Al dia siguiente me desperte con un leve dolor de cabeza, y al recordar pasajes de la noche anterior me asalto una tremenda duda: lo que habia pasado en el baño ¿fue un sueño o fue real?... pensaba en esto cuando escuche a alguien tarareando, supuse que seria Karen.
Entre al baño y la vi, se enjuagaba la cara frente al lavabo, semi-inclinada viendose en el gran espejo ubicado encima del lavabo, traia aquel polo blanco, translucido, que por la forma en que estaba inclinada dejaba al descubierto sus muslos y parte de sus nalgas.
Al verme entrar me miro con una sonrisa complice, yo aun seguia confundido y no me atrevia a preguntar nada, no le iba decir: Oye por si acaso no recuerdas si ayer, aprovechando que estabamos ebrios, te rompi el ojete, o algo por el estilo.
Me acerque por detras, dandole a entender que me dejara un espacio libre para poder mojarme la cara, pero ella no me dejaba, juguetonamente se movia de un lado u otro, impidiendome acercarme, en cada una de sus maniobras movia su trasero poniendolo como barrera, verla menear asi su trasero comenzo a calentarme nuevamente, y mas aun con las imagenes que me invadian de mi sueño o lo que sea que haya sido.
Cogio la pasta dental y comenzo a cepillarse los dientes, yo me acerque un poco mas y ahora su trasero choco con mi entrepierna, mi verga comenzo a despertar, queria quedarme asi hasta que mi pene creciera a plenitud y clavarmela, pero lo pense mejor y me movi disimuladamente a un lado, aun no estaba seguro de lo que habia pasado la noche anterior y no queria que pensara que yo era un mañoso (bueno si lo era, que joven no lo es, pero no queria que lo supiera tan pronto).
Ante mi grata sorpresa, ella dirigio nuevamente su culo hacia donde estaba mi verga, no, no puede ser me dije, debo seguir soñando, me movi nuevamente, y ella volvio a colocarme su culazo en mi ingle, por el espejo pude ver en su cara una expresion picara, burlona. Esta vez si senti toda su raja, ahora ella me meneaba su trasero, mi verga, aun dentro del short, estaba cada vez mas dura, y al parecer Karen la sintio porque vi como empezaba a excitarse, empuje un poco mas, mi verga dura se hundio entre sus nalgas, ella ya no se daba cuenta de lo que hacia, la blanca crema dental le escurria entre los labios, ver esto me excito, recorde como se habia bebido mi leche la noche anterior.
No aguante mas, me baje el short, le levante el polo dejando al descubierto sus poderosas nalgas, mi pene completamente erecto en direccion a su conchita humeda, basto que le metiera la cabecita para que ella sola, completamente excitada, retrocediera poco a poco, metiendose ella misma centimetro a centimetro mi verga... pero como les dije ella era un poco estrecha, asi que de un empujon termine por metersela toda...
- ahh!, lanzo un leve suspiro de sorpresa.
La deje adentro y vi como la gozaba, mordia su cepillo, y la otra mano se aferraba al lavabo. Se agacho un poco para escupir la espuma de la pasta dental que no podia contener en su boca. Intento hacerse la desentendida y siguio con su cepillado, mientras yo la bombeaba por detras cada vez mas fuertemente, hasta que llego el momento en que, debido a la violencia de mis arremetidas, no pudo mas y tuvo que aferrarse con las dos manos en los bordes del lavabo. Karen comenzaba a gemir de placer.
- hummm... ayyy.... ouhhhh.... y en su excitacion proferia otras palabras que no lograba escuchar bien.
Su camiseta mojada, por el agua y la espuma que caia de sus labios, se le pegaba al cuerpo, al busto, mostrando dos pezones orgullosos, duritos, que querian tambiern participar de la accion, asi que comence a jalonearlos. Estas bruscas caricias hicieron mayor efecto, ya que cada vez gemia mas fuerte.
- hummm... que rico... asiii...
Ahora si podia oirla claramente, decia incoherencias, pero lo disfrutaba, hasta que llego el momento en que se atrevio a pedirme:
- hummm... Quiero...humm... que me la metas... hummm.... como ayer...
Asi que despues de todo no habia sido un sueño, me dije, y al parecer le habia gustado tanto o mas que a mi. No me hice de rogar y puse mi verga en su anito arrugadito, y comence a meterlo lentamente casi enroscandoselo.
- Ayyy... Adrian que esperas... apurate... que no aguanto...
Le hice caso, se la hundi con tal fuerza que casi la estampo contra el lavabo. En su rostro una mueca de dolor y admiracion. Como ahora no se encontraba tan anesteciada, ni adormecida por efecto del alcohol, sintio la pegada, y vaya que la sintio:
- Auuuu, mierd..., ayyyy... se quejo tan fuerte que temi que nos escucharan.
- Espera ya va a pasar, le dije tratando de calmarla.
- Caraj..., no recordaba que doliera tanto, me dijo mientras se le escaparon algunas lagrimas.
- Relajate, abre un poco mas las piernas, inclinate y levanta un poco el trasero.
Me hizo caso, se movio tal como le dije esto le alivio un poco el dolor, pero seguia angustiada y recuerdo que entre sollozos me dijo:
- Ayayayyy parece que estuviera atorada... ¿y si no sale?...
Escucharla hablar asi con esa vocecita inocente y con su rostro preocupado me excitaba mas.
- Vamos eso solo les pasa a los perros, le dije casi riendo, ella tambien sonrio un poco al darse cuenta de lo que habia dicho.
Aunque en realidad mi pene que era mas grueso de lo normal, para mi edad, parecia apresado en su pequeño agujero, asi que comence a lubricar su ano con sus liquidos vaginales y con un poco de saliva.
- Ahora voy a comenzar a moverme asi que no te deseperes...
- Sacamela por favor... auuu, me dijo casi suplicante entre pequeños sollozos.
- Esta bien, pero para eso tengo que meterla y sacarla poco a poco, hasta que salga toda, le explique, pude haberle sacado mi pene de golpe pero a decir verdad yo queria seguir asi, estaba super excitado al verla asi sumisa, perforada por mi verga.
La tome por la cintura como la noche anterior y comence a cabalgarla, mi pene entraba y salia con dificultad, Karen seguia quejandose y a mi no me importo mucho, ella se lo habia buscado.
- Ayyy... mi culitooo... auuuu.
Procuraba no reirme de sus quejidos, porque se daria cuenta que me estaba aprovechando de la situacion, y mientras tanto yo seguia martillandole el culo:
- Aayyy Aadrian... pareece que ya puede salir.... ouchhh
No le preste atencion y segui banqueteandome con su culazo, ella me veia disfrutar morbosamente a traves del espejo, sorprendida.
- Aadrriann... ouchh, ayhhhh
- Ya sale, ya sale... no te preocupes.
Pero yo seguia metiendo y sacando, ella agacho la cabeza, sometida, nuevamente comenzo a hablar en voz baja, quejandose supongo... levanto nuevamente la cabeza, la expresion le habia cambiado, ya no parecia tan angustiada, sino mas bien parecia confundida....
- Aadriann... poor favor...
- Esta bien... ya sale, falta un poco.
- no... Adrian por favor...noo
A pesar de su angustia y confusion me parecio ver en sus ojos lujuria, placer...
- No que?, le pregunte.
- No... no te detengas... ohhh no puedo creerlo... siigueee por favor...
Me quede atonito, pero no deje de moverme, ahora se dedicaba a gemir sin reparos, mi verga iba y venia desde la raiz hasta la cabeza, su ano mejor lubricado y mas dilatado lo recibia cada vez mas adentro, mas profundamente y ella ahora me lo agradecia.
- Ohhh... siii... quee bien que siente... assiii... mas fuerteeee...
Me pedia mas, a pesar de estar casi desfalleciente, con los ojos casi fuera de orbita los codos apoyados en el lavabo, aguantando la mayor cogida que le habian dado por el culo en toda su vida, y ella como toda una goloza, lo disfrutaba.
En un ultimo esfuerzo arremeti con todo, sus nalgas vibraban ante mi impetu, sus senos saltaban por debajo del polo, estaba cerca de venirme, ella lo noto por la expresion alucinada de mi rostro, mis manos en su cintura la atrajeron hacia mi, ella se levanto un poco apoyandose nuevamente en sus manos, se la hundi lo mas que pude, casi hasta meterle las bolas, mis manos ahora sobre sus hombros la empujaban contra mi verga, a su vez levante mi ingle lo mas que pude, aprisionando sus nalgas en mi entrepierna, ella parada en puntitas casi levantada, recibia mi verga en su maxima expresion, en ese ultimo intento se la meti toda, absolutamente toda. Karen asi izada como una bandera, empalada, maravillada por mi esfuerzo y absorta por el pene que le perforaba tan profundamente las entrañas, respiraba dificultuosamente, agitada.
- Carajo se me viene, le dije, y se la saque finalmente, dirigiendome al excusado a descargar toda mi leche.
- Espera, espera, me dijo apurada.
Cuando voltee, ella estaba de rodillas, me agarro el pene a punto de explotar y selo metio en la boca, no pude mas y deje caer los torrentes de mi semen dentro de su boca, salpicando sus labios, sus mejillas y su barbilla que aun tenia espuma dental. A ella no le importo se, trago la leche que pudo, y si alguna duda me quedaba de que lo de la noche anterior habia sido un sueño, al verla asi limpiandome la verga con su lengua, mi duda quedo despejada.
Ella volvio a lavarse la boca, esta vez sin interrrupciones. Antes de irnos nos dimos tiempo de disfrutar un poco de la ducha y descubrir como era el sexo bajo el agua, cosa que volveriamos experimentar semanas despues en una piscina, de noche, a oscuras, escondidos de ese fastidioso portero.
En cuanto al departamento, me tomo un par de horas limpiarlo, y tuve que soportar algunas
indirectas de cierto entrenador, pero cada vez que salia de la ciudad... la llave de su departamento tenia dueño...
Adrian