'¿¡Ahora intervienes y no cuando me follaba la boca!? ¡Eres un cabrón igual que él!
Segunda entrega: Habla de forma torpe y lenta y aprovecho todos estos factores para ocultarme debajo de la cama sin que apenas se note.
Me levanté y subí a la tarima para ver mejor desde allí a toda la clase.
He de empezar diciendo que esta historia se ubica en una centro de secundaria a nivel de cuarto de la ESO pero que la historia la vive una repetidora así que tiene dieciocho años. Es una chica de metro sesenta y cuatro aproximadamente, con el pelo a la altura de los hombor casi siempre recogido de forma desastrosa en un moño, con piernas delgadas (aunque no en exceso), un culo de infarto y unos pechos más bien escasos.
Ya verás como en un par de veces más el simple hecho de comerme la polla va a hacer que te mojes mucho para mí.