El día anterior de trabajo había sido una locura, un hombre se dispuso a calentar mi día, parecía convencido de lo que quería y yo estaba dispuesta a jugar con él, mi fiera solo acababa de comenzar a despertar.
Un viaje de verano que me hace descubrir realmente los placeres del sexo.
Mientras trabajaba como otro día cualquiera, un hombre se dispone a calentar mi día a día, consiguiendo despertar mi fiera.
Y lo conocí... Por fin pude encontrarlo, poco a poco mis más profundos sueños se harían realidad.