miprimita.com

Un taxista con suerte

en Hetero: General

Melanie salía de un pub después de una noche de fiesta. Tras una buena noche de diversión se metió en un taxi para irse a casa. Dijo la dirección sin siquiera mirar hacia delante, pero al mirar al retrovisor, se le subieron las pulsaciones por el tío tan guapo que conducía el taxi. Decidió presentarse.
-          Soy Melanie.
-          Encantado, yo soy Rafa.
 
Siguieron conversando durante el trayecto. Melanie, se estaba poniendo cachonda por el atractivo de aquel taxista, y se acariciaba la entrepierna a escondidas. Su rostro, su cuerpo, su voz… todo en él la excitaba. Quería su polla locamente. Llegaron a la dirección, pero Melanie no quería irse a casa. Rafa paró el taxímetro y ella le dijo:
-          Tengo un problema. Creo que he perdido la cartera. - Mintió
-          Lo siento pero no puedo dejarte ir sin pagar.
-          Bueno, hay otras formas de pago… - Insinuó ella con voz sensual.

 

 

 

Entonces se pasó al asiento del copiloto, y una vez sentada allí, dirigió sus manos a la bragueta de Rafa. La desabrochó y sacó su miembro. Se relamió de ver una polla tan grande. Se agachó y llevó la cabeza hasta su entrepierna para chupársela. Disfrutó mamando su polla un rato. Se la sacó de la boca un momento para decir:
-          Ahí detrás hay unos campos. Conduce hasta ahí que estará más oscuro y tranquilo.
 
Rafa obedeció y llevó el coche hasta ahí mientras Melanie estaba amorrada a su miembro. Pasó a lamer sus huevos, disfrutaba chupando. Utilizaba su húmeda lengua para saborear cada centímetro del pene del taxista.
-          La chupas muy bien, pero eso no es suficiente para pagarme el viaje.
-          Tranquilo, no pensaba parar aquí.
 
Sacó un condón de su bolso, lo abrió y se lo metió en la boca mirando a Rafa. Después volvió a meterse su polla en la boca y fue bajando poco a poco hasta que ese inmenso aparato hubo entrado completamente en su boca, y luego se la sacó. El condón cubría el pene entero, lo había puesto con la boca, y parecía tener práctica en ello.
-          No sabía si me iba a caber entera. – Bromeó ella. Pero Rafa estaba muy excitado como para contestar.
 
Se limitó a echar el respaldo del asiento hacia atrás. Melanie se pasó a su asiento, sentándose encima de él. Se quitó el vestido de una pieza y lo echó a un lado. Mientras Rafa hacía lo mismo con su propia camiseta, Melanie se desabrochó el sujetador y lo tiró también. Una vez así, ambos se fundieron en un profundo beso. Sus lenguas recorrían la boca del otro con efusividad. Ella pasaba suavemente sus manos por el pecho de Rafa, y las manos de éste agarraban las tetas de la chica, todo sin dejar de besarse.
 
Entonces Melanie se levantó un poco y echó su tanguita ligeramente hacia un lado, para dejar paso al coño. Se sentó sobre la punta del gran miembro viril de Rafa y se lo fue metiendo dentro poco a poco. Una vez estuvo completamente en su interior, resopló ampliamente por el esfuerzo de tener tal aparato dentro de ella. Después empezó a subir y bajar follándose a Rafa. Alcanzaron buen ritmo y ella botaba encima de él con ganas. Ambos se miraban con lujuria mientras tenían sexo dentro del taxi. Sus miradas se clavaban en el otro al tiempo que sus cuerpos sudorosos se rozaban. Los pezones erectos de Melanie parecían dibujar en el pecho de Rafa. Él agarraba el firme culo de ella para llevar el ritmo.  En ocasiones se daban algún beso apasionado más. Sus lenguas no podían estar separadas mucho tiempo. Se miraban continuamente. Melanie se abrazaba a Rafa mientras él la penetraba, y éste aprovechaba para susurrarle al oído.
-          Eres mía… - Decía sensualmente. Melanie sólo podía gemir del placer. – Ahora sólo eres mía. Y si te quiero follar, te follaré, porque eres totalmente mía.
 
En ese momento Melanie sentía que estaba totalmente a disposición de Rafa. Era tal su excitación que estaba dispuesta a cumplir cualquier perverso deseo que tuviera el taxista en ese momento, y estaba disfrutando increíblemente del polvo. “Sal del coche” murmuró él, y ella obedeció. Una vez fuera del coche, la cogió bruscamente del brazo y la tiró contra el capó del taxi. Luego bajó las bragas de Melanie, y se acercó a su oreja.
-          Voy follarme tu culo...
 
Esas palabras excitaron tremendamente a Melanie, que estaba casi temblando. Rafa se la metió por el culo con cuidado. Ella se separaba los cachetes del culo con las manos para facilitar la entrada. Él la cogía de la cintura para llevar el ritmo. Melanie se dejaba hacer. Tirada sobre aquel capó de taxi, con los pies apoyados en el suelo. El capó, aún caliente, producía calor sobre las tetas de Melanie, mientras Rafa se la follaba por detrás. Estaba siendo sodomizada por un desconocido sobre su taxi, y eso le gustaba.
 
Cada vez que Melanie giraba la cabeza se encontraba con la mirada de Rafa clavada en sus ojos. Él la penetraba analmente con dureza. Un fuerte orgasmo anal sacudió el cuerpo de Melanie, que evitó como pudo gritar locamente. Las piernas le temblaban pero Rafa no iba a parar, estaba cerca del orgasmo él también.
 
Entonces dejó descansar su culo. Subió a Melanie encima del capó y la puso boca arriba. Rafa se quitó entonces el condón y apoyó su polla desnuda sobre el coñito de ella. La metió con bastante más facilidad que por el culo y sintió ese calor húmedo envolviendo su miembro. La gran polla de Rafa entraba y salía de Melanie. Sus tetas bonitas y naturales se balanceaban en movimientos circulares. Le gustaba sentir los golpes de los huevos de Rafa sobre su depilado coño. Estaba volviéndose loca de placer. Se mordía los labios para contenerse porque cada vez que él la penetraba se sentía en el cielo.
-          Me voy a correr.
-          Sí, dame tu leche. – Exclamó Melanie mientras se arrodillaba frente a Rafa. – Cubre mis tetas con tu semen.
 
Melanie se agarró ambas tetas ofreciéndolas. Rafa se pajeó un poco más hasta que por fin empezaron a salir chorros de semen de su polla y cayendo sobre los pechos de Melanie. Ella gozaba notando ese líquido espeso y caliente sobre sus tetas. Cuando acabó de correrse Rafa, Melanie chupó su polla, succionando para llevarse hasta la última gota.
 
 
JUAN
Puedes darme tu opinión escribiendo a:
juan_s_s@hotmail.es
juan_s_s2@hotmail.es
 
 
 
MÁS RELATOS ESCRITOS POR MI EN MI BLOG: http://relatosjuans.blogspot.com.es/