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Putita sumisa de mi novio (Segunda parte)

en Dominación

Como Marcela les contó anteriormente, nuesta relación es increible y sobre todo en la cama nos encanta experimentar y sobre todo a mi me encanta hacerla disfrutar al maximo, al mismo tiempo que yo disfruto increiblemente de cogerla como a mi se me antoja.

Bueno, ahora sí, yendo al grano, cuando descubrí que a mi novia le gustaba que la usara a mi antojo, que se ponía muy caliente cuando la dominaba y la usaba como una verdadera putita, decidí ver que tanto le gustaba serlo.

después de comprarle y usar el plug en su culito, sabía que a ella en verdad le encantaba sentirse muy llena de todos sus hoyitos, a veces mientras la cogía la hacía montarme con su plug dentro para poder jugar con él dentro de su culito con mi pene en su vagina y le ponía mis dedos en su boca y ella los chupaba como desesperada de lo caliente que estaba, yo le decía cosas como "¿te gusta estar así de llena putita?" y ella decía que le encantaba.

Entonces decidí ver que tan llena podía estar... aquí empieza realmente el relato.

Para empezar a hacerla una verdadera putita, empece a decirle que se vistiera como tal, entonces un día le dije "mi amor, voy a pasar por ti, vistete muy putita para mi" yo llevaba una sorpresa para ella... pero cuando llegué por ella yo tambien me llevé una linda sorpresa.

cuando ella salió, iba vestida muy putita, unas botas con tacón alto, un leggin muy ajustado a su culito y un top que dejaba descubierto su abdomen. en cuanto salió la abracé la bese y la subí al coche, no sin antes decirle que tenía una sorpresa para ella, a lo que puso una cara de putita viciosa.

en el camino, yo no perdí el tiempo, al momento meti mis manos debajo de su leggin y haciendo de lado su tanguita empece a meter mis dedos, haciendola acabar varias veces antes de llegar al motel, cuando llegamos ella estaba deseosa de ser cogida, estaba muy caliente y empapada totalmente. 

la acosté en la cama, le quite toda su ropa, le até sus manos detrás de su espalda. vendé sus ojos y comencé a comerme su vagina que de por sí ya estaba empapada, metí mis dedos haciendo que acabará mucho, mojando toda la cama mi mano y mi cara, entonces levanté sus piernas, dilaté un poco su culo y metí su plug dentro, después me subí yo sobre ella y empecé a cogerla como le gusta, muy duro, ella estaba muy caliente, entonces acerqué de nuevo mis dedos a su boquita y ella los empezó a chupar, fue entonces cuando le dije "¿quieres chupar y mamar algo rico?" y ella solo decía con su cabeza que sí. entonces saqué su nuevo regalo, era un dildo un poco mas grande y grueso que mi pene, y se lo puse en la boca, ella inmediatamente lo empezó a mamar, lo hacía hasta ahogarse.

Pero yo quería verla aún mas puta, aun más caliente, así que se lo saqué de su boca, abrí mas sus piernas y se lo empecé a meter por su vagina, era difícil moverme, ya que tenía el plug en su culito, mi pene y su dildo en su vagina, pero entraban todos, allí me dí cuenta que mi putita realmente podía con mas de tres penes al mismo tiempo. eso me puso muy caliente, mientras la cogía la ahorcaba, le chupaba sus tetas, le daba cachetadas y la cogía lo mas duro que podía mientras apretaba tanto su vagina, ella no paraba de terminar, una y otra vez sus orgamos estan tan intensos que con mi mano libre tenía que detener el plug de su culo porque sino se salía, entonces como el dildo tiene para pegarse a alguna superficie, lo pegué en uno de los espejos, la levante, desate y le quité la venda de los ojos, y ella solita con su plug aun en su culito, se lo metió todo el dildo cogiendose solita, poniendose como la perrita que le gusta ser, mientras yo me puse delante de ella y ella me chupaba mi pene hasta el fondo, mas deseosa y caliente que nunca.

Después de tenerla así un rato, le dí la vuelta, para ser yo el que la cogiera, y mientras miraba en el espejo como ella chupaba el dildo lleno de su propio flujo, eso me pusotan caliente que estaba a punto de terminar, le jale su cabello la puse de rodillas y empecé a llenarle la boca de semen. 

esa noche cogimos varías veces, siempre llenando todos sus hoyitos, y eso se repitió otras ocasiones, pero fué después en el siguiente relato les contaré como empezó a querer ser aun más putita.