sentí ahogarme, pero no me soltó, y me hizo tragar todo,  al fin se aparto y yo me apresure inconscientemente a chupar unas gotas que tenía en su pecho, las chupe y eso le agrado.

Desfallecidos descansamos un momento y después me lave la cara y la boca, me puse mi ropa y antes de salir me dio las gracias.

Ana gracias por venir,  quieres realizar lo que hablamos. Tengo algunos amigos que gustosos aceptarían.

Déjame pensarlo yo te aviso,   -de acuerdo toma mi tarjeta y llama cuando lo desees.

Salí apresurando el paso para llegar a mi casa, satisfecha por esa nueva sensación de placer:         sentí remordimiento por mi esposo, pero mi cuerpo exigía ser atendido.