miprimita.com

Secuestro de una Sumisa -final

en Sadomaso

El Amo me Busca.

Un día, mi madre me llama, nos ha invitado a cenar, acepto. Le indico a Marta que en casa nos trataremos como amigas, no como Ama y sumisa, que los errores que ella cometa se los hare saber de inmediato, pero que el castigo será en casa.

La cena era benéfica para los niños huérfanos de Afganistán, además era de máscaras, al llegar nos pasaron a Marta y a mi dos hermosas mascaras que estaban a juego con mi vestido, pasamos al salón donde estaba la familia reunida,  compartimos un aperitivo para luego pasar al jardín donde estaban ubicados los invitados, habrían unas 150 personas,  mi madre me designo una mesa, la cual constaba de 10 personas, nos sentamos, cenamos , conversamos luego el baile, todos salieron con sus respectivas parejas quedando solo nosotras, y respeto al lugar no salí a bailar con Marta, así que nos quedamos viendo como bailaba el resto.  Le pido a mi esclava que vaya al bar en busca de unos tragos, ella se levanta y va a enseguida a buscar lo solicitado. Quedo sola en la mesa. De repente escucho una voz tras de mí.

-Susana, has cambiado mucho, te hizo bien el paseo.- no lo podía creer era la voz del Maestre, del Amo, de mi príncipe… quise darme vuelta para verlo, pero él me detuvo.

-Aun no, aún falta para que me veas…sigue así, sigue educando a Marta, que pronto volveré por ti.- En eso para la música y algunos vuelven a la mesa, en tanto intento verle, pero ya se ha ido, solo ha dejado su máscara… es un recuerdo que guardare muy bien. Marta ha llegado, con lo pedido, pero al verme nerviosa pregunta, que me pasa, apenas le puedo decir… el Maestre estuvo aquí.

Después de esto no quise quedarme en la fiesta, nos despedimos de mi familia y volvimos al apartamento, al llegar enciendo las luces de mi dormitorio y encuentro un ramo de rosas, con una tarjeta que decía.

Para mi futura sumisa,

Que está ejerciendo de buena Dueña

M.A-

Me sentí vigilada, vulnerada no sabía qué hacer, por lógica debía llamar a mis padres, habían vulnerado la seguridad, pero si lo hacía podría perder todo contacto con él…, Marta, no era de mucha ayuda, ella estaba angustiada, se sentía más insegura que yo,  sentía que su pasado la venia a buscar, por lógica y por ella, llame a mis padres, quienes tomaron las medidas del caso, llego la policía, tomaron huellas de todo el lugar se llevaron la tarjeta lo único que me unía a él, lo de la fiesta también opte por contarlo, pero obvie lo de la máscara, quería retener su perfume, para soñar con mi AMO.

Luego de la investigación de rigor, no se encontró nada relevante para el caso, mis padres doblaron nuestra seguridad, lo que provoco un estrés en ambas me despreocupe tanto de Marta, que no me di cuenta de su dolor, no me daba cuenta de sus necesidades sadomasoquistas, ella creció con ese estilo, necesitaba los castigos para desahogarse, yo en cambio solo necesitaba a mi Maestre. Una noche, Marta entra en mi cuarto con sus muñecas sangrando.

 -Ama, si usted no me quiere prefiero morir.

La tome en brazos y junto con el equipo de seguridad la llevamos a la clínica, por suerte no eran tan profundas, luego de su curación volvimos a casa en silencio, ella estaba distante, me senté en el sillón, le pido que se acerque.

-Marta, ven recuéstate sobre mí. – tenía miedo, se acercó despacio con cautela. Al estar recostada sobre mí, acaricio su rostro amablemente, le acaricié su pelo, su rostro –Perdón Marta, susurre. Ella intenta levantarse pero se lo impido con ternura. Seguimos en silencio, pasado un rato ella duerme en mi regazo, me paro con cuidado para no despertarla, la veo feliz durmiendo, luego de una ducha relajante entro a la habitación encontrando a Marta en posición de sumisa en espera, y en sus manos mi cinturón,  sabía que debía castigarla por su estupidez,  así que tome el cinto, le indique la posición a tomar, sin aviso descargue el primer golpe, con tanta furia  que de inmediato su culo quedo marcado, era furia acumulada, por las situaciones vividas, descargue solo tres golpes, para luego quebrarme y llorar, cuando ya desahogue mi estrés volví a la realidad,  Marta aún estaba en la pieza, lloraba en silencio y no era por el golpe recibido era por la angustia de estos últimos días, la abrace nos acostamos juntas, sin someterla, sin castigarla, si humillación…sin sexo, solo dormimos como si fuéramos hermanas. Ya al otro día, las tensiones se habían relajado, pero debía tomar el control de la situación, a Marta le gustaba estar sometida, era su estilo de vida, así que tomo mi rol de AMA.

-Puta, despierta hay mucho que hacer- ella lo hace contenta, apenas escucho decir MI AMA ha vuelto.

-Si puta he vuelto, quiero revisar tus orificios, muéstramelos todos. Mientras ella se colocaba en posición, yo buscaba los artefactos que pensaba utilizar en ella, (unas bolas chinas, consolador anal con cola), me enguante las manos y la reviso.

-Haber puta, tu boca… que asco tienes un aliento de perra, la abofeteo.

-Tu choro…que horrible esta peludo, te has dejado estar puta, espero que tu culo este limpio- meto un dedo en él lo saco con mierda.

Pienso, he descuidado mucho a mi sumisa, pero debo reponerme, como dice “Primer Amo” aunque tú te equivoques tu sumisa debe pagar.

-Levántate sucia, dúchate depílate y vuelves desnuda, tu culo no lo limpies de ese me encargo yo.

Luego del tiempo esperado, Marta vuelve la llevo a la pieza del castigo, le pido que se suba hincada y de espalda al sillón, le coloco muñequeras y tobilleras, luego preparo un edema, sé que no le gustan pero hoy estoy tan sádica que lo preparo frente a ella, su mirada cambia de inmediato a suplica.

-Ama, no por favor, le prometo que no tendré más su culo sucio…

No hago caso de su suplica, inserto el catéter en su culo y empiezo a vaciar el líquido, ella se retuerce, cuando he vaciado todo el líquido le coloco un tapón, la levanto del sillón,  la ato aun poste y empiezo a castigarla, azoto su sexo recién depilado , por cada 3 azotes le aplico alcohol ella no soporta el dolor sus poros recién abiertos arden, pasado 10 minutos la suelto, la llevo al baño y saco el tapón, el líquido con toda la mierda que lleva dentro sale a chorro.

-Puta, saldré cuando vuelva quiero todo ordenado y limpio.

Salgo, voy a casa de mis padres.

-Mamá,  quiero hacer un viaje con Marta, este ha sido un año de mierda para las dos, al menos yo me siento secuestrada en mi propia casa, dile a Papá que nos libere un poco.

-Susana, te entiendo yo a veces también me siento así, pero es por nuestro bien.

-Madre, por favor has algo, que si sigo así soy capaz de huir de casa… no aguanto más- lloro en sus brazos, ella llama a mi Padre quien acude de inmediato, conversamos mucho rato, hasta que autorizo un viaje, pero con la misma seguridad, bueno algo es algo.

Al volver a departamento, este brillaba de limpio, de pronto me acorde de las heridas de Marta, le pedí a José unos de los guardaespaldas que la llevara a la clínica. Por fin sola, me recosté escuche música y dormí, soñé con él, desperté de pronto y SI, él estaba a mi lado, con su dedo me tapo la boca, aunque yo no pensaba gritar.

-Susana, que gusto verte, has cambiado mucho, me gustas, ¿así que te vas de viaje?, ¡elige Chile, es bonito! luego búscame en Villarrica, allí estaré esperando.-me besa me pide cerrar mis ojos y se va, me ha dejado excitada, ardiente, tanto que debo darme una ducha.

En la tarde mi padre me llama para que elija el destino de mi viaje, se asombra al escuchar que quiero viajar a Chile, y en especial a Villarrica.

-Susana, que vas a hacer allá, en si Chile es un país turístico, me han contado que tiene una belleza exótica, pero donde quieres ir es al sur de ese país, es frio, porque no vas a Cancún, en una de esas de reúnes con tus amigas.

Pongo cara de niña consentida (siempre me funciona)…Papá, por favor, quiero conocer otros lugares…

-Lo pensare, investigare y si puedo tenerte segura iras, de lo contrario tu viaje será a Cancún

Salgo cabizbaja, rogando que se pueda

A la semana siguiente mi Padre me llama anunciando que podre ir a Chile, hizo las reservas en la suite del Hotel El Ciervo, viajamos mañana en su jet privado, nuestra escolta la conformaran 12 personas, creo que exagera un poco, pero todo sea por el viaje y por mi Amo.

 Encontre mi amor

            El viaje fue largo y tedioso, hasta que por fin llegamos a Chile, luego a Villarrica, por toda la seguridad que llevaba, pensaban que era alguna estrella de Hollywood, Marta y yo ocupamos la Suite el equipo de seguridad habitaciones aledañas, luego de dejar el equipaje y descansar un poco, recorrimos el lugar, este era realmente hermoso un gran volcán y a sus faldas un lago, camine un rato luego llegue a la habitación, encontré una nota que decía:

Sumisa, pide a marta que salga de la habitación, que esta noche iré a verte

No sé cómo lo hacía para vulnerar la seguridad, quizás sea un miembro del equipo, imaginaba., a pesar de haberle prometido a mi Padre que no recibiría anónimos, me lo guarde, y esa tarde pedí a Marta buscar y comprar artesanía para llevar a mi país, por suerte no sospecho, sola en la habitación esperaba, de pronto aparece, vestido de jeans, botas, camisa cuello polo y su perfume …ese aroma que aún lo tengo en mi memoria, detrás de su Mascara, me sonríe, se acerca y toma de mis brazos tumba en la cama, despacio desnuda mi cuerpo, despacio empieza a excitarme, hasta arder con solo sentir su cuerpo, mis jugos caían por las piernas, esperando ser penetrada, esperándolo, mete sus dedos en mi coño los saca empapados, los chupa y saborea- Estas deliciosa-

Por favor, entre en mi- pido.

-Susana, paciencia hoy no serás afortunada, hoy serás castigada por ser tan ardiente- saca su cinturón, me deja boca abajo, azota mi culo 10 veces, al terminar me levanta de la cama, pero no me deja sobarme para calmar mi dolor-

-Susana “La caliente”, así te pondré cuando seas mía, ¿Por qué te castigue?

-Por Caliente mi amo.

-Bien dicho, mañana inscríbete en una caminata al volcán, en el grupo que sale a las 10:00 am, no uses ropa interior, me besa y se va.

            Esa noche no podía conciliar el sueño, le pedí a Marta que me excitara para sacarme la calentura que me dejo el Maestre. Ya de mañana tomamos un rico desayuno, fui a inscribirme en la caminata, pero para mí horror ya no quedaban cupos, hasta mañana, me desespere como lo iba hacer, mi Amo me hizo una solicitud y no la cumplí. Sentía rabia y pena, ni con todas mis influencias y dinero pude conseguir un lugar en esa bendita caminata, estuve furiosa toda la mañana, ni Marta se acercó, solo un mozo, que vino a dejar un trago que no pedí, a pesar de mi mal humor recibí ese trago, no entendía pero el insistía que revisara el portavasos, lo hice y cuál fue mi sorpresa era una carta de mi Amo.

Susana “La Caliente”, ve a tu habitación sola, espérame desnuda y con los ojos vendados, castigare tu desobediencia, llegue a la cima sin ti.

Me pare de inmediato, marta estaba bañándose en la piscina, llegue a la pieza el equipo de seguridad estaba esperando, fingí un malestar para que me dejaran en paz, entre me desnude cubrí mis ojos y espere…espere… hasta sentir su aroma, su calor.

Susanita, mi puta caliente, te pedí tan solo una cosa y no cumpliste.

-Amo. No… había – Silencio- dice y  golpea mi cuerpo, -Un puta caliente no da excusas solo obedece, sus excusas solo aumenta el castigo.

-Hoy tu castigo será llevar un vibrador por toda la tarde, a la noche te lo vendré a sacar. Abre tus piernas, lo hago el introduce el aparato, y lo hace funcionar…. Me agito con violencia, -Amo pare, basta – cuenta hasta 20 y te vistes Caliente. Pasado el tiempo obedezco, llevo el vibrador por todo el día, tiene control a distancia, y el mando lo tiene él.

 Así pasan los días de descanso en ese lugar, el último día de estadía, me envía una carta.

Susana  si quieres conocerme, debes entregar a Marta a mis hombres ella tiene asuntos pendientes conmigo y debe ser castigada. Luego viajas a de vuelta a casa, termina tu año de estudio y yo te buscare.

Por amor a Marta, no hice lo que me pidió, volvimos a casa, termine mi año académico, seguía soñando con él, pero cada vez menos, una tarde Marta se acercó a mí con la carta en la mano.

-Mi ama porque no me entrego.

-No quise que te lastimaran.

Ama, gracias nadie había hecho algo así por mí-sollozaba, nadie…

La mire le sonríe, luego mire al infinito y llore.

Ama, acompáñeme sé dónde está el Mestres,

…. Marta fue la que me entrego a él, por fin soy su Sumisa, su Susana “La Caliente”, llevo 3 años en su poder, soy la sumisa más feliz del mundo.

Epilogo.

Cuando Marta me llevo a donde el Mestre, pensé que no sería recibida, pues no había cumplido sus órdenes, pero era una prueba si hubiese entregado a Marta nunca lo hubiese conocido…pues él esperaba lo contrario lo que debe hacer un buen AMO, “CUIDAR Y PROTEGER A SU SUMISA”…y yo lo hice…

Fin.