Se casaba un buen compañero de trabajo y me invitó a su despedida de soltero. Realmente no era mi compañero, sino que yo soy su jefe.
Tenemos muy buena relación y quedamos alguna vez para ir al gimnasio, jugar al padel, salir a correr en nuestra hora de comida. Sabía que a la boda me invitaría, pero me sorprendió que me invitase a la despedida de soltero que le hacían sus amigos de la ciudad donde vivía, sus amigos de toda la vida. Aunque trabajamos en Madrid, él vive en otra ciudad a una hora de viaje y va y viene todos los días, así que no conocía a sus amigos. Tras darme los teléfonos de sus amigos. Nos pusimos durante los meses previos a la despedida a preparar qué, donde, como... vamos a organizarla. Yo tampoco quería opinar mucho, me amoldaba a lo que fuese, ya me ha pasado en otras despedidas que al final discute todo el mundo y en esta, que yo realmente era un acoplado, no quería ser el elemento discordante. Como la boda era a final de verano, quedamos en pasar un fin de semana en julio en el cual todos podíamos asistir. Entre todas las opciones, al final se escogió unas despedidas que se organizan en bardo desde Denia y llegan a Ibiza, pasas la noche de marcha y luego vuelves. En el barco van varias despedidas y mezclan de chicos y chicas, luego hay actuaciones "striptease" y demás... y barra libre en el barco... así que el plan era bueno. Como suele ocurrir en estas cosas, al principio todo el mundo se apunta y al final, en el momento de concretar, pedir dinero y pagar, se quedan los realmente amigos. Es decir, de 14 que íbamos al final éramos 8. Y como no, a menos de dos semanas del fin de semana que habíamos quedado... con lo que surgieron problemas. Yo tengo 34 años y el novio y los amigos entre 25 y 28 y era la primera despedida de los amigos. Yo como ya he pasado varias, sé lo que pasa y estaba ya preparado para estas circunstancias, así que les dejé opinar y ya me puse manos a la obra a final. Así que éramos 8 incluido el novio, y al ir a reservar en el barco que teníamos pensado, surge el gran problema. Ya no hay plazas. Así que nos pusimos a ver que opciones había con el dueño de la empresa con la que íbamos a hacer el viaje inicial. El chaval se portó muy bien y nos ayudó en todo lo que pudo. Nos dio otras opciones, y la que más nos convenció era parecida, pero no igual. Algo más cara pero más exclusiva. Nos conseguía un barco para nosotros. El plan era el mismo, viaje a Ibiza desde Denia en barco pero cambiaba que en lugar de ir con más despedidas, el barco era más pequeño, nos darían comida y barra libre y llevaríamos uno, dos o tres camareras-gogos-strippers... Bueno, básicamente, el chaval me contó que todo dependía de lo que quisiésemos y del presupuesto que tuviésemos. Es decir, cuantas más chicas.... más caro... obviamente. Y luego el precio de las chicas dependía de para que fuese... me explico. Si queríamos camareras monas en bikini costaba un dinero, por algo más nos hacían striptease, si queríamos show lésbico más, y sí queríamos sexo... pues más.... No sé como pero al final terminé yo encargarme del tema junto con otro chaval de la despedida. Así que comenté a los otros amigos del novio lo que querían. Todos me dijeron que el novio ni ellos querían nada de sexo, que les parecía muy bien lo de ir solos en el barco y con las chicas. Que nos hiciesen un striptease y luego que fuesen ligeritas de ropas... lo más ligeritas que nos diese el presupuesto.
Mi chica, Natalia, estaba al tanto de todo y escuchaba todas las conversaciones con los amigos y con el de la empresa organizadora. Esta opción de ir sólos en el barco se nos subía bastante más, además abaratamos bastante con la vuelta desde Ibiza que la haríamos en el ferry normal, así no tendríamos hora de vuelta. Pero aún con esas surgían problemas, porque teníamos o dinero para que fuese una chica con nosotros y nos hiciese un striptease, o para dos camareras en bikini pero sin striptease. El empresario, me decía que tenían que ir dos chicas obligatoriamente por temas de servir la comida. Ya que las que hacen striptease como mucho ponen alguna copa.... así que teníamos un problema. Quedaba una semana para la despedida y todavía no teníamos nada, llegué un día a casa cansadísimo de tanto teléfono por intentar cerrar el tema. Natalia me vió muy agobiado y me preguntó que pasaba, así que se lo conté... y esa noche me recompensó con una follada impresionante acabando en su boca mientras me miraba al los ojos... Al día siguiente era sábado, y mi chica me despertó con una mamada, para terminar follándola a 4 patas.... sus primeras palabras nada más terminar de corrernos fueron que tenía una solución para lo de la despedida...
La escuché a ver si me resolvía algo de una vez, pero no me esperaba lo que me iba a decir:
Natalia: " Vamos a ver, vosotros queréis llevar dos chicas que vayan ligeritas de ropas, y que por lo menos una os haga un striptease. Y no va a haber sexo. Pero solo tenéis dinero para la stripper... así que... ¿porque no voy yo de camarera? Al fin y al cabo no me conoce ni el novio, y a la boda no voy a ir. Además, aprovechamos y nos quedamos una semana en Ibiza los dos." Yo: "No creo que estos quieran que vayas" Natalia: "cariño, creo que no lo has entendido.Obviamente nadie va a saber que soy tu chica, yo voy como si me hubieseis contratado. Esta noche he tenido un sueño y me ha puesto cachondísima. El sueño era que iba en un barco con varios chicos, como camarera... e iba desnuda.... ufff....mira lo mojada que me pongo de sólo pensarlo....” Me cogió la mano y me la acerco a su empapado coño y a mi se me puso la polla dura de sólo imaginármelo y tuvimos que echar otro polvo. Aunque, a Natalia ya la he descrito en otros relatos…… Natalia tiene 31 años, es morena, mide 1.68 , tiene un culo muy bonito sin ser exagerado, con curvas pero duro del aerobic y unas tetas de muy buen tamaño una 95 copa c , con unos pezones marrones y medianos y bien puestos. Y de cara es bastante guapa. Tiene un cuerpazo que cada día me vuelve más loco. Con su vientre plano, sus piernas firmes y torneadas y sus tetazas que la gusta lucir al sol siempre que puede. Nuestra relación es muy abierta. No vamos a clubs de intercambio, pero hemos probado muchas cosas. La encanta provocar, ir sin ropa interior y en la playa o piscina en topless o desnuda. Y también hemos hecho tríos y alguna orgía. Ella no es bisexual pero si que ha jugueteado con besos y toqueteo con otra chicas.
Una vez hecha la presentación sigamos con el relato. La idea era buena y excitante, y porqué no divertida. A parte de solucionarnos el problema. Hablé con el organizador y aunque me puso alguna pega, al final nos dejó que fuese Natalia. Yo le comenté que había conseguido una chica que iba a ir a trabajar a Ibiza y que la pagábamos poco y a cambio nos servía la comida y las copas. A mis compañeros de despedida no les comenté nada. Si no que directamente les dije que ya había camarera y stripper. Ahora su pregunta era que si la camarera estaba buena o era fea y que si iba a ir ligerita de ropa. Se lo comenté a Natalia, y la pregunté que qué es lo que iba a ponerse. Natalia: "uhmmm.... va a ser una sorpresa también para ti. Tú no te preocupes, confía en mí y disfruta como lo voy a hacer yo. Eso si, cuando llegues a Ibiza, no te folles a ninguna guarrilla ni llegues muy borracho porque cuando aparezcas en el hotel que reserves para nuestra semana en Ibiza, te voy a estar esperando cachondísima y te voy a dejar seco....." Ahora el que estaba nervioso era yo.
Llegó el día. Quedamos en vernos todos en Denia. Ellos irían por su parte y yo con Natalia en nuestro coche. Ya que ella tenía que estar un par de horas antes para que la explicasen lo que tenía que hacer en el barco y demás. Una vez que nos juntamos todos, ya por fin pude conocer a los amigos de Javi (el novio). Eran todos más jóvenes que yo. Eran muy majos y para alegría de mi chica estábamos todos de muy buen ver. Fibrosos, musculados (no mucho excepto uno de ellos que estaba cuadrado) y parece que alguno lucía unos abdominales perfectos. A Javi (el novio) le traían vestido de chinita un tanto porno, con unas mallas rojas y un camisoncito de raso rojo también.
Una vez localizado el barco, nos encontramos con el organizador que nos contó el plan. Que era tomar algo, mientras salíamos a mar abierto. Luego nos servirían algo de comida fría (ya que el barco no tenía cocina y todo era de Catering). Luego empezaríamos con las copas. Después sería el striptease. Y en el momento que quisiésemos nos podríamos parar para pegarnos un baño. Siempre y cuando estemos a tiempo para llegar al puerto de Ibiza antes del anochecer.
El barco era un yatecito. El "capitán iba arriba en la torre de mando y la parte de abajo era una salón cerrado con una "terraza" con mesas y sillas. Todo muy chillout y moderno. Era un señor barco. Y en la pequeña barra de bar estaba mi adorable Natalia junto a una rubia algo más alta que ella, guapísima. Con algo menos de culo que Natalia pero con unas tetas una o dos tallas más que las de mi chica. Iban vestidas las dos igual. Con una minifalda blanca, un top azul marino apretado y un gorrito de marineras. Se notaba que ambas llevaban bikini debajo del top.
Una vez nos presentamos todos al capitán y a las chicas el barco comenzó a salir del puerto, y nosotros nos fuimos directos a babear delante de nuestras camareras y pedirlas unas cervezas. En una de estas, se me acercó Natalia a traerme otra cerveza y al oído me dijo:
Natalia: "espero que te lo pases bien.... y que no me dejes de mirar en cuanto la rubia haga su striptease y tenga esas tetazas al aire, que yo ya las he visto y son impresionantes......"
Nosotros nos fuimos a poner todos el bañador a uno de los camarotes que había. Unos iban con bañadores de estos apretados tipo competición pero más anchos. De estos modernos y otros con bermudas más o menos cortas. Como ya he dicho antes estábamos todos de buen ver.
Una vez salimos del puerto, ya en alta mar y tras tres o cuatro cervezas Natalia comenzó a sacar platos de comida, mientas la otra chica que se llamaba Sonia, sacaba los platos de una cámara caliente. Nos pusimos a comer, mientras veía como las chicas cuchicheaban entre ellas y se reían mientras nos miraban. Parece que algo estaba tramando. Natalia la estaba contando algo a lo que Sonia la respondía, que por mi perfecto y sin problemas. Eso me pareció entender en sus labios. Estábamos terminando de comer y los chicos nos contábamos batallitas. Nos recogieron los platos de la mesa y Natalia nos empezó a traer los postres. Yo no me di cuenta, fue Alberto, uno de los amigos del novio, el que dijo:
Alberto: “menudas tetas tiene la camarera morena...” Yo me quedé sorprendido y directamente miré Natalia, que se había quitado el top y lucía su bikini blanco. Uno que la braga era brasileña casi tanga y la parte de arriba algo más pequeña de lo normal, unos triangulitos que tapaban una parte de sus tetas. Todos se volvieron a verla mientras la veíamos dirigirse a la cocina del barco, y Sonia, la otra chica insinuaba una sonrisa en su cara. Estábamos todos comentando la jugada, cuando volvió a salir Natalia, con una bandeja con los vasos con hielos para nuestras copas...Y SIN LA MINIFALDA. Iba con el bikini. Cada vez que entraba a la cocina se quitaba algo de ropa. Todos miraban abobados, sobre todo cuando nos dio la espalda y vieron su precioso culo en ese tanga blanco. Volvió a la cocina y estábamos todos mirando a ver si nos sorprendía con algo más y salió con los refrescos en otra bandeja, pero no parecía que se hubiese quitado nada. Hasta que Jorge, otro de los amigos, dijo que no llevaba el sombrero de marinera. Parece que el juego llegaba hasta ahí, mientras seguíamos babeando mirando su culo según se alejaba.
Al rato salió otra vez con una bandeja y se dirigía a nosotros, esta vez, con las botellas de Ginebra, Ron y Whisky, que casi la tapan la cara. Nos apartamos un poco para dejarla sitio para que la dejase sobre la mesa, y sorpresa... ESTABA EN TOPLESS. Se había quitado el top. Lucia orgullosa sus morenas tetas, tostadas al sol de la piscina de Madrid, de tomar el sol en nuestra casa y de alguna escapada a la playa. Se me puso la polla dura de ver sus tetazas moverse al inclinarse a soltar la bandeja, y se fue uno por uno a servirnos las copas. Estábamos todos babeando. Yo estaba cachondísimo y a ella se la veía disfrutar. Todo fueron comentarios al irse otra vez dentro. Que si que buena estaba, que menudas tetas, que vaya pezones más bonitos.... Natalia se dirigió dentro y puso música mientras apareció Sonia, vestida de colegiala.... era el momento del striptease....
Comenzó la música y ahí estaba Sonia la stripper, moviendo ese cuerpazo y quitándose poco a poco ese uniforme de colegiala, mientras mi chica, en tetas, recogía su ropa según la tiraba. Yo no sabía donde mirar.... bueno sí. Cuando llegó el momento en que Sonia ya sólo llevaba el sujetador y el tanga… ahí consiguió mi atención. Tenía un cuerpazo. De unos veinte tres años, rubia. Mediría un metro setenta y pico. Rubia de piel clarita. Culo redondo y pequeño, vientre muy plano y unos pechos increíbles. Grandes, no sabía si naturales u operados...pero rápido salí de dudas. Se deshizo del top, y pudimos ver esas tetas completamente naturales, perfectas, sin marca alguna de bikini, con unos pezones rositas pero grandes.... Eran duras y firmes, pero se movían con sus movimientos. Continuó bailando contoneándose, sólo con su tanguita negro. Cambió la canción y Sonia se acercó a nosotros. Cogió al novio y lo tumbó en el suelo. Javi iba con un bañador de competición rosa, que le habíamos comprado para la ocasión, así que se le marcaba una buena erección. Mientras Javi estaba tumbado, Sonia se sentaba sobre él, le ponía el culo sobre su polla y se lo frotaba bien, luego se ponía de cara a él y le plantaba las tetas en la cara. Le cogió las manos y se las puso en el culo, luego fue subiendo por su tripa y le colocó las manos en sus tetazas. No perdíamos detalle en cómo se movía Sonia. Me había hecho olvidar que mi novia estaba casi desnuda delante de 8 tíos. En esto que Sonia hizo una señal a Natalia, que se acercó con una cuerda y una silla. Colocó la silla en el suelo junto al novio, le cogió de la mano y le sentó sobre la silla, le ataron las manos a la espalda y a la silla, con lo que le dejaron inmóvil. Sonio siguió bailando mientras se sentaba sobre el, le ponía las tetas en la cara… Luego se sitió de espaldas a Javi, y de un golpe se quitó el tanga y se agachó delante de él, con lo que tuvo una visión perfecta de su culo y su chochito completamente rasurado. A continuación se pusieron a bailar las dos chicas, en un espectáculo un tanto lésbico. Bailaban cuerpo con cuerpo, se tocaban el culo, las tetas. Se pusieron cara a cara y se empezaron a besar mientras se magreaban todo el cuerpo. Ya se lo había visto hacer a Natalia alguna vez, pero estaba vez tenían más público. Después Sonia fue besando a mi chica, primero el cuello, después bajo a comerla las tetas, después fue bajando por su tripa mientras sutilmente fue quitándola la braguita del bikini dejando su depilado sexo a la vista de todos. Cuando su boca pasó por su rajita también la pegó un lametón a lo que Natalia pegó un leve gemido. Y todo está a escasos centímetros del novio que seguía atado a la silla. Después las chicas se fueron a por el novio. La stripper Sonia, cogió un bote de nata, y puso un poco en el canalillo y pezones de mi chica. Y esta se sentó a horcajadas sobre él, colocando su desnudo sexo sobre su polla a punto de reventar dentro del bañador. Acercó su canalillo y el novio no dudó en comerse toda la nata de entre sus tetas y después se fue a por los pezones que chupó con gana. Después Sonia colocó más nata, esta vez haciendo una línea entre el ombligo y hasta el sexo de Natalia. Ésta se acercó decida y fue acercándose poco a poco al novia, que sacaba la lengua hasta que Natalia estuvo lo suficientemente cerca y empezó limpiando desde al ombligo bajando, mientras Sonia, desataba las manos al novio, que cuando se vio liberado colocó son manos en el culo de mi chica y termino de comerse a conciencia la nata sobre el sexo de mi chica dándola algún que otro lametón. Mientras Sonia, se ponía nata en sus tetas e iba bailando y pasando por el resto de amigos a que la chupasen esas tetazas increíbles. Mientras el novio bailaba con mi chica y alguna que otra mano la colocó en las tetas. Cuando la stripper llegaba a mí, apareció mi chica con nata en los pezones y se puso frente a mi… riéndose, porque sabía que me moría de ganas de probar la nata sobre las tetas de la rubia.
Después de tremendo espectáculo, estuvo listo el capitán y decidió parar para que nos pegásemos un baño en alta mar, así nos calmaría un poco los ánimos. Detuvo la embarcación y nos fuimos todos al agua. Se podía ver las erecciones que llevábamos todos debajo de los bañadores. Estábamos ya todos en el agua y aparecieron las chicas. Natalia se había puesto la braguita y se iba a bañar en tetas, mientras que Sonia se había puesto el bikini completo. Se tiraron al agua y por aclamación popular las pedimos que se lo quitasen, pero no quisieron. Obviamente mi chica era la que llamaba la atención y todos querían jugar con ella en el agua y poder estar cerca de sus desnudas tetazas. Recibimos la llamada del capitán para comenzar de nuevo la travesía. Nada más subir al barco, nos fuimos a por nuestras copas y suplicamos a las chicas que se desnudasen completamente… se hacían de rogar, hasta que uno las ofreció 100 euros a cada una si se desnudaban… se miraron entre ellas y los bikinis desaparecieron… así que estuvieron desnudas el resto del trayecto. Recibiendo las miradas de todos.
Llegamos al puerto y nosotros nos fuimos a Ibiza a una famosa discoteca, mientras que las chicas se fueron por su cuenta. No pude acercarme en ningún momento a Natalia para decirla nada. Así que recibí un mensaje recordándome que me esperaba en la habitación 320 del hotel, que estaba muy cachonda y que tenía una sorpresa para mí…. Me dejó con la intriga… La noche fue larga… sobre todo porque llevábamos de copas desde la hora de comer. Así que a las 10 de la mañana dejé a mis compañeros de despedida y cogí un taxi hacía mi hotel. Llegué al hotel cansadísimo, deseando pegarme una ducha y dormir… pero debía cumplir antes con mi chica. Porque también tenía que descargar mi herramienta, me había puesto muy cachondo en el barco y bueno… la noche ibicenca también te permite ver muy buenos ejemplares… así que me dirigí a la habitación 320… llamé a la puerta, empezó a abrirse y apareció mi novia completamente desnuda. Me cogió del brazo, me metió en la habitación y empezó a besarme como loca. Me arrancó la camisa que llevaba, después que quitó los pantalones dejándome completamente desnudo, y cuando me dirigía a la cama vi que había alguien más en la habitación. Asustado paré, me separé de Natalia y de las sabanas apareció Sonia, la stripper completamente desnuda……
(continuará) davidrese@hotmail.com