miprimita.com

Tetazas De Uso Público (Parte 3) Final

en Hetero: General

Cuando subí al coche golpee a Gabri llorando.

-          Todos me han tratado como una puta no sabes todo lo que he tenido que pasar por la estúpida idea de hacer de stripper. Me siento muy molesta y muy cansada quisiera irme de aquí. 

-          Cuando te fuiste salimos tu marido y yo a buscarte, pero pensamos que te cambiarias y te irías al hotel, después continuamos con la fiesta dentro del reservado del restaurante. Acabamos, les pague a las chicas y me dijeron que tu ropa continuaba en el almacén. Entonces imagine que estarías corriendo desnuda por la calle. Deje a tu marido en el hotel, estaba muy borracho, comprobé que no estabas y salí a buscarte, los policías de aquí son casi todos amigos míos y fueron ellos los que me mandaron un WhatsApp cuando te encontraron.

Me vestí como pude dentro del coche mientras el conducía hacia el hotel, sin dejar de observarme.

-          No quiero subir a la habitación. Invítame a comer algo.

Fuimos a uno de los pocos sitios que quedaba abierto; una sucia hamburguesería no lejos del hotel. Pidió dos burgers y unas coca colas. Las devore con avidez, mientras lo interrogaba, quería enterarme de cómo había llegado a la patética situación de andar desnuda por las calles, ser forzada a practicar sexo con extraños, y ser manoseada por la policía, no sucedía ni en las películas.

-          Tenías que haberme dicho que eran putas y que pretendíais hacer allí una orgia, entonces un hubiera aceptado a desnudarme para vosotros.

-          No estaba planeado, de verdad, solo era un striptease y tontear con el novio, sí que te iban a sobar los melones y a meter mano pero no pensé que llegara a convertirse en un desmadre, pero cuando a una puta le ofrecen dinero, hace su trabajo. Lo siento, no quería que te metieras en esto.

-          ¿Mi marido estuvo con alguna de esas?

-          Eso no te lo puedo decir, pregúntale a él.

-          Entonces, si  estuvo

-          Yo no he dicho eso

-          ¿Con cuál?

-          No te lo voy a decir

-          Ya te has descubierto. Cuéntamelo todo ¿Qué hicisteis con las chicas?

Creo que le presione tanto y me vio tan enfadada que me empezó a contar con detalle la fiesta.

-          Muchos se llevaron una desilusión cuando saliste corriendo. Le gustaste a muchos de ellos que querían usar tus tetas para hacerse una paja y se enfadaron con el que provoco que te fueras

-          ¿Qué dijeron cuando me fui?

-          Que estabas muy buena y que querían jugar con tus tetas

-          ¿Solo eso?

-          No te enfades. Pero decían que eras un poco mayorcita pero tus tetas eran impresionantes. Otros decían que estabas muy bien compensada bajita y tetona.

-          Que imbéciles.

-          No les gusto que te fueras.

-          Si me hubiera quedado me hubieran follado todos.

-          Puede ser.

-          ¿Y las chicas?

-          Las chicas si follaron con algunos, todos querían a la rusa, hizo algunas mamadas. Y follo con un par de ellos. Pero la mulata recibió más. La pusieron de culo contra la mesa y creo que todos pasaron por ahí, esa era más putilla y también se la metieron por el culo. Saco un buen dinero.

-          Tú también. Yo no. Estaba más pendiente de que todo fuera más o menos bien.

-          ¿Y mi marido? No insistas no te lo voy a decir.

-          Se la metió por el culo ¿verdad?

-          No lo se

-          Venga. Creo que me debes algo más que “no lo sé”

-          Si, él fue el primero en sodomizarla.

-          Que hijo de puta. Yo odio que me la meta por el culo, no me gusta nada. Y el siempre insiste.

Apure mi coca cola y me levante.

-          Ha sido un placer conocerte. Espero no volverte a ver más.

Quizá fui un poco arisca, al fin de cuentas era el único que me había ayudado. Cuando llegue a la puerta note que no tenía ganas de ver ahora a mi marido borracho roncando en la cama. Me volví y le dije lo más simpática que supe: - Si me invitas a una copa, te perdono.

El sonrió y fuimos a un pub cercano, tomamos un par de copas, charlamos y bailamos, hasta que él dijo de irnos.

-          No tengo ganas de ir al hotel

-          ¿quieres quedarte a dormir en mi casa? No está lejos.

-          ¿me estas proponiendo algo?

-          No, creo que a los dos os vendrá bien no veros esta noche.

-          Quizá. Vale, pero solo dormir.

-          De acuerdo

Estaba claro que no iba a ser así, y más cuando me llevo a un precioso ático con vistas a toda la ciudad, puso algo de música mientras yo me duchaba y me dejo ropa para dormir.

 Cuando termine, el me esperaba tan solo con los pantalones, lucia su atractivo y atlético torso del no pude apartar la vista. Me abrió el sofá y puso toda la ropa de cama, se desenvolvía muy bien para vivir solo.

-          Estarás cansada. Esta cama aunque no lo parezca es muy cómoda.

-          Está bien. No te preocupes.

-          Sabes. Te queda por decirme porque decidiste hacer el striptease, hay que ser muy valiente para atreverse.

-          Je, je, je. Yo soy una mujer valiente. Me gusta sentir, tener experiencias.

-          A mí también, pero hoy estaba más preocupado de que todo saliera bien. Tanto que creo que fui el único que no pudo acariciar tus pechos.

Creo que no podía dejarlo así, era un tipo atractivo, me había cuidado y estaba muy cabreada con mi marido, me quite la camiseta y me acerque a él.

En lugar de tocarme se lanzó a mis labios, note un beso esponjoso, dulce y la punta de su lengua acariciar la mía, su fuertes brazos rodearon mi cuerpo en una sensación de protección y seguridad, mientras continuaba devorándome la boca. Me tomo en brazos y me llevo a su dormitorio tumbándome sobre la cama y con destreza puso la cabeza entre mis piernas y me lamio el clítoris como un auténtico maestro. Hoy realmente era un día de sensaciones.

Podía sentir claramente como su lengua se introducía en mi vagina, un montón de sensaciones recorrían todo mi cuerpo, lo que estaba pasando en ese momento sin duda era lo mejor de ese día, después de complacer a tanta gente ya era justo que alguien hiciera lo mismo por mí.  Lo deje que estuviera entre mis piernas por largo tiempo luego poco a poco fue subiendo hasta mis tetas y delicadamente comenzó a acariciarlas, pude notar que sus manos lo hacían con ternura y eso me gustó mucho, sin decir más esta vez de nuevo unimos nuestros labios mientras continuaba acariciándome. Mi turno llego y era hora de devolver el favor así que decidí hacerle una mamada, ya para este momento se notaba que el amiguito de Gabri estaba más que despierto .No puedo negar que estaba muy bien dotado sin pensarlo más lo lleve a mi boca y comencé a jugar con mi lengua, recordé que este truco me funciona muy bien con mi marido y pensé que tal vez a Gabri podría gustarle también, mientras hacía esto miraba lo miraba fijamente ,me gusta mucho ver la cara de placer de mis amantes se veía que lo estaba disfrutando. 

Separo mi cabeza de su pene: - déjalo ya. Me tumbo boca arriba y me penetro despacio, jugando en la entrada de mi cueva con su dulce verga, los movimientos de su pelvis me conmovían, mis senos bailan en un dulce movimientos, con intensidad pausada, me los toque, sentía mi cuerpo arder. Me agarro los pechos, uno en cada mano mientras me seguía penetrando.

-          Tienes unas buenas tetas pero la gente no se da cuenta de que tu mejor parte es la trasera. 

Dijo de repente, sin venir al caso, se levantó de la cama y me tumbo boca abajo, quede estupefacta por su reacción con tono poco romántico y agresivo. Me cacheteo el culo

Mi culo es grande y firme debido al ejercicio, no voy a negar que estoy muy bien proporcionada.

Me quede algo sorprendida de sus palabras y del vuelco en su forma de actuar, me desconcertó mucho el cambio Tan repentino de Gabri, me asuste un poco.

Me abrió las nalgas y metió su durísimo pene por el ano, no estaba preparada para ese cambio tan violento después de lo cariñoso que había sido. Me hizo mucho daño.

Cada varias penetraciones me golpeaba el trasero. Ni siquiera sé por qué no opuse resistencia a tan repentino cambio, Gabri se había puesto muy brusco conmigo, era una sensación muy extraña entre gusto y miedo, tal vez por eso no dije nada

-          Me encantan este tipo de culos.

Me hizo incorporarme quedando a cuatro patas y poder agarrarme las tetas, mientras me penetraba duro golpeando en cada movimiento mis glúteos, era como un conejito enganchado a su hembra, a toda velocidad apoyado en mi espalda y apretando mis pechos casi hasta hacerme daño

-          Estoy muy cansado para darte más.  Dijo mientras llenaba de leche mi intestino

Estuvo agarrado a mí hasta vaciarse entero, pellizcando mis pezones y golpeando mis pechos.

Quede muy decepcionada, una vez más me había utilizado como un objeto sexual .Mientras me aseaba pensaba en la actitud tan rara que Gabri había tenido conmigo, me sentía muy confundida pero aun con tantas dudas en mi cabeza ya no quise cruzar palabra con él, lo único que quería era dormir estaba demasiado cansada.

Cuando desperté por la mañana no había nadie en casa, Gabri me había dejado una nota y 200 €, me había hecho quedar como una verdadera puta. Me sentí enfadada e insultada con ello, más aun con la nota:

“Mi querida Paty.

Desde que te conocí ayer me apeteció follarte, por varios motivos, por lo potente, segura y feliz con tu marido, por lo cachondo que me pusiste en el striptease; podrías dedicarte a ello, meneas los melones que vuelves loco a cualquiera. Por lo buena que estas y las enormes tetazas que tienes, me encanto ver cómo se las follaban todos los que quisieron. Pero sobre todo por vengarme de tu marido, tenía algunas cuentas pendientes de la universidad, me levanto unas cuantas novias, él era siempre el guapo con éxito y yo solo el simpático.

Hay cosas que no se olvidan, como nunca olvidaras este fin de semana en mi ciudad. Por cierto, tu marido está loco buscándote, ve rápido a tu hotel, no sabes lo preocupado que esta por ti.

Besos

Gabri

PDT: Que sigas presumiendo ser la tetona más feliz del mundo”

De largo puedo estar segura que siempre recordaré esta experiencia, por lo mal que la pase,  pero ese es el pago que me llevo por haber ayudado amigos que ni siquiera eran míos.