Hola me llamo Borja, tengo 35 años y siempre he tenido una fantasía por cumplir, convertirme en Jimena... soy una CD que se viste de putita y masturba en casa. hablo con gente en los chats pero nunca he dado el paso para quedar en persona. tengo un consolador en casa y de vez en cuando lo utilizo. 

Mido 167 cm y peso 68k, tengo ojos azules. Nadie me ha visto jamás vestida así, pero hoy es un día especial. Esta tarde he quedado con un chico y va a ser mi primera vez... He soñado este momento desde hace mucho tiempo y los nervios y las ansias son increíbles.

Llevábamos mucho tiempo hablando. De forma interrumpida. Él me dijo que se llamaba javi, pero yo siempre he pensado que no es su verdadero nombre. Mis miedos siempre ganaban y al final no quedábamos o yo no me decidía. Siempre me puso cachonda. Siempre. Es el tío con el que he hablado por internet con mayor decisión y mayor seriedad. Un tío legal. Y eso siempre me ha gustado. Siempre he sabido que era él a quien debía entregarme. Esta vez todo era diferente. Es muy firme y le gusta ordenar. Ser duro. 

Era domingo por la tarde. Sabía que era mi última oportunidad. Así que llamé al timbre de su portal. Me abrieron pasados unos segundos. Yo iba vestida de chico, ya que nunca salgo a la calle vestida de Jimena. Habíamos quedado en que él me dejaría la puerta entreabierta y yo entraría dejándola cerrada y buscaría la luz encendida del baño.

Una vez dentro del baño gire la cerradura. Encendí un cigarrillo de marihuana y encontré allí el cenicero que le había pedido. Di un par de caladas y me puse como una cerda. Empezaría a transformarme en la mayor puta de la ciudad. Una puta perra sumisa. Me había depilado y mi piel estaba lisa y tersa. Como la de una puta de mierda. El 100% de mi cuerpo estaba depilado. Además estaba muy blanquita y tenía algunos lunares. Me puse la peluca morena lisa de flequillo recto. Me maquillé como una pornostar. Labios rojos y raya negra en el ojo. Unas pestañas postizas con rímel y un poco de colorete. Me puse un bikini color dorado con brillo metálico, unas braguitas de cuadros rosas y unos taconazos negros. Encima del bikini me coloqué un vestido rejilla negro como una autentiza puta. Llevaba uñas postizas en las manos.

Me mire al espejo y vi a Jimena. Una auténtica zorra. Me puse cachonda al instante. Saque de mi mochila la bala anal y la ensalive en la boca. Tardé un poco en metérmela dentro de mi culo de puta. Con la bala dentro me entraban escalofríos y me ponía mucho más cachonda. Tenía ganas de entregarle todo a mi macho alfa. Entregarle todo a mi amo. Di las últimas caladas al cigarrillo y mastique un caramelo de fresa para eliminar el olor a tabaco y marihuana. Llevaba bastante perfume que ayudaba un poco. Cogi un collar, unas pinzas, una bola y un un vibrador metálico. También lleve conmigo unas esposas de velcro que inmovilizan las manos en el muslo. Salí del baño subida en mis tacones y con pinta de puton. llegue hasta el salón y allí vi a mi macho alfa. Estaba en el sofá, y me acerqué  a la mesa sin decir nada. Mi corazón estaba temblando, mi pulso superacelerado. Estaba muy nerviosa. Empezaba a respirar entrecortado y deje las cosas encima de la mesa. Me retiré hacia atrás y entrelace mis manos a la espalda ante él. 

• Muy bien puta de mierda - me dijo él. Bienvenida Jimena. 
• Gracias AMO - dije yo

Se puso de pie y se acercó. Se puso ante mi y comenzó a acariciarme. Yo permanecía inmóvil. En un momento concreto me agarro del cuello y comenzó a lamerle un brazo, siguiendo hasta la cara. Entonces empezó a apretar el cuello con su mano y me dio una bofetada. Yo inspire fuerte y me dio un escalofrío. Jimena ya estaba muy cachonda... hablaba mucho conmigo, me decía lo puta que era, y lo que me iba a pasar, y eso me ponía como una perra. De vez en cuando me abofeteaba la cara y a mí me gustaba. Algún cachete me caía en el culo. Entonces se volvió al sofá y me ordenó que me pusiera de rodillas con las manos a la espalda. 

• Esta será tu posición de servicio, siempre que estés ante mi está será tu posición. Ahora levántate, ve a la cocina y ponme una copa con hielo - me dijo él con tono decidido.
• si AMO - conteste yo y así obedecí

Al volver con la copa hacia el salón vi que javi tenía su rabo fuera y estaba pajeandose. Le di la copa y volví a mi posición de servicio. El bebió de la copa y continuó pajeandose mirándome. Tenía una cara de cerdo que me ponía muy cachonda. Allí estaba yo, sirviendo a mi AMO y excitándole con mi sola presencia. No podía ser más feliz. No podía ser más agradecida que sirviendo a mi AMO dándole placer. Entonces me dijo:

• date la vuelta y abrete el culo - y yo obedecí - JOOODER!!! Si llevas la bala dentro!!! Pero menuda puta que estás hecha! Eres una puta guarra de mierda Jimena - y mientras tanto aumentaba la velocidad de su mano mientras se pajeaba. 

De pronto dejo de masturbarse:

• Quiero que atiendas bien - continuó - saca la bala y coge tu vibrador metálico. Quiero que te corras delante de mi - me dijo

A mí me sorprendió, pero me puso la idea muy puta y obedecí. Saque mi bala, y me costó un poquito. Cogi de la mesa el vibrador y me puse de rodillas ante el. Lo metí en la boca y lo salive. Me lo llevé a mi parte de atrás y lo introduje con cuidado...

• ufffffffff! Que puta soy joderrrrrrrr!!!! - dije gritando

• ¿Alguien te ha dicho que hables? - dijo él desde el sofá mientras se levantaba y se guardaba la polla en el pantalón. - mantén dentro el vibrador, sin moverlo - y se puso de rodillas delante de mi. De rodillas quedaba claro que era más alto que yo, más macho, más potente, más dominante. Mi macho alfa. Cogió el collar de la mesa y me lo puso, para después tirar de mis pezones y ponerme unas pinzas. Entonces cogio una bola con correa y me la metió en la boca. - esto es para que no hables puta de mierda - y después de ajustarme las correas me escupió en la cara y me dio una bofetada que me giró la cara...

Se volvió hacia el sofá, se sacó su rabo enorme y comenzó a masturbarse. - ahora córrete puta - y me miró con cara enfadada. Allí estaba yo, ante mi macho, vestida como una puta pornostar, con tacones, bikini y rejilla, peluca morena estilo cleopatra, el vibrador en el culo metiendo y sacando con una mano, con la otra masturbandome mi coño, de rodillas y con un escupitajo de mi AMO deslizándose por mi cara... yo aumentaba el ritmo de mi follada y cada vez estaba más perra. Comenzaban a temblarme las piernas. Emitía sonidos extraños con la bola en la boca y más pinzas empezaban a molestarme apretando mis pezones. Estaba empezando a retorcerme de placer, y mi AMO se dio cuenta - tienes permiso para correrte Jimena - el simple hecho de escuchar su voz provocó un escalofrío que recorrió desde mi culo hasta mi cerebro y provocó que me corriera como una puta de mierda en el suelo.

Me senté sobre mis talones intentando recuperar el aliento y me fijé que él había dejado de masturbarse y se subió el pantalón. Se levanto y salió de la habitación. Yo esperé exhausta en el salón y al rato volvió con algo en la mano. En la otra llevaba papel de cocina con el que limpiar el suelo y los restos de corrida de mi coñito. Luego puse ver qué llevaba en la otra mano. Era una jaulita para mí coño. Era de plástico de color negro, y traía un candado. Se puso de rodillas ante mi y entonces me la puso, encerrando mi coño recién corrido. Colocó el candado y metió la llave a través de su cadena fina de plata que llevaba al cuello. Se guardó la cadena con la llave por dentro de la camisa, y me dijo al oído:

• bienvenida a mi mundo Jimena...

¿Continuará?

si te ha gustado el relato házmelo saber y así continuar con una segunda parte. Por favor deja tu opinion. para contactar conmigo puedes consultar mi email en mi perfil. 

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